Danza
“Un cuerpo sano siempre será bonito”

Fue bailarina profesional. Una anorexia nerviosa le hizo romper con todo aquello que ahora es pasado. Romper, al menos, con la forma en que antes pensaba la danza.
Saioa Vivanco
Saioa Vivanco, bailarina, ahora entiende la danza desde otro lugar, a otro ritmo.

Fue bailarina profesional. Bilbao-Madrid. Madrid-Irlanda. Irlanda-Bilbao. A Saioa Vivanco, bilbaína, antes de la pandemia se le iba el tiempo en bailar, bailar, bailar, leer y trabajar. “Lo típico”, aclara. Después, todo cambia: escribir y dedicar el día a los demás. Una anorexia nerviosa le hizo romper con todo aquello que ahora es pasado. Romper, al menos, con la forma en que antes pensaba la danza. “Volveré”, dice. Y nadie lo duda: volverá.

¿Tu vida de niña en una imagen?
No tengo muchos recuerdos. La mayoría son en la escuela de baile o ensayando. Si pienso en alguna imagen… los martes y los jueves cuando iba a casa de mi amama a tomar café.

¿Abandonaste el baile o te abandonó?
No me gusta la palabra “abandonar”. Implica distanciarse y en este caso no ha sido así. La danza era mi pasión. Lo tuve que dejar a nivel profesional, pero espero poder volver.

¿Qué te queda? 
Recuerdo con mucho cariño el primer escenario, las primeras zapatillas de punta, los ensayos, los compañeros. La danza me ha aportado cosas maravillosas y muy dolorosas.

¿Bailar te llevó a enfermar?
Bailar es bonito. Cada uno a su manera, todos podemos bailar. No creo que bailar me hiciera enfermar, fue la gestión de mi forma de bailar la que me llevó ahí. Una pasión no puede hacerte enfermar, pero  una mala gestión de ella. Autoexigencia, sin llegar casi a disfrutar. Siempre se puede hacer mejor, nunca es suficiente. El perfeccionismo está bien, pero pudo potenciar el desarrollo del Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA).

¿Cómo explicarías a una niña de cinco años cómo es ese trastorno?
De hecho, comencé a bailar con cinco años, si no recuerdo mal. Ya entonces tenía fijación con mi cuerpo. Los años, la adolescencia, la sociedad fueron aumentando esa fijación. Hasta que me mudé a Madrid, donde, viviendo sola, incrementé la hipervigilancia. Cuando eres consciente de que algo no va bien suele ser tarde. La enfermedad empieza a formar parte de ti. Cuando una persona no es capaz de expresar lo que le pasa con palabras, lo hace a través de la comida: comiendo y vomitando, comiendo poquito. Algo no va bien. Eso es un TCA.

 Sentirse sola es como estar vacía

¿Cómo estás?
Depende del momento del día en que me lo preguntes. Te puedo decir que sigo en tratamiento. Es un proceso muy largo y duro. Hay recaídas. Un TCA solo es el síntoma de algo que no va bien, el trabajo viene detrás. Estoy tratando de comprender qué me hace y qué me hizo tanto daño, cómo lo hizo, cómo llegó hasta mí. Con ayuda, pero estoy intentando reconstruir mi vida, que no es fácil. Menos mal que tengo la familia que tengo. 

¿Qué es ahora, para ti, un cuerpo bonito?
Un cuerpo sano siempre será un cuerpo bonito. Un cuerpo que te permita viajar, tener una familia, caminar, hacer deporte… 

Has pasado por varios ingresos psiquiátricos. 
Sí. Y cada uno es diferente, depende del grupo, del ambiente, del equipo. Siempre me quedo con la frase “nadie es culpable de padecer una enfermedad, pero sí es responsable de su recuperación”. Es decir, de tratarse y seguir las pautas médicas. A veces no me he dejado ayudar. 

