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Sanidad
Residentes MIR de Madrid: resistimos hasta decir basta
Es importante cuidar a quien cuida, y eso la Consejería no lo tenía claro. Hasta ahora, que nos hemos unido y nos hemos levantado para decirle a la Comunidad de Madrid que basta.
Durante los peores momentos de la pandemia en Madrid, se ha contado con médicos internos residentes (MIR) ahí donde hacía falta. Y hemos respondido. Hemos permanecido en primera línea mano con mano con pacientes: para ayudarles a sentirse mejor, a curarse o a encontrar rápido un tratamiento que darles. Nos han destinado a servicios distintos del nuestro, incluido el Hospital IFEMA y hemos acudido a la llamada. Lo hemos hecho porque siempre estamos ahí, aunque eso nos conlleve problemas de salud y peligros en la seguridad de pacientes. Nos han acostumbrado a aguantar con carros y carretas, a resistir. Pero también es importante cuidar a quien cuida, y eso la Consejería no lo tenía claro. Hasta ahora.
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Ahora nos hemos unido y nos hemos levantado para decirle a la Consejería de Sanidad que basta. Que basta de ser la base laboral del sistema sanitario cuando aún estamos en formación, ningún servicio, centro o unidad debería ser dependiente del trabajo de residentes, aun así conformamos casi un 40% de la plantilla sanitaria. Esto enhebra con otro basta, a la explotación a costa de jornadas de trabajo interminables, queremos que se respete el descanso y los salientes de guardia como establece la ley. Nuestro descanso asegura que no se opere pacientes tras más de 30h sin dormir o tras 6 días seguidos trabajando sin descansar.
Sanidad pública
Médicos MIR confirman que irán a la huelga en Madrid
Basta de una formación escasa, a demanda individual, autodidacta y sin supervisión adecuada. La Consejería no asegura que residentes, en su periodo formativo, tengan una supervisión que garantice la seguridad de pacientes y una formación reglada. Huelgas previas pusieron de manifiesto que Urgencias de hospitales terciarios de la Comunidad de Madrid tenían una relación de hasta 1:12 (especialista:residente). Las Urgencias y servicios de nuestros hospitales no pueden dar una atención adecuada y segura a pacientes cuando más del 90% de la plantilla de guardia somos personal en formación. Imagina encontrarte mal y acudir en la noche a una urgencia; que te atienda alguien profesional, pero sin una supervisión ajustada a su experiencia y que además llevará unas 20h de trabajo. Esa es la situación actual en la Comunidad de Madrid.
Basta también de no asumir que no somos personal estructural. Esta asunción de que somos imprescindibles en las guardias y en nuestro día a día nos hace tener miedo a enfermar por tener que buscar y llamar a alguien que nos sustituya, para no dejar mermada una guardia ya precaria en cuanto a personal que tira sobre todo de residentes. A veces se opta por hacer la guardia pese a la enfermedad.
También enfrentarnos a esta situación como la persona que recibe esa llamada, ¿cómo dices que no a otro residente? Las llamadas suelen ser a pocos minutos de empezar la guardia y sin margen de maniobra. Incluso en fines de semana. Siempre para cubrir un puesto no estructural. Personal no estructural al quien se la amenaza con sanciones o se le pide que justifique por qué no va a cubrir guardias que quedan cojas por bajas o incidencias de residentes; por qué en su día de descanso no va a cubrir un puesto que no debería ser imprescindible.
Basta además de una precarización salarial. Somos la Comunidad Autónoma con el sueldo de residentes más bajo de toda España, entre unos 3.000 y 4.000 euros menos que la media española y unos 10.000-12.000 euros menos que en las que mejor se paga.
Respecto a la supuesta inequidad salarial que enarbola el consejero que supondría un aumento de nuestro sueldo, en nuestra misma Comunidad, un grupo de residentes han conseguido aumentar su salario base y que se les remunere las mal llamadas “pagas extra” al 100%. Al resto nos siguen pagando un porcentaje menor de las mismas, contraviniendo igualmente la ley. Especialmente precarizada es además la situación salarial de las EIR, que pese a ser graduadas como el resto de residentes, se les tiene en una consideración laboral y salarial inferior al resto de residentes por considerarlas de categoría A2 en vez de A1 como al resto. ¿Piensa el señor consejero revertir la inequidad salarial de sus residentes?
Sanidad
Más allá de los MIR: los otros internos residentes en huelga
Residentes sanitarios se han unido para reivindicar sus derechos laborales y su huelga ha captado la atención mediática. Aunque el colectivo médico MIR es el más numeroso y visible, personas en formación de otras áreas como psicología, enfermería, química, radiofísica, farmacia o biología recuerdan que también se están movilizando y que su situación es si cabe más precaria.
Pues el consejero dice que no tiene competencias ante estas reclamaciones de seguridad, formación y salud, que como residentes hemos propuesto resolver en forma de convenio. Me gustaría recordar al señor Escudero que nuestra comunidad cuenta con un Convenio Colectivo en el que se podrían dar cabida a estos derechos de residentes como se da cabida a los de la sanidad en general u otras profesiones como profesionales de los incendios forestales, de la Justicia o la Educación.
A nuestras peticiones de mejora hemos recibido la espalda del Gobierno de la Comunidad de Madrid, lo que nos ha llevado a convocar la huelga que tenemos en marcha. Por parte de la Consejería se ha respondido con un 100% de servicios mínimos, atentando contra el derecho a huelga recogido en el art. 28.2 de la CE y el RDL 17/1977, y dejando patente la nula voluntad de negociación y acuerdo del Gobierno madrileño.
No somos héroes, no tenemos poderes, ni siquiera el de la supervisión. Somos personas que enfermamos con la falta de descanso, con el estrés del desamparo formativo y legal al atender a pacientes, con una sobrecarga laboral que nos lleva a errores. Las condiciones de quasi-explotación en las que trabajamos son y han sido un problema de salud pública que hay que solventar ya. Por todo ello, decimos basta.