Racismo
Construyendo movimiento antirracista en el País Valencià

Desde siempre, las migrantes y racializadas tenemos enormes dificultades para articular un movimiento propio. Nos jugamos la libertad, la residencia en el Estado Español y la posible separación de nuestras familias. Nos jugamos la vida por el simple hecho de organizarnos, de plantar cara, de levantar la voz.

Manifestación Antirracista 12n Valencia
El 12 de noviembre se desarrolló una marcha antirracista en las calles de Valencia Patricia Cadavid

Como migrantes y racializadas estamos atravesadas por fuertes relaciones de opresión. A muchas de nosotras nos oprime la situación de pobreza y de género, pero también y muy importante, se nos oprime por no pertenecer a las privilegiadas, a las blancas. Antes, cuando salíamos con nuestras compañeras valencianas y españolas blancas a manifestarnos contra el CIE o la Ley de Extranjería, gritábamos: ¡Nativa o extranjera la misma clase obrera! Hoy hemos aprendido a reconocer que afortunadamente a nuestras compañeras con papeles y no racializadas, es decir, a nuestras compas blancas, no les atraviesa la Ley de Extranjería ni el racismo social e institucional.

Esta distinción es fundamental, por ejemplo, si el Estado manda perseguir migrantes para llenar un vuelo de deportación. A las compañeras blancas y con papeles, aunque clase obrera, no se les perseguirá, no serán víctimas de una redada racista. Simplemente no viven esta realidad. Ellas están abajo, nosotras en el sótano.
Desde siempre, las migrantes y racializadas tenemos enormes dificultades para articular un movimiento propio. Nos jugamos la libertad, la residencia en el Estado Español y la posible separación de nuestras familias.

Si el Estado manda perseguir migrantes para llenar un vuelo de deportación, a las compañeras blancas y con papeles, aunque clase obrera, no se les perseguirá

Nos jugamos la vida, por el simple hecho de organizarnos, de plantar cara, de levantar la voz. Las compañeras blancas, por suerte, pueden pedir permisos para hacer concentraciones, muchas tienen derecho a paro si las tiran del trabajo, pueden sindicalizarse, no las encerrarán en un CIE, ni las deportarán. Ellas, las compañeras blancas, pertenecen, como explicaba Frantz Fanon, a la zona del ser.

En esta zona los conflictos dentro del sistema-mundo son regulados, según Bouventura de Souza, “por métodos de regulación y de emancipación y de reconocimiento de códigos de derechos, laborales, derechos de la mujer, derechos humanos, etc. y reconocimiento de discurso emancipatorio como igualdad, libertad, autonomía, etc.” Es decir, las compañeras gozan de privilegios que les permiten resistir y luchar desde otra posición en el mundo.

Por el contrario, en la zona del no-ser, los conflictos se gestionan mediante el despojo y la violencia. Grosfoguel indica que “como su humanidad no es reconocida, todas sus formas de pensar, de existir, espirituales, de actuar y de ser, son consideradas inferiores.” No somos consideradas personas dignas de ejercer los derechos humanos. A nosotras sólo nos queda como respuesta a nuestros empeños emancipatorios la represión pura y dura o la muerte.

El gran aporte del pensamiento decolonial, es señalar al pensamiento de izquierdas que la modernidad surgida en 1492 no inauguró una fase de progreso y desarrollo como señalan ahora los libros de historia. La modernidad occidental y por tanto, el capitalismo neoliberal no se contrapone al racismo y al patriarcado, es parte de esta civilización que se globaliza. No podemos cambiar solamente la política económica sin destruir también en el proceso las opresiones de raza y género.

No podemos cambiar solamente la política económica sin destruir también en el proceso las opresiones de raza y género
Nuestra historia de lucha e invisibilización en el País Valencià es larga. Hay hitos que recordaremos por siempre: la resistencia clandestina en el boom de la construcción de los ochenta, los importantes encierros para conseguir la más grande regularización extraordinaria en 2001, la lucha por el centro de acogida y contra el desalojo de los que ocuparon el puente de Ademúz y la ex-fábrica de Bombas Gens, los motines y las fugas en el CIE de Zapadores, la resistencia ante las redadas policiales y muy importante, la actual lucha por justicia, ante la brutal agresión de la policial local del “ayuntamiento del cambio” de Valencia a nuestra compañera guineana Nieves Nfina.

