We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Inteligencia artificial
Un manifiesto denuncia la desprotección de artistas y trabajadores culturales frente a la IA generativa
Varias organizaciones de autores, artistas y trabajadores de la cultura denuncian la desprotección que sufren ante la competencia desleal y los “abusos” de las empresas desarrolladoras de inteligencia artificial generativa y exigen al Gobierno medidas que minimicen el daño que está provocando su implantación. En concreto, Alianza Audiovisual, la Asociación de Directores de Escena de España, ACE Traductores, la Federación de Asociaciones de Ilustradores/as de España, la Federación Estatal de Asociaciones de Compañías y Empresas Profesionales de Danza y la Unión de Correctores han hecho público un manifiesto en el que resumen las malas prácticas llevadas a cabo por las empresas responsables de la IA generativa y también elevan sus peticiones para que el Gobierno “proteja los derechos fundamentales de todos los ciudadanos, en general, y de los profesionales del sector artístico y cultural, en particular”.
Las demandas expresadas en el manifiesto son, entre otras, la exigencia de autorización previa, la remuneración por el uso legal de las obras y la retirada del mercado de los “modelos ilegales” de IA, así como una indemnización por el uso ilegal de obras artísticas y literarias realizado desde la aparición de los modelos de IA. También solicitan que los productos generados por esta no puedan ser considerados obras de creación intelectual ni estar protegidos por la normativa de derechos de autoría y de propiedad intelectual, y que exista transparencia e información accesible por parte de las empresas para que autores, artistas y titulares de esos derechos sepan si sus obras han sido utilizadas en el entrenamiento o en cualquiera de las fases de desarrollo, puesta en marcha y explotación de los modelos de inteligencia artificial.
Los productos realizados con IA generativa compiten “de forma desleal” en los mismos mercados y plataformas donde creadores y artistas comercializan sus obras, “desincentivando la creación artística y poniendo en riesgo su profesión y fuentes de ingresos”, se lee en el manifiesto
El texto recuerda que las aplicaciones basadas en IA generativa “han inundado el mercado ofreciendo la posibilidad de generar imágenes, sonidos, textos, vídeos a cualquier persona sin conocimientos creativos”. Pero las organizaciones firmantes denuncian que, para poder generar todo ese material, “los modelos de IA han tenido que ser entrenados previamente con obras literarias y artísticas para lo que la mayoría de las empresas de IA no han pedido la autorización de autores, artistas y titulares de los derechos. Tampoco se les ha remunerado por ello”. Además, subrayan que los productos realizados con IA generativa compiten “de forma desleal” en los mismos mercados y plataformas donde creadores y artistas comercializan sus obras, “desincentivando la creación artística y poniendo en riesgo su profesión y fuentes de ingresos”.
Por ello, como primera medida, exigen que las empresas de IA acrediten que han obtenido autorización previa para el uso de las obras en cualquiera de las fases de construcción, desarrollo y explotación de los modelos de inteligencia artificial y que se ha remunerado a sus titulares; y reclaman que se retiren los modelos de inteligencia artificial que se hayan creado de forma ilegal y se les indemnice por el uso ilícito de sus obras.
“En el caso de los modelos de inteligencia generativa —se lee en el manifiesto—, las infracciones de los derechos de propiedad intelectual se suceden en una segunda fase una vez estos modelos salen al mercado y se explotan comercialmente. Generan productos (que no obras) que, en muchas ocasiones, son idénticos a aquellas obras que les sirvieron de material de entrenamiento. Se realizan otra vez en esta segunda fase, por tanto, reproducciones o transformaciones de las obras y se ponen a disposición de terceros, todo ello sin autorización ni cesión de derechos de sus titulares y sin remunerarles por el uso”.
Inteligencia artificial
Literatura y tecnología La IA no sustituirá a los autores humanos, pero ya está precarizando la industria editorial
El manifiesto, al que se han adherido otros colectivos como la Asociación Colegial de Escritores, la Asociación de Autores/as Profesionales del Cómic y la Federación de Asociaciones de Guionistas Audiovisuales, advierte del “profundo impacto que tendrá la inteligencia artificial en el trabajo de miles de personas”, que va más allá de los derechos de autoría y propiedad intelectual. “Tiene también un efecto negativo evidente en el número de encargos que reciben y en sus ingresos y, en consecuencia, en las posibilidades que tienen de vivir de su trabajo, mientras otros se benefician injustamente de su actividad artística y creativa previa”, critican en el texto, que también señala cómo la IA afecta igualmente a muchas otras personas trabajadoras culturales “que, aun no teniendo derechos de propiedad intelectual, son esenciales en todo el proceso de creación de las obras y que ven cómo las labores fundamentales que realizan están siendo sustituidas por estos modelos de inteligencia artificial generativa y sus empleos se encuentran igualmente en riesgo”.
Inteligencia artificial
Inteligencia Artificial y cine ¿Sueñan los cineastas con ovejas eléctricas?
Las asociaciones profesionales firmantes del manifiesto recuerdan que el 12 de julio se publicó en el Diario Oficial de la Unión Europea el conocido como Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial y destacan que en esta normativa “se subrayan los riesgos que para los derechos fundamentales puede suponer el uso de sistemas de inteligencia artificial y se nombran expresamente, entre otros, el derecho a la dignidad humana, la libertad de expresión y de información, los derechos de los trabajadores y los derechos de propiedad intelectual”.
