Editorial
La vida sigue igual

Lejos de proyectar el rumbo hacia un futuro gobierno de izquierdas, EH Bildu ha tendido su mano a los jeltzales en distintas ocasiones y se decanta por “una nueva política de colaboración” para alcanzar un pacto con el PNV.
Hordago 74 - 5 Olaso Dorrea Telesforo Monzon
Olaso Dorrea en Bergara fue la casa donde nació Telesforo Monzon y en la que hoy el TM eLab está forjando los acuerdos entre el PNV y EH Bildu Itoitz Otsoa
20 abr 2024 06:01

Existen pocas esperanzas de que algún proyecto político –digamos, emancipador o de ruptura– cabalgue la coyuntura económica vasca, crecientemente degradada desde 2008. La novedad estriba en que, tras 44 años de gobiernos del PNV, de los cuales 19 han sido en coalición con el PSE, y con la excepción del interregno fraudulento, EH Bildu (EHB) ha logrado acercarse en votos a su rival histórico. Tras abandonar la violencia política, la izquierda abertzale ha virado desde un discurso populista similar al que hizo medrar a Podemos hacia un proyecto institucional que no esconde su voluntad de integración en el estado de las cosas, aunque con una mirada más progresista. De esta forma, sienta las bases para consensos nacionalistas que articulen un hipótetico futuro proceso soberanista vasco, al menos cuando las condiciones políticas en España lo permitan.

Gobierno vasco
Gobierno Vasco Un trámite de investidura para Pradales
El jeltzale será nombrado hoy lehendakari en el Parlamento Vasco gracias a la mayoría absoluta de PNV y PSE. Se enfrenta al reto de recuperar a los votantes que ya no confían en la gestión neoliberal y clientelista de su partido

Mientras tanto, tenemos política neoliberal para rato, lo que ahondará en la privatización de los servicios públicos, el deterioro de Osakidetza. También una Ertzaintza desatada, una fiscalidad regresiva, así como un sistema educativo y lingüístico segregador. En el contexto de declive de hegemonía del PNV, por tanto, EHB y su nuevo portavoz Peio Otxandiano, lejos de fijar el rumbo hacia un futuro gobierno de izquierdas, tienden su mano a los jeltzales y hablan en público de “una nueva política de colaboración” que consistiría en un pacto estratégico entre las dos formaciones abertzales, “los acuerdos de país” de los que tanto se discute ultimamente. Acuerdos que ya operan en la universidad pública, en Mondragon Corporation, en la radiotelevisión pública, en la política educativa o en el uso del euskera para copar todos los niveles de acceso a la administración.

“Los acuerdos entre PNV y EHB ya operan en la universidad pública, en Mondragon Corporation, en EITB, en la política educativa o en el uso del euskera para copar todos los niveles de acceso a la administración”.

Más allá de la puesta en escena de un cambio hipotético (el pacto entre PNV y PSE se antoja sólido), el giro electoralista de la coalición abertzale genera incomodidad y desorientación entre sus bases sociales y militantes, movilizadas en los últimos años contra las políticas regresivas de Lakua. Contraponer a un tecnócrata contra otro, o un abertzale con bagaje cooperativista contra un jeltzale con herencia corrupta puede ser tácticamente inteligente, pero difícilmente servirá para luchar contra el Estado opresor y, no digamos ya, para construir una alternativa al capitalismo global en un momento en que este culmina su giro militarista.

Hoy integrada en los bloques legislativos que sostienen al Gobierno en España y a la socialista María Chivite en Navarra, EHB ha pretendido recorrer el mismo camino en el Parlamento Vasco durante la XIII legislatura. Amortizada la vía social tras la implosión de Podemos y Sumar, el cambio de estrategia recupera por fin la esencia nacionalista del proyecto histórico que enarbola la izquierda abertzale.

