Muerte digna
El establishment médico contra la eutanasia: entre el conservadurismo y la irrelevancia

Una parte del sector médico se ha mostrado opuesto a la regulación de la eutanasia y el suicidio médicamente asistido. Pero, ¿cuál debe ser el papel de la profesión en este debate? 

Puente Manzanares
Paseantes por uno de los puentes de Madrid Río Álvaro Minguito
Javier Padilla Bernáldez

Es integrante del Colectivo Silesia.

23 ago 2018 05:14

La regulación de la eutanasia ha sido, probablemente, el tema que en más ocasiones ha pasado por un pleno del Congreso de los Diputados durante esta legislatura; en lo que llevamos de año ya se han aprobado a trámite dos propuestas de ley que seguramente harán que la petición de asistencia por parte de los pacientes para acabar con su vida se vea regulada, ya sea en forma de eutanasia, suicidio médicamente asistido o ambas.

Como en muchos otros casos, la luz verde por parte del poder legislador llega después de que la sociedad haya mostrado su apoyo a la eutanasia cada vez que se le ha preguntado de una u otra forma; este retraso en la adopción de medidas para regular la eutanasia y el suicidio médicamente asistido se han disfrazado detrás de la necesidad de “que la sociedad lleve a cabo un debate calmado al respecto” sin poner ninguna base que sustentara dicho debate.

Ahora que el Congreso de los Diputados ha hablado llegan las reacciones de un colectivo caracterizado por ser escudo protector frente a cualquier cosa que pueda sonar a avance social no liderado por ellos: la profesión médica.

Recientemente la Organización Médica Colegial (más exponente de lo que podemos llamar el establishment médico que de “los médicos y las médicas”) ha publicado un documento de posicionamiento sobre la eutanasia en el que se remite a varios artículos del Código Deontológico que inciden en la idea de que “el médico nunca provocará intencionadamente la muerte de ningún paciente ni siquiera en caso de petición expresa por parte de éste”.

Tanto la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFyC) como el Colegio de Médicos de Barcelona han reconocido que el de la eutanasia no es un debate médico sino social y político

Asimismo, varios médicos con cargos de responsabilidad en la Organización Médica Colegial se han manifestado en entrevistas recientes con frases como “no estudié medicina once años para quitar la vida a un paciente” o “la eutanasia representa una práctica contraria a la ética médica”.

Frente a este posicionamiento unívoco de la organización que representa a la profesión médica a nivel estatal, han surgido algunas voces institucionales que no se han alineado con ese discurso. Tanto la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFyC) como el Colegio de Médicos de Barcelona han reconocido que el de la eutanasia no es un debate médico sino social y político, y es en esos debates en los que la profesión médica debería participar sabiendo que su aportación técnica no le imprime un mayor valor moral a sus opiniones y que la sociedad puede ir muy por delante (o en un sentido diferente, por no dotar de una visión lineal a la evolución de las decisiones) de las opiniones que la profesión médica decida adoptar.

En el mismo Código Deontológico que se utiliza para justificar el posicionamiento de la Organización Médica Colegial contra la regulación de la eutanasia aparece el siguiente párrafo:

“Este Código sirve para confirmar el compromiso de la profesión médica con la sociedad a la que presta su servicio, incluyendo el avance de los conocimientos científico-técnicos y el desarrollo de nuevos derechos y responsabilidades de médicos y pacientes”

De acuerdo con ello, tal vez sería deseable huir de la demonización de los deseos de la población de que se regule la petición de ayuda médica para morir y se atienda al elevado porcentaje de la población (84% según Metroscopia) que creen que “un enfermo incurable tiene derecho a que los médicos le proporcionen algún producto para poner fin a su vida sin dolor”, como dice la pregunta de la encuesta de Metroscopia.

Esa pregunta es relevante, porque algunos de los detractores más ilustres de la eutanasia desde el ámbito médico parecen tener menos problemas si el médico no participa en el proceso, es decir, si se regula el proceso de una muerte asistida pero sin participación del médico/a. Habría mucho que objetar a esta idea, pero probablemente las mejores palabras que podemos tomar son las de John Berger en el libro “Ayudar a morir”, de Iona Heath:

“El médico es el familiar de la muerte. Cuando llamamos a un médico le pedimos que nos cure y alivie nuestro sufrimiento, pero si no puede curarnos también le pedimos que sea testigo de nuestra muerte. El valor del testigo es que ya vio morir a muchos otros [...]. Es el intermediario viviente entre nosotros y los innumerables muertos. Está con nosotros y estuvo con ellos, y el consuelo difícil pero real que los muertos ofrecen por su intermedio es el de la fraternidad”.

El establishment médico podría, por una vez en la era contemporánea, acompañar los deseos de la sociedad aportando su valor de testigo, de familiar de la muerte, y haciendo que el respeto a la autonomía verdadera (que incluye especialmente aquellas situaciones en las que no se comparten las decisiones de los pacientes) se conjugara con el compromiso social de hacer que las personas que deseen la eutanasia la reciban en la mejor de las condiciones posibles.

