Huelga feminista
Huelga feminista en taxi

Porque la huelga feminista empieza en cada lugar dónde algún cabrón nos trata de joder.

Rihanna flipa
22 feb 2018 19:33

Pillo un taxi porque me lo van a pagar los del curro. Son las tres de la mañana y se me cae el coño al suelo cuando hago el cálculo de las horas que podré dormir. El taxista me repite tres veces durante el trayecto que le gustaría irse a dar una vuelta por ahí con alguna chica guapa en vez de estar trabajando. Como si no hubiera entendido a la primera que se me quiere pinchar. Me hace un montón de preguntas totalmente fuera de lugar que respondo con mentiras estándar, que ya tengo aprendidas para estas ocasiones, mientras pienso en si debería asustarme por el hecho de estar encerrada en un coche a merced de este cenutrio. Pero como dice Despentes, «me resbalan completamente sus pobres pichas de pajeros, porque ya he tenido otras en el vientre y porque me cago en ellos», así que decido que estoy demasiado cansada y puede que borracha como para encima tener que preocuparme.

¿Cómo nos vamos a sentir cómodas si van matando a tías por ahí y todavía es nuestra culpa, por ir solas, por ir tarde, por ir como nos da la gana?

Le hago parar dos esquinas antes para que no sepa donde vivo. Me hace un ticket a mano, mientras me explica con entusiasmo que ahí está todo, número de licencia, matrícula y teléfono. Claro que sí, guapi, mañana te llamo y te la chupo, ¿no te jode? Hasta me devuelve más cambio para que me tome algo. Cojo la pasta y huyo de lo que el tonto de los cojones este habrá vivido como un flirteo picarón entre taxista y clienta. Me espero a que se pire para que no me siga y camino lo que me queda hasta casa mientras pienso en la huelga general del 8 de marzo y me vuelve el temor de que no estemos a la altura de las circunstancias.

Una colega me decía el otro día que no nos sentimos cómodas en la calle porque, por definición, no es nuestra. ¿Cómo nos vamos a sentir cómodas si van matando a tías por ahí y todavía es nuestra culpa, por ir solas, por ir tarde, por ir como nos da la gana? Pues quizás twerkeando con más ímpetu, tomando este espacio supuestamente público en el que no nos dejan estar y transformándolo en algo nuestro, en algo vivo. O quizás cambiando la lógica y reapropiándonos de ello en las sombras a las que se nos ha relegado, actuando con nocturnidad, alevosía e imaginación –para sabotear todo lo que nos jode. Una vez más, no se trata de una dualidad, o de una frontera insuperable. Hay que estar en los dos lados.

Este 8 de marzo vamos a hacer la huelga de las que no podemos hacer huelga porque el paradigma fábrica-obrero-patrón, en el que los trabajadores detienen la producción y crean pérdidas inasumibles para el jefe, empieza a oler a viejuno. Algunas ni siquiera hemos podido hacer nunca huelga en términos legales, porque no nos ha pillado dadas de alta a la seguridad social. Los startups, el virus de los emprendedores, el flujo de datos, las multinacionales, el Uber y el Airbnb dibujan el perfil de un nuevo horizonte para el que hace falta inventar un nuevo chantaje eficiente.

Pero sin dejar por ello de hacer una huelga contundente, salvaje, algo que sea percibido como peligroso por los de arriba

En la última huelga general en Catalunya, el pasado 8 de noviembre, los CDRs dieron un buen ejemplo de lo que venimos hablando desde hace tiempo: se cortaron carreteras, sobre todo en puntos fronterizos, y se impidió la salida de trenes. De esta forma se rompía la dicotomía entre alguien que trabaja asalariada y legalmente, que tiene el poder de dejar de producir, y el resto del mundo: migrantes, amas de casa, putas, estudiantes, carteristas y las que simplemente hemos decidido no dedicar nuestro tiempo a generar dinero para que algún cabrón se siga haciendo rico.

La huelga feminista va a reinventar el concepto, éste va ser nuestro día. El día de salir a gritar, a bailar, a saquear y a quemar lo que haga falta. Hay que darlo todo, poniendo la vida en el centro y los cuidados en valor, exigiendo que sea así siempre, que sea de cajón. Pero sin dejar por ello de hacer una huelga contundente, salvaje, algo que sea percibido como peligroso por los de arriba.
Las declaraciones de Arrimadas me dan un poco de tranquilidad en este sentido, cuando dice que no apoya la huelga porque, según ella, esconde cuestiones ideológicas de fondo (no como las otras huelgas generales, que esconden un delicioso relleno de chocolate). Eso significa que la huelga sigue siendo nuestra, y que algo estamos haciendo muy bien.

