LGTBIAQ+
Homonormatividad y política sexual en el neoliberalismo

El movimiento LGBT+ ha sido siempre diverso y, consecuentemente, ha visto surgir en su seno intensos debates. Uno de los más relevantes, mantenido durante las últimas décadas, es el referente al papel y la influencia que el sistema capitalista neoliberal puede llegar a tener en el movimiento.
Burguer King Pride
'Pinkwashing'. Campaña publicitaria. 2020
24 jun 2022 08:00

Los orígenes del movimiento LGBT+, en lo que a su vertiente historiográfica occidental se refiere,1 se sitúan tiempo atrás, en el siglo XIX, cuando Magnus Hirschfeld inició en Alemania una contienda contra la legislación antihomosexual que penalizaba la sodomía con cárcel. A ello le siguieron el movimiento homófilo de posguerra, en los años 50 y 60, que organizó las primeras manifestaciones LGBT+, y las revueltas de Stonewall de 1969. Estas últimas supusieron un punto de inflexión dentro de la militancia queer estadounidense, iniciando un levantamiento de emancipación sexual, ideológica y política de corte crítico y radical que pretendía transformar el sistema buscando más la anulación de las opresiones estructurales que los meros cambios institucionales.

A partir de entonces, la lucha en las calles se hizo cada vez más patente y visible y comenzó a aglutinar a más y más personas. Muchas de ellas se organizaron en colectivos como el Frente de Liberación Gay o la Amenaza Violeta, cuestionando las estructuras y normas sociopolíticas predominantes y poniendo en entredicho realidades que eran dadas por sentado. Desde ese momento, los logros y avances del movimiento han sido considerables y de vital importancia para un colectivo (heterogéneo entre sí) que vivía en el más absoluto ostracismo.

Filosofía
"Stonewall": una lectura de Judith Butler
Desde las revueltas de Stonewall y de la mano de J. Butler, reivindicamos las alianzas entre la multitud de colectivos minoritarios y precarizados.

El movimiento LGBT+ ha sido siempre diverso y, consecuentemente, ha visto surgir en su seno intensos debates. Uno de los más relevantes, mantenido durante las últimas décadas, es el referente al papel y la influencia que el sistema capitalista neoliberal puede llegar a tener en el movimiento. El debate se afianzó especialmente a partir de los años 80, cuando este sistema se impuso a nivel mundial de una manera que quería parecer definitiva, ajustando sus dispositivos de dominación a las nuevas realidades sociales. Frente a las posiciones que defendían la importancia que el capitalismo había tenido para la conformación del movimiento y demandaban la participación de su vertiente neoliberal en el mismo, se erigió un activismo más crítico. Acompañado principalmente por la teoría queer, este activismo rechazaba las posibles contribuciones, alegando que el modelo económico también político y cultural― hegemónico desvirtuaba y asimilaba la lucha y sus demandas. Así, fueron muchas las personas que mostraron su descontento con la deriva tomada, debido al contexto en el que se insertaban algunas de las victorias y los logros conseguidos.

Una de las mayores precursoras de esta posición crítica ha sido Lisa Duggan, quien en su libro Materializing Democracy resume con una frase todos los argumentos que se reúnen alrededor de su postura: “el neoliberalismo ―afirma la autora― tiene en realidad políticas sexuales” (2002: 177). De esta manera, se aleja de la retórica de igualdad, imparcialidad y centralismo político en el que se inserta muchas veces el sistema neoliberal, así como de los argumentos pro-comercialización que intentan separar las actividades económicas especialmente visibles en el caso de las grandes empresas que llevan a cabo estrategias de ‘pinkwhasing― de la esfera política, negando cualquier relación entre ambas e inscribiendo sus prácticas en la inocencia de los negocios. En realidad, detrás de las decisiones económicas hay siempre motivaciones políticas y, por lo tanto, toda actividad económica tendrá también sus correspondientes efectos en este último campo. Esta nueva política sexual del sistema económico neoliberal fue bautizada con el nombre de homonormatividad.

Heteronormatividad y homonormatividad serían dos caras de una misma moneda, pero mientras la primera ocupa un lugar hegemónico, la segunda es subalterna y sirve para reafirmar y mantener a la anterior

La homonormatividad no surge de la nada, sino que es la reformulación de otro sistema normativo existente y dominante: la heteronormatividad. Esta se caracteriza, en palabras de Cathy Cohen, por “esas prácticas localizadas y esas instituciones centralizadas que legitiman y privilegian la heterosexualidad y las relaciones heterosexuales como fundamentales y naturales dentro de la sociedad” (1997: 440). La heteronormatividad tiene su origen en la forma en la que Occidente ha estructurado la sexualidad a lo largo de su historia, con el establecimiento de un sistema jerárquico donde la heterosexualidad ocupa el eslabón superior y a su alrededor se establecen las fronteras de lo aceptable, quedando marginada así cualquier otra vertiente sexual.

