Indonesia
El no progreso de los mentawai

En el corazón de Siberut, una isla a unos 100 kilómetros al oeste de Sumatra, habita desde hace más de 3.000 años la etnia mentawai.

Mentawai 1
Los mentawai habitan en una isla del oeste de Indonesia. Marina Calahorra
29 oct 2017 07:05

A unos 100 kilómetros al oeste de la isla de Sumatra, en Indonesia, se encuentran las Mentawai. Cuatro islas principales forman este archipiélago volcánico: Pagai del Sur, Pagai del Norte, Sipora y Siberut. En el corazón de esta última habita, desde hace más de 3.000 años, la etnia mentawai. No fue hasta después de la Segunda Guerra Mundial cuando empezó a tener relación con la civilización occidental.

Los mentawai son una cultura conocida por sus costumbres. Sus tierras están repartidas por clanes. En el centro de cada terreno se alza una gran estructura de madera llamada uma, que sirve de casa. Alrededor de las umas corre el ganado de la familia, en su mayoría cerdos y gallinas, cazados en la selva y criados en semilibertad. Los bananeros y el sagu les proporcionan su alimento principal. Los sikerei, sus chamanes, son los líderes del clan. Suelen reunirse vestidos con sus mejores galas, adornando su cuerpo de plantas para celebrar rituales que pueden llegar a durar días.

Mentawai 2
Sikerei el el nombre con el que este pueblo denomina a sus chamanes. Marina Calahorra

Los mentawai carecen de documentación y censo, pero sí utilizan símbolos: los titi, un tatuaje típico de esta etnia. Cada uno de estos tatuajes tiene un significado que indica el clan al que pertenecen. Les sirven para identificarse como guerreros frente a posibles adversarios y para apelar a la protección de los espíritus de la selva. 

LUCHA DE INTERESES

Esta cultura está ahora en peligro de extinción. Varios expertos advierten del riesgo que la industrialización supone para la tribu. “Durante los años 70 hubo una gran discriminación cultural contra los mentawai. Sus símbolos, casas de oraciones tradicionales y pueblos fueron quemados por el Gobierno cuando los forzaron a trasladarse y estos se negaron”, afirma Frans Siahaan, miembro de la ONG Yayasan Citra Mandiri. El Gobierno indonesio creó los denominados “programas de cambio conductual”, con los que pretendía enseñar a los nativos a asimilar una Indonesia en desarrollo. La realidad fue otra. Varios ambientalistas afirmaron que dichos programas servían para enmascarar otras intenciones: que la familia de Suharto, presidente de Indonesia hasta 1998, pudiera ofrecer los bosques a empresas madereras controladas por Yakarta.

Mentawai 3
En el pueblo de Butui es habitual ver móviles, aunque no haya luz eléctrica. Marina Calahorra

El 8 de diciembre de 1998, el Gobierno indonesio celebró en Padang, capital de Sumatra, un encuentro de consulta organizado por el Departamento de Transmigración y Reasentamiento Forestal de la provincia.

Directivos del Gobierno local y alrededor de 120 representantes comunales y jefes de aldea de las islas Mentawai se reunieron para aprobar un nuevo plan de transmigración. Casi 11.000 familias de las islas, vinculadas a una plantación comercial de palma a cargo de la compañía PT Citra Mandiri Widya Nusa, propiedad del exministro de Trabajo Abdul Latif, se vieron afectadas por el nuevo plan.

Hace unos años, el Gobierno aprobó otro plan de reubicación y una nueva ley que reconocía las tierras habitadas por los mentawai como propiedad del Estado. Esta ley exigía a sus habitantes obtener un certificado gubernamental de adquisición para justificar su propiedad, documento que era prácticamente imposible de conseguir, ya que solo se expedía en Yakarta. El Gobierno construyó una zona cerca de la frontera de la selva, que denominó como ‘pueblos del gobierno’. Ofreció a la tribu, si se trasladaba al lugar, educación gratuita para sus hijos, atención médica, ropa “civilizada”, una iglesia de su elección o una red eléctrica. Muchos clanes salieron de sus hogares para establecerse en pequeñas casas unifamiliares más modernas. Este nuevo pueblo es el Ugai.