Las justificaciones basadas en la esencia de la profesión para oponerse a cambios que se producen en la sociedad ya fueron esgrimidos en el caso del aborto, lo están siendo en la eutanasia y probablemente lo serán en algún caso que aún no acabamos de vislumbrar; estas justificaciones intentan plantear a la profesión médica como un ente separado de la sociedad en la que ejerce, y que ha de velar por la pureza de un conjunto de prácticas que no son sino la construcción colectiva de las sociedades en las que se han ido desarrollando.

La eutanasia se regulará en el Estado español. Médicas y médicos mostrarán opiniones variadas con mayor o menor resonancia, siendo muchas personas las que aporten su quehacer profesional a la práctica de la eutanasia y otras las que realicen objeción de conciencia, y entretanto esperaremos que estén las instituciones para velar porque los derechos de las personas no dependan de las convicciones personales de un proveedor sanitario.

Archivado en: Salud Vejez Muerte digna
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Muerte digna
Festival sobre el final de la vida Acompañar el duelo y enterrar el tabú
El festival “Dando vida a la muerte” llega a la quinta edición con presencia en ocho comunidades.
O Teleclube
O teleclube 'O Teleclube' visita 'A Habitación do Lado' de Pedro Almodóvar
O director manchego traslada o seu estilo emblemático a Nova York con dúas grandes actrices para falar sobre a morte digna.
Muerte digna
INDUSTRIA DE LA MUERTE Grupo Mémora: el monopolio de la muerte controla 111 instalaciones funerarias en Hego Euskal Herria
Tras fichar para el patronato de su fundación a un exconsejero de Salud del Gobierno Vasco, compró a las empresas que lideraban el sector en Euskadi y Nafarroa.
Líbano
Líbano Cinco décadas sin paz ni justicia en Líbano
El país mediterráneo conmemora el 50 aniversario desde el inicio de la guerra civil, un conflicto cuyos crímenes no se han juzgado y cuyos desaparecidos no se han encontrado
València
València “‘El vol de Guillem’ ha supuesto la liberación de todos estos años de lucha”
Ricard Tàpera, autor del cuento, y Betlem Agulló, hermana de Guillem Agulló, que ha puesto voz a la historia, nos explican cómo ha sido el proceso de creación de esta obra coral, ilustrada por Helga Ambak.
La vida y ya
La vida y ya Días de vacaciones
No somos conscientes de que la lluvia depende, en un porcentaje altísimo, de ellas. Sin plantas hay menos lluvia. Sin lluvia las semillas no germinan. Así funciona.
Economía social y solidaria
Tecnología Inteligencia Artificial y economía solidaria: ¿posibles aliadas?
¿Cómo debe relacionarse la economía solidaria con una tecnología que vulnera derechos humanos y ambientales constantemente? Cooperativas e investigadoras tecnológicas animan al movimiento a perderle el miedo y a utilizarla de manera crítica.
Multinacionales
Multinacionales Maersk y las rutas de complicidad con el genocidio israelí en Gaza
Crece la presión internacional contra la naviera danesa que está aprovisionando a Israel de armas para cometer el genocidio de Gaza en contra de las medidas cautelares tomadas por la Corte Internacional de Justicia.

Últimas

Eventos
Taller de podcast El Salto invita a estudiantes a explorar las posibilidades del formato audiovisual
Proponemos un taller de guion y producción de programas para estudiantes de comunicación y periodismo los días 24 de abril y 8 de mayo.
El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.
Opinión
Space X Los viajes al espacio y el efecto Katy Perry
El 2024 fue el año más caliente desde que hay registros, mientras que Katy Perry y un puñado de millonarias nos deleitaron con su viaje espacial cortesía de Jeff Bezos.
Más noticias
Estados Unidos
Estados Unidos La buena sintonía entre Trump y Meloni
Como era de esperar, los mandatarios mostraron afinidades políticas e ideológicas. La italiana insistió en la idea de “fortalecer Occidente”.

Recomendadas

Historia
Historia Cuando la solidaridad antifascista reunió a musulmanes, judíos y cristianos en la España republicana
Marc Almodóvar y Andreu Rosés rescatan a los combatientes árabes de la Brigadas Internacionales en el libro ‘Moros contra Franco. El antifascismo y la Guerra Civil española en el mundo árabe’.
Valencià
València Duelo colectivo y brecha de género, las consecuencias de la dana en la salud mental
Más allá de lo material, el sufrimiento mental continúa golpeando las vidas de l´Horta Sud. Mujeres cuidadoras y colectivos vulnerables encabezan un luto que todavía no ha encontrado descanso.
Galicia
Galicia La UE cava hondo: litio gallego para el nuevo militarismo europeo
En pleno rearme ordenado desde Bruselas, Galicia entra en el tablero geopolítico como potencial proveedor de litio para la industria de defensa. Un enclave de alto valor ecológico en Doade (Ourense) se convertirá en cantera para baterías militares.