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Rap
Poetas Puestos: “Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz”
Coordinador de la sección de economía
La escena de música valenciana le ha dicho adiós (o hasta luego) en los últimos meses a dos de las bandas que han llevado el sonido de la terreta más allá de sus fronteras, Los Chikos del Maíz y Zoo. La mezcla de la cultura de orquestas municipales, las trompetas y las dulzainas, el rap más político y el rock más divertido ha dado fruto a un montón de bandas que abarrotan los festivales con su acento del levante. Sus cruces, colaboraciones y, como se diría en València, la germanor de dichos artistas ha dado luz a otras agrupaciones que han sabido mezclar estilos con maestría. Uno de los más recientes ejemplos de esa escena son los Poetas Puestos.
Carles Sanchís y Pablo Espadas, o mejor dicho Charly Efe y Teko, valenciano y tarraconense, se juntaron en 2012 para grabar “El día de tu boda”, un tema de amor roto y drogas. Una barra de Teko en la que decía que estaba “junto a Charly en el club de los Poetas Puestos” fue la semilla de la que años después floreció la banda. Ahora, Charly Efe y Teko se ha unido a una banda de músicos para dar vida a un nuevo proyecto con un estilo diferente que han bautizado como rap‘n’roll con el que quieren llegar “a un público más homogéneos, menos sectario y que conecte con nosotros”.
Con 20 años en los escenarios, pero más acostumbrados al rap de las bases de cuatro por cuatro, arrancan esta aventura que ya tiene varias maquetas a sus espaldas, pero que ahora pone la carne en el asador con el disco Tontos Felices. “Mira que he hecho conciertos en mi vida y con este estoy más nervioso que nunca”, dice Teko cuando nos vemos aprovechando que vienen a Carabanchel para arrancar la gira en el mítico Gruta77 y que les llevará el 24 de enero a Barcelona y el 7 de febrero a Valencia.
Venís del rap puro y duro, sobre todo tú, Charly. Pero esto es diferente. ¿Cómo definís vuestro nuevo estilo a alguien que no conoce a los Poetas Puestos?
Charly Efe: Hemos inventado un término, el rap‘n’roll. Creemos que en España sí que había bandas tocando con artistas, pero esas bandas se limitaban a calcar las bases que tenía el artista, los ritmos. Simplemente los tocan, un cuatro por cuatro, y ya está. Pero nosotros hemos intentado ir un poquito más allá y ha sido al revés. Los raperos nos hemos adaptado a los ritmos que ha creado la banda, por lo tanto hay pocos cuatro por cuatro en el disco. Hay alguno que otro, pero hay estructuras muy diferentes. No es todo repetitivo, sino que hay puentes, hay estribillos, hay párrafos que, por ejemplo el de “Que le jodan a Petete” es cuatro versos y luego dos sueltos y luego otra vez cuatro versos. Eso en el rap no existía.
Teko: El tema “Radical”, por ejemplo, es cero rap.
A mí “Radical”, que es de mis temas favoritos del disco, me recuerda mucho a Siniestro Total.
C.: ¡Síiii! Soy fan de ellos. En la esencia no tiene nada que ver con ellos, pero sí que tenemos mucho que ver en la ironía y denuncia en todo lo que hacemos. Siniestro Total son referentes.
T.: Justo para esa canción Charly me dijo “quiero una canción rollo Siniestro Total”. También hemos tirado de otros referentes como son Los Toreros Muertos.
C.: ¡Claro! La de Petete es muy Toreros Muertos.
La verdad es que el disco os ha quedado muy rockero. Después de escuchar el single anterior “Gas ciudad”, que sí era más rapero, este ha sido un giro muy grande al rock. ¿Era esa la intención?
T.: En realidad, no tanto. La cosa cambió cuando entró Mauri [Mauricio Pujadas]. Antes estaba Kiko Evia, el guitarrista inicial de Poetas Puestos. Pero él estaba con otro proyecto, Gitano del palo. Teníamos que grabar el disco y el cabrón nunca tenía tiempo. Como es como mi hermano, le dije “Kiko, a chuparla, nos estás jodiendo la banda y tenemos a un posible guitarrista que podría grabar el disco”. Lejos de enfadarse, nos dijo que lo entendía perfectamente y que tiráramos palante. Entonces fue cuando entró Mauri, que se aprendió el disco en una semana. Ahí le dio un toque más rocanrol. Mauri, que es un tipo que le gusta mucho el rock americano y argentino, le dio un toque mucho más rock a los solos y a los estribillos. Que las maquetas ya lo tenían, pero el cambio se ha notado.
Nos gustaría que con este disco nos siga gente que a lo mejor no venga del rap, sino que sean de otros ambientes, que simplemente han conectado con nosotros
C.: Yo creo que tiene parte de esencia rapera, porque yo realmente vengo de ahí y llevo 20 años en el círculo del rap, pero la actitud totalmente del rocanrol. De hecho, nos gusta tener un público heterogéneo y nos gustaría que con este disco nos siga gente que a lo mejor no venga del rap, sino que sean de otros ambientes, que simplemente han conectado con nosotros. Pero nos gustaría ir hacia un público más heterogéneo, no tan sectario. Creo que lo estamos consiguiendo.
