We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
En medio de la mayor crisis económica desde que es presidente, Mauricio Macri ha iniciado negociaciones con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, para abrir una línea de crédito que ascendería a 30.000 millones de euros. La medida rompe con 15 años sin que Argentina solicite ayuda financiera al organismo internacional y sume al país en un clima de incertidumbre y preocupación.
En un breve mensaje grabado, Macri volvió a culpar de la situación al gobierno kirchnerista, a quien acusó por el “desastre dejado en las cuentas públicas”, y se excusó en que este “es el único camino posible para salir del estancamiento”.
La petición es una paradoja para quien hace poco más de dos años, se paseaba por los medios de comunicación con un cartel que decía “No volvamos al fondo”
“Están subiendo las tasas de interés, está subiendo el petróleo, se han devaluado las monedas de países emergentes, entre otras variables que nosotros no manejamos. El problema que tenemos es que somos de los países del mundo que más dependemos del financiamiento externo. Frente a esta nueva situación y de manera preventiva, he decidido iniciar conversaciones con el Fondo Monetario Internacional para que nos otorgue una línea de apoyo financiero”, anunció.
Si bien el presidente no dio a conocer las cifras del préstamo, la agencia económica Bloomberg publicó que rondaría los 30.000 millones de euros. Tampoco lo hizo su ministro de Economía, Nicolás Dujovne, quien defendió que el crédito pedido al FMI es a tasas más bajas que en los mercados internacionales.
Una paradoja para quien, hace poco más de dos años, se paseaba por los medios de comunicación con un cartel que decía “No volvamos al fondo”, defendiendo que prefería el endeudamiento en el mercado financiero porque “de repente el FMI quiere poner condicionamientos que la Argentina no va a querer tomar”. En términos futboleros, Dujovne sentenciaba: “No queremos que nos marque la cancha”.
Desde la semana pasada el peso argentino sufre una depreciación constante frente al dólar. La moneda norteamericana rondó los 24 pesos apenas horas antes del mensaje presidencial y ha perdido el 5,3% de su valor. En el intento de frenarlo, Argentina ha gastado infructuosamente más de 7.000 millones de sus reservas.
La inflación se ha disparado a más de un 20% y, por si esto fuera poco, ha reaparecido en los medios de comunicación dando consejos el otrora ministro de economía Domingo Felipe Cavallo, famoso por el corralito que en diciembre de 2001 llevó a Argentina al estallido social.
El FMI es el invitado indeseable de los hogares argentinos. No en vano, en una encuesta realizada el pasado mes de enero entre periodistas, políticos y empresarios del país sudamericano, el 67% dijo tener una visión negativa de este organismo comandado por Lagarde.
El primer endeudamiento argentino con el Fondo se remonta al año 1957, cuando la llamada Revolución Libertadora, el grupo de militares golpistas que derrocaron al entonces presidente Juan Domingo Perón, solicitó un préstamo por 57 millones de dólares de entonces.
A partir de allí cada vez que un gobierno solicitó dinero, la contrapartida exigida por el organismo —con mayor o menor rigurosidad— fue siempre implementar mayores ajustes y un desarme del Estado de bienestar que trajo exclusión social y pérdida de derechos laborales y sociales de las clases más desfavorecidas.
La última vez que Argentina recurrió al FMI fue en el año 2003. Dos envíos por un total de 11.074 millones de dólares marcaron el final de las líneas crediticias. El 3 de enero de 2006 el entonces presidente Néstor Kirchner en un solo pago de 9.800 millones canceló la deuda, uno de los hitos más recordados de su gestión, decisión que permitió un ahorro de 842 millones en intereses.
“Dijimos que queremos volver a ser independientes y manejar nosotros los resortes de nuestro país y por eso decidimos terminar con esa deuda de cincuenta años y le dijimos al Fondo Monetario Internacional basta a la deuda externa. La Argentina paga, se libera, construye su destino y empieza construir su independencia. Tenemos decisión soberana”, exaltó en un acto proselitista.
Este retorno al endeudamiento se vive con mucha preocupación en la sociedad argentina. Las experiencias anteriores nunca fueron buenas. Casualidades o no, la semana pasada el Gobierno anunció un recorte de 3.000 millones de dólares en el gasto público, lo que se suma a las reformas de flexibilización laboral y una posible vuelta al sistema privado de pensiones, todo en la línea de las exigencias que siempre hacen desde el Fondo.
Relacionadas
El Salto Radio
El Salto Radio Etxebizitza eskubidearen gatazka Euskal Herrian
Estados Unidos
Análisis Por qué era fácil predecir la victoria de Trump: una mirada económica y social
Dana
València ¿Qué pasó con las ayudas en otras catástrofes?
SITUACION ECONOMICA DEL REGIMEN MACRISTA
https://www.lahaine.org/mundo.php/la-situacion-economica-del-regimen
Memoria del saqueo, documental completo de Fernando Pino Solanas.
https://www.youtube.com/watch?v=GgHsLxO0oxs