Fracking
Las perforaciones en busca de gas en La Rinconada (Sevilla) encienden las alertas sobre el ‘fracking’

Mientras en Madrid se organizaban los preparativos para la Cumbre sobre el Cambio Climático bajo el lema “Tiempo de actuar”, con el compromiso de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, se daban a conocer distintas noticias relacionadas con proyectos de exploración de hidrocarburos en la Península.

Fracking La Rinconada  01
Prospecciones de gas en La Rinconada (Sevilla). | Foto: Sonia Cabrera

@Helios_EM

23 dic 2019 06:00

A finales de noviembre se publicaba en el BOE la decisión del Ministerio para la Transición Ecológica de autorizar los trabajos de sondeo para la explotación de gas natural en el término municipal de Vitoria-Gasteiz, dentro del proyecto Armentia-2. Las perforaciones comenzarían alrededor de 2021, si se completan los trámites pendientes. También se autorizaba en esas fechas la ejecución del sondeo de explotación de hidrocarburos en el yacimiento Viura, a unos 12 kilómetros de Logroño, que según la empresa Unión Fenosa alberga el 10% del consumo anual de de gas en España.

La noticia más destacada ha sido sin embargo el comienzo de los trabajos de perforación en dos zonas del municipio de La Rinconada (el Gordillo y Majaravique), en Sevilla, vinculados también a sondeos de exploración de posibles yacimientos de gas natural. La autorización para estas actividades se publicó en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) del pasado mes de mayo, enmarcándolas dentro de los trabajos a desarrollar en el permiso de investigación de hidrocarburos Penélope. Se trata de un proyecto cuya autorización se hizo pública en 2012, y que fue concedido a la empresa Oil & Gas Capital, S.L, la misma a la que se le otorgaron permisos similares en la provincia de Jaén (denominados Ulises 2 y Ulises 3). En su momento este conjunto de permisos generaron cierta alarma y movilización, al vincularse con la utilización de las técnicas de fractura hidráulica o fracking. Se trata de un procedimiento de extracción para los yacimientos considerados “no convencionales”, generalmente en formaciones de esquistos o arenas compactas. Mientras que los hidrocarburos convencionales se hallan en rocas porosas y permeables, por lo que pueden extraerse mediante perforación y bombeo, la poca permeabilidad de las formaciones no convencionales requiere la inyección de agua, químicos y arena a alta presión para fracturar la roca y poder extraer el petróleo o gas alojados en ella.

Esta técnica se ha ido extendiendo en la última década en diversos países debido a la progresiva escasez de hidrocarburos convencionales, a pesar de su mayor coste económico y medioambiental. Son precisamente sus consecuencias ecológicas y sociales las que la han convertido en un elemento de disputa para organizaciones ecologistas y en defensa del territorio en todo el mundo. Actualmente se práctica de forma regulada en Estados Unidos, Canadá, Argentina, y China. En todos ellos se denuncian de forma continua los impactos sobre la salud y el entorno, en forma de filtraciones de productos químicos a los acuíferos, fugas de metano, o aumento de los movimientos sísmicos, lo que ha llevado a que cada vez más países prohíban esta práctica (mientras muchos de ellos la promueven a su vez en países exportadores).

Organización de los vecinos del Valle del Guadalquivir

Los trabajos de perforación en el municipio de La Rinconada comenzaron a mediados de noviembre, pero fue una semana después de su inicio cuando lo vecinos se empezaron a informar, al sospechar de la gravedad de las mismas. Sonia Cabrera, vecina de la urbanización afectada por las obras, denuncia el secretismo con el que se han llevado a cabo: “al comenzar a informarnos por nuestra cuenta descubrimos la publicación en el BOJA del proyecto, del que hasta entonces no sabíamos nada. Ninguna administración nos había informado, a pesar de que creemos que somos afectados, y no pudimos conocer el plazo de alegaciones. No se ha colocado ni siquiera un cartel informativo”.

Fracking La Rinconada  02
Foto: Sonia Cabrera

Según afirma, “actualmente la principal consecuencia es la contaminación acústica, porque las máquinas están al lado de las casas, además del paso continuo de camiones y máquinas pesadas por los caminos, y la suciedad provocada por el barro”. Pero lo que sobre todo preocupa a los vecinos son los impactos que pueda haber en caso de que el proceso de investigación resulte positivo y comience la explotación, las consecuencias ambientales y de salud que puedan producirse. “Cuando se empiece a extraer el gas ya será tarde para pararlo, por eso nos estamos moviendo ahora. Aquí cerca hay vecinos que viven de sus tierras y se pueden ver afectados, además de la contaminación en el aire”.

