Corrupción
Clientelismo e “insalubridad” en un udaleku de Getxo: así robaron quince días de verano a 50 niños

Pinpoil Ocio S. L., que gestionaba la colonia clausurada, está dirigida por la cuñada del presidente de Getxo Kirolak, Álvaro González Pérez, también concejal del municipio. La empresa ha recibido más de 400.000 euros procedentes de subvenciones y contratos, sobre todo de la Diputación Foral de Bizkaia.
PINPOIL OCIO
María Moreno López, administradora de Pinpoil Ocio S. L. y cuñada del presidente de Getxo Kirolak, en una entrevista de EiTB

Baños sucios, muy sucios, amarillentos, embarrados. Neveras atestadas de comida, ollas, precocinados y chorretones de grasa. Colchones cochambrosos. Agujeros en la pared del vestuario. Restos de tubos y hasta un carrito de la compra encajado en un recoveco de la instalación. Esa es la imagen previa al desalojo de una cincuentena de menores, niños y niñas de entre 6 y 16 años, del campamento de verano que Pinpoil Ocio S.L. organizaba en Getxo (Bizkaia).

La administradora de esta empresa, María Moreno López, cuñada del presidente de Getxo Kirolak, Álvaro González Pérez (PNV), también concejal del municipio, ha echado balones fuera apuntando a que las instalaciones pertenecen al Club Deportivo Galea. Sin embargo, la inspección realizada por los técnicos de la Diputación de Bizkaia constató que se trataba de un caso de “insalubridad”. Pero ello solo es la punta de un largo iceberg. Como ha podido saber Hordago-El Salto, esta empresa, primero como asociación y luego como sociedad limitada, ha recibido más de 400.000 euros por parte de las instituciones públicas.

El campamento que nunca fue

Se presume que Getxo Kirolak —que depende del Ayuntamiento— debe velar por la salud de los niños que acuden a ‘udalekus’, así como de las buenas prácticas administrativas que se dan en este entorno. No obstante, como los sucesos tuvieron lugar en un club privado, ni Getxo Kirolak ni el Consistorio han tomado cartas en el asunto.

Huelga decir que, actualmente, además de presidir Getxo Kirolak desde hace 15 años, González Pérez es concejal titular del Área de Contratación, Patrimonio y Vivienda. También, como ha podido constatar Hordago-El Salto, el encargado de firmar –de manera posiblemente irregular, en sus propias palabras, de forma “errónea”– los primeros contratos para la puesta en marcha de otros campamentos de Pinpoil Ocio, empresa de su cuñada donde, hasta 2015, su mujer era administradora solidaria. “Álvaro González Pérez recibió la confianza del alcalde en 2016 cuando presentamos la denuncia. Incluso después de haberse demostrado que su manera de hacer no es la más correcta ni ética, que ha cometido errores que ponía en duda su capacidad de gestión, ahora es la alcaldesa quien lo apoya en su cargo”, expone Paula Amieva, entonces portavoz de GUK (y ahora concejala por Elkarrekin Podemos).

Ahora bien, fueron las madres y padres de los niños, que pagaron alrededor de 450 euros por cada menor, quienes denunciaron lo ocurrido en diferido, pues los propios jóvenes enviaban las fotos del lugar a sus progenitores. Una gran parte de los niños y niñas venían de Madrid, pero también hay denuncias por parte de familias alavesas y vizcaínas. Y el problema no solo era la suciedad. Las madres y padres relatan a los medios de comunicación algunos episodios de mala gestión como el siguiente: tres de los seis kayaks con los que contaba el campamento se hundieron y una de las niñas que tuvo el accidente sufrió, además, un ataque de ansiedad por ello. 

“Llevaremos preguntas a Juntas Generales para saber cuál va a ser el papel de la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno Foral. Si van a involucrarse, si van a inspeccionar otros espacios similares, si van a multar a la empresa…”, señala Amieva como concejal de la oposición en el Ayuntamiento de Getxo. La pelota está –y estará– en el tejado de la Diputación, quienes clausuraron el campamento gestionado por Pinpoil Ocio en las instalaciones del Club Deportivo Galea.

¿Crónica de una estafa anunciada?

