Memoria histórica
Sobre el antimilitarismo de Emilia Pardo Bazán

Emilia Pardo Bazán, una de las autorías más importantes del entresiglos español, tuvo unos fuertes sentimientos pacifistas que no dejó de traslucir a lo largo de toda su obra, aspecto apenas conocido, y reivindicado en este artículo, como homenaje a esta mujer en el año en que se celebra el Centenario de su fallecimiento.
Detalle de la estatua de Emilia Pardo Bazán
Detalle del conjunto escultórico dedicado a Emilia Pardo Bazán en la calle Princesa en Madrid (Rafael Vela del Castillo, 1926). Desarma Madrid
Mujeres de Negro contra la guerra-Madrid
21 may 2021 08:00

Este año se cumple el Centenario de la muerte de Emilia Pardo Bazán (1851-1921), y es una oportunidad para celebrar la vida de esta escritora y reivindicar su legado. Su vida es tan rica de matices que se presta a enfoques contradictorios, como señalan muy bien las excelentes biografías y monografías que se han hecho de esta escritora, desde la pionera de Carmen Bravo Villasante (Vida y obra de Emilia Pardo Bazán, 1973) a la más reciente de Isabel Burdiel (Emilia Pardo Bazán, 2019; y específicamente en un artículo previo: “La última encrucijada: Emilia Pardo Bazán ante la Gran Guerra”, 2015). En este artículo, no se trata de atribuir etiquetas a una mujer que públicamente hizo gala de no dejarse etiquetar en ninguna adscripción colectiva, política o de otra índole. Solo pretendo recordar ideas y palabras de esta autora compatibles con un antimilitarismo muy actual.

Hay una frase suya “La violencia me subyuga”, que se repite muchas veces sacada de contexto. Según Isabel Burdiel, la autora la escribió en 1909, en el Diario de la Marina, a propósito de acontecimientos tan diversos como las acciones de las sufragistas inglesas de su tiempo y, también, de la contemplación de marinos alemanes en el puerto de La Coruña.

Cuando hace unos años el grupo de Mujeres de negro de Madrid hicimos el libro de Mujeres que se opusieron a la Primera Guerra Mundial no la incluimos en él. No teníamos clara su postura, pero habíamos leído algunas frases suyas sobre el despilfarro que suponía mantener los ejércitos y el gasto en armamento, y las citamos en algunos de nuestros comunicados. Su negativa a firmar el manifiesto de rechazo a la Gran Guerra que le propusieron las mujeres noruegas del Comité Internacional en favor de la Paz con motivo de la conferencia de La Haya, recordado por Bravo Villasante, no quería decir que no rechazara la guerra misma, sino que rechazaba dar su firma. Incluso podía justificarse ese rechazo conque no quisiera prestarse al juego político del momento, la división nacional entre aliados y germanófilos:

“Os abruman, os pinchan, os demuestran, en cinco minutos, que tenéis el estricto deber de ser algo, y de serlo con rabia. ¡Con exclusivismo, con alma, con vida! (…) A mí me ha placido (sería ordinario escribir que me ha dado la gana) permanecer neutral en esta nunca vista y descomunal contienda…”.

Su negativa a firmar el manifiesto de rechazo a la Gran Guerra podía justificarse en no prestarse al juego político del momento, la división nacional entre aliados y germanófilos

A estas razones se añadían otras de mayor peso, como la carencia de derechos políticos de las mujeres, que no se cansó de denunciar en sus escritos.

Retrato de Emilia Pardo Bazán
Retrato de Emilia Pardo Bazán

“Me he propuesto huir como del fuego de la política. Me lo prescribe la más elemental prudencia. Me lo impone, además, el hecho tan notorio de que la mujer carezca de derechos políticos. Dada esta situación de la mujer, lo que haga en política tendrá que ser siempre un vuelo de gallina, un intento frustrado. El hombre (y hablo absolutamente en general, sin referirme en especial a nadie) no vacila en servirse de la mujer para fines políticos, y la embarca como ahora suele decirse, en protestas, en manifestaciones, en algunos actos colectivos que generalmente tienden a determinados fines, íntimamente relacionados con la política. Los partidos graves, conservadores, tienen sus damas blancas; los radicales, sus damas rojas. Lo que no tiene partido alguno, que yo sepa, en su programa, es un artículo por el cual se pida y se conceda, llegado el momento, los derechos políticos a la mujer”.