En este sentido, los vecinos se han organizado en una nueva plataforma contra la extracción de hidrocarburos en la Vega del Guadalquivir, que ha mantenido una reunión con el ayuntamiento de La Rinconada y con distintos representantes de partidos y ha solicitado la paralización de las perforaciones. También ha habido concentraciones en el lugar de las obras que han llegado a paralizar los trabajos.

Dudas sobre la utilización de fractura hidráulica

Según Eduardo Gutiérrez, coordinador de Ecologistas en Acción de Andalucía, no parece que las exploraciones que se están llevando a cabo en Sevilla estén encaminadas a la explotación mediante fracking. “Existen desde hace tiempo pozos de extracción convencional de gas natural en todo el Valle del Guadalquivir, desde Doñana a Córdoba. Estos trabajos actuales se enmarcan en los mismos yacimientos”. Por otro lado, “los permisos que tiene esta empresa son para un pozo de hasta 500 metros, mientras que si fuera de gas no convencional podría ser de hasta dos kilómetros.

Eduardo Gutiérrez, Ecologistas en Acción: “Existen desde hace tiempo pozos de extracción convencional de gas natural en todo el Valle del Guadalquivir, desde Doñana a Córdoba. Estos trabajos actuales se enmarcan en los mismos yacimientos”

En el mismo sentido, aunque con más cautela, se expresa Pablo García, geógrafo e investigador de la Universidad de Granada sobre hidrocarburos no convencionales. “En España el único pozo reconocido oficialmente de fractura hidráulica es el de Bigüenzo, en Cantabria. En el resto de proyectos de exploración, como en este caso, no se dice nada de fracking, lo que no quiere decir que no pueda haber intenciones de llevarlo a cabo más adelante”. Ello dependería de los resultados de estas fases iniciales, que tratan de evaluar el tipo y cantidad de recursos existentes: “una vez que la empresa evalúe la viabilidad de la explotación tiene que pedir la concesión de la misma, y si se la conceden y son recursos hidrocarburos no convencionales pueden aplicar fractura hidráulica de alto volumen, que además está legalizada en la ley vigente con una regulación incluso de los ingresos para los municipios afectados”.

Tanto Eduardo Gutiérrez como Sonia Cabrera coinciden la oposición al proyecto más allá de las técnicas particulares empleadas, y en la contradicción de este tipo de iniciativas con los objetivos de lucha contra el cambio climático. “Al margen de que sea o no fracking, a lo que nos oponemos es a seguir explotando combustibles fósiles. No tiene sentido que mientras se ha celebrado la COP25 y se habla de reducción de emisiones y de abandonar estos combustibles, se sigan abriendo pozos de gas natural”, afirma Gutiérrez.

La dependencia del gas exterior como justificación

España mantiene una elevada dependencia de las importaciones de gas natural, al igual que el resto de países europeos. Según datos de Eurostat y CORES, el consumo de este recurso supone entre el 20% y el 30% del consumo de energía primaria, y más de la mitad proviene de Argelia (a través del gasoducto Medgaz), seguido de Noruega, Nigeria y Qatar. En nuestro territorio se produce actualmente menos del 1% del gas natural que consume. Según Alfons Perez, del Observatori del Deute en la Globalització, esta situación de dependencia exterior puede servir para justificar la reactivación de permisos de hidrocarburos que se pueda estar dando, “pero también puede ser una excusa; en la mayoría de los casos se trata de movimientos especulativos”, advierte

Multinacionales
Las potencias europeas promueven el fracking fuera mientras lo prohíben dentro de sus fronteras

Al mismo tiempo que el rechazo popular está haciendo retroceder en terreno europeo la polémica técnica del ‘fracking’, las multinacionales del viejo continente multiplican la inversión en proyecto de fractura hidráulica en países empobrecidos.