Mentawai 4
Las plantaciones de palma son una de las amenazas a las que se enfrenta el pueblo de los mentawai. Marina Calahorra

EL PRIMER PUEBLO MENTAWAI

Un infinito marco verde se convierte en el escenario de juegos para los niños. Los adultos, que parecen ser dueños de un tiempo infinito, envuelven sus porches en humo, apurando el tabaco mientras conversan con sus vecinos. Ugai es actualmente un pozo de controversia. Los plasmas reinan en los salones de las casas. También los teléfonos móviles que, con un poco de suerte y algunos kilómetros de caminata hasta lo alto de una montaña, encuentran cobertura. Una pequeña tienda ofrece productos de necesidad: arroz, azúcar, galletas y —el más preciado de los productos para los nativos— tabaco. Las epidemias de cólera y la hepatitis siguen siendo frecuentes en Ugai. No existe plan alguno de potabilización de agua ni saneamientos habilitados. Estas aldeas representan el fracaso de la modernización. Los mentawai que fueron reubicados no disfrutan de ninguna de las ventajas de la ciudad, pero sí sufren muchas de sus desventajas.

BUTTUI, EL FUTURO UGAI

A solo una hora andando a través de un pequeño sendero en medio de la selva está Buttui. Aquí no hay plasmas reinando en los salones y, cuando oscurece, el pueblo se queda a la luz de las velas.

mentawai 5
Una mujer mentawai en el interior del edificio que sirve de mezquita en Butui. Marina Calahorra

En el centro del poblado se observa una edificación que resulta ser una mezquita. De fondo se oye el atronador sonido que produce un generador instalado para que los operarios puedan seguir trabajando en la construcción del gran plan de la ONG Yayasan Aksi Peduli Bangsa. “Alguien tiene que enseñar a esta gente a no vivir como animales”, afirma el líder de la ONG. La mezquita es la primera de las cinco edificaciones del plan, que también contempla una escuela del Gobierno, una residencia para maestros, una biblioteca y un hospital.

La luz del generador sirve a un chico de 15 años que se encarga de arreglar viejos móviles. Algunos jóvenes, miembros de las cuatro familias hasta el momento convertidas al islam, pasean con sus motocicletas. En el pueblo no hay luz eléctrica con la que cargar los móviles, ni señal para usarlos. Tampoco hay ninguna carretera por la que puedan circular las motos. Un litro de gasolina aquí puede pagarse a precio de oro.

Mentawai 6
Un niño juega en la casa en la que ha sido reubicado junto a sus padres. Marina Calahorra

¿PROGRESO O RETROCESO?

Los indígenas de la isla de Siberut llevan años siendo presionados por los militares indonesios para llevar a cabo una plantación de palma aceitera de 70.000 hectáreas y un proyecto asociado de transmigración, a pesar de que la isla ha sido declarada reserva de la biosfera por la UNESCO. La industria de aceite de palma está experimentando un auge explosivo en toda Indonesia y en Buttui, una de las pocas áreas vírgenes que quedan en Indonesia, el segundo país con mayor biodiversidad del mundo.

El último plan ideado por el Gobierno indonesio en colaboración con las autoridades regionales de las islas Mentawai lleva por nombre Trans Mentawai. Se trata de un proyecto cuyo objetivo es construir una red de carreteras que servirán para facilitar la accesibilidad a todo lo largo y ancho de la isla. Hasta el momento, el difícil acceso a las islas había servido de ventaja a los nativos para frenar la avalancha turística a las islas.

Actualmente la zona no dispone de aeropuerto ni de un circuito de caminos adecuado para poder llegar a las paradisíacas playas de Mentawai, dueñas de uno de los mejores rompeolas del mundo. El proyecto Trans Mentawai supondrá abrir las puertas a este paraje. “El gobierno está enviando colonos cerca de aquí. Les da facilidades para que cultiven las tierras y para que vengan industrias madereras que talan nuestros árboles. Ahora será peor, porque ya no tenemos dónde huir, dónde retirarnos para seguir viviendo de forma tradicional. Estas son nuestras tierras, que busquen otro lugar para los colonos”, concluye Aman Lau Lau, uno de los más importantes sikereis del clan. 

Archivado en: Indonesia
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Sidecar
Sidecar Línea de sucesión en Indonesia
Prabowo Subianto, elegido presidente de Indonesia el pasado 14 de febrero, es un representante de las fuerzas ultraconservadoras ligadas al siniestro pasado militar del país.
Crisis climática
Crisis climática Cuatro pescadores indonesios contra el gigante suizo Holcim
Residentes de la isla de Pari, en Indonesia, demandan a la cementera suiza Holzim por los daños climáticos ocasionados por la emisiones de CO2.
Cine
Cine ‘Alma anciana’, viaje fílmico a Indonesia (y a los dogmas que nos oprimen)
Se estrena en cines ‘Alma anciana’, una etnoficción rodada en la isla de Java por el director debutante Álvaro Gurrea. Las observaciones de la cotidianidad y las irrupciones de belleza natural se enmarcan en un contundente entramado discursivo que alerta sobre el poder que otorgamos a los sistemas de creencias
#2124
31/10/2017 12:20

LO QUE DENOMINAMOS COMO CIVILIZACIÓN NO PROGRESA NI QUERIENDO, NOS HEMOS OLVIDADO DE MUCHAS COSAS, PRINCIPALMENTE VIVIR ACORDE A LA NATURALEZA

1
0
MANUEL
30/10/2017 1:48

LA HUMANIDAD TENDRIA QUE APRENDER A VIVIR SIN DEPENDENCIA DE LO ARTIFICIAL Y CONVIVIR CON LA NATURALEZA MANO A MANO.
TODO LO DEMAS ES UN ENGAÑO AL SER HUMANO.