En 2016 la agrupación política GUK denunciaba lo que sería “el gran escándalo en el vizcaíno municipio de Getxo gobernado los últimos 40 años por el PNV”, tal y como se apuntaba en ‘Euzkadi SA, el gen corrupto del PNV’. Las colonias de verano habían sido prorrogadas por la Mesa de Contratación de Getxo Kirolak durante, al menos, siete años consecutivos para ser gestionadas por el entorno familiar del presidente del organismo. Esto es, durante al menos siete años, Álvaro González Pérez permitió que sus cuñadas, a su vez socias de su mujer —juntas habían gestionado Pinpoil Ocio S. L.— recibieran decenas de miles de euros en dinero público. Se calculaba que Getxo Kirolak como sociedad había entregado en contratos, entre 2010 y 2016, hasta 600.000 euros para las familiares del entonces también titular de la concejalía de Deportes. “El concejal había incluso procedido a firmar personalmente el contrato de una de ellas”, documentaba el libro.

La primera cuñada del concejal facturó al Ayuntamiento de Getxo desde 2010 hasta 2013 la cifra de 234.272,50 euros. La segunda cuñada, entre 2014 y 2015, la cifra de 214.500 euros. En total, casi medio millón de euros de los presupuestos municipales para dos familiares

Ese último verano de 2016 colmó el vaso. GUK impugnaba la prórroga, que la sentencia recoge que iba a parar a Fátima Moreno López, hermana de la ahora administradora de Pinpoil S. L. y cuñada del presidente de Getxo Kirolak. La familia Moreno López iba a recibir 71.500 euros para la gestión de los campamentos, dinero que provenía de una sociedad pública liderada por el propio cuñado de Fátima López Moreno (y marido de su hermana). La magistrada que llevó el caso de la denuncia por parte de Paula Amieva (GUK) estimó parcialmente la demanda, estipulado como “no conforme” la prórroga por valor de varias decenas de miles de euros.

Así fue y así lo constató el propio González Pérez. “Que mis dos cuñadas hayan obtenido dos contratos no supone fraude de ley”, explicaba ante las acusaciones de la oposición. Pero la situación es aún más rocambolesca: el propio Gónzalez Pérez reconoció que en 2010 firmó “de manera errónea” el primer contrato cuando debería haberlo firmado la presidencia suplente, porque él, según su posición, siempre se abstuvo de participar en la Mesa de Contratación. La versión de la plataforma GUK, debidamente referenciada, es la contraria: el presidente de Getxo Kirolak participó en la Mesa de Contratación de 2010 favoreciendo la adjudicación de un contrato a Pinpoil Ocio. Entre 2010 y 2013, explicaba GUK, “el concejal firmó hasta en 5 ocasiones en favor de su familiar”. 

GUK denunciaba que el concejal era consciente de que en Pinpoil Ocio S. L. estaba su mujer y que, aunque sus dos cuñadas se presentaran con un NIF diferente, cada una de las resoluciones se refiere inequívocamente a la empresa Pinpoil Ocio S. L. La primera cuñada del concejal facturó al Ayuntamiento de Getxo desde 2010 hasta 2013 la cifra de 234.272,50 euros. La segunda cuñada, entre 2014 y 2015, la cifra de 214.500 euros. En total, casi medio millón de euros de los presupuestos municipales para dos familiares.

El todavía presidente de Getxo Kirolak y concejal del municipio apostilló que eran autónomas y no una sociedad. Entonces estaban constituidas como asociación, pero actualmente Pinpoil Ocio es una Sociedad Limitada administrada por la misma cuñada del concejal, María Moreno López. De hecho, como se recoge en las actas oficiales de una sesión del Consejo Rector de Getxo Kirolak, se llegó a confirmar que las transferencias de dinero se hicieron personalmente a María y Fátima –ambas cuñadas del presidente de esta sociedad–.  “A Pinpoil Ocio no podemos daros porque no hay ninguna transferencia y ninguna orden de pago. Son a Mª Esperanza Moreno López y a Fátima Moreno López, por aclarar porque luego queda en el acta. Entonces a Pinpoil Ocio no se le ha transferido nada”, se recoge en la transcripción de la sesión del 27 de septiembre de 2016 como respuesta a la pregunta de la portavoz de GUK hacia el propio Álvaro González Pérez. “Yo quiero que quede bien claro. No hay ninguna adjudicación a nombre de Pinpoil. Ninguna”, insiste el presidente de la sociedad pública.

