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Juventud
Ocio juvenil, colectivo y comprometido
Aún no habíamos hablado de ocio en el blog, un sector en el que el capitalismo ha logrado introducir de forma progresiva durante las últimas décadas las lógicas mercantiles, , haciendo de este conjunto de actividades una fuente de negocios cada vez más importante, con fuertes impactos negativos a escala social y medioambiental. La dinámica de mercantilización del ocio no sólo ha supuesto la monetarización de este tipo de actividades, sino también una fuerte tendencia a convertirlas en una actividad de consumo individualizada, pasiva y muy dependiente de la tecnología. Así, predomina un ocio consumista, que nos aísla, pero que enriquece a grandes marcas globales (Netflix, Facebook, Disney, Epic Games, Codere…) que pugnan por ocupar nuestro tiempo libre.
Por tanto, si nos referimos a alternativas de ocio, estas serán fundamentalmente colectivas, aunque también activas, creativas, no monetarizadas… Conversamos con Carmen Peiró y Manuel Sanz, del Colectivo Juvenil Villa de Vallecas, que es un proyecto muy enriquecedor en este sentido.
¿Cómo nace el colectivo y con qué objetivos?
Manuel: El Colectivo Juvenil Villa de Vallecas nació en marzo de 2019, cuando un monitor del proyecto Quedat para jóvenes, del Ayuntamiento de Madrid, nos propuso crear este proyecto para mantenernos unidos, poder poner en práctica todo lo que aprendimos allí y poder crear nosotros mismos todos esos proyectos que hacíamos para el barrio pero siendo nosotros los propios directores de las actividades y colaboraciones.
¿Cuántos sois en el colectivo?
Carmen: Actualmente, en el grupo de WhatsApp del colectivo, somos diez personas, sin embargo, este número ha ido variando desde el principio ya que vienen personas nuevas y otras van tomando otros caminos.
¿Cómo veis en general la oferta de ocio del Ayuntamiento de Madrid para los jóvenes?
Manuel: Personalmente yo creo que la oferta no es mala pero no tiene la suficiente promoción y/o impacto que tiene en los jóvenes todo el ocio relacionado con la fiesta y el alcohol.
¿Qué tipo de actividades organizáis?
Manuel: Pues sobre todo realizamos actividades que promuevan el ocio libre, como gymkanas, talleres y actividades deportivas para así concienciar de que no solo existe el ocio relacionado con la fiesta y el consumo de alcohol.
Carmen: Organizamos actividades para la cohesión del grupo como por ejemplo tardes de juegos de mesa, de debate, tardes de dinámicas en distintos sitios del barrio como en el famoso parque de las siete tetas donde también hicimos un picnic. Hacemos también cinefórums donde vemos una película y luego la comentamos y a los que puede venir la gente que quiera...
También colaboramos con la Asociación Vecinal del PAU del Ensanche de Vallecas en la carrera popular del PAU, tanto como voluntarios, como haciendo juegos y dinámicas con los niños y niñas mientras los papis y mamis corrían en la carrera, así como en gymkanas por el barrio. También hemos organizado pasajes del terror en Halloween para las familias del barrio. Hemos colaborado con un colectivo de skaters en un festival de skate. También participamos en las fiestas del Ensanche haciendo juegos con niños, talleres de manualidades y pintacaras. En la Feria de la Salud con juegos y talleres de reciclaje.
Cuando habláis de las actividades que hacéis, no solo definís alternativas al ocio de fiesta y alcohol, sino que además programáis actividades que defienden un ocio activo, creativo, no mercantilizado ni consumista y con conciencia social. ¿Es algo que habéis buscado conscientemente?
Carmen: Por supuesto, nuestro colectivo tiene unos valores claros entre los que está fomentar el bienestar tanto físico como mental, evitar el consumo, fomentar la creatividad, cuidar el medio ambiente, por lo que nos preocupamos por nuestro entorno, y por supuesto valores basados en el respeto y la diversidad.
