Elecciones 10N
Gente extraordinaria (votar o no votar)

¿Qué diferencia a la gente ordinaria de la gente extraordinaria? Mientras los primeros ocupan los puestos políticos, los segundos se movilizan diariamente para poder cambiar las cosas a través de la lucha social en las calles.

José Luis Carretero Miramar

Militante de Solidaridad Obrera.

13 oct 2019 05:00

Gente extraordinaria haciendo cosas extraordinarias. Gente joven, dinámica, rupturista, con un pasado de activismo y transgresión que ilumina los viejos despachos con ideas nuevas. Profesionales de nivel, conversadores elocuentes, bohemios y modernos. Eso nos indican, día tras día, los medios de comunicación que sólo comunican unidireccionalmente, que son nuestros “representantes ciudadanos”, nuestras gentes de la “nueva política” y hasta los cuadros avejentados de los viejos partidos. La élite intelectual, cultural, política, que hace cosas sin comparación posible, que cambia el mundo (el único cambio factible y real, puntualizan), que pasa a la historia. Hombres y mujeres que han hecho de sí mismos una marca llamada a perdurar.

Pero nada de eso es verdad: lo que hay en los parlamentos, diputaciones, juntas locales y demás tugurios semejantes es lo más previsible, aburrido y casposo del mundo. ¿Qué hay de nuevo en que los jóvenes más ambiciosos de la clase media —e incluso algunos de la clase obrera—, profesionales sin oficio conocido todavía, hagan el trayecto que va desde una juventud dorada y un poco bohemia o subversiva a convertirse en los ilustres señores responsables que gestionan el desastre que nos envuelve, tal y como era de esperar y como lo hicieron todas (o casi todas) las generaciones que les precedieron? ¿Qué hay de “sexy” y de “rompedor” en ver una nueva jeta en los cuadros macilentos de los orondos “triunfadores” que pueblan los pasillos de los ayuntamientos, ministerios y casinos regionales varios?

Y no, no cambia nada porque ahora algunos vistan con vaqueros y no lleven trajes. La gestión de la miseria es la más antigua profesión de los señores (y las señoras) cuando llegan a esa edad en la que por fin son conscientes de “las serias realidades de la vida” y de sus obligaciones para con sus pares.
Gentes ordinarias haciendo lo ordinario, lo repetitivo, lo rutinario. Lo que se esperaba, desde el principio, de ellos y de ellas: gestionar el desastre, organizar el despojo que enriquece a la clase que realmente manda. Nada nuevo bajo el sol. La “historización” que decía Sartre. El mundo, la clase y la época, en su brutal solidez de plomo, devastando toda posibilidad de creatividad humana.

Hay breves momentos de fulgor en que el voto puede cambiar algo, porque lo esencial está cambiando en las calles

No me pidáis, pues, que elija entre ellos. Hay breves momentos de fulgor en que el voto puede cambiar algo, porque lo esencial está cambiando en las calles. Momentos en que una monarquía se derrumba porque pierde unas elecciones municipales, como en 1931. Pero porque las pierde con unas calles ardientes de luchas y de organización autónoma de los de abajo. Porque la marea de las calles amenaza con derribar algo mas importante que la monarquía: el edificio entero del Capital. No es ese, ahora, el momento que vivimos.

Nuestros “representantes”, de hecho, se han comportado los últimos meses exactamente como se esperaba de ellos. Poniendo la propia carrera por encima de las promesas electorales varias (“Parar al fascismo como primera prioridad, pero mejor lo dejamos para luego que no me dan lo que quiero…”). Implementando la pedagogía del desencanto sobre las masas populares, una de sus principales labores históricas en el puesto que ocupan.

Mientras los social-liberales mugen que les piden demasiado (más de lo que el Ibex les había autorizado a dar), los socialdemócratas suaves se hacen los exquisitos (pero en lo del programa no hay problema, chicos (o chicas), prometemos que asumiremos lo que venga, empezando por el estado de excepción en Cataluña, si hace falta…). La derecha franquista, por su parte, ejerce de derecha franquista: varias familias en una, grande y libre columna autoritaria que parte de negar toda posible apertura democrática en un Estado heredado, hasta el detalle, de una dictadura genocida.