Porque cuando se niega a firmar el manifiesto del Comité Internacional en favor de la paz, declara las razones que tiene para actuar de esta manera, no es que esté en contra de estos ideales, al contrario, los elogia, lo que pasa es demasiado realista para confiar en que puedan realizarse:

“…quién duda que es un bello sueño el que sueñan estas simpáticas mujeres? Hablan en nombre del amor, de la piedad, de la confraternidad universal; y esta cuerda resuena en todos los corazones… Dudaré constantemente de la armonía entre pueblos y naciones (…) No habría cosa más pueril, (y la mujer debe evitar ante todo parecerse al niño) que creer en sentimentales aproximaciones de razas, naciones y pueblos a quienes impulsa un estímulo de engrandecimiento y de expansión comercial (…) Por eso me falta la fe. Mi adhesión al Comité, cuyas intenciones encuentro dignas, respetables, cristianas, tiene que ir acompañada de mil restricciones”.

Isabel Burdiel, de cuya biografía he tomado tan larga cita, señala la importancia política que tiene la postura de la escritora gallega de mantener un feminismo independiente que la lleva a ciertas contradictorias a lo largo de su vida, pero que no olvida nunca la defensa de los derechos de la mujer ni la libertad en el arte.

Jardines de las feministas
En 2019 el Ayuntamiento de Madrid decidió nombrar los jardines que circundan el conjunto escultórico dedicado a Pardo Bazán como «Jardines de las Feministas». Desarma Madrid

Otra cita, recogida en este caso por Bravo Villasante, de un artículo publicado en La ilustración española, abunda en el mismo sentido:

“Enviáronme las señoras noruegas, con ocasión de la Conferencia de La Haya, un mensaje para que aquí organicemos centros y conferencias en el mismo sentido pacífico y se divulgue esta idea eminentemente cristiana. Yo confieso que no tuve fe bastante en los resultados posibles dentro de mi patria: lo colectivo aquí se me figura punto menos que una pica en Flandes o que pasar el camello por el ojo de la aguja”.

En 1917 pronunciará una conferencia, que podríamos tildar de pacifista con el título de La piedad

Se desmarcó muy pronto del carlismo de sus primeros años, con su defensa de la violencia, al que califica como una fantasía juvenil teñida de épica y romanticismo, para pasar a una etapa de madurez, en la que uno de sus escritos glosa la biografía de San Francisco. Este libro le da pie a múltiples conferencias y artículos sobre el santo de Asís y su mensaje pacifista, que continuarán hasta fechas cercanas al final de su vida. En 1917, cuatro años antes de su muerte, pronunciará otra conferencia, que podríamos tildar de pacifista, con motivo de la conmemoración del cincuentenario del Convenio de Ginebra y creación de la Cruz Roja Española con el título de La piedad. Por estas mismas fechas, dio una conferencia titulada Porvenir de la literatura después de la guerra, en la Residencia de Estudiantes, publicada también por esta institución. Como católica, cita al Papa en este texto, recuerda su llamada a la paz y añade:

“No es lo material de los hechos históricos, sino lo íntimo de los sentires lo que determina, a la larga, las direcciones fundamentales de la humanidad. Y estos sentires secretos, convertidos ya en instinto inconsciente, han clamado “paz” también, han preparado a las almas para el día, sin duda muy lejano, pero anunciado ya por el trémulo claror de la Estrella, en que las guerras sean fenómeno aislado y singular, y sin trascendencia en las líneas generales de la historia”.

En el mismo artículo, Pardo Bazán dice, con toda claridad, que la guerra es una anormalidad, una fatalidad histórica a la que empujan los nacionalismos. Puede ser una frase nada más que no se corresponda con el sentido que algunas querríamos darle. La trayectoria vital de la escritora no se presta a calificarla de antinacionalista. Son numerosas las veces que escribe en defensa de la nación española, sin embargo, sus palabras están aquí, en estas citas, que interpretadas como se quiera, culpabilizan a los nacionalismos de las guerras y proponen una paz entre las naciones en aras de un ideal más humano de respeto a los hombres y a la naturaleza:

“¿Por qué esta convicción, por qué esta persuasión de la rapidez del horrendo fenómeno? Porque el género humano, aunque nunca haya ido a la lucha y a la muerte con mayor desprecio de la vida y del peligro, está embebido de la persuasión de que la lucha del hombre con el hombre no puede ser sino una anormalidad”.

