We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Ecologismo
La fauna puede esperar: años sin aprobar sus Planes de Recuperación en Extremadura
Urgen a la Junta de Extremadura a acometer sin demora los Planes de Recuperación para especies en peligro de extinción, antes de que su desaparición en la región sea irreversible. Mientras tanto, se incrementa la presión contra la prohibición de la caza en Monfragüe.
Persisten las críticas a la política de conservación desarrollada por la Junta. Ecologistas en Acción de Extremadura critica que, casi tres años después de que el Plan de Recuperación de la Cigüeña Negra, uno de los emblemas faunísticos de la región, fuera aprobado en 2017 por el Consejo Asesor de Medio Ambiente de Extremadura (CAMAEX), el gobierno autonómico aún no haya aprobado definitivamente su orden ni se haya publicado en el DOE.
Y es que, hasta el momento, ninguna de las personas representantes en el CAMAEX tienen noticia alguna ni información de los motivos por los que proyectos de esta naturaleza se quedan estancados en su tramitación, “demostrando con ello el total desprecio al funcionamiento de estos órganos asesores por parte de la administración regional”. De igual modo, afirman, tampoco reciben información acerca de si las sugerencias y alegaciones presentadas a la redacción de estos planes han sido tenidas en cuenta o, en caso contrario, los motivos que hubieran podido llevar a su desestimación por la Administración. Una parálisis de difícil explicación a la luz del potencial ecológico de la región y del capital cultural y de desarrollo que podría suponer para la misma.
El bloqueo de la aprobación de Planes de Recuperación de especies en peligro parece ser ya una práctica habitual de la Junta de Extremadura. En idéntica situación se encuentra el Plan dedicado a la recuperación del Jarabugo, que también fue aprobado por el CAMAEX en 2018
En este sentido, para Ecologistas en Acción de Extremadura el caso del Plan de Recuperación de la Cigüeña Negra resulta ser un ejemplo más que demostraría que las políticas medioambientales de la Junta de Extremadura respecto a la conservación del patrimonio natural extremeño en peligro de extinción “dejan mucho que desear en los últimos años. Tanto la anterior Consejería de Medio Ambiente como la actual para la Transición Ecológica y Sostenibilidad siguen dejando de lado los temas verdaderamente importantes para la conservación de la naturaleza extremeña, dedicando sus esfuerzos más al greenwashing ─es decir, a tratar de mostrar una imagen pública de profundo interés por el medio ambiente─, que a aprobar y aplicar políticas efectivas de conservación de la biodiversidad extremeña”.
Con una población en torno a las 200 parejas de Cigüeña Negra, Extremadura tiene la responsabilidad de acoger y conservar casi el 50 por ciento de la población ibérica de esta especie que, aislada del grueso de la euroasiática, resulta ser la más vulnerable y, por ello, se encuentra catalogada “En Peligro de Extinción” en territorio extremeño. De ahí la necesidad y la extrema importancia de aprobar medidas claras y objetivas para mejorar y compatibilizar su conservación con otros intereses dentro de un marco legal adecuado.
El bloqueo de la aprobación de Planes de Recuperación de especies en peligro parece ser ya una práctica habitual de la Junta de Extremadura. En idéntica situación que la cigüeña negra se encuentra el Plan dedicado a la recuperación del jarabugo, que también fue aprobado por el CAMAEX en 2018 y, dos años después, aún está paralizado a la espera de su publicación oficial y entrada en vigor.
Casi dos décadas llevan esperando muchas otras especies, además de la cigüeña negra, a que la administración extremeña apruebe algún Plan de Recuperación o Gestión de acuerdo al catálogo aprobado en 2001
A pesar de la obligatoriedad de la aprobación de los Planes de Recuperación y Gestión de especies protegidas en peligro de Extinción o Sensibles a la Alteración del Hábitat contempladas tanto por la Ley 42/2007 de Biodiversidad, la Ley 8/98 de Conservación de la Naturaleza de Extremadura, o en el Decreto 37/2001 que regula el Catálogo Extremeño de Especies Amenazadas, son numerosas las especies en peligro que esperan la atención adecuada para no desaparecer irreversiblemente del medio natural extremeño, como ya ocurrió con el lobo ibérico o la lamprea de río.
