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Entrevista La Poderío
Jihan, ¿quién pudiera ser gitana?
Pucioasă, 7 de enero de 1993 (Villa rumana a 100km. de Bucarest)
Cantante, compositora, productora, organizadora de eventos y muchas cosas más, se presenta en su Instagram como La Jihan, artista, nombre al que acompaña de dos lemas: flamenco y revolución y la pureza es mestizaje. Esta cantante rumano-siria-española, presentó el pasado mes de enero la última pieza de su trilogía “Todos somos gitanos”, un trabajo que inicia en Granada, en el Sacromonte, cuando llega antes de la pandemia dejándolo todo atrás por un sueño. Regresa así a esa Andalucía que conoció cuando niña y le abrió el mundo del flamenco y de sus sentires.
Su proyecto es un trabajo importante para el que ha contado con muy buenos compañeros y compañeras de viaje. Pero no ha finalizado aún, pues este próximo abril, en el Castillo de Lachar, tendrá su continuidad en el Festival benéfico a favor del pueblo gitano, un festival que está preparando con un importante elenco de artistas.
¿Cómo surge tu pasión por la música y, en concreto, por el flamenco?
Surge porque lo que me hizo cantar cuando yo era pequeñita fue el flamenco. Mi madre me cantaba desde que estaba en su vientre. Ella era, es y será para mí siempre cantante. Se dedicaba a la música, cantaba en restaurantes de lujo en Rumanía, en su capital, Bucarest. Y así es como conoció a mi padre.
Ella siempre me dice: “Hay que ver todo lo que yo te cantaba y al final cantas flamenco. ¡Pero si no tiene absolutamente nada que ver!” Pero es que yo cuando empiezo a cantar es cuando llego a España, a Málaga, con seis años, y me enamoro de Andalucía por muchísimas razones. Eso es lo que a mí me hizo cantar, la música que yo escuchaba. El folklore y el flamenco activaron mi pasión por el arte.
Una cosa importante, de la que luego nos fuimos dando cuenta, es que muchísimas de las canciones que me cantaba mi madre eran gitanas, gitanas rumanas. De hecho, ella actuó durante muchos años con gitanos. Una de las frases que me decía siempre era, “cariño, los genios más genios que yo he conocido en mi vida han sido gitanos. Son músicos increíbles. Si algún día tienes ocasión de tocar con ellos, lo vas a ver. Cómo viven la música, cómo viven el arte, cómo viven la vida”.
Cada lugar por el que he pasado me ha construido, pero sobre todo me han formado de muchísimas maneras. Me ha influido desde mi forma de ser a mi forma de vestir, de expresarme, mis gestos, mi música, lo que compongo, lo que hago, la lucha por los derechos humanos.
Naces en una familia que tiene un pie en Europa y otro en Oriente Medio, ¿esto te construye a ti como persona?
Claro, por supuesto. Mi padre, realmente, nació en Líbano. Lo que pasa es que él ha vivido en Siria y él siempre dice que es sirio. Pero bueno, nuestra familia está mezclada tanto del Líbano, de Siria, de Rumanía. Yo nací en Rumanía, pero quieras o no, obviamente, mis raíces... Porque claro, es un poco extraño, ¿no? Yo me siento española, porque llegué con seis añitos y medio a Málaga.
En Málaga, estuvimos viviendo aproximadamente un año y medio, porque mi padre trabajaba en Marbella. Y luego nos mudamos a Castellón. Casi toda la vida la pasamos allí. Luego, estuve cuatro años, por trabajo, en Valencia. Y aquí, en Granada llevo desde antes de la pandemia. Cada lugar por el que he pasado me ha construido, pero sobre todo me han formado de muchísimas maneras. Me ha influido desde mi forma de ser a mi forma de vestir, de expresarme, mis gestos, mi música, lo que compongo, lo que hago, la lucha por los derechos humanos. En absolutamente todo, también la educación que me han dado.
También he conocido la discriminación que, por desgracia, ha estado ahí, sobre todo hacia mis padres. Porque mi hermano y yo hemos tenido nuestros momentos también, por supuesto, pero no es lo mismo que mis padres. Lo han pasado fatal. Ellos lo han dejado absolutamente todo para darnos una vida mejor. Y lo han conseguido. Nosotros estamos inmensamente orgullosos de nuestros padres y súper, súper agradecidos.
