Huertos urbanos
Una huerta ecológica para la inserción sociolaboral en Sevilla

Bioalverde desarrolla un proyecto de actuación comunitaria teniendo como eje el respeto a las personas y al medioambiente

Bioalverde 01
Bioalverde cuenta con una huerta ecológica de 30 hectáreas junto a la estación del Metro de Sevilla Olivar de Quintos, en la zona de Montequinto (Dos Hermanas) / Bioalverde

Pega el sol. Es casi mediodía y en los terrenos situados junto a la estación del Metro de Sevilla Olivar de Quintos, en la zona de Montequinto (Dos Hermanas), la actividad no para. Allí, Bioalverde, una empresa sin ánimo de lucro impulsada por Cáritas Sevilla, gestiona y explota una huerta ecológica de 30 hectáreas.

La finca, que fue legada por una señora tras su fallecimiento, acoge desde 2015 una iniciativa destinada a la inserción sociolaboral de personas en exclusión. El objetivo es promover un consumo justo, sostenible, ecológico y responsable apostando por canales cortos de comercialización mediante la sensibilización de las personas.

“No íbamos a especular con el terreno. Queríamos montar un proyecto que ayudase al mayor número de personas posibles”, explica la responsable de comunicación de Bioalverde, Esther García.

La empresa lanza cada año un curso de formación, cuyas 16 plazas se han agotado en cada edición, para que personas que han tenido problemas con las drogas o el alcohol, inmigrantes o parados de larga duraciónpuedan acceder a una preparación en agricultura ecológica.

Bioalverde les otorga las herramientas necesarias para que puedan reincorporarse al mercado laboral, pero desde la organización se rechaza el punto paternalista que en ocasiones se asocia a este tipo de programas sociales. “No damos sólo trabajo sino que acompañamos a estas personas para que devuelvan algo a la comunidad”, explica García. Así, los empleados reciben una asistencia para que puedan sacarse el carné de conducir, formarse en ofimática, arreglar los papeles de residencia, ... Todo un proceso que cuenta con el seguimiento y evaluación de dos trabajadoras sociales. 

La empresa en la actualidad cuenta con 28 empleados en nómina: 11 son de estructura y 17 son personas en exclusión. Se supera el porcentaje de trabajadores en proceso de inserción de al menos el 50% del total de la plantilla a partir del cuarto año de creación de la entidad, acorde a la legislación del Registro de Empresas de Inserción en Andalucía. 

Bioalverde 02
La empresa reparte unas 200 “ecocajas” de verduras y frutas semanalmente por toda Sevilla / Bioalverde

Según la ley, estas empresas sólo pueden dar trabajo durante un máximo de 3 años. Bioalverde no apura ese plazo y el empleo es de dos para que la rotación sea más frecuente y abarcar por tanto un mayor número posible de usuarios. Como recuerda García, “a nivel empresarial no merece la pena ya que formamos a estas personas y cuando están al 100% de su rendimiento, se marchan”. Pero “cuanto más gente pase por aquí, más volverán a reincorporarse al mercado laboral”. La mayoría de los participantes en los cursos formativos encuentran otro empleo, principalmente en negocios agrícolas.

El boca a boca es clave conocer lo que se hace en un programa en el que Pepe Aparicio se enroló gracias a una amiga. “Estaba tirado, sin trabajo y al 100% sin ingresos. Ahora cuento con una estabilidad económica”, explica.

Aparicio, que trabajaba en el sector de la construcción, es desde el pasado mayo uno de los empleados de la plantilla. Se quedó tras el curso de formación y está encantado, como reconoce. “Después de unos meses, se le coge el rollo bien cogío”.

Por una soberanía alimentaria

Bioalverde apuesta por la actuación comunitaria y la inclusión social apoyada en una alianza de personas y para personas; la interacción entre consumidores y productores basada en un consumo responsable y una economía solidaria.

Para poner en valor esta filosofía es necesario una concienciación social que empieza despojando la manía de que “lo ecológico es caro”. Tampoco es una moda, sino una necesidad.

La compra directa a agricultores, la proximidad de la mercancía y el respecto por el medio ambiente hacen que las uvas vengan de Trebujena, los huevos de El Viso del Alcor y las patatas de Cazalla de la Sierra. “En este último caso, nadie le pagaba al campesino lo que valía su género. Nos comprometimos a realizarle una compra para mantener el negocio”, explica García.