El doble rasero del Ayuntamiento de Valencia –Compromís, València en Comú, PSPV- cuando de racismo institucional se trata es lamentable. Impulsan campañas para impulsar la interculturalidad, pero su silencio con el caso de Nieves Nfina, clama al cielo . El Ayuntamiento del cambio todavía no ha recibido a la Asamblea Ciudadana contra el Racismo para dar explicaciones. Asegura que no ha zanjado la investigación, pero no hacen públicos los resultados. Mientras tanto la compañera es doblemente victimizada, denunciada por “desacato a la autoridad” por la Policia Local.

En todo este recorrido de lucha las compañeras blancas, activistas y técnicas de organizaciones solidarias nos han acompañado. Especial mención hemos de hacer a la Campaña por el Cierre de los Centros de Internamiento para Extranjeras y a la Mesa de Entidades en Solidaridad con los inmigrantes. Así como a los medios alternativos más representativos de Valencia, especialmente Radio Klara y Radio Malva.

Las compañeras racializadas y empoderadas han conseguido a pesar de las críticas y descalificaciones, incluso del mismo tejido asociativo valenciano y de la izquierda, levantar la voz y participar en la primera marcha de las comunidades racializadas contra el racismo, 12N Por una Sociedad sin Racismo, organizada en paralelo en Madrid y Barcelona. En nuestro caminar nos hemos encontrado con el pueblo gitano, compañeras y compañeros que experimentan el racismo social e institucional como nosotras y que han querido sumarse al movimiento en Valencia.
Un nuevo sujeto feminista, político, antirracista y colectivo surgió el 12N en Valencia. "¡Somos las nietas de las indias y las negras! ¡Nunca más sin nosotras!" 
reivindicó Salomé Carvajal. Un nuevo sujeto feminista, político, antirracista y colectivo surgió el 12N en Valencia. "¡Nunca más sin nosotras!¡Somos las nietas de las indias y de las negras, que, aunque las violaron, no las pudieron extinguir! ¡Nunca más sin nuestras niñas y jóvenes!" Así reivindicó Salomé Carvajal, portavoz racializada, el protagonismo que han adquirido las compañeras en la lucha antirracista.

La concentración del 12N en Valencia “Por una Sociedad sin Racismo” marca un antes y un después en la lucha antirracista. Se trata de sólo el principio de un movimiento “tres veces rebelde” como señalaba nuestra compañera catalana María Mercè Marçal. Se trata de construir un movimiento antirracista, pero también antipatriarcal y anticapitalista. Este texto es un llamado a que las compañeras y compañeros racializados que se sientan aludidos se sumen al movimiento. Es un llamado a la sociedad civil valenciana para que nos acompañen. Es un llamado para fortalecer los movimientos sociales en el País Valencià.


Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Análisis
Análisis Políticas de la muerte: La herida abierta del Mediterráneo
No toda muerte vale lo mismo.La desigualdad de los vivos se convierte en una jerarquía de los muertos, al punto que algunos ni siquiera cuentan.
Racismo
Racismo Que no quede impune el racismo policial
VV.AA.
Diversos colectivos hemos creado la “Red contra los abusos policiales racistas” para sostenernos, informarnos y, sobre todo, visibilizar los casos que no se denuncian pública ni judicialmente
Almería
Derecho a la vivienda ADIF desahucia a cuatro familias migrantes en Almería por las obras del AVE
Los vecinos piden una “alternativa justa” para poder marcharse de sus casas y han recurrido la orden de desalojo inmediato, resuelta a favor de ADIF, al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
#3580
22/11/2017 18:17

Y si no os sentís integrados porque insistís en quedaros?? No queremos parasitismo social.

0
1
#3550
22/11/2017 0:16

Llamar privilegios a los derechos,refleja el pobre nivel critico del articulista.Se extrapolan conceptos y se sugiere un mix que en el fondo es igualmente racista.La lucha contra el racismo,es mucho mas que una oprtunidad para que ciertos plumiferos den rienda suelta a sus teorias funcionales al la peor reacción.