En el escrito también exhortan a la Administración para que no haga uso de ninguno de estos “modelos ilegales” de IA ni permita la presentación de productos generados por aplicaciones basadas en ellos en concursos, premios, ayudas, subvenciones o licitaciones públicas en los que participen profesionales de la cultura “hasta que no se respeten sus derechos y se regule adecuadamente la IA generativa”.
“La mayoría de los modelos de IA, por no decir el 100%, han sido entrenados sin haber solicitado la autorización de sus titulares, infringiendo un principio básico de la propiedad intelectual: sin autorización no hay uso legal”, afirma Marta Sánchez-Nieves, presidenta de ACE Traductores
“Es inadmisible que la propia Administración esté impulsando e incentivando el uso de la Inteligencia Artificial Generativa sin tener en cuenta que la mayoría de los modelos de IA, por no decir el 100%, han sido entrenados sin haber solicitado la autorización de sus titulares, infringiendo un principio básico de la propiedad intelectual: sin autorización no hay uso legal”, afirma Marta Sánchez-Nieves, presidenta de ACE Traductores, una de las organizaciones firmantes.
La IA en la colaboración público-privada
La relación entre administraciones públicas e IA ha sido objeto de polémica en los últimos meses. El 11 de febrero, el Ministerio de Juventud retiró una campaña por el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia tras recibir críticas por el uso en su cartelería de imágenes creadas con IA. Unas semanas antes, en el sector privado, varias librerías de toda España se pusieron de acuerdo para sacar de sus escaparates la novela Juana de Arco, de Katherine J. Chen, después de que el ilustrador y autor de cómics David López criticase con dureza la ilustración de portada, llena de errores debido a un uso inapropiado de la IA.
En su primera comparecencia ante la Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados como ministro del sector el lunes 22 de enero, Ernest Urtasun habló de la protección de los derechos de autoría como uno de los grandes retos que afronta, en un contexto de avances tecnológicos y, en particular, el desarrollo de la IA. “Debemos ser las instituciones públicas quienes trabajemos, en este caso de la mano de las instituciones europeas, para que la IA no sea un mecanismo de desposesión del propio trabajo y de los derechos de los trabajadores, sino al revés, para que sea una herramienta que nos permita vivir mejor”, aseguró el ministro.
Para dar respuesta, mostró su intención de que el Ministerio de Cultura vele por los intereses de los creadores y la protección de la diversidad cultural con una serie de acciones, entre las que se encuentran convertir la Subdirección General de la Propiedad Intelectual en una Oficina de Propiedad Intelectual, con más recursos y rango de Dirección General.
Un mes después, el 23 de febrero, el Ministerio de Cultura presentó su guía práctica de uso de la IA, con la que el departamento encabezado por Urtasun pretende que sea una “herramienta para creadores, creadoras y personas trabajadoras del sector cultural que respete el marco regulatorio de propiedad intelectual”. La guía será de aplicación en los procedimientos del ministerio en las actuaciones que lleve a cabo y afecta a tres ámbitos: la contratación de servicios y actividades creativas, los Premios Nacionales y las subvenciones.
En cuanto a la contratación de servicios y actividades que requieran un desempeño creativo, desde el ministerio se optará por el recurso a profesionales de la creación artística y obras protegidas por derechos de propiedad intelectual. En estos casos, dice la guía, “podrán emplear sistemas de inteligencia artificial como herramientas de apoyo en sus procesos creativos, pero no de manera sustitutiva al desempeño humano”.
En el ámbito de los Premios Nacionales del Ministerio de Cultura (agrupados en siete grandes categorías: Bellas Artes, Cine y Audiovisuales, Libro Lectura y Letras, Artes Escénicas y Música, Patrimonio Histórico, Industrias Culturales y Tauromaquia, cada cual con sus propias subcategorías), el ministerio promoverá la inclusión en las convocatorias de una cláusula “para que no puedan resultar galardonadas aquellas obras que sean creadas íntegra y exclusivamente por inteligencia artificial generativa”.
Inteligencia artificial
Tecnología y cultura Ninguna obra creada “íntegra y exclusivamente” con IA podrá ganar un Premio Nacional
Y sobre las subvenciones y ayudas públicas, la guía especifica que en las convocatorias se promoverá la inclusión de una cláusula en la que se indique que “los proyectos y actividades beneficiarios, especialmente aquellos en los que se incluya inteligencia artificial, deben garantizar el máximo respeto a la normativa reguladora en materia de inteligencia artificial y de propiedad intelectual”.
El mismo día de febrero en el que Cultura presentaba su manual de uso de la IA, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de Microsoft, Brad Smith, firmaron un acuerdo en Moncloa para “impulsar el despliegue de la inteligencia artificial responsable”. La compañía multiplicará por cuatro las inversiones en infraestructura de IA y cloud en España durante 2024 y 2025, hasta alcanzar los 2.100 millones de dólares (unos 1.950 millones de euros), lo que supone la mayor inversión de Microsoft en sus 37 años de presencia en el país. Según este plan, la empresa abrirá una Región Cloud de Centros de Datos ubicada en la Comunidad de Madrid, y también plantea construir un campus de Centros de Datos en Aragón.
El acuerdo de colaboración público-privada entre España y Microsoft contempla la extensión del uso de la inteligencia artificial en la administración pública, incluyendo la formación de funcionarios, y la promoción del uso de IA responsable.