Acabas de estrenar la tercera parte de tu trilogía “Todos somos gitanos”. ¿Qué es y cuándo nace este proyecto?
“Todos Somos Gitanos” es un proyecto que se inició en plena pandemia. Acababa de llegar a Granada y estaba viviendo en las cuevas del Sacromonte. Había dejado absolutamente todo por la música, aquel tiempo fue un momento de catarsis súper importante en mi vida. Dejé mi trabajo, mi pareja, mi familia se quedó lejos. Dejé absolutamente todo.
La verdad es que yo siempre decía: un buen día me despertaré y sabré que esta no es mi vida. Porque yo me dedicaba a otra cosa que no tenía nada que ver, era representante de firmas de moda en un showroom de Valencia. Era muy buen trabajo. Pero yo llevaba años sabiendo que un día me despertaría y lo dejaría todo porque esa vida no era la que quería. Y así pasó. Aposté absolutamente todo por lo que me hace feliz, la música.
Fue un momento duro. Me puse a viajar en busca del equipo con quien empezar a trabajar en mi proyecto y, entre tantos viajes, aterricé en Granada. Y fue aquí cuando llegué al Sacromonte y me quedé completamente enamorada. Por primera vez, después de estar en tantos lugares, sentí que este era mi hogar. Fue algo muy fuerte.
Así fue como empezó todo. En plena pandemia nos fuimos de viaje a distintos lugares con Cristóbal, que era el filmmaker, visitando a cada uno de los que habían dado su ok, a los que les voy a estar agradecida de por vida, porque lo hicieron completamente gratis. A mí, el proyecto me costó muchísimo. Invertí todo lo que tenía y lo que no. Yo, imagínate, estaba en quiebra económica total pues lo había dejado absolutamente todo. No tenía ni para comer, así te lo digo. Fue un momento muy duro. Pero bueno, entre tantas cosas planeé Todos Somos Gitanos, y empecé a desarrollarlo en las cuevas del Sacromonte, mirando a la Alhambra.
Al principio era solamente un vídeo. Luego decidí que quería hacer una segunda parte e hice Djelem, el himno internacional gitano, una interpretación con la que quería transmitir un mensaje de unión hacia todo el pueblo gitano y hacia el mundo entero.
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En la presentación de esta segunda parte nos recuerdas el Primer Congreso Mundial Romaní/Gitano, celebrado en Londres el 8 de abril de 1971, en el que se instituyó la bandera gitana y su himno compuesto por Zarko Jovanovic, para recordar a las gitanas y gitanos víctimas del nazismo. Y luego, hace un mes, en enero, nos llega la tercera pieza de esta trilogía.
Sí. Después de “Djelem” pensé que tenía que acabar por todo lo alto, con la alegría y el colorido con el yo veo al pueblo gitano. Trabajé está tercera parte, “Quién pudiera ser Gitana” con mucho amor. Con las gafas que utilizo para ser feliz en mi día a día. Desde esas gafas especiales y maravillosas he querido contarle al mundo cómo veo al pueblo gitano, cómo lo siento y lo importante que es para mí. Porque entre muchas historias, el pueblo gitano a mí me ha acogido como parte de su familia, como una más.
Y lo presentas como un homenaje reivindicativo de los seiscientos años que el pueblo gitano lleva viviendo en la Península Ibérica.
Exacto. Es mi primer single, una rumba que habla de las tradiciones y las características del pueblo gitano desde mi punto de vista, el de esa niña, como yo lo he visto desde muy pequeñita y lo sigo viendo, y del amor que yo les tengo. Es una especie de homenaje, con toda la humildad y todo el respeto al pueblo gitano. Es un canto a la lucha por la igualdad de todos los pueblos y en concreto del pueblo gitano, porque como siempre digo, los gitanos en España son españoles sin más.
