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Derecho a la vivienda
Una operación urbanística quiere expulsar a 11 familias de su casa en Basauri con la ayuda del Ayuntamiento
Once familias vecinas de la localidad de Basauri están en riesgo de quedar desalojadas de sus viviendas. Con la complicidad del Ayuntamiento y parapetándose detrás de los planes urbanísticos, el propietario, Atxalar, así lo ha decidido. Allí, en los bloques 5,7, 9 y 11 de San Fausto, se erigirán nuevas viviendas enmarcadas en las 275 del PERU, la mayoría, 204, son “libres” para su uso comercial.
Estas vecinas de la calle San Fausto de Basauri, junto con miembros del sindicato de vivienda Batu y otros vecinos y militantes de colectivos de la localidad se han plantado. Denuncian, y así los escenificaron ante el ayuntamiento de la localidad, la delicada situación en la que se encuentran.
Como las vecinas remarcaron en una rueda de prensa, las casas donde residen como inquilinas son propiedad del gestor inmobiliario Atxalar, empresa perteneciente a la empresa amurriotarra Destilerías Acha, la cual, a principios de noviembre, rescindió de manera unilateral los contratos de alquiler de un total de once familias. Debido a ello, las vecinas de los bloques 9 y 11 podría perder sus hogares. Estas vecinas explicitan su miedo a tener que abandonar Basauri. Algunas, con menores a su cargo, añaden que sus hijos deberán, de darse la situación, cambiar de centro escolar.
La historia que se esconde tras la operación de los bloques 9 y 11 de San Fausto viene de atrás y tiene un contexto político. En el corazón de Basauri, y donde se ubica el santo de la localidad que da nombre a la calle, esta ubicación ha estado sujeta a distintos planes urbanísticos contemplados en el PGOU y el PERU, en particular a las actuaciones destinadas a las zonas de Bidebieta-Pozokoetxe-San Fausto. Dentro de estas actuaciones siempre estuvo contemplada la opción del realojo para las familias residentes en estos dos portales.
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La solución que le ofrece la sociedad municipal Bidebi a los vecinos es de carácter monetario, incumpliendo la opción del realojo que se prometió
En su lugar, Bidebi, sociedad municipal para la gestión y ejecución de operaciones urbanísticas previstas por el Ayuntamiento, no ha llegado a ofrecer ninguna opción por esa vía, ya que como el sindicato y las vecinas informaron, las “propuestas personalizadas para cada situación” que desde el Consistorio se han contemplado consisten en una serie de indemnizaciones monetarias que no se adaptan a las necesidades de las vecinas ni tampoco a la imagen actual del mercado inmobiliario.
El sindicato Batu ha querido señalar que “los alquileres se encuentran disparados y muy por encima de lo que una parte creciente de la población puede llegar a asumir”. La media de la renta de un piso en Basauri es de 700 euros, lo cual deja fuera a muchas vecinas. En algunas situaciones “no pueden llegar a afrontar pagar cerca del 70% de su salario en el pago de un alquiler”.
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Un punto que remarcado en numerosas ocasiones es la complicidad que en todos estos meses ha habido entre la propiedad –Atxalar– y el Ayuntamiento para llevar a cabo la ejecución del plan urbanístico que pretende derribar los bloques 5, 7, 9 y 11 para la construcción de nuevas viviendas. Como las vecinas subrayaron, en numerosas ocasiones han recibido presiones por parte de Bidebi y sus técnicos para aceptar las indemnizaciones propuestas desde la instancia municipal, sin tener en cuenta la situación particular que atraviesan las vecinas.
Las vecinas y el sindicato creen que esto tiene como objetivo agilizar en el tiempo el derribo de la calle para comenzar, cuanto antes, a construir las viviendas. Cabe tener en cuenta que las casas de los maestros, último edificio de titularidad municipal en Basauri, fue finalmente derribado para la construcción de viviendas de lujo bajo una licitación de la constructora Grupo Eibar, con un precio medio que alcanzó los 400.000 euros, llegando incluso a adquirir un valor de 700.000 euros por inmueble. Como puede resultar obvio, el salario medio en Basauri se encuentra muy alejado de los gastos hipotecarios necesarios para acceder a una vivienda de este tipo.
El sindicato y las vecinas recalcan de las 274 viviendas del plan 204 son “libres”, lo que equivale al 75% de las viviendas. Dentro de estas viviendas público-privadas, la mayoría están destinadas al régimen de propiedad de VPO
Los vecinos opinan que en la batalla que está teniendo lugar en San Fausto no solo están en juego sus casas y posibles realojos, sino el modelo de ciudad que se proyecta en Basauri, ajeno a aquellos que residen en la ciudad. Basauri, con una fuerte impronta industrial, albergó algunos de los conflictos obreros más duros, como la famosa huelga de Bandas, donde en la actualidad se ubica la empresa Arcelor Mittal.
En su último comunicado, el Ayuntamiento se ha escudado en que en la calle San Fausto no se van a construir viviendas de lujo. No obstante, el sindicato y las vecinas recalcan que si bien es cierto que se van a construir viviendas de distintos tipos, de las 274 viviendas del plan 204 son “libres”, lo que equivale al 75% de las viviendas. A su vez, dentro de estas viviendas público-privadas la mayoría están destinadas al régimen de propiedad de VPO. En los últimos tiempos, los movimientos sociales de Euskal Herria han venido señalando la creciente necesidad de unas políticas públicas destinadas al alquiler social frente a la compra de viviendas subvencionadas.
Tras la rueda de prensa, las vecinas hicieron una entrega formal en las oficinas municipales del Ayuntamiento de un permiso de reunión con la concejala delegada del Área de Sostenibilidad, Desarrollo urbano y Seguridad, así como al equipo de gobierno, en aras de buscar una solución dialogada con las instituciones públicas.