Su mujer, Ana Moreno López, antes junto a su hermana en Pinpoil Ocio, ha conformado su propio negocio, AnaAnimazioa. Según reza en su web: “AnaAnimazioa lleva 20 años dedicada a organizar actividades de ocio y tiempo libre para la población infantil y juvenil, antes, como miembro de la asociación Pinpoil”. Tiene su sede en Sopela, municipio colindante con Getxo, donde reside la familia. En Sopela, además, Ignacio Moreno López, hermano de María y Ana, es concejal por el PNV. 

Pinpoil Ocio se habría hecho con más de 438.179 euros públicos entre subvenciones y contratos. Algunos de ellos, directamente firmados por el cuñado, concejal en el Ayuntamiento de Getxo

Desde 2002 a 2021, Hordago-El Salto ha podido constatar que Pinpoil (primero como asociación y más tarde como Sociedad Limitada) se ha consolidado en el negocio del ocio en Bizkaia —Getxo, Sopela, Barrika, Mundaka, Turtzioz— Cantabria —Laredo, Suances— y Burgos —Cornejo, Frías, Medina de Pomar— gracias a las subvenciones y contratos públicos con los que se ha hecho, en opinión de la oposición política de Guk, antes, y Elkarrekin Podemos, ahora, en Getxo, gracias al “clientelismo” y la contratación de familiares desde los órganos públicos. Además, según denuncian, se ha contado con la pasividad del resto de la oposición.

Sin contabilizar la nueva empresa de una de las hermanas Moreno López —AnaAnimazioa—, solo Pinpoil Ocio se habría hecho con más de 438.179 euros públicos entre subvenciones y contratos. Algunos de ellos, directamente firmados por su cuñado. Entre 2002 y 2009 se han contabilizado 83.663 euros. Desde 2010 a la actualidad, Hordago-El Salto ha podido sumar hasta 355.516 euros. 

Subvenciones y contratos: 2002-2009

Cuando Pinpoil era aún una asociación, empezó a recibir contratos públicos por parte de las instituciones más cercanas. Este medio ha podido contabilizar un total de 82.663 euros que proceden mayormente de la Diputación Foral de Bizkaia y Getxo Kirolak entre los años 2002 y 2009. No se contabiliza una ayuda obtenida en 1995 por parte de María Moreno López por valor de 112.500 pesetas (unos 676 euros) que Hordago-El Salto también ha podido comprobar.

En 2005 el Ayuntamiento de Getxo entregaba 5.911 euros de subvención a Pinpoil Ocio para desarrollar un programa de actividades de ocio y tiempo libre en Cornejo (Burgos). Del mismo modo, ese año el Ayuntamiento de Sopela otorgó 600 euros a Pinpoil S. L. para la “realización de actividades culturales que se desarrollen durante el año 2005 en el municipio”. Otros 7.557 euros de subvención fueron a parar a la asociación, como aparece en el Boletín Oficial de Bizkaia. 

La Diputación Foral de Bizkaia, a través de su departamento de Cultura, concedió a Pinpoil Ocio una nueva subvención en 2009 por valor de 15.347 euros para la “organización y desarrollo de colonias de verano en Cornejo y Medina de Pomar (Burgos), y Turtzioz, Sopelana y Barrika (Bizkaia). 

Sin duda, la joya de la corona fue un negociado sin publicidad del mismo 2009 —así figura en la adjudicación— por valor de 53.248 euros para la empresa de María Moreno López (aún junto a la cónyuge del concejal) para desarrollar su programa “jugueteando y divertiverano” durante los meses de julio y agosto del mismo año que provenía de Getxo Kirolak, sociedad presidida por su marido. 

También ha recibido multas. Entre 2001 y 2006, más de 2.800 euros en sanciones. Por ejemplo, una 140.000 pesetas en 2001 por “pegado de carteles” que hacía referencia a “limpieza urbana” y provenía del propio Ayuntamiento de Getxo y que se repetía un año después, por 300 euros, por el mismo motivo.

