Laboral
Las altas temperaturas exponen a mayores riesgos a los colectivos precarizados

El estudio 'Los episodios de altas temperaturas como riesgo laboral', publicado por CC OO, alerta de los nuevos sectores expuestos a estrés térmico y de la dejación institucional en esta materia. “Gamesa es líder en aerogeneradores eólicos y si dice que hay que subir para reparar uno, subes, lo pones en marcha y pasas calor”, resume un extrabajador.
Ola de calor junio 2022 - 2
Un repartidor de paquetería trabajando ayer en Madrid. David F. Sabadell

El verano de 2003 fue terrible. Pero oficialmente, y en ese momento, no fue para tanto: el entonces Ministerio de Sanidad de Ana Pastor (PP) anunció que solo habían muerto 141 personas debido a la ola de calor que asoló a Europa. El Centro Nacional de Epidemiología corrigió la cifra en 2004, elevándola a 6.500 muertes. Pero seguía siendo un dato poco creíble, comparándolo con el de países del entorno: más de 20.000 personas fallecidas por exceso de mortalidad en Italia. En Francia, más de 10.400 muertes, según los cálculos de las empresas funerarias. Finalmente, en 2005, los datos del INE revelaron que España tuvo aquel verano un exceso de mortalidad de casi 13.000 muertes, un 15% más que en 2002. Esos datos ya encajaban.

Aún sin reconocer toda la mortalidad, en 2004 España fue el primer país europeo en elaborar un plan, que desde entonces se actualiza anualmente, para adoptar “actuaciones preventivas de los efectos del exceso de temperaturas de la salud” orientado a poblaciones vulnerables, entendidas estas como personas mayores, niños y pacientes crónicos. “Ha tenido éxito”, resume la investigadora Claudia Narocki, “porque ha logrado romper la correlación que había entre mortalidad y calor, excepto en la franja de 18 a 44 años”, apunta la socióloga. Las causas del exceso de mortalidad en esa franja de edad no hay que buscarlas en la vulnerabilidad de sus cuerpos —no lo son, están fuertes—, sino en la exposición continuada al estrés térmico en horario laboral y la vulnerabilidad socioeconómica de las trabajadoras que más se exponen, apunta la experta. De esto, los ministerios competentes aún no han elaborado un plan y siguen dejando en manos de las empresas y, estas, en el privilegio del autocuidado la prevención de riesgos laborales en situaciones de temperaturas elevadas.

Del mismo modo que el PP trató de ocultar las cifras reales de muertes por calor en 2003, hoy se siguen omitiendo las de mortalidad y siniestralidad laboral por exceso de temperatura, tanto aquí como en Europa. Y a pesar de la crisis climática y de la certeza de que los episodios meteorológicos extremos aumentarán, como advierte el Panel Intergubernamental contra el Cambio Climático (IPCC, en sus siglas en inglés). Hay tres colectivos emergentes susceptibles a sufrir con más continuidad las altas temperaturas, que se añaden a los ya clásicos peones de la construcción, trabajadores del campo y camareros de terraza, indica la experta Claudia Narocki: riders, técnicos de mantenimiento de molinos de viento y trabajadores del campo que deben entrar en invernaderos ataviados con trajes EPI para protegerse de los productos químicos que se les echa a los cultivos.

“Ya está bien del cuídate, no todas las personas pueden optar por el autocuidado”, advierte Claudia Narocki, socióloga y autora del informe

Trabajar al lado de una estufa inmensa

Una vuelta de las aspas de un aerogenerador eólico son cien vueltas de la caja multiplicadora que hay en su interior. “Genera tanto calor que si pones la mano encima no aguantas más de cinco segundos seguidos, es como una estufa del tamaño de medio coche”, explica José García —nombre ficticio—, quien ha pasado diez años de su vida arreglando molinos de viento en Toledo y Ciudad Real. “Imagina los veranos”, añade antes de detallar qué otros cachivaches elevan la temperatura en el interior de un molino: los armarios que conducen la corriente que se inyecta en la red eléctrica. A las máquinas que desprenden calor hay que sumarle el esfuerzo físico de subir hasta la altura de las aspas sin ascensor y cargado con el equipo. “Es como subir de seguido 50 escaleras de aluminio de las que tenemos en casa”, compara para que una persona que no ha subido por el interior del palo del molino pueda entenderlo. En la mayoría, no hay sistemas de refrigeración.

