Hemeroteca Diagonal
Menores trans: invisibles y sin derechos

Algunas personas sienten y expresan en su infancia identidades sexuales diferentes a las que les asignaron al nacer. El sistema los ignora mientras las familias luchan para que se reconozcan sus derechos.

Tomboy
Fotograma de la película Tomboy, dirigida por Céline Sciamma, en 2011. Otras películas recomendables son Ma vie en rose (Alain Berliner, 1997) o el corto Vestido nuevo (Sergi Pérez, 2008).
“En el momento en que somos capaces de nombrarnos”, contesta la sexóloga Almudena Herranz cuando se le pregunta a qué edad puede una persona expresar su identidad sexual. Patrick lo hizo a los dos años. Eli a los tres. “Cuando pueden empezar a nombrarse hablan de sí mismos en el género que les resulta más afín a lo que sienten”, explica Herranz. “Algunos son muy directos y empiezan a decir que son niños o niñas aunque todo el mundo piense lo contrario”.

Los y las menores transexuales, niños o niñas cuya identidad sexual no coincide con el sexo asignado al nacer en función de sus genitales, no existen en la estadística. Pero “los niños hablan y, cuando lo hacen, tenemos que escucharlos”, explica Vio­leta Herrero, madre de Eli, vicepresidenta de Chrysallis Madrid y coordinadora del grupo de padres y madres de Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (Cogam). Su hija le dijo muy pronto que, pese a haber sido clasificada como niño al nacer, era una niña. En su familia empezó un proceso de transición. “Cuando empiezas a dejar que tu hija sea ella misma la oyes reír, ves que, en su caso, terminan los terrores nocturnos, no le dan rabietas, no la ves decaída... ves que es una niña mucho más feliz”. “Dejándoles que se expresen sabemos que mejora su estado de ánimo, y cualquier familia lo relata: empiezan a relacionarse de otra manera con la gente, a estar sonrientes”, explica Herranz.

Saida insiste en que nunca ha querido condicionar a su hija, sino que procura que ella tenga “toda la información”
Por su parte, Saida García, presidenta en la Comunidad de Madrid de la asociación de familias de menores transexuales Chrysallis, señala qué es lo que más demandan las familias. “La primera necesidad de las familias con menores transexuales es la información, y con esa información puedes hacer un mejor acompañamiento”. La asociación Chrysallis da cobertura a unas 150 familias y responde cada día dos o tres mails de madres o padres que se hacen preguntas y no encuentran respuestas. En algunos casos, dice Saida, simplemente se trata de padres y madres que detectan actitudes no normativas en su hijos e hijas. La psicóloga feminista experta en terapias de género Cristina Garaizábal, con una larga trayectoria junto a personas transexuales, pide prudencia para no etiquetar a las personas antes de tiempo y condicionar su desarrollo. Saida insiste en que nunca ha querido condicionar a su hija, sino que procura que ella tenga “toda la información”.

Poner nombre

“Muchas veces los padres y las madres lo que relatan es que pensaban que sus hijos o hijas eran más masculinos, o más femeninos, o creen que se trata de que son gays o lesbianas; la capacidad de explicación llega hasta ahí”, dice Herranz. “Te explican que su hijo es sensible, o que su hija es marimacho pero, ¿un niño transexual?... Se quedan sorprendidos”. Poner nombre forma parte de un proceso complicado en el que los menores transexuales y sus familias se enfrentan a un sistema para el que son invisibles. Las familias de Chrysallis se quejan de las trabas para cambiar el nombre de sus hijos e hijas en el registro. Pero hay resquicios: los padres de Eli buscaron un nombre unisex para poder hacer el cambio de nombre y ser oficialmente quien ya era en su vida cotidiana. La familia de Patrick espera poder hacer pronto la rectificación registral de sexo y nombre.
Dibujo de Jesse, facilitado por la asociación Chrysallis
Dibujo de Jesse, facilitado por la asociación Chrysallis
El sistema de salud tampoco es capaz de dar cobertura a los y las menores transexuales. Violeta y Eli “se colaron” en la unidad de género de la Comunidad de Madrid. Eli, explica su madre, era entonces la paciente más pequeña y acuden a la unidad regularmente para dejar constancia de su caso, algo que en teoría le facilitará en un futuro el acceso a otros recursos si así lo desea. En la unidad del género, la sensibilidad es poca, como ya indica su nombre: Unidad de Transtornos de Identidad de Género (UTIG). No hay pediatra ni personal médico especializado en menores transexuales. A Eli, ir a ver a su endocrino le parece “un rollo”, explica su madre. “Se da por hecho que quien va allí es porque quiere operarse y no se atiende ningún otro aspecto”. De hecho, no todas las personas transexuales piensan en someterse a una operación de reasignación de sexo. Según Violeta, su hija expresó inquietud desde muy pequeña: “Preguntaba a su hermano por operaciones, me preguntaba cuándo le iba a crecer la barba”. Después del cambio de nombre, explica su madre, Eli se relajó. “Creo que ha ido aceptando su cuerpo cada vez más, y que le influye saber que hay otras niñas como ella”.

