La Colmena
¡Más madera! ¡Más calor!

Ni Marx, ni Engels, ni Bakunin predijeron el cambio climático, pero sí supieron hilar el agravio de la clase trabajadora a la explotación y deterioro de la Tierra.
19 ago 2024 12:29

Cuando inventamos el capitalismo, aprendimos a arrancarle la piel a tiras a la tierra, a la vez que se la arrancábamos a quienes la trabajaban. Para ayudarnos en la tarea nos inventamos también el consumo del chorroborro, que es el aluvión de cosas inútiles que necesitamos tener para ser más felices, aunque nos vaya la vida en ello.

En 1951, a manos del Estado, comenzó la repoblación con eucaliptos en las riberas del Guadiana, a su paso por Badajoz. El objetivo primero era vender la madera a una Europa que cada vez consumía más leña de caldera, carbón vegetal, suelo de parquet, y después, alimentar la industria papelera, con pasta de celulosa. Entre ese año y 1984 casi la quinta parte de los bosques extremeños eran grandes eucaliptales, los llamados bosques del silencio: en sus ramas no anidan aves, en su suelo no hay vida, salvo la suya. Junto a los pinares repoblados a principios del siglo XX, y que sustituyeron al bosque autóctono, constituyen el granito de arena extremeño a la subida global de la temperatura.

Ni Marx, ni Engels, ni Bakunin predijeron el cambio climático, pero sí supieron hilar el agravio de la clase trabajadora a la explotación y deterioro de la Tierra. Si ayer eran los obreros de Zola quienes se consumían de calor en las profundidades de las minas, hoy son quienes trabajan a cerca de 40 grados en las naves secadero de tabaco, en una obra a pie de calle o en un sembrado recolectando lo que la tierra quiera dar, bajo un sol de justicia que de esta tiene poco. Jornaleros de la hortofrutícula y operarios de las conserveras se consumen en la caló del verano extremeño de las Vegas del Guadiana y de la huerta de Cáceres, en jornadas extenuantes que superan las 8 horas, sin que se paguen horas extra ni días festivos, todo justificado por la jodida campaña, el argumento ideal para el enriquecimiento de quienes hacen su agosto a costa de la esclavitud de los demás, en connivencia con los organismos de inspección.

A día de hoy, las condiciones establecidas por las leyes laborales sobre temperatura en los lugares de trabajo, ni se cumplen ni se quieren hacer cumplir. La explotación se mide por grados centígrados y las muertes por olas de calor en el tajo no se reconocen como accidente laboral. Mientras tanto, continuamos mirando hacia otro lado, a pesar de que el humo que nos impide ver nos avisa de que la casa ya arde por los cuatro costados.

¡MÁS MADERA!

Amech Zeravla

Archivado en: La Colmena La Colmena
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

La Colmena
Dana La memoria del agua
El agua tiene memoria. Nos recuerda que antes de nuestras huellas sobre la tierra todo fue un océano. El paso de nuestra especie no es más que una brizna de polvo en mitad del tiempo.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Estados Unidos
Hari Kunzru “En EE UU hay dos tipos de nazis: los que llevan botas y los que llevan corbata”
El escritor británico reflexiona sobre la victoria de Donald Trump y cómo los conservadores han movilizado teorías como la psicología evolutiva para renovar sus posiciones y plantear una batalla cultural en foros online o redes sociales.
Política
El Salto Radio Podcast | Todas las elecciones hablan de mí
Aprendizajes de la derrota en EE UU para nuestro contexto, claves de la deserción de Twitter a Bluesky y ecos de la retirada de Nadal.
Análisis
Análisis Europa no puede blindarse contra Trump
Tras las elecciones estadounidenses los expertos europeos en política exterior están reviviendo las ideas de autonomía estratégica de 2016, sin entender todo lo que ha cambiado en los últimos ocho años.
Medios de comunicación
Financiación a medios ultras María Guardiola justifica financiar medios ultraconservadores condenados alegando “independencia periodística”
La líder de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha preguntado a la presidenta de la Junta de Extremadura por su financiación a Ok Diario, Libertad Digital y The Objective, pidiendo que cese de “financiar a pseudomedios de extrema derecha”.
República Dominicana
América Latina República Dominicana en disputa: Trujillo contra Bosch
El trujillismo, pilar del pequeño estado caribeño en su configuración contemporánea, es también fundamental para entender el origen de las políticas intervencionistas estadounidenses en América Latina.

Últimas

Cine
Cine Nicolás Pereda, el Hong Sang-soo mexicano que habla de clases y desigualdad con humor (extraño)
El realizador presenta su último largometraje, ‘Lázaro de noche’, una comedia contenidísima sobre los deseos y sobre el trabajo cultural, en el marco de L’Alternativa, Festival Internacional de Cinema Independent de Barcelona.
Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Estados Unidos aprueba la “ley más peligrosa para las libertades” desde la Patriot Act
En Gaza, Cisjordania y Líbano, nuevos ataques israelíes dejan más de un centenar de muertos. En Washington, el Congreso aprueba una ley que permite quitar fondos a ONG, universidades y colectivos sin pruebas ni un proceso transparente.
Cádiz
Derecho a la vivienda Así prepara la asamblea de Jerez por la Vivienda su primera gran movilización contra gobiernos y rentistas
Cuatro meses después de haberse constituido, el colectivo convoca una manifestación el sábado 23 de noviembre gracias al trabajo de activistas como Inma, Jaime, Olga o Alberto: “En la última década el alquiler en la ciudad ha subido un 65%”
Análisis
Violencia sexual Pensar juntas las violencias para poder seguir hablando
En este tiempo, aparentemente no se ha parado de hablar de un tipo de violencias, las violencias sexuales. Y sin embargo, nos preguntamos: ¿es así?
Más noticias
Comunidad de Madrid
Educación en Madrid El profesorado madrileño vuelve a parar, con la huelga indefinida ya entre sus planes
Durante la segunda convocatoria de huelga educativa en la Comunidad de Madrid, Menos Lectivas ha organizado una asamblea para plantear paros más duraderos.
El Salto Radio
El Salto Radio Desenmascar la violencia
Almudena Carracedo, la directora de “No estás sola. La lucha contra la Manada” nos habla, en su última película, de cómo el “yo sí te creo” consiguió desenmascarar tantas agresiones sexuales hasta entonces silenciadas.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.

Recomendadas

Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el CAED de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el Estado español.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
València
Dana y vivienda “La crisis de vivienda multiplicada por mil”: la dana evidencia el fracaso de las políticas del PP en València
La dana ha dejado a miles de familias sin hogar. Ante la inacción de las instituciones, han sido las redes familiares las que han asumido el peso de la ayuda. La Generalitat, tras décadas de mala gestión, solo ha podido ofrecer 314 pisos públicos.