Andalucismo
El andalucismo de clase como proyecto de país: Notas sobre la tercera ola y el nuevo ciclo político

El 28 de febrero nos recuerda a los andaluces que los derechos los conquistan las mayorías sociales . Y que sin mayorías sociales, podemos perder nuestra idea de país y nuestro derecho a autodeterminarnos.
Andalucismo distorsión
Historiador y sociólogo, profesor de Relaciones Internacioanles en la Europea de Madrid, autor de La hoz y el olivo. Ensayos sobre marxismo andaluz (Bellaterra, 2024)
26 feb 2025 20:02

El 28 de febrero nos recuerda a los andaluces que los derechos los conquistan las mayorías sociales . Y que sin mayorías sociales, podemos perder nuestra idea de país y nuestro derecho a autodeterminarnos. El debate territorial se cierra sobe una reformulación territorial en términos de clase. La condonación de la deuda, la llegada de la Vicepresidenta del Gobierno María Jesús Montero ofreciendo un proyecto de andalucismo de izquierdas para el PSOE andaluz, la presidencia de Juanma Moreno en el Comité Europeo de las Regiones, y la llegada de Antonio Maíllo a la coordinación federal de Izquierda Unida hacen pensar que la política del Estado vuelve a cabalgar sobre los lomos de Andalucía. Ante esta nueva estatal en la política andaluza, se suma la inexistencia de una agenda política específicamente andaluza. La incapacidad del andalucismo político para crear un espacio sociológico y electoral propio contrasta con las políticas soberanistas y plurinacionales que en el resto del Estado están permitiendo la existencia de un Gobierno progresista plurinacional. Pero todo indica que las circunstancias han cambiado. El ciclo progresista se desmorona. El auge de los nuevos fascismos es una realidad anticipada en toda Europa por gobiernos de tipo socialdemócrata. El repliegue de los movimientos sociales democratizadores como el feminismo, el independentismo catalán, las luchas de trabajadores o el nuevo ecologismo son tan evidentes que el 1 de Octubre, la Huelga del 8M o los Fridays for Future parecen ya episodios del pasado. Un nuevo ciclo político se cierne sobre nosotros. Si las autonómicas de 2022 abrieron un gran ciclo electoral que terminó con las europeas, parece que las próximas autonómicas de 2026 van a iniciar otro ciclo político de características bastante diferentes.

El andalucismo es una revolución en dos etapas

Decía Lenin en su obra Las dos tácticas de la socialdemocracia rusa en la revolución democrática que la revolución se hace en dos etapas. Una primera etapa en la que, para luchar contra la aristocracia feudal y los restos de la monarquía imperialista, los sectores del movimiento obrero deben coaligarse con los sectores de la burguesía democrática y las tendencias nacionalistas de la pequeña burguesía (anti-centralistas, anti-imperialistas o anti-coloniales), incluso con el movimiento obrero de la nación dominante, en caso de luchas de liberación nacional. Eso que, según Lenin, sería una revolución democrática popular, serviría para Rusia, pero también para Polonia o Irlanda. También podríamos afirmar que serviría para Catalunya, Galicia o Andalucía. Se trata de las llamadas revoluciones liberales o burguesas que en las naciones del sur de Europa o en las regiones del capitalismo periférico no se desarrollaron con profundidad, dando lugar a estados monárquicos de carácter imperialista como era la Rusia zarista, Gran Bretaña o España. En segundo lugar, decía Lenin, una vez realizada la revolución democrática popular, los sectores más conscientes del movimiento obrero deberían liderar un proceso de transformación radical de carácter socialista, es decir, una revolución socialista. Esto explica por qué los movimientos de liberación nacional, en una primera etapa, siempre han estado compuestos por diferentes sectores como el movimiento obrero, la burguesía democrática, las tendencias reformistas e incluso el movimiento obrero de la nación predominante. Por ejemplo, en el independentismo en Catalunya, el republicanismo irlandés, han sido históricamente movimientos transversales que aglutinaban a diferentes sectores obreros, socialistas, republicanos, reformistas y la burguesía democrática.