De 2010 a la actualidad

Entre 2010 y la actualidad, Pinpoil Ocio S. L. ha seguido haciendo caja con dinero público. En concreto, en estos 12 años Hordago-El Salto ha podido confirmar hasta 355.516 euros por parte de sociedades públicas.

El Departamento de Cultura entregó, con un goteo anual de contratos, hasta 203.539 euros a Pinpoil Ocio entre 2010 y 2021 para la organización de colonias de verano en Cantabria, Burgos y Bizkaia. Las cifras de esos contratos oscilan entre los 10.000 y 33.000 euros. 

Por su parte, Getxo Kirolak, en un megacontrato “veraniego” de 354.057 euros para diferentes empresas durante dos años (2010 y 2011), otorgó en el lote “Jugueteando / Divertiverano” un total de 92.161 euros con IVA a Pinpoil Ocio S. L. En ese mismo contrato, el lote “Fútbol” también lo ganaba la empresa de las cuñadas y la mujer del presidente de la sociedad: 14.636 euros. En total, 114.636 euros.

El Instituto Foral de Asistencia Social de Bizkaia adjudicó hasta 23 contratos a Pinpoil Ocio por valor de 37.341 euros entre 2016 y 2021, es decir, pudo haber enviado a niños y niñas menores a campamentos tachados por los propios técnicos forales de “insalubres”

El Instituto Foral de Asistencia Social (IFAS) de Bizkaia adjudicó hasta 23 contratos a Pinpoil Ocio por valor de 37.341 euros entre 2016 y 2021. Todos ellos son “inscripciones en campamentos de verano”. Es decir, el Instituto Foral de Asistencia Social de Bizkaia pudo haber enviado a niños y niñas menores a campamentos gestionados por Pinpoil Ocio , cuya última organización de colonias fue tachada por los propios técnicos forales de “insalubre”. El año con más contrataciones por parte del IFAS a Pinpoil Ocio fue 2019, con hasta doce adjudicaciones diferentes por valor de 20.546 euros en total.

Por tanto, en resumen, Hordago-El Salto ha podido documentar más de 400.000 euros entre subvenciones y contratos para Pinpoil Ocio entre 2002 y 2021. Por su parte, GUK había denunciado la prórroga de un contrato de Getxo Kirolak hacia la familia por valor de 71.500 euros en 2016. También, no obstante, que alrededor de 230.000 euros habían ido a parar a una cuñada del concejal entre 2010 y 2013, y otros casi 215.000 a una segunda cuñada del mismo entre 2014 y 2015.

22.000 euros por 10 días en campamento sucio

Getxo Bilingüe. Esa era la actividad propuesta para julio. Del 11 al 21. 450 euros por menor. Así figura en el calendario de Pinpoil Ocio S. L. Según se relata, se apuntaron más de 50 niños para participar en estas colonias fallidas, lo que supone un ingreso por 10 días de más de 22.000 euros brutos. Más beneficio aún para la empresa si se tiene en cuenta otra denuncia realizada por los padres y madres consultadas por esta revista: en los campamentos que fueron cerrados en Getxo había 8 monitores pero solo tres de ellos cobraban como tal, el resto eran “becarios” o estaban “en prácticas”. 

María Moreno López defiende que las condiciones laborales eran justas. En una entrevista durante el primer verano pandémico, la administradora de Pinpoil afirmaba que así es “desde el 92 que se creó una asociación juvenil de tiempo libre”. Y añadía: “Después de años reivindicando la profesionalidad de todos los monitores que no solo trabajaban en verano, que buscaban vivir de esto, empezamos a trabajar en colegios, en parques de Navidad, en fiestas…”.

Pinpoil Ocio pudo abrir su colonia para niños y hacer negocio con ella mientras el Gobierno de Iñigo Urkullu cerraba indefinidamente los campamentos públicos ofertados durante el verano de 2020, impidiendo que, tras las limitaciones que supuso el coronavirus, los pequeños de las familias humildes rehicieran su vida y disfrutaran del verano. No todos los padres y madres pueden pagar 450 euros por diez días. Ni siquiera si el lugar está infestado de suciedad y clientelismo. 

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