Como todo esto no hay quien se lo trague, ahora nos envían los refuerzos: un social-liberalismo guay, de gentecilla del “movimiento”, nacionalista pero no, izquierdista pero no, populista pero no. Más guapos, más pulidos, más “personal branding”, más humanidad menguante convertida en mercancía. Más jóvenes airados convertidos en señores y señoras como Dios manda.

Y nada va a cambiar el 10-N, votemos o no votemos. No voy a repetir de nuevo la socorrida y pertinente cita de siempre de Ricardo Mella. Las vacas mugen, los rumiantes tienen varios estómagos, los jovencitos radicales y ambiciosos llegan a una edad en que se convierten en gestores, asesores, expertos, ciudadanos de pro que dirigen lo que las élites les dejan decidir y ni una sola cosa más. La naturaleza es así. La vida es así. Es la ley de hierro de las generaciones y de la sociedad de clases. Lo más previsible del mundo.

No me interesan las gentes extraordinarias que hacen cosas extraordinarias que nos enseñan las tertulias televisivas, porque, normalmente, no son más que productos previsibles del proceso de valorización del capital y de digestión de la vida en los estómagos rumiantes del poder. Por eso no me interesa votar el 10N, ni elegir que “salaud” (como los llamaba Sartre) va a gestionar la descomposición de un mundo que se hunde bajo sus pies mientras toca otra vez la “Marcha Real” la orquesta de Ferreras y Ana Pastor.

Me interesa la modista que defiende Madrid de los invasores en 1808. El albañil que llega a general del pueblo por volver a defenderlo en 1936

Me interesa la gente ordinaria que hace cosas extraordinarias. La modista que defiende Madrid de los invasores en 1808. El albañil que llega a general del pueblo por volver a defenderlo en 1936. Los indígenas cobrizos sin nombre que sitian a un tipo llamado Lenin que se supone que les representa y que es progresista, porque les ha vendido y porque se ha vendido él mismo. Las manos que trabajan y los cuerpos que se exponen a ser desvalijados sin abandonar su dignidad.

Eso es lo que llamaban la abstención activa: olvidarse de los representantes y organizarse con los no representados. Practicar la autonomía de los sujetos sometidos. Construir lo común que viene desde abajo, desde las entrañas, desde el subsuelo, desde las más altas esperanzas de quienes no quieren repetir eternamente la rueda infernal que crea señores y súbditos. Y por eso toman su vida en sus manos, su mundo en sus manos, y se representan sólo a sí mismos.

Lo sabía Eisenstein: los de abajo no somos tan guapos, tan pulidos, tan brillantes. Pero existe la posibilidad, al menos la posibilidad, de que tampoco seamos tan previsibles, tan aburridos, tan reiterativos. De que la monotonía de los señores que ocupan los escaños se vea enturbiada por la volcánica mañana de luz de las calles en revuelta.

No es que se hayan vendido (sea lo que sea lo que quiera decir eso) es que son el rutinario bostezo de un mundo que se repite neuróticamente, pero de una forma cada vez más degradada, más mentirosa. No queremos nuestros caretos en un cuadro gris y feo en la Diputación Provincial, comiendo el polvo del tedio. El 10 de noviembre que no cuenten conmigo. Yo amo a la gente ordinaria que hace cosas extraordinarias, ya lo dije. No a los domésticos responsables que organizan la nada y danzan estáticos la melodía de un mundo sin esperanza.

Archivado en: Elecciones 10N
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Partidos políticos
El evitable ascenso de Vox en 2019

El año ha estado decisivamente marcado por la emergencia del partido de Santiago Abascal. Hasta cinco elecciones han puesto a prueba la crisis de representación que vive España.