6
0
Iñigo Arispe
29/10/2017 19:15

Pues sí, el no progreso de los metanwai, ni de nadie.
Estamos a punto de la gran perturbación.

5
1
Gasto militar
Gasto militar El Gobierno reconoce 22.000 millones de nuevos programas de armas, el doble del presupuesto de Defensa
La cifra admitida por el Gobierno se queda corta, según denuncia el Grupo Tortuga, ya que esconde sobrecostes, créditos a coste cero y otros gastos asociados a esta nueva escalada armamentística.
Lawfare
CLOACAS DEL ESTADO Manos Limpias: génesis de la querella como arma política de la ultraderecha
Ruiz-Mateos fue pionero en presentar demandas y personarse como acusación particular en causas judiciales sobre la corrupción del PSOE. Miguel Ángel Rodríguez y Manos Limpias sofisticaron este ‘modus operandi’ con bulos desde “pseudomedios”.
Desempleo
Paro El paro cae en abril y se superan los 21 millones de afiliados
La cifra de desempleo disminuye en 60.503 personas y se sitúa en 2.666.500, la cifra más baja registrada desde septiembre de 2008.
Baleares
Plurilingüismo Mallorquines y mallorquinas salen a la calle y gritan un rotundo “Sí a la llengua”
La Plaça Major de Palma se quedó pequeña para albergar a las miles de personas que acudieron al acto organizado por la OCB en defensa del catalán.
Educación pública
Julio Rogero “La dignidad docente está secuestrada por el poder para que el docente haga lo que el poder quiere”
Desde sus inicios como profesional de la educación Julio Rogero encontró en los Movimientos de Renovación Pedagógica su ‘leitmotiv’ en la enseñanza. Aunque jubilado, continúa su labor de innovación pedagógica.
Literatura
Literatura La Feria del Libro de Buenos Aires, sin plata
La 48º edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires no es una más, se volvió un síntoma de la situación del libro y su industria en la Argentina gobernada por la extrema derecha.

Últimas

Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: Una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Green European Journal
Green European Journal ¿Qué une al activismo climático con la guerra en Gaza?
La guerra de Israel contra Gaza ha dado mucho de qué hablar entre los movimientos por el medio ambiente.
Catalunya
Catalunya Pere Aragonès, de presidente a segundo plato de Illa o Puigdemont
Las encuestas y el tirón de Pedro Sánchez acompañan a Salvador Illa, quien probablemente volverá a ganar las elecciones catalanas, como ya ocurrió en 2021. Esta vez, tiene más probabilidades de gobernar.
Tauromaquia
Federico García Lorca Usar el nombre de Federico García Lorca en vano
El alcalde de Madrid genera controversia al usar una cita de Lorca para defender la tauromaquia. Una apropiación paradójica de un símbolo de izquierdas y de la memoria histórica.
Más noticias
Memoria histórica
Memoria Olvidadas por la historia: las mujeres del Patronato
Durante más de cuarenta años, la libertad de miles de mujeres fue arrebatada por el Patronato de Protección a la Mujer. Siguen invisibilizadas por una Ley de Memoria Democrática
Comunidad El Salto
Palestina La campaña de apoyo a Gaza de El Salto recauda más de diez mil euros para la UNRWA
El pasado 26 de febrero, tras más de cuatro meses de ofensiva militar de castigo por parte Israel sobre la Franja de Gaza, desde El Salto decidimos ir más allá del periodismo ante la gravedad de los hechos.

Recomendadas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Pueblo gitano
Pueblo gitano Silvia Agüero y Nicolás Jiménez: “Hay que gitanizar a los anarquistas que se han burocratizado”
Son pareja en la vida, en la divulgación y en la tarea de gitanizar el mundo. Silvia Agüero y Nicolás Jiménez acaban de publicar '¿Anarquismo gitano?' para romper estereotipos y profundizar en la realidad de su pueblo.
Migración
Migración Maternidades migrantes: criar entre la precariedad laboral y la ley de extranjería
Sin redes familiares en las que sostenerse y en un contexto laboral enfrentado con la conciliación, las madres migrantes se ven especialmente expuestas a la precariedad.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.