Así que tiki-tiki, Arrimadas en contra y Ylenia a favor, ya está todo dicho

En cambio, Ylenia ya ha mostrado su apoyo a la huelga, y es que como dice ella: Cuando dejas a tu marido porque siempre está de fiesta mientras tú haces de madre. Eres feminista!, Cuando no estás dispuesta a ser una guarra por disfrutar tu sexualidad y que ellos sean cracks. Eres feminista!, Cuando no estás dispuesta a cobrar menos que un hombre porque sabes que eres mejor que él. Eres feminista! Así que tiki-tiki, Arrimadas en contra y Ylenia a favor, ya está todo dicho.

Este 8 de marzo, a vomitar en el taxi, o a pincharle las ruedas, o a vaciarle la caja mientras le dices guarradas al oído, o a aparecer detrás de un semáforo en rojo y, emulando a Mallory Knox en Natural born killers, reventarle los cristales con un bate de béisbol al grito de «¿Todavía te parezco sexi?».

Sobre este blog
Twerkeando en la revuelta

info@elsobresalto.com

Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Huelga feminista
Represión Siete participantes de la huelga feminista del 2018 son condenadas a un año y medio
La sentencia exige a las activistas catalanas más de 26.000 euros de indemnización a la empresa ferroviaria, así como hacer frente a las costas judiciales.
8 de marzo
8 de marzo Los feminismos andaluces llenan las calles un 8M marcado por el apoyo al pueblo palestino
Decenas de miles de mujeres se movilizan en las convocatorias del 8M de los feminismos diversos centrados en denunciar el genocidio en Palestina y la defensa de los derechos de las mujeres trans
Represión
Euskal Herria Denon Bizitzak Erdigunean Donostia celebra un guateque para pagar las multas de la huelga feminista general
El goteo de multas ha empezado esta semana. La primera asciende a 800 euros, 400 con pronto pago. El 30 de noviembre hubo 24 identificadas y 5 detenidas solo en la capital guipuzcoana.
Trabajador
7/3/2019 14:11

"...las que simplemente hemos decidido no dedicar nuestro tiempo a generar dinero para que algún cabrón se siga haciendo rico."
Eres un ejemplo a seguir... sin trabajo yo también hago huelga

0
0
#9115
25/2/2018 14:05

no, "los de arriba" son todos aquellos que se creen por encima de las mujeres, sólo por ser hombres

0
1
#9073
24/2/2018 13:52

¿Los de arriba son un taxista salido que gana una miseria y se pasa la vida encerrado en una lata de sardinas meneándosela soñando con alguna clienta?

3
0
#9116
25/2/2018 14:06

no, "los de arriba" son todos aquellos que se creen por encima de las mujeres sólo por ser hombres

0
2
#9003
23/2/2018 12:01

Las huelgas nunca dejarán de ser necesarias, ni las feministas, ni las de ¿fabrica-obrero-patrón?¿es que no estamos tod@s en el mismo barco?No deberíamos llamar a la división sino a la unión de las clases oprimidas, lo que buscan las élites es nuestra división, y parece que lo están consiguiendo.

2
0
#9015
23/2/2018 13:35

la radicalidad de tus palabras esconde la miseria de tus actos, saludoas jajajajajaj

2
0
#9000
23/2/2018 11:26

Pues aplicarle el cuento al resto de artículos que publicáis. Igual tenemos que quemar el Salto y el resto de medios "del rollo". Llegaremos en taxi, claro.
gracias por iluminarnos.