Si analizamos la situación actual de la política andaluza a la luz de las transformaciones de los últimos años, debemos determinar tres ideas que marcan el tiempo político en la nueva coyuntura. En primer lugar, el andalucismo ha sido absorbido por todas las fuerzas políticas estatales desde el PP, al PSOE, Podemos o Anticapitalistas. La disputa política no se debate en la confrontación entre andalucismo o españolismo, pues hasta sectores históricamente reticentes al andalucismo como el PP o la extrema izquierda estatal hoy en día abrazan el andalucismo al igual que lo hicieron históricamente socialistas y comunistas. Ya no queda nada fuera del consenso regional/territorial. El andalucismo de Juanma Moreno le durará hasta que haya un cambio de gobierno en Madrid, y luego comenzará el turno del andalucismo del PSOE andaluz.

Desde el año 2015, con la disolución del Partido Andalucista y de la Candidatura Unitaria de Trabajadores, nadie ha vuelto a ocupar el espacio electoral y político del nacionalismo andaluz en la pasada década. La pregunta que nos debemos hacer es por qué en un contexto de gran tensión territorial y de emergencia de formaciones soberanistas como ERC, CUP, Bildu, BNG, Més, Compromís o Más Madrid no hemos logrado en Andalucía articular una fuerza progresista liderada por figuras del soberanismo andaluz, más allá de Adelante, una escisión de Podemos liderada por miembros de una organización estatal. Además del vacío que ha dejado el Partido Andalucista, el soberanismo nítidamente de izquierdas tampoco ha conseguido reestructurarse. Desde que Juan Manuel Sánchez Gordillo, el Secretario General de la CUT, se retirase de la política activa con la consiguiente fractura que se provocó con su sucesión y la escisión de Diego Cañamero que se llevó parte de la CUT como una corriente al interior de Podemos. Tampoco la organización heredera del Partido Andalucista, Andalucía por Sí, ha logrado la cohesión de un partido nacional andaluz y sus objetivos han estado más vinculados a las experiencias municipales que a la formación de un proyecto nacionalista de ámbito andaluz. La ampliación de una parte de la izquierda hacia el espacio andalucista responde de forma natural al espacio compartido que han ocupado hace medio siglo el andalucismo y la izquierda estatal. Alianza Socialista de Andalucía (el origen del PSA) fue parte de la Junta Democrática junto al PCE. El mismo año de 1984, cuando el PSA pasó a ser PA, y el andalucismo pierde la orientación socialista, nace Convocatoria por Andalucía, la plataforma de unidad de la izquierda andaluza lanzada por Julio Anguita que sería el preludio a Izquierda Unida. Así mismo, después de que el PA se disolviera en el año 2015, las siguientes elecciones autonómicas la izquierda estatal concurre a las elecciones con una marca propia andaluza que fue Adelante Andalucía, que volvió a concurrir a las siguientes elecciones autonómicas de nuevo bajo la forma Adelante Andalucía liderada por miembros de la organización estatal Anticapitalistas. Mientras que la primera coalición Adelante Andalucía incluía al conjunto de la izquierda estatal en Andalucía obtuvo 16 diputados, la escisión liderada por la organización estatal Anticapitalistas pasó a obtener sólo dos diputados. Recordemos que el motivo de la escisión fue que Anticapitalistas decidió abandonar Podemos debido a la formación del gobierno de coalición PSOE-Podemos en Madrid. Después de las autonómicas, los siguientes intentos de reconstruir el antiguo espacio electoral del Partido Andalucista han sido complejos. En las elecciones andaluzas de 2022, Adelante obtuvo 4 concejales en toda Andalucía, más los seis que obtuvo en coalición con Izquierda Unida en Cádiz. Pilar González lideró una candidatura de Adelante a las elecciones generales de 2023 que se presentó solo por Cádiz y que obtuvo 9.000 votos, a pesar de que Adelante gobernaba el Ayuntamiento de la capital. A las Europeas de 2024, Anticapitalistas decidió desde Madrid y Bruselas que Adelante no concurriera y el resultado fue la candidatura Ahora Andalucía que articuló diferentes espacios del andalucismo político, liderada por Andalucía por Sí, cuyo candidato fui yo mismo, y que obtuvo 25.000 votos.