Elecciones 10N
Cuando la izquierda gira al centro
Cuando las supuestas (o reales) izquierdas giran al centro pierden la capacidad de mantener vivas las esperanzas y las aspiraciones y deseos de una transformación de la realidad.
#41795
21/10/2019 16:25

¿Conoce alguien el limite de votos por debajo del cual unas elecciones quedan invalidadas? ¿Existe siquiera ese límite? ¿Alguien se plantea el abstencionismo como una postura activa antisistema apoyada por un sunami en las calles de todo el país? ¿Alguien duda que el 15M puso nervioso al poder durante un tiempo? Son sólo preguntas, no propuestas, que no obtendrán respuesta.

2
1
#41793
21/10/2019 16:14

La realidad circundante en la calle, en el trabajo -el que lo tenga-, o en el entorno en en que cada uno nos movemos se revela como nuestra única verdad. Desde la mía no puedo mas que estar de acuerdo de principio a fin con este texto. Sin aburrir a nadie con circunstancias personales diré que Carretero asume una realidad penosa y frustrante que se refleja en el desencanto de muchos de nosotros. En el golpe duro de la mal llamada crisis las calles respiraban otra reactividad que no fraguó como escuela del asociacionismo y la autogestión. Quienes lideraron entonces un movimiento esperanzador desmovilizaron a la vez las posibilidades de que en torno a la hoguera fraguara algo más sólido. Los rescoldos acabaron como cenizas esparcidas por algunos escaños.
Yo lo siento como un fracaso que alejó amistades y posibilidades de apoyo mutuo, en lo anímico y en lo pragmáticamente utilitarista. Agitar las manitas al aire en forma de aplauso se ve ahora infantil. Votar se ve inútil.

0
0
#40972
14/10/2019 10:23

Sí, lo sabemos, votando no cambiamos el sistema, pero ustedes no vayan a votar, que los más conservadores si que lo harán.

3
3
#40999
14/10/2019 13:12

Lo bueno, es que da igual, tanto si votas como si no, así que es mejor hacer cosas más importantes.

3
0
#41027
14/10/2019 15:51

Hombre, si crees que da igual votar a vox que a podemos, por ejemplo, pues creo que tienes un problema. De esta "bendita" acracia intelectual se aprovecha estupendamente el fascio.

0
3
#40935
13/10/2019 11:21

Buf, como cansa cualquier maniqueismo... Las personas ordinarias haciendo cosas extraordinarias a veces también estan en las instituciones. Y a veces no. Para criticar el sistema representativo y las mediocridades de la partitocracia no hace falta irse a lo personal -que además en muchos casos es injusto, algunos de los activistas que conozco que mas horas no-cobradas le ponen estan en la esfera de la "nueva política". Es algo mucho mas estructural, derivado de estar jugando a un juego que no es el nuestro.

6
1
anonimander
21/10/2019 15:52

Más cansa aún el relativismo. Ese "a veces" estaría bien concretarlo. Que hay gente dentro de las instituciones que creen posible cambair algo desde dentro, pues sí, que hay algunos intentando en los ayuntamientos mejorar detalles pequeños y concretos del común de los vecinos, pues también. El problema estructural que refieres derivado de jugar un juego que no es el nuestro demuestra que las reglas de ese juego son inmutables cuando quienes las han impuesto las hacen inquebrantables desde dentro. La representatividad interna de las instituciones es de los que están dentro, no nuestra y su falso juego de mayorías no permite cambiar nada. Las consignas recientes del "no nos representan" y del "la misma mierda es" están más vigentes que nunca. Eso es lo verdaderamente estructural. Escuchar al líder de Podemos de hace unos años que articulaba y desentrañaba aquellas consigas y, y atender perplejos al de ahora es el resumen de que el posibilismo y el arribismo son las claves de la política institucional. Quien no lo quiera ver no será capaz de dar un paso más allá del colegio electoral.

1
1
#40934
13/10/2019 10:31

Estupendo artículo. Lo he disfrutado.