Sin embargo, las normas sociales, las pautas de comportamiento intrínsecamente políticas al permitir su uso la construcción de objetividades sociales y el surgimiento de fronteras identitarias que configuran la noción de “Otro”, no son inamovibles, sino dinámicas y susceptibles de contestación, tanto por parte de los de arriba como de los de abajo. Sería precisamente esta posibilidad de contestación a las normas lo que daría al sistema las herramientas necesarias para que el estándar cambiase, incorporando algunas acciones anteriormente no permitidas, en este caso ciertas sexualidades e identidades de género. Esto es lo que se ha denominado como “heteronormalización” (Ludwig, 2016), que no es más que una simple reformulación normativa del canon social ya consolidado.

Lo que deducimos de lo anterior es que heteronormatividad y homonormatividad estarían similarmente construidas, serían dos caras de una misma moneda. Eso sí, habría que tener en mente que mientras la primera ocupa un lugar hegemónico, la segunda es subalterna y sirve para reafirmar y mantener a la anterior, puesto que todo centro necesita de una periferia para existir y concebirse como tal. De esta manera, la homonormatividad es definida, tomando otra vez las palabras de Lisa Duggan, como “una política que no cuestiona las asunciones e instituciones heteronormativas dominantes, sino que las sostiene, a la vez que promete la posibilidad de una comunidad homosexual desmovilizada y una cultura homosexual privatizada y despolitizada anclada en la domesticidad y el consumo” (2002:179).

Desgranando la definición propuesta, es posible identificar dos estrategias que el neoliberalismo utiliza para llevar a cabo su política homonormativa. Ciertas sexualidades e identidades de género son incorporadas a los marcos sociales y legales, pero con una condición: se les otorga reconocimiento como particularidad, como algo intrínseco al individuo. Se produce así un proceso de individualización en el que el manejo de las vidas se lleva a cabo a nivel personal, incluyendo en este la búsqueda de soluciones a discriminaciones sistémicas. El neoliberalismo se mueve bajo la promesa de empoderamiento y autorregulación y se presenta como liberador ante el control que el Estado venía haciendo de la intimidad (Binnie, 2014). Se reivindica el derecho a la privacidad y no interferencia. Sin embargo, este individualismo choca con la regulación que en realidad se hace de la esfera íntima.

La despolitización es fruto de uno de los muchos movimientos reaccionarios que lleva a cabo el capitalismo neoliberal ante el avance de una lucha que cuestiona sus cimientos y amenaza con derribarlos

Junto a la individualización se desarrolla una privatización. Con esta estrategia, el neoliberalismo relega la diferencia sexual y de género al terreno doméstico. Esto conlleva que la responsabilidad social se volatilice, impide a los individuos verse como agentes políticos colectivos y dificulta enormemente su unión e identificación grupal, así como la construcción de solidaridades que permitan luchar contra el sistema en su totalidad.

Como resultado de los procesos anteriores, en nombre de la libertad y la diversidad individual y privada, se produce un intento de despolitización del movimiento de liberación sexual. No obstante, esa despolitización responde, al contrario de lo que pueda parecer, a una agenda política, la cual es fruto de uno de los muchos movimientos reaccionarios que lleva a cabo el capitalismo neoliberal ante el avance de una lucha que cuestiona sus cimientos y amenaza con derribarlos. Esta agenda busca, en última instancia, un mayor control de las personas por parte de las estructuras dominantes. El neoliberalismo incluiría entonces otras sexualidades e identidades de género dentro de su sistema normativo, a través de la concesión y consolidación de ciertos derechos civiles, de manera que las políticas sexuales facilitaran la perpetuación y reproducción del sistema económico al hacer a la población manejable y fomentando, así, el autogobierno de los individuos.

Partiendo de estos planteamientos, y sin quitar mérito a los avances conseguidos por los sujetos políticos, parte de la apertura sociopolítica a la visibilidad LGBT+ podría deberse a una reestructuración capitalista ante una de sus crisis de legitimidad, así como a una reformulación de los regímenes de regulación sexual, permitiendo y suprimiendo sus distintas vertientes a través de la creación de nuevas formas de disciplina. Es necesario tener esto en mente a la hora de organizar la lucha presente y futura para evitar caer en estatismos reformistas que transformen solo la superficie, que creen el espejismo de que se están produciendo cambios trascendentales con los que conformarse. Es necesario porque, mientras tanto, el sistema sigue intacto y continúa desplegando sus dinámicas opresivas, categorizando a los individuos a su antojo, no solo en función de su sexualidad e identidad de género, sino también de su raza y clase social. Es necesario para no perder de vista aquello por lo que se luchaba hace no mucho.

Bibliografía

Binnie, J. (2014). Neoliberalism, Class, Gender and Lesbian, Gay, Bisexual, Transgender and Queer Politics in Poland. Int J Polit Cult Soc, 27, 241–257 DOI 10.1007/s10767–013–9153–8.

Britt, B. R. (2015). LGBT rights in contemporary global politics: norms, identity, and the politics of rights. PhD Thesis. University of Delaware. Disponible en: udspace.udel.edu

Cohen, C. (1997). Punks, Bulldaggers, and Welfare Queens: The Radical Potential of Queer Politics? GLQ 3, 437–465.