Patrick, que tiene 12 años y vive en un pueblo de Huesca, ha empezado a tomar bloqueadores hormonales hace cuatro meses. Lo hace en una clínica privada de Barcelona, después de que el sistema público de su comunidad autónoma se los denegara. “Ha sido dificilísimo”, cuenta su madre, Natalia Aventín, presidenta de Chrysallis a nivel estatal. “Estaba preocupada porque mi hijo estaba dejando de hacer cosas como ir a la piscina o hacer deporte; desde que está con los bloqueadores está bien... adolescente, pero bien”.

Dibujo de Inés, facilitado por la asociación Chrysallis
Dibujo de Inés, facilitado por la asociación Chrysallis
Según Chrysallis, el criterio de acceso a este recurso, que sirve para frenar el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios y se puede utilizar en la pubertad si lo desea el menor y los padres consienten, no está definido y en la práctica depende de la voluntad del médico. “El problema es que en este país hay un descontrol total. Hay sitios donde no se dan hormonas hasta los 18 años, ni tan siquiera se dan a los 16, cuando se podrían dar con el permiso paterno o materno. En otros sitios, se dan bloqueadores en la adolescencia. Eso demuestra cómo ni la propia comunidad profesional que se dedica a estos asuntos se pone de acuerdo en relación a los bloqueadores. Yo creo que hay casos en los que son necesarios... La norma sería analizar cada caso en concreto”, dice Garaizábal.

Chrysallis pide una ley que proteja a los menores transexuales. “Las necesidades son muy básicas y lo que debería incluir una ley para nuestros menores ya está recogido en la Constitución y en los Derechos del Niño: no es otra cosa que el derecho al libre desarrollo de la persona, que no se respeta”, dice Natalia Aventín. “El que no se le excluya del sistema sanitario o la libre identidad son derechos fundamentales”, apunta.

Las familias de estos niños y niñas creen que sus hijos son valientes y afirman que tener un hijo transexual ha enriquecido sus vidas. “Me ha hecho crecer como persona y me ha enseñado la diversidad”, dice Violeta. “Si esto no me hubiera pasado, habría muerto ignorante”, explica Natalia. Creo que estamos en una situación en la que, por primera vez, las familias apuestan por lo que dice el chaval o la chavala”, cuenta Almu­dena Herranz. “Estos peques tienen en primera línea de apoyo a sus padres, a sus madres, a sus hermanos. Las vivencias que van a tener son muy diferentes a las que han tenido las personas transexuales que hoy son adultas”.