¿Te has sentido sola?
Tengo la suerte de contar con un entorno que me apoya, me siento comprendida. Estoy infinitamente agradecida. Al mismo tiempo me siento responsable de todo el dolor que la enfermedad me ha hecho hacerles pasar. Todo lo que colateralmente la enfermedad trae: malas contestaciones, aislamiento, el dolor de ver cómo una hija se consume poco a poco. Me he sentido sola acompañada de mucha gente. Sentirse sola es como estar vacía. 

¿Y ahora?
Estoy organizando mi vida. Me estoy sacando el carné, hago voluntariado, he terminado las prácticas en la guardería, escribo la línea del tiempo de mi vida para poder ver dónde empezaron a torcerse las cosas. Aún no sé cuál es mi vocación, pero quiero cuidar a los demás. Muchas cosas me apasionan, soy como una esponja. Me encanta escuchar. 

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

El Salto Radio
El Salto Radio Flamenco Inclusivo: el vuelo de la diversidad
Historia y presente del proyecto de flamenco inclusivo impulsado por el bailaor José Galán en la voz de sus propias protagonistas.
Opinión
El abuso de la ilusión y el fraude de la confusión
Otra edición de la Muestra Ibérica de las Artes Escénicas (MAE), organizada por la Asociación de Gestores Culturales de Extremadura y el Centro de Artes Escénicas y de Música de la Junta, que sigue sin convencer.
Baile
Tradición: torreiro de conflito

Un novo movemento de bailadoras e de escolas está a defender o baile tradicional galego como algo vivo: desmontando estereotipos machistas ou estendendo foliadas onde mandan a espontaneidade e se abandonan os vellos xeitos folclorizantes. Cuestionan desde o feminismo o “isto sempre se fixo así” dos sectores máis “puristas”.

Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Galicia
Galicia La Xunta de Feijóo, condenada por negar visitas a una mujer que murió de cáncer por tener covid-19
La jueza dice que la situación exigía “flexibilizar” las medidas de prevención. Falleció a inicios de 2022 en el Hospital Álvaro Cunqueiro durante los últimos meses de la administración del jefe del PP con Julio García Comesaña de conselleiro.
Egipto
Egipto Ashraf Omar continúa en prisión provisional por dibujar
Ashraf Omar, caricaturista político del medio digital AlManassa, sigue en prisión preventiva indefinida tras ser arrestado violentamente en su domicilio el 22 de julio de 2024.

Últimas

Justicia
Justicia Rubiales, condenado por agresión sexual y absuelto del delito de coacciones
18 meses de multa con cuota de 20 euros al día por un delito de agresión sexual. Es la condena al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por los hechos ocurrido en la ceremonia de entrega e medallas del pasado mundial celebrado en agosto en Sidney.
Tribuna
Tribuna Verde de ecosocial, verde de educación pública
En nuestras aulas se ha colado una prisa ansiosa, que juzga al alumnado como un gasto, que lo dirige, poco a poco, a un mundo laboral tecnoptimista y completamente atomizador.
Más noticias
El Salto Radio
El Salto Radio Humedales necesarios
Damos un paseo radiofónico por algunos de los humedales de Andalucía, espacios fronterizos entre el mar y la tierra, tan necesarios para nuestra supervivencia. Lo hacemos con Juan Martín Bermúdez, de SALARTE y algunos oyentes.
Fascismo
Memoria antifascista Allí donde hay humo, hay fuego
A unos días de las elecciones alemanas, donde la ultraderecha acude fortalecida, un repaso sobre el proceso de desnazificación posterior a la Segunda Guerra Mundial y sus medias verdades.

Recomendadas

Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.
América Latina
Extrema derecha Los soldados de Donald Trump en América Latina
Mientras algunos presidentes latinoamericanos, con mayor o menor ímpetu, intentan ponerle freno, otros tantos se arrodillan y le rinden pleitesía sin recibir nada a cambio. ¿Quiénes son los súbditos latinoamericanos de Trump?