2
2
#40933
13/10/2019 9:43

Comparto absolutamente todo lo dicho, pero creo q caemos en el error de sobrvalorar el voto.
Se puede admirar a gente ordinaria haciendo cosas extraordinarias, y se puede perder una tarde de domingo para ir a votar, y despues se pueden seguir haciendo cosas extraordinarias.
Aunque sólo sea x q seguir haciendo cosas extraordinarias sea un poquito, solo un poquito más facil.

14
6
#40958
13/10/2019 21:27

El derecho a voto, nunca estará sobrevalorado. O nunca, mejor dicho, debería estarlo. Solo recordar la cantidad de sangre, sudor y lágrimas que costó obtenerlo. Quizá las personas que habéis nacido en tiempos en los que era posible votar, lo pasáis por alto. Luego está que el mundo es jodido, mejorable, etc. etc.

2
0
#41001
14/10/2019 13:15

El derecho al voto es como el derecho al pataleo. Quéjarse de algo a toro pasado y después no te hacen ni puto caso.

2
0
#40990
14/10/2019 12:53

Por favor, lee bien, creo q no has entendido nada.

0
1
#41026
14/10/2019 15:49

Quién no ha entendido es usted. Sólamente he contestado al comentario de 40958.

0
0
Crisis económica
Economía mundial Por algo más que por dinero: las razones de Trump para una sacudida sin precedentes a la economía mundial
Un estudio estima que la familia promedio perderá 300 dólares al mes con motivo de la oleada arancelaria desatada por el Gobierno de Trump. China anuncia que resistirá hasta el final.
Laboral
Laboral Los cambios en el mercado laboral se reflejan en la siniestralidad en el trabajo
Pese a la bajada de contratos temporales, la rotación aumenta en los fijos discontinuos, donde aumentan los accidentes. Las mujeres tienen un 31% más de siniestros in itinere debido a los contratos a tiempo parcial y dedicarse a los cuidados.
Panamá
Centroamérica Los hombres de Trump vuelven a Panamá para presionar con la toma de control del Canal
La retórica antiChina y el interés por una infraestructura que supone el 6% del tráfico marítimo internacional ha llevado al Gobierno de Estados Unidos a tensar la relación con Panamá y sugerir una posible operación militar.
Pueblo gitano
Día del Pueblo Gitano La Última Roma: resistencia y legado del Pueblo Gitano entre las ruinas de la era soviética
En Soroca, Moldavia, resiste la comunidad gitana más numerosa del país. Entre construcciones fastuosas y cúpulas doradas, la identidad romaní lucha por su supervivencia.
Opinión
Opinión Genealogía del antigitanismo: la buena fe y la mala sangre
Si queremos honrar los 600 años de presencia del pueblo gitano en España, debemos mirar con seriedad la historia de la marginación y la violencia institucionalizada.
Galicia
Galicia Las trabajadoras de Sargadelos exigen la reapertura de la fábrica y rechazan la “irresponsabilidad” del dueño
Los sindicatos apuntan a que la reacción del propietario es “injustificada” por la multa de Inspección y apuntan a que usa a la plantilla para llegar a un acuerdo con la Xunta de Galicia.
Segovia
Mujeres rurales Maribel y sus amigas o cómo sobrevivir sin servicios públicos
Maribel lleva trabajando en el campo desde que era pequeña pero no ha podido cotizar nunca. Junto a sus amigas resiste en un medio rural que envejece sin sanidad, educación o transporte.
Filosofía
Carolina Meloni Carolina Meloni: “Nunca será cómodo ser una filósofa”
‘La instancia subversiva’, su último libro, analiza las bases patriarcales de la tradición filosófica nacida en la Grecia clásica y muestra lo femenino como germen de un nuevo modo de pensamiento.