“Gamesa es líder en aerogeneradores eólicos y si dice que hay que subir para reparar uno, subes, lo pones en marcha y pasas calor”, resume José García. Confirma que en materia laboral todo queda a expensas del autocuidado, tal y como alerta el estudio Los episodios de altas temperaturas como riesgo laboral; su impacto en la salud, la seguridad y el bienestar de la población trabajadora y en las desigualdades sociales, coordinado por Claudia Narocki para el Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud de Comisiones Obreras.

“Te dan un curso de 60 horas de prevención y cada uno es responsable de sí mismo y del equipo”, continúa García

“Te dan un curso de 60 horas de prevención y cada uno es responsable de sí mismo y del equipo”, continúa García, quien desconocía el estudio publicado el lunes por CC OO  y se ha prestado a detallar a El Salto sus diez años de trabajo en el sector de los aerogeneradores. Cuando Garcías notaba que iba a darle una lipotimia, “bajaba el ritmo, dejaba tareas sin hacer y pensaba ya le daré explicaciones al jefe, si Gamesa me quiere echar, que me eche, lo primero es mi vida”. A pesar de que su actitud era la correcta para su salud, la socióloga añade que “ya está bien del cuídate, no todas las personas pueden optar por el autocuidado”. 

Se refiere a las trabajadoras precarizadas, las que no tienen representación sindical y las socioeconómicamente vulnerables. Corren muchos más riesgos que quien puede decidir disminuir el ritmo y parar a echar un trago de agua. “Efectivamente, lo colectivo debería primar sobre lo individual”, señala al respecto el técnico de mantenimiento de molinos, en concordancia con la socióloga. Y añade que ni siquiera su sector está adecuadamente protegido en comparación con otros países. “En Francia no te dejan subir más de 100 metros al día por el tubo. Tienen convenio propio, como en Alemania y Estados Unidos, nosotros nos acogemos al del metal, que no está mal, pero dime tú qué tiene que ver con esta profesión”. A pesar de trabajar colgados de un arnés en las aspas y estar expuestos a cables por los que pasan, como mínimo, 20.000 voltios, no cobran plus de altura ni de riesgo eléctrico. 

Cuando notaba que iba a darle una lipotimia, “bajaba el ritmo, dejaba tareas sin hacer y pensaba ya le daré explicaciones al jefe, si Gamesa me quiere echar, que me eche, lo primero es mi vida”

Dejación pública

Claudia Narocki indica que ha visitado invernaderos en los que no hay condiciones mínimas para asegurar la salud, como una caseta con ducha colocada en los aledaños para poder refrescarse y bajar la temperatura corporal. “Si así se trabaja donde podemos llegar desde Comisiones Obreras, imagina donde no hay sindicatos”, advierte sobre el recorrido que ha conseguido la negociación colectiva para afrontar los cambios que requieren fenómenos como las altas temperaturas. Recuerda que Inspección de Trabajo realizó el pasado año una campaña dirigida a la construcción y la agricultura, una acción que considera positiva pero insuficiente. “Las instituciones públicas deben mandar un mensaje claro a los empresarios en materia de prevención laboral, no solo decirle al trabajador cuídate”, repite.

Considera que con la normativa actual se puede actuar —según prevención de riesgos, el empresario debe preveer todas las situaciones que pongan la integridad del trabajador en peligro— pero, dada la inacción empresarial, deberían ser las autoridades quienes se manifiesten respecto a las obligaciones de los empresarios. “No puede ser que inventemos todo tipo de riesgos laborales y no pensemos en añadir los paliativos adecuados”, razona la investigadora sobre la ausencia de aire acondicionado en las bases de los molinos y una simple ducha al lado de los invernaderos.