Mi objetivo es cambiar la sociedad que nos rodea en todos los ámbitos posibles para la búsqueda de un desarrollo sostenible

La empresa busca la sensibilización con visitas escolares gratuitas para que los más jóvenes conozcan de primera mano cómo se produce lo que comen a diario. Más de 800 alumnos han pasado por sus instalaciones en el momento de escribir este reportaje. También se ofrecen cursos sin coste alguno y ya planean visitas guiadas a la huerta para que los participantes tomen conciencia de la importancia de elegir un estilo de vida sostenible.

“Mi objetivo es cambiar la sociedad que nos rodea en todos los ámbitos posibles para la búsqueda de un desarrollo sostenible”, explica el director de Bioalverde, Fernando Rodríguez. Y prosigue: “Aunque suene a broma, la próxima generación no va a poder elegir qué comer si se continúa con un modelo que no se mantiene medioambientalmente”.

Una fórmula ecológica viable

En la parcela de Montequinto, donde también se sitúa el renovado centro de reparto, el consumidor puede adquirir productos a granel o tomarse una café mientras se sienta frente a las 30 hectáreas cultivadas, 6 de regadío y 24 de secano.

La vía principal de comercialización de los cultivos de Bioalverde es a través de un sistema de “ecocajas”de verduras y frutas que se reparten por toda Sevilla. En 2017 se preparaban unas 60 unidades semanales. Ahora ese promedio ha ascendido a 200 cajas, que muestra la consolidación de un modelo de empresa que vela por la sostenibilidad.

Bioalverde 03
Katile Dramane es una de las personas en exclusión que realizó el curso en agricultura ecológica que ofrece esta empresa sin ánimo de lucro / Bioalverde

Pero Rodríguez no baja la guardia. El director del proyecto se plantea seguir dando y creando empleo en la huerta ecológica y ya se ha iniciado la colaboración con varios hoteles y empresas de catering para el suministro de sus productos.

Además, Bioalverde ha sumado recientemente otra actividad: se encarga del almacenaje y gestión de las donaciones de ropa de los contenedores de Cáritas para su reutilización y reciclaje en Sevilla. La iniciativa, conocida como Moda Re, encaja con los principios de la empresa y sigue el mismo modelo que su proyecto agrícola. En esta rama del negocio se da trabajo a 6 personas en exclusión en un programa al que además se han sumado dos empleados que habían pasado por el curso de formación en anteriores promociones.

La complejidad por la situación de las personas con las que se trabaja, el desarrollo de una agricultura ecológica a la que se han sumado la competencia de las grandes marcas y toda la coordinación logística de las miles de toneladas de ropa usada son los principales desafíos de Bioalverde de cara al futuro. Rodríguez no tiene dudas en un proyecto que se fortalece, pero en el que no todo vale: “El capitalismo tiene un límite físico porque el planeta no puede permitirse una situación de crecimiento infinito, no lo puede sostener”.

Derecho a la vivienda
Un paso en firme frente a la indigencia
En Granada, cerca de 150 personas se han visto obligadas a vivir en la calle. Son historias de abandono, pero también de lucha por mejorar sus condiciones de vida.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Huertos urbanos
Horta de València Cuidem Benimaclet: “Cortar el suministro de agua de la huerta beneficiará a las promotoras del PAI”
Decenas de vecinas y vecinos del barrio de Benimaclet se concentraron el pasado sábado para exigir al Ayuntamiento de València una solución a la contaminación del agua de la acequia de Mestalla, infraestructura de riego que mantiene los huertos urbanos cuyo cierre beneficiaría a la especulación inmobiliaria
Movimientos sociales
Movimientos en la pandemia: agricultura urbana, autonomía alimentaria y huida de las ciudades

“La incertidumbre es diferente si estamos organizados y nos apropiamos de nuestros territorios en los barrios”, dicen en las asambleas reunidas en cabildos territoriales en Chile. “Sabemos cuidar la vida, mientras el Estado no tiene la menor idea”. Nueva entrega de la serie Movimientos en la pandemia, elaborada por el periodista y analista Raúl Zibechi.