2
0
#8973
22/2/2018 22:36

balla no me lo experava

2
0
#8969
22/2/2018 22:17

Boommmmmmmmmmmmm

2
0
Sobre este blog
Twerkeando en la revuelta

info@elsobresalto.com

Ver todas las entradas
Desahucios
Escudo social Sanitarios y sanitarias de atención primaria se unen contra los desahucios, “un problema de salud pública”
Depresión, ansiedad, empeoramiento de enfermedades crónicas o surgimiento de nuevas afecciones acompañan a los problemas habitacionales. Lo denuncian médicos de Vallecas (Madrid) y lo refrendan los estudios.
Argentina
Argentina “Existen solo dos géneros: fascistas y antifascistas”: las luchas LGTBIQ+ aglutinan el rechazo a Milei
Una gran movilización recorrerá centenares de localidades en Argentina y en grandes ciudades del mundo este 1 de febrero en respuesta al discurso de odio del líder ultra.
Galicia
Galicia ¿Quién es quién en Greenalia? La empresa que quiere otra celulosa en Galicia y arrasa olivares en Andalucía
Los tentáculos del entramado empresarial tras esta corporación tocan a gran parte de la oligarquía gallega. Desde medios de comunicación como 'La Voz de Galicia' hasta equipos de fútbol como el Deportivo o entidades financieras como Abanca.

Últimas

Crisis climática
Parlamento Ciudadano Climático Un jurado popular ciudadano para combatir la crisis climática y el retroceso democrático
En un momento crítico para la democracia y la acción climática, cinco organizaciones medioambientales reunieron en el Congreso de los Diputados a científicos, actores sociales y asambleístas para impulsar un Parlamento Ciudadano Climático Permanente.
Pensiones
Revalorización de las pensiones Los pensionistas no se fían y salen a la calle tras el rechazo al decreto ómnibus
La Unidad de Acción de Madrid convoca a manifestarse este viernes 31 frente a la sede del PP tras la “posición negativa de la derecha ultranacionalista, sea española o catalana”.
Ayuntamiento de Madrid
Convenio colectivo Las cuidadoras ganan a Almeida: Madrid anuncia nuevos pliegos con la subida salarial pactada
Las trabajadoras de cuidados seguirán en huelga dado que “no hay nada tangible”. El anuncio afectaría a 12.000 personas empleadas por el Ayuntamiento, pero no a las 2.000 trabajadoras más convocadas a la huelga que trabajan para la Comunidad.
Cine
El Salto recomienda Diez películas y series en Filmin para acercarse a la diversidad de Andalucía
Una selección realizada por la periodista de El Salto Aurora Báez Boza sobre las mejores películas y series para descubrir las diversidades que habitan dentro de Andalucía
Salario mínimo
Pacto bipartito Trabajo y sindicatos acuerdan la subida del salario mínimo en 50 euros sin el apoyo de la patronal
Díaz anuncia un acuerdo con los sindicatos que llevará al Congreso de Ministros de forma “inminente” la propuesta del Ministerio de Trabajo. Los sindicatos proponían una subida de 66 euros y la patronal, de 34 euros.
Más noticias
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Sin materiales, sin protección adecuada y sin financiación: los bomberos de Madrid denuncian “abandono”
La contaminación de los equipos de protección de cinco bomberos en un incendio en una nave de reciclaje hace levantar de nuevo la voz de los sindicatos, que ya tienen denunciada ante el TSJ de Madrid, la falta de financiación.
Opinión
Opinión No es Poder Popular todo lo que reluce
VV.AA.
No hay alternativa capaz de cambiar este sistema que no hable claramente de socialismo y de clase trabajadora
Lavapiés
Madrid Lavapiés gana un asalto a la organización fascista Hacer Nación
La empresa en la que se iban a organizar unas jornadas con figuras de la extrema derecha europea ha confirmado que comunicó a Hacer Nación que no le cedía su espacio.

Recomendadas

Dana
Tres meses de la dana “Aquí no llovió casi nada”
VV.AA.
Un vecino de Benetússer explica cómo la riada arrasó y cambió para siempre las vidas de miles de personas.
Crímenes del franquismo
Isabel Alonso Dávila “El franquismo fue una máquina de fabricar miedo y dolor hasta el final”
Detenida en Granada en 1974 y 1975 por su vinculación con el movimiento estudiantil antifascista de la época ha presentado la primera querella en Andalucía por Crímenes contra la Humanidad en la dictadura franquista
Jaén
Andalucía Lopera no quiere que Greenalia especule con sus olivos
Decenas de pequeños olivareros de la Campiña Norte de Jaén podrían perder sus terrenos en beneficio de una empresa que quiere talar los árboles para instalar siete parques fotovoltaicos.
Redes sociales
Nuevas normas Meta abraza el discurso de odio y desafía la normativa anti discriminación
La plataforma de Mark Zuckerberg anunció cambios en sus normas: cuando empiecen a aplicarse, los comentarios misóginos y LGTBIAQ+fobos no violarán su política, pero existen herramientas para denunciar el discurso de odio.