Casi dos décadas llevan esperando muchas otras especies, además de la cigüeña negra, a que la administración extremeñaapruebe algún Plan de Recuperación o Gestión de acuerdo al catálogo aprobado en 2001. Este es el caso del aguilucho cenizo, el sisón, la avutarda, el milano real, el galápago europeo, la lavatera triloba, el espinoso o el pez fraile, por poner sólo algunos ejemplos, dándose el caso de que algunas de estas especies, como las dos primeras, se han colocado en los últimos años en una situación crítica de riesgo de desaparición en la comunidad autónoma.
Es por ello que Ecologistas en Acción de Extremadura “exige que la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad apruebe definitivamente y publique sin más demora los Planes de Recuperación que tiene paralizados, acometa con urgencia los que aún tiene pendientes de redactar referentes a otras especies y haga un esfuerzo de transparencia manteniendo informado al Consejo Asesor de Medio Ambiente y teniendo en cuenta las sugerencias que este le aporte para la mejora de estas herramientas de conservación de las especies en peligro de desaparecer definitivamente de nuestro territorio”.
Caza
CAZA Compromiso para el fin de la caza en Monfragüe
Satisfacción en Ecologistas Extremadura por el compromiso de la Consejería para la Transición Ecológica y Sostenibilidad de poner fin a la caza comercial en el Parque Nacional de Monfragüe.
SE MANTIENE LA PRESIÓN PARA MANTENER LA CAZA EN MONFRAGÜE
Mientras se mantiene la parálisis en el desarrollo normativo de las medidas de protección, parece incrementarse la presión del lobby cazador sobre los espacios protegidos. Esta misma semana se ha conocido que, en la reunión del Patronato del Parque de Monfragüe del pasado 1 de diciembre, la mayoría de sus componentes, con la única excepción de los grupos ecologistas, rechazó prohibir la caza en el interior del mismo.
Recordemos que la Junta dispuso recientemente un plan para acabar con las monterías dentro de Monfragüe, práctica habitual hasta la fecha y que suscita no pocas críticas por lo inexplicable que resulta la actividad cinegética dentro de los límites de un espacio de esas características. Desde el sector favorable a esta práctica, se argumenta la necesidad de regulación de determinadas especies de ungulados debido a su sobrepoblación, planteamiento que contrasta con las afirmaciones de colectivos ambientalistas y ecologistas que señalan de forma contundente cómo “después de décadas creando este problema, con una gestión de la caza mayor que ha propiciado su crecimiento demográfico, ahora pretenden hacer creer que la culpa del problema es la gestión del Parque Nacional extremeño y no suya”.
Desde hace décadas es práctica habitual que se complemente la alimentación de ciervos y jabalíes en los cotos extremeños, con el objetivo de obtener trofeos de mayor porte, pero también multiplicando así de forma artificial sus poblaciones. Hace escasas fechas, y en medio de la polémica sobre la regulación del número de ungulados y jabalíes en la región, ya se expresaron en este sentido las ONGs de protección de la naturaleza de Extremadura ADENEX, AMUS, ANSER, DEMA, GRUS, Ecologistas en Acción de Extremadura, Ecologistas Extremadura, SEO-Birdlife y Sociedad Extremeña de Zoología.
Caza
Monfragüe: ¿parque nacional o parque para la caza?
Relacionadas
Medio ambiente
Denuncia Ecologistas en Acción señala al parque eólico de Casas de Millán como un atentado contra la biodiversidad
Huelva
Doñana Impunidad judicial y pozos sin cerrar: los regadíos ilegales siguen amenazando Doñana
Ecologismo
Impactos y características del Lyocell. Lyocell y Altri.
Un gobierno de enemigos del medio ambiente, de la biodiversidad y del clima, que sólo atiende a las élites extractivistas, clientelares y retrógradas en una región que debería ser una potencia y un ejemplo y que lleva siendo expoliada desde tiempo inmemorial pero en los últimos decenios por un Psoe que es la vergüenza de occidente, podrido hasta la médula, carente de legitimidad, de ideas y de ética, un auténtico cáncer.