Auge y ocaso de la tercera ola andalucista

En el caso andaluz, lo que nos ha demostrado la última década y el pasado ciclo político (desde las autonómicas de 2015 a las europeas de 2024) es que la reconstrucción del movimiento nacionalista andaluz en términos electorales y de espacio político propio no se va a producir por una coalición de organizaciones netamente andalucistas o de obediencia andaluza, ni tampoco se va a producir liderado por una organización estatal de extrema izquierda como Anticapitalistas.

El escenario de oportunidad rupturista y de procesos constituyentes que se abrió en el Estado español con el 15M en 2011 en términos democráticos y con el procés de Catalunya en términos territoriales a partir de 2012 (la ruptura entre Rajoy y Mas) se ha cerrado con la formación de gobierno de las nuevas izquierdas que nacieron del 15M y los pactos plurinacionales que han dado lugar al pacto fiscal y la reconstrucción del modelo territorial. Si entre 2014 y 2024 la ventana de oportunidad permitió el boom de las fuerzas soberanistas y territoriales como la CUP, ERC, BNG, Compromís, Teruel Existe, Més Mallorca o la Chunta de Aragón, en el caso andaluz el estado de maduración de la conciencia nacional no ha permitido la formación de un espacio político propiamente andaluz. Por un lado, las formaciones nacidas de la desintegración del PA han tenido como principal prioridad retener el voto del antiguo PA. Los resultados de Ahora Andalucía en las europeas fueron la primera contienda electoral donde se detenía la hemorragia electoral desde 2015. Por otro lado, la escisión de Anticapitalistas solo consiguió resultados en las autonómicas de 2022 bajando de 16 diputados a 2. Salvo estos dos fenómenos, se puede decir que la mejor expresión de una candidatura andalucista de izquierdas o de izquierda con orientación andalucista sería la confluencia del año 2018, donde la confluencia entre Podemos, Izquierda Unida, Primavera Andaluza e Izquierda Andaluza obtuvo 17 diputados, el mejor resultado para la izquierda en Andalucía, solo por detrás de los 20 diputados de 1994 en plena época de Julio Anguita. El cierre del ciclo territorial, la resolución del conflicto vasco, el descenso electoral de las fuerzas soberanistas de izquierdas, la dificultad del BNG para llegar al Gobierno gallego, la crisis interior en Compromís por la guerra judicial a Mónica Oltra, hacen que parezca evidente el cierre, por ahora, del debate territorial. Por otro lado, en términos de conflicto social, es más que evidente que desde la conformación del gobierno progresista el malestar producido por la incapacidad de las fuerzas reformistas para lograr soluciones y conquistas de nuevos derechos, ha producido un nuevo auge de la derecha y la ultraderecha en las calles. La batalla cultural reaccionaria en los medios de comunicación del establishment, la guerra judicial de los jueces conservadores, así como el aumento del conflicto social en términos reaccionarios (discursos contra la migración, contra el derecho a la vivienda, contra el feminismo) hacen pensar que la alternativa al gobierno de progreso va a estar caracterizada por la composición de un nuevo ejecutivo derechista, con miembros de extrema derecha que podrá mutar en formas de estatismo autoritario en los próximos años. La captación del andalucismo por los partidos estatales como el PP de Juanma Moreno, el PSOE de María Jesús Montero o por la extrema izquierda española, hace complejo que en este cierre de ciclo pueda emerger una fuerza netamente andalucista que irrumpa en el actual tablero político y que reconstruya el espacio electoral del antiguo Partido Andalucista.