#39490
18/9/2019 16:30

los huetos ecologicos son mas antiecologicos que los cultivos tradicionales

0
0
Catalunya
Catalunya Pere Aragonès, de presidente a segundo plato de Illa o Puigdemont
Las encuestas y el tirón de Pedro Sánchez acompañan a Salvador Illa, quien probablemente volverá a ganar las elecciones catalanas, como ya ocurrió en 2021. Esta vez, tiene más probabilidades de gobernar.
Migración
Migración Maternidades migrantes: criar entre la precariedad laboral y la ley de extranjería
Sin redes familiares en las que sostenerse y en un contexto laboral enfrentado con la conciliación, las madres migrantes se ven especialmente expuestas a la precariedad.
Pueblo gitano
Pueblo gitano Silvia Agüero y Nicolás Jiménez: “Hay que gitanizar a los anarquistas que se han burocratizado”
Son pareja en la vida, en la divulgación y en la tarea de gitanizar el mundo. Silvia Agüero y Nicolás Jiménez acaban de publicar '¿Anarquismo gitano?' para romper estereotipos y profundizar en la realidad de su pueblo.
República Democrática del Congo
República Democrática del Congo Chikuru quiere para la República Democrática del Congo esa paz que nunca ha conocido
La vida de Chikuru ha transcurrido en una República Democrática del Congo siempre en guerra, desde su organización FoBeWorld, aspira a ayudar a la infancia y juventud a construir un futuro mejor, frente al expolio que devora su presente.
La vida y ya
La vida y ya Futuros laborales
Lo que está claro es que para mí pensar en mi futuro laboral tiene que ir acompañado de pensar qué puedo hacer para que el mundo sea un poco diferente.
Literatura
Literatura Mallorca, el refugi de Vicent Andrés Estellés
El poeta trobà a l’illa la serenitat necessària per enfrontar-se a l’entorn sempre tens de València, a la vegada que publicà diversos volums i travà sòlides amistats.
Memoria histórica
Memoria Olvidadas por la historia: Las mujeres del Patronato
Durante más de cuarenta años, la libertad de miles de mujeres fue arrebatada por el Patronato de Protección a la Mujer. Siguen invisibilizadas por una Ley de Memoria Democrática

Últimas

Genocidio
Genocidio La ONU advierte de que un ataque sobre Rafah colapsaría la distribución de ayuda en Gaza
Turquía suspende todo el comercio con Israel. El fiscal del Tribunal Penal Internacional advierte de que no admitirá “amenazas” después de que trascendiera que imputará a Netanyahu y los suyos.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Religión
Opinión Semana Santa y Ramadán
En el Sindicato de Vivienda de la Red de Apoyo Mutuo se celebró un desayuno con motivo del Ramadán, lo cual generó un debate interno interesante por ser una organización laica
Palestina
Palestina Bicicletada contra el genocidio palestino en Alicante
El núcleo local del BDS País Valencià ha realizado un recorrido reivindicativo para exigir el fin del genocidio contra Palestina por las principales calles de las tres capitales valencianas.
Fútbol
Fútbol Vicente del Bosque como respuesta a las presiones de FIFA y UEFA
El nombramiento del exseleccionador como presidente de la Comisión de Normalización, Representación y Supervisión busca alejar los fantasmas de una intervención política de la RFEF.
Más noticias
Que no te lo cuenten
Que no te lo cuenten De estrategias y misiones incumplidas
VV.AA.
La no dimisión de Pedro Sánchez y la imposibilidad de la Flotilla de la Libertad de llevar ayuda a Gaza marcan unas semanas intensas.
Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: Una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Comunidad El Salto
Palestina La campaña de apoyo a Gaza de El Salto recauda más de diez mil euros para la UNRWA
El pasado 26 de febrero, tras más de cuatro meses de ofensiva militar de castigo por parte Israel sobre la Franja de Gaza, desde El Salto decidimos ir más allá del periodismo ante la gravedad de los hechos.
Cine
Cine 'Civil War', estética geopolítica en tierra de nadie
La sensación es que Civil War se queda en algunas ocasiones en una peligrosa tierra de nadie, tanto en sus cambios de estilo como en su contenido.

Recomendadas

Colombia
Colombia Sostener la vida en un ETCR
En la vereda colombiana La Plancha, la convivencia entre excombatientes y población civil es una realidad marcada por necesidades comunes.
Rap
Rap Viaje a los orígenes del hip hop en España: “Nadie esperaba ganar dinero con el rap”
El historiador Nicolás Buckley y el periodista Jaime Valero, exredactor jefe de HipHop Life, publican Maestro de ceremonias, un libro sobre la historia de la cultura hip hop en España.