0
2
Estados Unidos
Ola antigénero Trump, pasado y futuro del infierno que viven las personas trans en Estados Unidos
Aunque los atentados más graves contra los derechos trans en EE UU en los últimos años han venido de parte de los Estados, Trump empieza su mandato cargando contra el derecho a la no discriminación o los tratamientos médicos para el colectivo.
Palestina
Genocidio “Felicidad mezclada con mucha tristeza”, gazatíes en Egipto reciben las noticias del alto al fuego
Las personas palestinas refugiadas en Egipto celebran el alto el fuego aunque reconocen muchas dudas sobre el posible retorno a su tierra, toda vez que la campaña de Israel ha terminado con las infraestructuras y diezmado a las familias gazatíes.
Estados Unidos
El regreso de Trump Trump saca a Estados Unidos del Acuerdo de París y cierra la frontera con México
Con una batería de órdenes ejecutivas, Donald Trump declara la “emergencia nacional” en la frontera sur, indulta a 1.600 condenados por el asalto al Capitolio y saca a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud.
La madeja
La madeja Jano, el fantasma y el umbral
La mística del Año Nuevo (el tiempo de lo recién hecho, de lo intocado aún) tiene que ver, sobre todo, con aquello que necesitamos dejar atrás. Funciona como exorcismo y no como conjuro.
Estados Unidos
Tecnologías y poder Trump y la Internacional del Odio, o cómo las tecnologías juegan al servicio del poder
Las nuevas tecnologías se habían convertido en el brazo armado del capitalismo, lo que no nos imaginábamos era el rol tan decisivo que terminarían jugando en el escenario político mundial.
Yemayá Revista
Yemayá Revista El feminismo saharaui, una lucha debilitada por el abandono de un pueblo
Pese a lo esencial de la lucha de las mujeres saharauis por reivindicar sus derechos y los de su tierra, 50 años de exilio y colonización han tenido impactos en los ejes patriarcales de los campamentos de personas refugiadas en Tinduf.
Análisis
Análisis Políticas de la muerte: La herida abierta del Mediterráneo
No toda muerte vale lo mismo.La desigualdad de los vivos se convierte en una jerarquía de los muertos, al punto que algunos ni siquiera cuentan.

Últimas

Comunidad de Madrid
Sanidad a la madrileña Partos sin epidural y bebés en riesgo, la situación de la maternidad de La Paz llega a los juzgados
La plantilla del gran hospital madrileño denuncia la situación de la atención materno infantil por la escasez de personal, que ha llevado a situaciones límites como pausas respiratorias de recién nacidos que no fueron detectadas.
Barcelona
Derecho a la vivienda Barcelona se vuelca en la defensa de la Casa Orsola ante su primer desahucio
El mundo de la cultura y el movimiento de la vivienda se organizan para frenar el desahucio programado para el 31 de enero. Un fondo buitre pretende expulsar a los vecinos, convertir todos los pisos en alquileres temporales y triplicar el precio.
Opinión
Opinión “¿Cómo se va usted con Errejón a su casa?”
El duro interrogatorio del juez Adolfo Carretero hacia Elisa Mouliaá, quien denuncia haber sido agredida sexualmente por Íñigo Errejón, demuestra que los avances del feminismo se siguen estrellando contra el bloqueo de las togas.
Crisis climática
Crisis climática Miles de millones en fondos europeos no logran salvar a los mariscadores de la crisis climática
VV.AA.
Las grandes empresas se llevan la mayoría de uno fondos europeos ligados a la sostenibilidad en detrimento del pequeño mariscador.
Ocupación israelí
Primera fase de la tregua Varios incidentes ponen a prueba el alto el fuego en Gaza
Cuando no se han cumplido 48 horas de tregua, la agencia Wafa denuncia dos ataques israelíes en Rafah, mientras un soldado habría muerto en Nablús. Al menos 830 camiones han entrado en la Franja con ayuda humanitaria.

Recomendadas

Migración
Derechos Humanos 2.465 personas han muerto o desaparecido intentando llegar a territorio español en 2024
El informe ‘Derechos humanos en la Frontera Sur’ de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía pone el foco este año en la situación de los asentamientos en Huelva y Almería donde viven más de 12.000 personas.
Laboral
Prácticas antisindicales Organizando el sindicalismo en El Corte Inglés: “Nos dicen que hablemos en la calle por miedo”
Sindicatos de base tratan de organizar el sindicalismo en El Corte Inglés, conocido por favorecer a los sindicatos oficialistas y reprimir a los demás.
Palestina
“Cuando cese el genocidio, todo el mundo debería recorrer las calles arrasadas de Gaza” Asmaa Alghoul
Nacida en Rafah en 1982, la periodista y escritora Asmaa Alghoul es una de las voces palestinas más independientes. Muy crítica con Fatah y Hamás asegura que no va a permitir que sus libros sean traducidos al hebreo.
Crisis climática
Un 50% entre 2070 y 2090 Decrecer de forma planificada o a la fuerza: el PIB mundial se hundirá por la crisis climática
Economistas y científicos británicos dan por hecho que el crecimiento se desplomará en las próximas décadas por los “shocks climáticos”.