Hacia una confluencia de izquierdas con orientación andalucista

Una lectura sosegada del presente ciclo político que se acaba nos hace pensar que desde la disolución en 2015 del PA y de la CUT la mayor expresión de un andalucismo de izquierdas ha sido la formación de la primera confluencia de izquierdas de 2018 que inauguró el ciclo de confluencias de Adelante Andalucía. Un proceso de confluencias que supo articular el acumulado social, sindical, feminista, ecologista y de los movimientos en defensa de la sanidad y de la educación en un espacio plural con vocación de espacio político específicamente andaluz y con vocación de pedagogía andalucista. Entre 2018 y 2025 son muchos los factores que han transformado las circunstancias. El cierre de la crisis política en Catalunya, los tres gobiernos de Pedro Sánchez, el fracaso electoral del segundo Adelante liderado por una organización estatal o la incapacidad de articular una organización heredera del Partido Andalucista con proyección nacional y con proyecto de reconstruir el nacionalismo andaluz, la formación de una identidad conservadora andalucista en una parte de la derecha española liderada por el PP, la renuncia de Teresa Rodríguez a liderar el ciclo político andalucista, o la pérdida del gobierno local de Cádiz como epicentro de la llamada nueva política en Andalucía. La sociedad andaluza y el conjunto del Estado se encamina a la formación de un gobierno de derechas con ministros de ultraderecha. Un gobierno reaccionario que aglutine al conjunto de las derechas como PP, Vox y quizás Coalición Canaria o Junts, puede ser un gobierno que transite hacia formas autoritarias según la tendencia que estamos viendo en la política europea de pérdida de derechos en términos de reducción en la financiación de servicios públicos, aumento del gasto militar y del belicismo, recortes en las libertades y derechos de protesta. Además, el desgaste del ciclo político progresista ha dado lugar a un auténtico escenario de conflicto entre el conjunto de izquierdas usando todos los campos de batalla posibles como herramientas de destrucción de espacios políticos aliados, incluyendo la guerra mediática contra Podemos, o el uso de las recientes denuncias contra abuso sexual de dirigentes como armas arrojadizas entre las izquierdas. La reconstrucción de un espacio político andalucista ha de venir determinado por la reconstrucción de un amplio proyecto que incluya, en términos de Lenin, todos los componentes necesarios para una revolución democrática y popular en Andalucía. Necesitamos una confluencia de izquierdas que se articule con sectores más conscientes del movimiento obrero combativo, con la pequeña burguesía nacionalista andaluza, con el regionalismo andaluz reformista y democrático para articular desde ahí una nueva mayoría social con vocación de país. El nacionalismo andaluz tiene una función orientadora, tiene la misión de orientar al conjunto de las fuerzas sociales y políticas en la construcción de un proyecto autocentrado para Andalucía. Por otro lado, las izquierdas de carácter estatal, tienen la fuerza y la estructura para construir un espacio de mayorías sociales que articule a las capas populares andaluzas hacia un proceso de defensa del territorio, de la democracia y de la redistribución de la riqueza. Eso fue exactamente nuestro 4 de Diciembre de 1977, un esfuerzo popular masivo, empujado por las izquierdas y los movimientos sociales democratizadores pero guiado por las tendencias más maduras del andalucismo político para la conquista de nuestro carácter nacional como reconocimiento político. Necesitamos que el andalucismo de izquierdas vuelva a ser nuestro proyecto de país.

Sobre este blog
Espacio de enunciación colectiva, encrucijada de ideas y reflexiones en torno a la descolonización de Andalucía, de sus prácticas y de su teoría social crítica. Cooridinado por Javier García Fernández @JavierGarcaFde1
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Opinión La vigencia del Tierra y Libertad
El encaje de Andalucía en la nueva globalidad se ve actualizado en cuanto oferente de mano de obra barata y espacios para el turismo o la producción energética, el viejo lema de Blas Infante, Tierra y Libertad, parece estar más vigente que nunca.
El Salto Radio
El Salto Radio Fallece Juana Orta, la memoria de la mujer trabajadora
El pasado 8 de Marzo fallecía Juana Orta y las señales de hoy escriben en el aire su nombre. Una mujer cuya vida ha estado indisolublemente ligada a la historia de los movimientos sociales, sindicales y políticos de Andalucía.
Andalucismo
Día de Andalucía ¿Por qué Andalucía sigue celebrando el 28F?
Las andaluzas y andaluces celebramos el día de Andalucía entre los actos institucionales y las reivindicaciones políticas, reflexionamos sobre la vigencia y la influencia política de este día.
Sobre este blog
Espacio de enunciación colectiva, encrucijada de ideas y reflexiones en torno a la descolonización de Andalucía, de sus prácticas y de su teoría social crítica. Cooridinado por Javier García Fernández @JavierGarcaFde1
Ver todas las entradas
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.
Turquía
Pinar Selek “Turquía sigue gobernada en base al miedo”
La profesora y socióloga turca, quien ha sufrido además de cárcel, un acoso judicial por 27 años, habla de la falta de independencia del poder judicial, del adoctrinamiento social y de la formación de la sociedad turca.
Gasto militar
Gasto militar ¿De dónde sacará Sánchez el dinero para financiar el incremento del gasto en defensa?
La promesa de aumentar las partidas presupuestarias militares necesita redirigir 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% del PIB. Cumplirlo este año abre a su vez un grave problema para hacerlo en 2026.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.