Dada la inacción de las empresas, deberían ser las autoridades quienes se manifiesten respecto a las obligaciones de los empresarios

El estudio concluye que, a pesar de que “son escasos los datos que reflejan la exposición laboral al calor ambiental, hay suficientes pruebas para afirmar que, durante los episodios de altas temperaturas, hay trabajadores que sufren exposiciones a estrés térmico que supera los niveles críticos repetidamente”, una situación que tiene efectos perjudiciales a largo plazo y que empeoran cuando se combinan con otros tipos de exposiciones, como los agentes químicos y los riesgos de seguridad. Caídas, laceraciones y quemaduras son sus consecuencias, “que quedan mayormente ocultas en las estadísticas oficiales”.

Hay tres factores que influyen en el estrés térmico: el ambiental —la temperatura del aire, la humedad y el calor radiante, que puede ser del sol o de los equipos de trabajo, como una cocina—, la ropa de trabajo que impide una normal transpiración —como las EPI— y el trabajo físico —a más esfuerzo, más calor corporal—. Obviarlas es una decisión política, económica y social. A ellas, añade el estudio, se suma el contexto en el que los trabajadores más precarios viven en su día a día: en viviendas más pequeñas, en barrios más hacinados y sin zonas verdes a su alrededor, por lo que incluso resulta difícil dormir durante las olas de calor. Y, además, el desplazamiento hasta el lugar de trabajo es más frecuente a pie o en transporte colectivo, donde es más difícil refrescarse. 

El plan de adaptación al cambio climático del Ministerio de Transición, publicado en 2021, incluye un epígrafe para realizar un plan adaptado a la población trabajadora, recordó en la presentación del informe Mariano Sanz, responsable de salud laboral en CC OO. En la presentación participaron también el director de Estudios Fundación 1 de Mayo, Pedro J. Linares, y el Director General European Trade Union Institute (ETUI), Phillipe Poche.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Accidentes laborales
Por falta de prevención 796 personas murieron en su trabajo en 2024, un 10% más que el año anterior
La mortalidad laboral crece enormemente en contraste con el 0,5% del crecimiento de la cifra de accidentes con baja. CC OO culpa de las muertes y accidentes a la falta de prevención de riesgos y pide más recursos para la Inspección de Trabajo.
València
València CGT interpone una demanda por la muerte de un trabajador que limpiaba un garaje inundado por la dana
El 18 de enero, A. J. Torres Paredes, de 45 años y empleado por Becsa, murió a causa de un accidente laboral mientras limpiaba un garaje en Benetússer.
Marc
16/6/2022 12:08

Les condicions de treball són conegudes però les xifres de mortalitat per calor no tant, i són brutals. Interessant article, gràcies.

1
0
#95159
16/6/2022 12:07

Les condicions de treball són conegudes, les xifres no tant, i són brutals. Interessant article, gràcies.

1
0
Residencias de mayores
Residencias Fondos de inversión y residencias: la mano invisible que retuerce los cuidados
Mientras DomusVi, en manos del fondo de inversión ICG, ya es la empresa con más residencias privadas del Estado, residentes, familiares y trabajadoras explican lo que supone que las prácticas especulativas acunen la vejez de las personas.
Residencias de mayores
Opinión Naces, creces, te reproduces, envejeces y sigues generando beneficios
El capitalismo extractivista emplea un ‘fracking’ similar sobre la última etapa de nuestras vidas: exprimir nuestra capacidad de producir beneficios hasta el último aliento.
Palestina
Palestina Egipto abre la puerta a un nuevo alto el fuego en Gaza con el visto bueno de Hamás y EEUU
A cambio de la retirada gradual de la tropas de Israel en la Franja, serían liberados cinco rehenes cada semana. El Gobierno de Netanyahu no se ha pronunciado y siguen los ataques contra población civil.
Argentina
Estela de Carlotto “Faltan todavía muchos nietos por encontrar”
Al cumplirse 49 años del golpe cívico-militar, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo dialogó con El Salto y apuntó contra el Gobierno de Milei y su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que encabeza la represión de la protesta social.
Opinión
Opinión ‘Severance’ o la decadencia audiovisual de Estados Unidos
La segunda temporada de la serie estrella de Apple TV abandona el conflicto laboral y se centra en el amor como principal eje argumental.
Comunidad de Madrid
Represión La Policía cita a seis activistas que participaron en el escrache a Espinosa de los Monteros en la Complutense
Acusan de delito de odio a activistas que participaron en una protesta en la Facultad de Políticas contra el exportavoz parlamentario de Vox. Fueron citados por la Policía el pasado 21 de marzo, más de un mes después del escrache.
Madrid
Derecho a la vivienda Consumo reclama al Ayuntamiento de Madrid que cierre y sancione los 15.200 pisos turísticos ilegales
El Ministerio de Derechos Sociales y Consumo, que dirige Pablo Bustinduy, entrega un listado de los 15.200 pisos turísticos sin licencia que operan en Madrid y pide a Martínez-Almeida que actúe contra ellos y sus propietarios.
Ni hablar
Ni hablar La clase obrera no va al paraíso
La explotación se aligera con el relato torticero de la explotación y de los héroes del capital, y con la asunción íntima de que capitalismo y democracia son conceptos sinonímicos.