En el flamenco me siento identificada porque es como si fuera parte de mi persona. Una mezcla de culturas, una mezcla de raíces, tradición, al mismo tiempo de vanguardia.“Todos somos gitanos” es un proyecto que dirige, guioniza y produce ella misma, con grandes compañeros y compañeras de viaje como David Heredia “El Marqués”; Esperanza Fernández; Diego del Morao; Los Mellis de Huelva; Rafael Moisés Heredia; La Lupi; Curro de María; Eva Yerbabuena; Alonso Díaz Carmona; Lorena Álvarez Rycardo; Moreno Brisa Fenoy; Jara Heredia; Juan Andrés Maya;Curro Albaycín; José Fernández; Justo ''El Malaguita'' y muchas y muchos otros
¿Cómo definirías el flamenco?
Para mí, es el mestizaje más grande que existe en este planeta. Y eso es también parte de la belleza, aparte de lugares como el Albaicín, el Sacromonte, aparte de su gente. Todo está impregnado de una belleza muy grande. En el flamenco me siento identificada porque es como si fuera parte de mi persona. Una mezcla de culturas, una mezcla de raíces, tradición, al mismo tiempo de vanguardia. Es atemporal. En él se juntan muchísimas culturas.
En muchas ocasiones los puristas hablan del flamenco puro. Yo la verdad que no lo entiendo. Con todos mis respetos, habrá quien podrá pensar que yo soy flamenca o no lo soy, me da igual porque lo que yo soy es feliz. Hago lo que quiero, como quiero y con quien quiero, pero siempre desde el respeto y desde el conocimiento. Porque yo, prácticamente todos los días, en mi día a día, escucho flamenco. El flamenco es un arte muy complejo, muy amplio, tiene un alma particular, aparte de su gran complejidad. Te puedes pasar toda la vida estudiándolo.
Tú dices que la primera parte de cualquiera de tus creaciones empieza contigo misma en tu soledad, ahí desarrollas la idea y creas la canción desde cero, música y letra. Y tu estilo, ¿cómo lo definirías?
Mi estilo es una mezcla cultural entre el flamenco y mis raíces rumanas y árabes. Esa es un poco la esencia de todo, aunque luego yo pueda cantar un blues o un soul, una ranchera, o lo que sea. Me apasiona e investigo muchísimo, sobre todo las músicas de raíz de cualquier lugar.
Todo esto se verá también reflejado en los discos que vaya haciendo, porque realmente la gente a mí me conoce, pero no conoce en concreto mi arte. Me conocen mucho a mí, y eso es muy importante y me encanta. Pero no han escuchado más allá de mi proyecto de Todos somos gitanos. Y me gusta eso porque acaban describiendo quién soy yo, como persona y como personaje, que al final son la misma en mi caso
¿Qué nos puedes contar de tus nuevos proyectos?
Con motivo de que el Estado español ha declarado este 2025 el Año del Pueblo Gitano para conmemorar el 600º Aniversario de su llegada a la Península Ibérica, este mes de abril, el viernes 11, en el Castillo de Láchar (Granada) voy a celebrar la primera edición de mi festival benéfico Todos somos gitanos.
Llevo años queriendo hacer este festival. De hecho, cuando contacté con todos los artistas para el video reivindicativo de Todos somos gitanos, lo fui comentando: haré un festival benéfico a favor del pueblo gitano. Y ya por fin ha llegado el momento. Al final, fíjate como caen las cosas, de qué forma tan maravillosa. Será precioso que este año tan señalado nos podamos unir todos. Llevamos tiempo trabajando todo el equipo y en estos momentos estamos con el tema de la financiación, contactando con distintas instituciones para que este Festival pueda ser una realidad.
Y para terminar, ¿cómo ves el mundo ahora mismo Jihan?
El mundo lo veo como un lugar complejo si vivo en él tal cual es. Pero al mismo tiempo para mí es un lugar bellísimo. Es una experiencia dura, complicada, pero a la vez muy enriquecedora. En realidad, el mundo lo veo desde otro lugar, porque si lo miro tal cual es, pues me dan ganas de llorar, la verdad.
¿Qué necesitas para construir tu día a día?
Lo primero, amor, compañía, que es todo lo opuesto a lo que estamos viviendo ahora mismo. Hay mucho odio, mucho conflicto. Cuando abro los ojos lo que quiero y busco es el amor, en este caso de mi pareja y de la Naturaleza, que me hace muchísima falta, me da tranquilidad y creo que todo lo podemos ver a través de ella: la vida, el amor, la calma.
Salud y Libertad Jihan.
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