Últimas

Salud
El precio justo La nueva ley del medicamento o estrategias para bajar el precio de los genéricos (que son caros)
En España pagamos de media un 10% más por los medicamentos genéricos que consumimos que en el resto de la UE. Al mismo tiempo, nuestro gasto farmacéutico ha aumentado un 33% en la última década.
Galicia
Galicia Más de 200 colectivos exigen transparencia sobre la mina Doade y piden la intervención del Parlamento Europeo
Organizaciones de toda Europa, lideradas por SOS Suído-Seixo, exigen a Bruselas acceso a la documentación sobre la explotación prevista, denunciando opacidad, privilegios empresariales y riesgo ambiental en zonas protegidas de Galicia.
Laboral
Laboral Tres nuevos días de huelga para parar el ERE en Bridgestone
Los sindicatos de forma unánime convocan paros los días 24, 25 y 26 de abril y no descartan ampliar las acciones de lucha para evitar el despido de 546 trabajadores.
There Is Alternative
There Is Alternative De redes, software, cacharritos y todo lo que no sea Elon Musk | TINA #1
Primer programa del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de la tecnología y sus alternativas éticas y responsables.
El Salto Radio
El Salto Radio A dos velas
El documental “A dos velas”, de Agustín Toranzo indaga en las causas de los cortes de suministro eléctrico sistemáticos e indiscriminados que varios barrios obreros de Sevilla vienen denunciando desde hace años.
Más noticias
Opinión
Opinión Priorizar bombas sobre camas de hospital
El presupuesto público parece tener siempre un límite cuando se trata de contratar personal o mejorar infraestructuras en Sanidad. Pero no lo tiene cuando se trata de gasto militar.
Opinión
Guggenheim Urdaibai Respuesta al Agirre Center: no participaremos en este juego con cartas marcadas
VV.AA.
El “proceso de escucha” se invalida a sí mismo al existir un plan ya elaborado y no publicado “de expansión discontinua del Guggenheim de Bilbao en Urdaibai”.
Comunidad de Madrid
Huelga de universidades públicas Con un gigantesco mural profesorado y alumnado exigen más inversión en las universidades públicas de Madrid
Después del encierro del pasado 7 de abril, una espectacular acción de la comunidad universitaria ha llamado la atención sobre el recorte de recursos que prevé el gobierno de Díaz Ayuso en su nueva ley de universidades.

Recomendadas

El Salvador
El Salvador El caso Ábrego García destapa el turbio pacto de Trump con Bukele
El joven salvadoreño no ha sido condenado ni en Estados Unidos ni en su país de origen, pero es uno de los cientos de personas con la vida pendiente de un hilo por las políticas de Trump y Bukele.
Siria
Siria Fragmentos de un retorno
Regresar no siempre es fácil. En estas misivas, los sirios Naoura A., residente en Francia, y Basem Al Bacha, residente en Alemania intercambian opiniones con motivo de la vuelta de Naoura a la ciudad donde se conocieron: Damasco.
Historia
Historia Miguel Martínez: “En Villalar, la izquierda arrancó los comuneros al franquismo”
Miguel Martínez, profesor de historia y literatura españolas en la Universidad de Chicago, analiza desde una óptica progresista la Edad Moderna, el momento histórico fetiche de las derechas españolistas.