Duggan, L. (2002). “The New Homonormativity: The Sexual Politics of Neoliberalism”. En Russ Castronovo y Dana D. Nelson (eds.): Materializing Democracy: Toward a Revitalized Cultural Politics, Durham, Duke University Press, pp. 175–194.

Ludwig, G. (2016). “Desiring neoliberalism”. Sex Res Soc Policy, 13, 417–427 DOI 10.1007/s13178–016–0257–6.

Rubin, G. (1984). “Reflexionando sobre el sexo. Notas para una teoría radical de la sexualidad”. In: Vence, C. (comp.) Placer y peligro. Explorando la sexualidad femenina, 1989. Madrid: Revolución. Pp. 113–190.


1Tenemos que ser conscientes de que tanto el término LGBT como la genealogía del movimiento social parten de una concepción profundamente eurocéntrica, que deja de lado e invisibiliza las luchas, epistemologías y realidades de otras partes del mundo bajo un afán universalista.

Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Cuidados ¿Abolimos el género o reescribimos la teoría queer con mirada perinatal?
Debemos reflexionar sobre el sistema sexo-género en relación a los cuidados de las infancias y pensar cómo hacemos compatible los debates identitarios con las responsabilidades individuales y colectivas de sostener la vida.
Sphera
Sphera Cómo ser trans en Grecia: existir, resistir
Las historias de Ari, Kassiope y Paola muestran la situación de las personas trans en Grecia. Un reportaje de El Salto Vídeo para Sphera Network.
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
Estados Unidos
Hari Kunzru “En EE UU hay dos tipos de nazis: los que llevan botas y los que llevan corbata”
El escritor británico reflexiona sobre la victoria de Donald Trump y cómo los conservadores han movilizado teorías como la psicología evolutiva para renovar sus posiciones y plantear una batalla cultural en foros online o redes sociales.
Análisis
Análisis Europa no puede blindarse contra Trump
Tras las elecciones estadounidenses los expertos europeos en política exterior están reviviendo las ideas de autonomía estratégica de 2016, sin entender todo lo que ha cambiado en los últimos ocho años.
Cine
Cine Nicolás Pereda, el Hong Sang-soo mexicano que habla de clases y desigualdad con humor (extraño)
El realizador presenta su último largometraje, ‘Lázaro de noche’, una comedia contenidísima sobre los deseos y sobre el trabajo cultural, en el marco de L’Alternativa, Festival Internacional de Cinema Independent de Barcelona.
Medios de comunicación
Financiación a medios ultras María Guardiola justifica financiar medios ultraconservadores condenados alegando “independencia periodística”
La líder de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha preguntado a la presidenta de la Junta de Extremadura por su financiación a Ok Diario, Libertad Digital y The Objective, pidiendo que cese de “financiar a pseudomedios de extrema derecha”.
Análisis
Violencia sexual Pensar juntas las violencias para poder seguir hablando
En este tiempo, aparentemente no se ha parado de hablar de un tipo de violencias, las violencias sexuales. Y sin embargo, nos preguntamos: ¿es así?
Cádiz
Derecho a la vivienda Así prepara la asamblea de Jerez por la Vivienda su primera gran movilización contra gobiernos y rentistas
Cuatro meses después de haberse constituido, el colectivo convoca una manifestación el sábado 23 de noviembre gracias al trabajo de activistas como Inma, Jaime, Olga o Alberto: “En la última década el alquiler en la ciudad ha subido un 65%”
República Dominicana
República Dominicana República Dominicana en disputa: Trujillo contra Bosch
El trujillismo, pilar del pequeño estado caribeño en su configuración contemporánea, es también fundamental para entender el origen de las políticas intervencionistas estadounidenses en América Latina.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Estados Unidos aprueba la “ley más peligrosa para las libertades” desde la Patriot Act
En Gaza, Cisjordania y Líbano, nuevos ataques israelíes dejan más de un centenar de muertos. En Washington, el Congreso aprueba una ley que permite quitar fondos a ONG, universidades y colectivos sin pruebas ni un proceso transparente.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Comunidad de Madrid
Educación en Madrid El profesorado madrileño vuelve a parar, con la huelga indefinida ya entre sus planes
Durante la segunda convocatoria de huelga educativa en la Comunidad de Madrid, Menos Lectivas ha organizado una asamblea para plantear paros más duraderos.
El Salto Radio
El Salto Radio Desenmascar la violencia
Almudena Carracedo, la directora de “No estás sola. La lucha contra la Manada” nos habla, en su última película, de cómo el “yo sí te creo” consiguió desenmascarar tantas agresiones sexuales hasta entonces silenciadas.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Más noticias
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.

Recomendadas

Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el CAED de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el Estado español.
Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
València
Dana y vivienda “La crisis de vivienda multiplicada por mil”: la dana evidencia el fracaso de las políticas del PP en València
La dana ha dejado a miles de familias sin hogar. Ante la inacción de las instituciones, han sido las redes familiares las que han asumido el peso de la ayuda. La Generalitat, tras décadas de mala gestión, solo ha podido ofrecer 314 pisos públicos.