Pérez participó hace dos años en la elaboración del informe “La trampa global del gas. Un puente al desastre”, editado por el mencionado Observatorio y la Fundación Rosa Luxemburgo. En este estudio se expone el valor geopolítico del gas y la importancia de las megainfraestructuras de transporte y conexión, así como la financiarización de estos mercados. Una de las principales conclusiones que apunta es el peligro de la narrativa sobre el gas como “combustible de transición” hacia una economía baja en carbono, basada en su supuesto menor potencial de emisiones en la combustión, para justificar su impulso desde las instituciones. Esta retórica minimizaría tanto su carácter no renovable como todo el conjunto de emisiones producidas a lo largo de la cadena, desde la extracción hasta el consumo, principalmente por las continuas fugas de metano que se producen.

Así pues, los discursos oficiales sobre la “emergencia climática” y la preocupación ambiental parecen chocar con la realidad del modelo económico y la matriz energética imperante, que sigue impulsando la explotación de combustibles fósiles en diversas formas, con consecuencias para territorios concretos como la Vega del Guadalquivir. Pero como ocurre con el auge de otros proyectos extractivos por toda la península, como la minería, las resistencias también se van organizando y extendiendo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
¿Era necesario echarle tomate a los girasoles de Van Gogh?
14 de octubre de 2022, dos activistas del grupo Just Stop Oil armadas con unas latas de sopa de tomate y pegamento lanzan el contenido de las latas sobre el famoso lienzo de Van Gogh titulado ‘Los girasoles’. En su ‘statement’ preguntan qué tiene más valor, el arte o la vida.
Fracking
Fracking Cómo la Guerra de Ucrania va a intensificar el número de seísmos
La Unión Europea está diversificando sus proveedores de gas ante el conflicto ruso-ucraniano, pero la mayoría de estos nuevos suministradores utilizan el 'fracking' para obtener este combustible fósil. Varios estudios vinculan el uso de esta técnica con el aumento de terremotos en las zonas de extracción.
La semana política
Resumen de noticias
La invasión de Ucrania llega a su duodécima semana. Los pocos avances en el terreno militar contrastan con el inicio de medidas de corte de suministro energético con el que Rusia amenaza a la Unión Europea.
#45014
23/12/2019 10:49

STOP Facking en Andalucía, por la movilización ciudadana YA

0
0
Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Cine
Kamal Aljafari “Palestina está en la raíz de la situación actual del mundo”
Kamal Aljafari lleva toda su carrera trabajando con materiales de archivo, indagando en las imágenes e interviniendo en ellas para preservar memorias en desaparición y para oponerse al proyecto colonial sionista y su falseamiento del pasado.
Opinión
Derecho a la vivienda Flex Living: el caballo de Troya de la precarización del alquiler
No es una respuesta moderna a las nuevas formas de habitar la ciudad. El ‘flex living’ no es más que la última jugada del sector inmobiliario y los grandes fondos de inversión para maximizar beneficios a costa del derecho a la vivienda.
Opinión
Opinión ¡Que vivan los aranceles!
Que Trump propugne aranceles no debe hacernos caer en la trampa de defender los intereses de los grandes oligopolios.

Últimas

Política
El Salto Radio Podcast | ¿Cancelar la cancelación?
Hablamos con Antonio Gómez Villar, a partir de su libro “Cancelar no es transformar” sobre malos entendidos y límites de esta acción política
Galicia
Memoria histórica Cultura, exilio y lucha de las bibliotecarias gallegas durante la Segunda República
Durante los primeros años treinta, las bibliotecas se convirtieron en espacios de trabajo ideales para un modelo de mujer que aspiraba ser independiente y que había manifestado un claro compromiso político. La Guerra acabó con todas sus aspiraciones.
Opinión
Opinión La unidad del anarcosindicalismo es la acción conjunta
Al hilo de supuestos movimientos desde la CGT hacia la unificación con CNT es necesario diferenciar entre lo que es una relación en clara mejora y lo que sería un proyecto real en marcha.
Más noticias
Galicia
Galicia La Xunta de Feijóo, condenada por negar visitas a una mujer que murió de cáncer por tener covid-19
La jueza dice que la situación exigía “flexibilizar” las medidas de prevención. Falleció a inicios de 2022 en el Hospital Álvaro Cunqueiro durante los últimos meses de la administración del jefe del PP con Julio García Comesaña de conselleiro.
Egipto
Egipto Ashraf Omar continúa en prisión provisional por dibujar
Ashraf Omar, caricaturista político del medio digital AlManassa, sigue en prisión preventiva indefinida tras ser arrestado violentamente en su domicilio el 22 de julio de 2024.

Recomendadas

Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.