Últimas

Madrid
Derecho a la vivienda Ocupan una sede de Blackstone para pedir una solución para Virginia, obligada a vivir entre goteras
La Agencia de Vivienda Social de la Comunidad de Madrid y Blackstone “se pasan la pelota” y se niegan a dar soluciones al caso de una vecina de Tetuán con graves problemas de salud que lleva siete años viviendo en un piso público en ruinas.
Menores tutelados
Precariedad laboral Exigen que el servicio sea público en la protección de los menores tutelados
Tanto en las medidas judiciales como de protección, auxiliares, educadores y trabajadores sociales piden más recursos para el bienestar de niños y niñas y la seguridad de las empleadas.
Comunidad de Madrid
Huelga universitaria Estudiantes y profesorado de la Complutense inician movilizaciones hacia la huelga general con un encierro
La Plataforma UCM por la Pública ha convocado la tarde de este lunes una asamblea previa al encierro en la Facultad de Matemáticas, como parte de las actividades preparatorias de la huelga del 28 de abril.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí Nuevos ataques elevan a 1.391 palestinos asesinados por Israel desde el fin del alto el fuego
Un nuevo periodista palestino es asesinado en Gaza en un conflicto que acumula más muertes de reporteros que la II Guerra Mundial, la Guerra de Vietnam y la Guerra de Corea juntos.
Libertades civiles
Represión La cifra de ejecuciones por pena de muerte en el mundo superó las 1.500 en 2024
Amnistía Internacional denuncia que es la cifra más alta desde 2015 y que hay Estados que están utilizando la pena de muerte como arma contra manifestantes y grupos étnicos.
Más noticias
Israel
Industria Armamentística La naviera Maersk vuelve a marcar el puerto de Algeciras como clave del transporte de armamento a Israel
El pasado 5 de abril inició su recorrido desde EEUU el buque Maersk Detroit cargado con armamento que llegará en mayo a Israel. Entre las paradas se encuentra Tánger donde la mercancía pasará al buque Nexoe Maersk, que parte desde Algeciras.
Huelga
Huelga Huelga contra los despidos en Bridgestone: “Dejan en un futuro muy incierto las plantas españolas”
La empresa quiere despedir a 546 trabajadores, entre la planta de Basauri (Bizkaia) y la de Puente San Miguel (Cantabria). Desde los sindicatos denuncian que la compañía de neumáticos apuesta por su producción en Polonia.
Derechos reproductivos
Derechos reproductivos Una mujer muere cada dos minutos por complicaciones durante el embarazo o el parto
Un informe calcula una disminución de las muertes maternas en un 40% entre 2000 y 2023, pero alerta de que el ritmo de mejora se ha ralentizado significativamente desde 2016 a consecuencia de los recortes en cooperación.
Catalunya
Violencia policial Tres Mossos de Esquadra son investigados por la muerte bajo custodia policial del joven colombiano Brian Rios
Casi tres años después de su muerte, la investigación del caso apunta hacia negligencia médica y responsabilidad tanto de policía local como de Mossos de Esquadra

Recomendadas

Francia
Francia Tras su inhabilitación, Le Pen no logra movilizar con su estrategia victimista
La mayoría de los franceses se dicen satisfechos de la condena de la líder ultraderechista y la manifestación en su apoyo solo reúne a unas 7.000 personas en París.
Música
Música Dut, una furia exquisita
El disco ‘Askatu korapiloa’ de Dut cumple 25 años. Exploramos un álbum que sigue impresionando.
Infancia
Marta Martínez Muñoz y Santi Morales “Problematizar el adultocentrismo no es igual a desatendernos de los cuidados”
La creencia de que las personas adultas son superiores solo por ser más grandes. La creencia. Eso es el adultocentrismo. Chicos, chicas y chiques lo definen en el estudio de Marta Martínez Muñoz y Santi Morales, sociólogos niñistas.
Salud
Enfermedades raras La enfermedad de Huntington: los rostros de una dolencia invisible
Hace 32 años se descubrió el gen responsable de la enfermedad de Huntington. Desconocida entre ciudadanos y sanitarios, se hereda en un 50% de los casos cuando uno de los progenitores la tiene.