Mientras, el ruido de fondo nos devuelve los ecos de un sector industrial menguante, se extiende la precariedad y las políticas públicas no dejan de ser una huída hacía adelante que no para de alimentar al monstruo turístico. El habitus neoliberal vasco está en crisis, sin duda, pero ¿acaso el capitalismo vasco no está siempre en crisis o, directamente, en guerra contra las clases subalternas vascas? La solución, como bien saben quienes leen Hordago, no está en las instituciones burguesas y mucho menos en la creación de una Gran Coalición que en una década pueda culminar finalmente la renovación socialdemócrata de una institucionalidad, como la vasca, que es corrupta y se encuentra anquilosada.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Agroecología
Agroecología El euskera es agroecológico
No es casual que en las huertas de Euskal Herria el euskera, con sus diferentes acentos y procedencias, sea el puente común que conecta cosmovisiones sedientas de justicia para el campo y emancipación para las personas
Ecologismo
Infraestructuras Ecologistas recuerdan que hay una alternativa al TAV por Aralar ante la amenaza de expropiaciones
El secretario de Estado de Transportes del Gobierno español, José Antonio Santano, abrió la puerta a hacer “expropiaciones temporales” ante los obstáculos que se están encontrando en los municipios afectados por la conexión entre Navarra y Euskadi
Euskal Herria
Palestina Miles de personas protestan bajo la lluvia en Gasteiz contra un Maccabi Tel Aviv totalmente blindado
Indar Baskonia denuncia la prohibición y “robo”, por parte de la Ertzaina, de una pancarta propalestina “previamente aprobada”. Miles de personas siguieron el boicot en las calles.
julen
22/6/2024 11:49

Sería conveniente que no se dejara a las lectoras la interpretación de lo que se quiere decir en un titular. Así, por ejemplo, cuando se dice que "la izquierda abertzale ha virado desde un proyecto populista similar al que hizo medrar a Podemos hacia un proyecto institucional..." habría que aclarar qué entiende la editorialista por populismo, sobre todo, para no caer en el uso y abuso de términos que en absoluto tienen un único significado. También se debería aclarar qué entiende por medrar y por qué Podemos "medró". Y, por último, que no significa que el editorial entero no merezca una buena revisión, se deberían explicar un par de conceptos que me han dejado estupefacto: el de "vía social" y el de "clases subalternas". Que Podemos y Sumar representen algo así como la "vía social", según el editorial, equivale a no decir nada, y hablar de "clases subalternas" sin explicar cuál es su significado gramsciano, lo mismo. Una pena, porque el editorial contiene muchos elementos que responden a la realidad y que definen con acierto el mapa político actual y hacia dónde pretenden dirigirlo quienes representan el mundo nacionalista.

0
0
Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Galicia
Galicia La Xunta de Feijóo, condenada por negar visitas a una mujer que murió de cáncer por tener covid-19
La jueza dice que la situación exigía “flexibilizar” las medidas de prevención. Falleció a inicios de 2022 en el Hospital Álvaro Cunqueiro durante los últimos meses de la administración del jefe del PP con Julio García Comesaña de conselleiro.
Egipto
Egipto Ashraf Omar continúa en prisión provisional por dibujar
Ashraf Omar, caricaturista político del medio digital AlManassa, sigue en prisión preventiva indefinida tras ser arrestado violentamente en su domicilio el 22 de julio de 2024.

Últimas

Justicia
Justicia Rubiales, condenado por agresión sexual y absuelto del delito de coacciones
18 meses de multa con cuota de 20 euros al día por un delito de agresión sexual. Es la condena al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por los hechos ocurrido en la ceremonia de entrega e medallas del pasado mundial celebrado en agosto en Sidney.
Tribuna
Tribuna Verde de ecosocial, verde de educación pública
En nuestras aulas se ha colado una prisa ansiosa, que juzga al alumnado como un gasto, que lo dirige, poco a poco, a un mundo laboral tecnoptimista y completamente atomizador.
Más noticias
El Salto Radio
El Salto Radio Humedales necesarios
Damos un paseo radiofónico por algunos de los humedales de Andalucía, espacios fronterizos entre el mar y la tierra, tan necesarios para nuestra supervivencia. Lo hacemos con Juan Martín Bermúdez, de SALARTE y algunos oyentes.
Fascismo
Memoria antifascista Allí donde hay humo, hay fuego
A unos días de las elecciones alemanas, donde la ultraderecha acude fortalecida, un repaso sobre el proceso de desnazificación posterior a la Segunda Guerra Mundial y sus medias verdades.

Recomendadas

Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.
América Latina
Extrema derecha Los soldados de Donald Trump en América Latina
Mientras algunos presidentes latinoamericanos, con mayor o menor ímpetu, intentan ponerle freno, otros tantos se arrodillan y le rinden pleitesía sin recibir nada a cambio. ¿Quiénes son los súbditos latinoamericanos de Trump?