Esto se ve reflejado en actos en los que hemos participado en contra de las casa de apuestas en nuestro barrio, manifestaciones para que se cierre cuanto antes Valdemingómez ya que esta expulsa gran cantidad de partículas tóxicas... También participamos en cabalgatas de carnaval con este mismo mensaje hace unos años.
Todas las actividades y reivindicaciones que hemos hecho están bajo unos valores. Estos se centran en cuidar nuestro barrio. «Pensamos globalmente en los problemas de la sociedad, actuamos localmente para mejorarla»
Habéis hablado de que colaboráis con la Asociación de Vecinos del PAU Ensanche de Vallecas, ¿colaboráis con otros colectivos?
Carmen: En Villa de Vallecas participamos en un grupo al que llamamos la Coordinadora de Villa, en el que se encuentran distintos colectivos, asociaciones vecinales, escolares… para poder ayudarnos y colaborar juntos.
También nos gusta mucho lo que hace el Colectivo Ármate Vallecana, siempre intentamos participar en sus proyectos, también hemos colaborado con Bukaneros del Rol, Vallekanas Feministas Km9, asociaciones vecinales como La Unión o La Colmena con las que tenemos una gran relación...
Antes decíais que organizabais actividades para la cohesión del grupo. ¿Dais mucha importancia a este tema?
Carmen: La verdad es que tratamos de darle mucha importancia ya que es fundamental que el grupo esté cómodo y que cada persona se sienta motivada e identificada con lo que se hace, puesto que así salen las cosas y los proyectos mucho mejor.
Es importante que la gente esté comprometida y haya mucha confianza para que la comunicación fluya entre nosotros y nosotras.
Y ahí entra también el uso de la tecnología, ¿verdad? Acordáis formas de que la tecnología no impida que os relacionéis entre vosotras.
Carmen: Es cierto que la manera más fácil de comunicarnos es a través del móvil, todos tenemos redes sociales, incluso tenemos un canal de Discord para jugar juntos a videojuegos. Esto se creó a partir de la pandemia.
Pero también es cierto que sobre todo hablamos por WhatsApp para concretar fechas para vernos en persona y poder hablar mejor así las cosas, pues nos parece muy importante el «contacto real». Siempre hemos preferido jugar todos juntos en la calle a juegos populares que jugar cada uno en su casa a videojuegos.
En los últimos meses se ha hablado mucho de la juventud, pero sobre todo con connotaciones negativas. Como responsables de la propagación de la pandemia, en relación con los problemas de salud mental... ¿Qué problemáticas pensáis que hay detrás de esos temas?
Carmen: Siempre se ha visto a los jóvenes como aquella parte de la sociedad que está desviada, los incomprendidos, los irresponsables y nos tachan de ser los causantes de muchos de los problemas de la sociedad, algunos nos llaman la generación de cristal por pensar que lo tenemos todo y no sabemos valorarlo.
Pero al igual que anteriores generaciones, seguimos teniendo grandes factores en nuestra contra, la falta de empleo, los alquileres, el salario precario... tan solo con esto calculamos que nos independizaremos bastante tarde y eso sin contar con el problema de las pensiones, que parece que nos tocará trabajar prácticamente hasta que no podamos más. Somos aquellos que más problemas de salud mental tenemos en la sociedad, pero eso no es nada nuevo, nos encontramos ante una etapa de nuestra vida con muchos cambios hormonales y personales, pero también hay que tener en cuenta que actualmente la sociedad no trata de ocultarlo tanto como en pasadas épocas en las que se veía de una manera muy negativa el ir al psicólogo.
El problema es la brecha generacional que siempre ha habido, los adultos no tienen en cuenta la opinión de los jóvenes, piensan que son menos válidas porque es lo que han aprendido ellos, pero creo que es el momento de cambiarlo. No podemos seguir juzgando a un libro por su portada. Tenemos que tratar de empatizar, escuchar y entender que la sociedad va cambiando y con esto los problemas de cada generación, sin que eso quiera decir que unos lo tengan más fácil que otros.