Últimas

Sanidad pública
Aragón La Atención Primaria de Zaragoza, en huelga
Los sindicatos convocantes denuncian el ‘decretazo’ autonómico, por ofrecer más servicios a la ciudadanía sin aumentar el personal contratado. Hay convocado un segundo día de paros el próximo 31 de marzo.
Comunidad de Madrid
Fin a la privatización Un tsunami marcha por Madrid por la gestión totalmente pública de los servicios a la ciudadanía
La plataforma Tsunami por los Servicios Públicos nace este domingo para aglutinar a decenas de organizaciones sociales que quieren hacer frente al “modelo neoliberal de destrucción masiva de los derechos humanos y sociales”.
Opinión
Opinión Los eufemismos y el gasto militar
Los profesionales en la confección de los mensajes políticos y manipulación de la opinión pública han debido apreciar que el termino “rearme” era demasiado explícito y contundente y que podría provocar cierto rechazo.
Gobierno de coalición
Consejo de Ministros Ángel Víctor Torres anuncia que tiene cáncer, pero seguirá al frente del Ministerio de Política Territorial
Reducirá su agenda como titular de Política Territorial en las semanas previas a una operación a finales de abril. Fuentes ministeriales dicen que la enfermedad “va bien” y “tiene solución”.
Más noticias
Contigo empezó todo
Contigo empezó todo El comunismo libertario de Hildegart Rodríguez
La joven madrileña, a quien se recuerda por morir a manos de su madre, contribuyó con sus ideas a la política revolucionaria durante la II República.

Recomendadas

México
Hallazgo en Teuchitlán Crisis de desaparecidos en México: los buscadores, entre el narco y las omisiones del Estado
El hallazgo del cementerio clandestino en Teuchitlán, Jalisco, ha conmocionado a todo México. El país que vive una crisis por la desaparición de más de 120 mil personas, que en 18 años solo han aumentado frente a una pasmosa impunidad.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un rayo de esperanza tras cinco años de los protocolos de la vergüenza
A punto de prescribir los posibles delitos, un avance judicial abre la puerta a conocer quién decidió no derivar a hospitales a ancianos en residencias en la Comunidad de Madrid.
Siria
Siria Siria, de la euforia por el fin del régimen al examen de la transición
Las matanzas en el litoral sirio y las dudas acerca de las nuevas autoridades dejan atrás la alegría por la caída de al Asad y enfrían el aniversario de la revolución, el primero tras la huida del dictador.
Medio ambiente
Oliver Franklin-Wallis “La industria de los residuos deja una cicatriz enorme en nuestro planeta”
El periodista británico Oliver Franklin-Wallis recorre en ‘Vertedero’ (Capitán Swing, 2024) las prácticas ocultas de la industria de residuos, exponiendo el papel de las grandes corporaciones, en connivencia con autoridades e instituciones públicas.