Teko ha estado en otras bandas. Pero tú, Charly, aunque en tus letras de rap y tu actitud siempre se ha notado que te gustaban el rock y el punk, nunca lo habías hecho. Has pasado de escribir tus letras solo, meterte en una pecera y grabar sobre unas bases a tenerte que poner de acuerdo con todo una banda. ¿Cómo has vivido ese cambio?
C.: Me ha costado mucho menos porque realmente queríamos jugar a eso, a que yo bailara otros tipos de ritmos. Teko fluye muy bien y siempre lo ha hecho. Pero yo, el 80% de mis temas son sobre rap, sobre cuatro por cuatro. Alguna cosa esporádica que había hecho, como un drumless o un doble tempo, pero normalmente iba sobre 85, 90, 95 [bpm]. De ahí no me salía. Pero para este proyecto, Teko me animó. Me ha ayudado en algunas estructuras. He bailado sobre ritmos que eran muy diferentes a lo que era el rap y se nota. No suena todo igual. En este disco, cada canción es un mundo.
De hecho, hoy aprovechando que estaba aquí en el barrio [Carabanchel] me he grabado un tema con Miguel Grimaldo y me preguntaba a qué público nos queremos enfocar, porque tampoco él lo tenía muy claro tras escuchar el disco. Yo creo que la idea está bastante centrada, pero es que la idea se puede centrar de muchas maneras. Puedes hacer una gira con una actitud u otra. No es una cuestión sólo de sonido y de que sólo exista un camino.
Algo que no es muy típico en este disco, que escapa de las lógicas de la chulería del rap y otros géneros, es el título: “Tontos felices”.T.: Eso fue idea del Charly y para mí fue una idea mágica, porque además el arte del disco ha venido todo por ahí y se ha creado desde esa esencia.
C.: Yo creo que la sociedad está ensimismada, todo el día mirando el móvil. Nosotros somos de la broma, de estar todo el día bromeando. También vivimos un poco en babia, en nuestra pequeña nube, como el resto de la sociedad. Estamos atontados, dentro de nuestra felicidad, pero nunca perdemos el sentido del humor y ese pequeño hilo de esperanza.
Quieren que seamos tontos felices y nosotros, a veces, caemos y somos tontos felices también
T.: Yo lo veo también por el lado de que cuanto más ignorante seas, más feliz eres. Es un topicazo, pero no deja de ser verdad. Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz y que estés contento. Quieren que, si puedes, te tomes un par de cañas el fin de semana o ver la tontería que te ponen en la tele y pista. Quieren que seamos tontos felices y nosotros, a veces, caemos y somos tontos felices también.
Es verdad que hay sentido de humor en vuestras letras y ese toque que explicas de tontos felices, pero también eso se mezcla con política. Por ejemplo, la canción “Guiris go home” es una canción de amor pero que denuncia la gentrificación. Es política, aunque haya un plot twist romántico o te acabes partiendo de risa con la letra.
C.: Claro, pero siempre está implícito.
En la vida cotidiana hay política, tomándote una caña hay política y echando un zurullo en tu puta casa hay política
T.: “Guiris go home” es un claro ejemplo. Es hilar muy fino. Una historia de amor, que encima fue una historia real, que es una crítica política. Y yo me quedo más con la crítica política que con la historia de amor. Lo he dicho siempre, en la vida cotidiana hay política, tomándote una caña hay política y echando un zurullo en tu puta casa hay política. Porque yo pienso a veces en según quién cuando cago. Es un punto de equilibrio entre historias cotidianas y política, que puede ser explícita o no.
Igual que la canción que grabasteis con Zoo, “Generación de cristal”, que vi que la tuiteastéis, muy bien traída, cuando Abogados cristianos y un montón de gente se ofendió por la estampita de Lalachus en las campanadas.
C.: Hostia, esa canción la sacamos justo una semana antes de la dana. Si hubiera salido después de la dana podría haberse convertido en un himno, pero también podría haber herido sensibilidades. Porque hablamos el estribillo habla de la generación de cristal, hablamos del barro y dice lo de “bailaremos bajo la lluvia” en un momento en el que la gente dice eso de que la juventud no mueve un dedo y todo eso, pero en Valencia se demostró que había una generación de jóvenes que estaba yendo a ayudar a la gente de todos esos pueblos. Se podría haber convertido en un himno.
Somos los Poetas Puestos, el grupo más maldito de España. No somos unos pijos de Madrid
T.: En realidad, el tema lo tiene todo para ser un himno. Pero somos los Poetas Puestos, el grupo más maldito de España. No somos unos pijos de Madrid. Si no, lo sería.
El disco, en cierto modo, es una oda al fracaso.
T.: Siempre. Siempre nos hemos sentido muy fracasados y muchas veces muy frustrados. Con la vida en general, pero con la música nos ha pasado mucho. Ayer le decía a Charly “hermano, mañana vamos a disfrutar”, porque cuántas veces nos hemos visto en garitos de mierda.