Una realidad negada en las aulas
Natalia Aventín, presidenta de Chrysallis en el Estado español, se queja de que en los colegios se estudien los tipos de hojas y la clasificación de los minerales, pero se evite cualquier referencia a la diversidad sexual. Los menores transexuales “pasan por el colegio sin poder ver su realidad reflejada, y no sólo eso, sino que su realidad es negada”, se queja. “Ellos no existen, y además eso se les manifiesta públicamente un día tras otro”. 
Alguna claves para entender la transexualidad
Identidad sexual: Sexo sentido como propio por cada persona y que le autodefine como hombre, mujer, queer o diversas identidades trans.
Orientación: Preferencia sexual de la persona. Da lugar a la clasificación entre personas heterosexuales, homosexuales, asexuales y pansexuales.
Tránsito social: Proceso en el que la persona transexual pasa a presentarse como quien es en su entorno.
Bloqueadores: Herramienta para retrasar la aparición de caracteres sexuales secundarios que consiste en suministrar un nivel estable de la hormona GHRH.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.
Redes sociales
MeToo en Instagram “Anónimo, por favor”: escritoras, publicistas y actrices pasan del testimonio en redes a la organización
Varias cuentas de Instagram publican testimonios que dibujan una escena de abuso de poder y violencia sexual normalizada las artes escénicas, la música o la publicidad. Sus impulsoras se organizan para transformar la realidad.
Dana
Medio ambiente y violencia machista Luchar contra la violencia de género; un pilar de la responsabilidad ambiental
La violencia de género y la crisis medioambiental atraviesan nuestras estructuras y se refuerzan mutuamente, creando un círculo vicioso que agrava las vulnerabilidades específicas de las mujeres frente a los desastres naturales como el de Valencia.
Galicia
Medio ambiente Balsas mineras: una amenaza perpetua en favor del lucro empresarial
Las balsas de residuos de la mina de Touro y Riotinto serían ilegales en muchos países por no cumplir normas básicas de seguridad. Estas estructuras ya han provocado docenas de catástrofes y vertidos tóxicos.
Opinión
Violencia sexual El estudio de Igualdad sobre trata alienta el control y el estigma hacia las trabajadoras sexuales
Es necesario reflexionar sobre los mecanismos de control social de corte patriarcal y racista que oprimen a las trabajadoras sexuales. Un feminismo plural debería sentirse interpelado a reconocer el nefasto impacto de estudios faltos de rigor.
Justicia
Reportaje El imperio de los jueces-soldado
La justicia española ha entrado en un callejón peligroso. Desde hace años, el Poder Judicial se ha mostrado escorado a la derecha y más como un problema para la resolución de cuestiones cruciales para el Estado.
Análisis
Violencia sexual Violencia sexual y datos: ¿se denuncia más o se violenta más?
La violencia sexual ha sido el reclamo principal del movimiento feminista y se han mediatizado casos muy diversos relacionados con esta forma de violencia. A la fuerte mediatización de estos casos le ha acompañado el aumento de denuncias.
Opinión
Revista El Salto Debajo de la palabra “lawfare” no está la playa
El sistema judicial, si se fijan, no obedece o asume propuestas o presiones del Ejecutivo o del Legislativo. Sino que más bien ocurre lo contrario.
COP29
Cumbre del Clima La COP29 cierra su acuerdo de financiación en 300.000 millones y corta la ambición de los países del sur
Tras dos semanas de negociaciones arduas, la Cumbre del Clima celebrada en Azerbayán ha aumentado sus objetivos de financiación, pero quedan muy lejos de las demandas de los países en vías de desarrollo que pedían al menos 500.000 millones para 2035.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Galicia
LGTBIfobia El jurado declara culpables de asesinato a tres de los acusados por el asesinato de Samuel Luiz
El tribunal popular aprecia homofobia en el crimen, absuelve la única mujer encausada y considera cómplice al único varón que no estaba en la cárcel.
Opinión
Opinión Aprender de las fantasías de la conspiración
Difícilmente los desmentidos científicos convencen a quienes ya han incorporado una fantasía de la conspiración. Sin embargo, estas fantasías se corresponden con un hecho como que el desasosiego por el futuro es un sentimiento generalizado.
La vida y ya
La vida y ya Huipil
Han escrito un libro que se titula 'Nuestros tejidos son los libros que la colonia no pudo quemar'. No hay lugar para las dudas sobre lo que te vas a encontrar al leerlo.
Más noticias
Opinión
Opinión La distopía no es un género literario
Hay grandes carteles por todos lados donde te hacen responsable de tener el móvil bien cargado y aconsejan llevar una batería externa para evitar percances.
Análisis
Análisis Tenemos que hablar de esto: enfermedad, daño y comunidades de cuidado
La comprensión resolutiva o positivista de la enfermedad esconde la profunda obligación de “estar bien”; una obligación que está quebrando nuestras sociedades sin que nos demos cuenta.
Opinión
Opinión Yo he venido aquí a licitar
El capitalismo de licitación, o capitalismo licitador, es el modelo económico que mejor define las prácticas que los diferentes gobiernos del PP valenciano han llevado a cabo a lo largo de la historia.

Recomendadas

América Latina
Leandro Morgenfeld “El triunfo de Trump va a empoderar a los Milei y los Bukele”
El historiador e investigador argentino especializado en la relación entre Estados Unidos y América Latina, analiza el triunfo electoral de Donald Trump y el impacto que tendrá en una región que Washington sigue considerando su “patio trasero”.
Euskal Herria
Cultura Los judíos en la tierra del euskera
Un repaso de la acogida que les brindó el Reino de Navarra tras su expulsión de Castilla y Aragón, a la red clandestina que los ayudó a cruzar la muga durante la ocupación nazi de Francia y las relaciones con el Estado de Israel
Dana
València Mazón se atrinchera detrás de un militar y cierra su crisis de gobierno
El president valenciano ha remodelado el Consell de la Generalitat dando salida a dos conselleras y fichando un general en la reserva para la vicepresidencia.