C.: En estos cinco años hemos estado en algún bolo, que nos mirábamos y pensábamos “¿por qué hemos aceptado esto?”. Sitios en los que nos han metido de rebote y ves que la gente no está atenta a tu música, no le importa el arte que estás construyendo. Eso es muy frustrante como artista.
Esta es vuestra apuesta definitiva. La carne en el asador.
C.: Llevamos cinco años ya con Poetas Puestos, que parece poco, pero desde que grabamos El día de tu boda 2 ya han pasado cinco años. Hace 13 años desde que nos juntamos para hacer aquel El día de tu boda, cuando empezó esto.
Beat Valencia os ha incluido en la lista de mejores discos valencianos de 2024. ¿Creéis que hay una escena en Valencia para un grupo como Poetas Puestos?
C.: Sí, sí. Yo creo que Valencia está muy fuerte. Se ha creado una escena grupos que han venido muy fuerte, desde Zoo o Los Chikos del Maíz, que ya venía el tema de otros grupos como Obrint Pas, La Gossa Sorda o Orxata Sound System, y ahora se abren camino otros como Auxili o La Fumiga. Vas a festivales como el Viña Rock u otros festis en Catalunya y te das cuenta que el 30 o 40% de las bandas son valencianas. Se ha generado una escena de bandas valencianas que es brutal.
T.: Lo lógico sería que nosotros recogiéramos el testigo pero nos tienen mucho miedo. [Ríen]
¿Por qué lo creéis?
C.: Hay una leyenda negra por ahí. [Ríe]
T.: Es verdad. Hemos tenido mala fama los dos. A mí también me ha pasado varias veces y me siento muy identificado con Charly en eso.
C.: Yo siempre he tenido la sensación de que he tenido que trabajar el doble para conseguir la mitad.
T.: Yo creo que por números, relevancia y calidad, lo lógico es que recogiéramos el testigo de grupos como Los Chikos del Maíz, pero entendemos que una propuesta como Poetas Puestos es más arriesgada que otras. Por el contexto de la banda, por las letras, por el tipo de música que hacemos… Incluso, muchas veces, el mismo nombre nos ha cerrado muchas puertas.
C.: Nos hemos caído ya de algún bolo por el nombre. Un ayuntamiento nos dijo que no le gustaba el nombre y nos canceló la contratación.
Ser un poeta puesto es una manera de enfrentar la vida, es una forma de ser
¿Por apología a las drogas?
T.: Sí, cuando tú puedes ser un poeta puesto de muchas cosas. Nosotros siempre decimos que ser un poeta puesto es una manera de enfrentar la vida, es una forma de ser. Hay tipos que los ves y dices “este es un poeta puesto”, y no tiene porqué drogarse. Es un perfil de persona que además se ve bastante claro.
Leí una entrevista hace muchos años a los Violadores del Verso que decían que les pasaba exactamente lo mismo.
C.: Claro, cuando el verbo violar puede ser violar una letra, una puerta o una ley. Es según el contexto que se le quiera dar, la doble lectura y lo reaccionario que quieras ser y hasta donde tú te quieras o quieras censurar. La gente tiene la piel muy fina para según qué cosas. Vamos hacia una sociedad que está legitimando ese tipo de cosas. Seas del partido o la ideología que seas, yo defenderé que tú puedas expresarte como quieras, aunque sea contrario a lo que tú digas. Si defiendes el derecho a expresarse, debes defenderlo de todo el mundo.
T.: Yo hay algo que echo en falta en la izquierda española relacionado con este tema: que Pablo Hasél no existe. Es increíble. Nadie habla de él, ni otros grupos de izquierdas. Nuestro amigo lleva años en la cárcel.
Vivimos en una especie de dictadura encubierta en la que los artistas estamos muy coaccionados
C.: Raperos en la cárcel por un juicio farsa, como le pasó a los 8 de Zaragoza. Nuestro amigo Hasél en la cárcel. Valtonyc se comió un exilio de cinco años por una canción contra el rey. Vivimos en una especie de dictadura encubierta en la que los artistas estamos muy coaccionados. Habrá gente a lo que le sude la polla, pero seguro que hay muchos artistas que se habrán cortado y autocensurado después de eso. Fue un aviso a navegantes.
T.: Yo ahora mismo también tengo antecedentes por una chorrada. Lo primero que me dijo mi abogado fue que no me metiera en líos. Yo he sido sindicalista muchos años en la CGT y me dijo que no fuera a las manis. Y piensas lo mismo con las canciones porque hay letras en las que no me corto un pelo. Hasél me envió una carta desde la cárcel y me costó como un mes leerla, de verdad que me costaba mucho leer lo que me explicaba porque me ponía en su situación y pensaba que esa mierda le puede pasar a cualquiera. Te puede pasar y te joden la puta vida. Y gracias a dios que no soy tan consecuente como Pablo Hasél. Yo siempre que hablo con él le digo que ole tus huevos. Si la gente fuera un 5% de lo consecuente que es Hasél con sus actos, cambiarían mucho las cosas. Yo no puedo y le admiro por eso, pero fíjate, el pobre está condenado.