Representación de "Emilia" en el Teatro del Barrio (Madrid)
Representación de Emilia, obra de teatro producida por el Teatro del Barrio (Madrid) en que la actriz Pilar López recrea pasajes de la vida de Pardo Bazán, con texto de Noelia Adánez y Anna R. Costa y dirección de esta última (2018). Fotografía amablemente cedida por el Teatro del Barrio

Más argumentos en favor del pacifismo de doña Emilia es su admiración por Tolstoi, no solo en cuanto escritor, representante de esa literatura rusa que ella misma da a conocer en España, con sus conferencias en el Ateneo de Madrid, sino también como imitador de San Francisco en su defensa de la pobreza evangélica y de la paz.

‘El Ejército nos cuesta un ojo de la cara, y en un trance crítico, de ningún apuro nos sacaría’ (Emilia Pardo Bazán)

En La España Moderna, la revista creada y dirigida por su amigo Lázaro Galdiano, publicará unos artículos, que denomina cartas, sobre la guerra que está teniendo lugar en Europa, en que da su opinión sobre los ejércitos: “El Ejército nos cuesta un ojo de la cara, y en un trance crítico, de ningún apuro nos sacaría”. Más tarde recopilará estos artículos en dos libros, uno de ellos titulado A los pies de la torre Eiffel, al que pertenece la carta XI y la XIV, titulada Pro Patria, donde están las frases más críticas contra el ejército, y que despiertan la susceptibilidad de un militar, Antonio Benzo, que le contesta, de manera anónima, con un folleto bastante insultante. Como ocurre la mayoría de las veces cuando se critica a una mujer, se usa la descalificación de rasgos físicos y aspectos de su vida familiar, la llama gorda varias veces, pedante, vanidosa, sabelotodo, le dice que aprenda del hecho de que cuando más la aplaudieron fue cuando llevó a su hija a la tabacalera en La Coruña, cuando estaba escribiendo su novela La Tribuna, porque las mujeres no le hacen caso sino cuando cumple con su cometido de madre. En fin, eso, un panfleto insultante, al que en un juego de palabras con el título del libro de doña Emilia, titula Al pie de la torre de los Lujanes, en el que, además, amenazaba con denunciarla por querellas.

También en la obra de ficción de doña Emilia se puede rastrear temas pacifistas (pueden leerse aquí); por ejemplo, en los cuentos que publica periódicamente en revistas españolas y americanas, luego recopilados en forma de libro. En el titulado Santiago, publicado en agosto de 1899, en El Imparcial, el Apóstol dialoga con san Isidro, al que describe como “pobrecillo jornalero laborioso, que en su vida montó más que jumentos cargados de trigo, porque los llevaba a la molienda”. De una manera simbólica, la autora asocia los males de la patria al culto a Santiago, que viene con su caballo de guerra, y presenta la alternativa del santo labrador, que le pide el caballo porque le hace falta para uncirlo al arado y que ayude a destripar terrones.

En el cuento La paz, los niños juegan a la guerra y lo que hace posible que sean enemigos es el trapo que ponen de bandera. Por su parte, en El mandil de cuero un humilde sastre pone paz en un reino en discordia y trae la prosperidad poniendo por bandera su mandil de trabajo:

“Juntó Doac un ejército de más de cien mil hombres, y volvió dispuesto a disolver las hordas que un artesano capitaneaba y que tenían por bandera sucio y denegrido mandil de cuero. Pero avínole mal, porque el bordado guión de Doac, de seda y oro, recamado de perlas, ostentando por emblema los siete planetas y la luna, hubo de retroceder ante el pedazo de suela que solo lucía los estigmas del trabajo y las huellas del humano sudor”.

Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Pacifismo
Paz e internacionalismo La pancarta
Es la hora del movimiento internacionalista y de su movilización por la paz, en defensa de la democracia y la justicia global.
Opinión
Pacifismo ¿Cómo sería un kit de supervivencia de no violencia alternativo al de la UE?
La paz no es el objetivo, es el método de trabajo en los conflictos internacionales, la paz es la esencia de la ética como lo explica el paradigma de cooperación-no violencia.
Opinión socias
Opinión socias No hay guerra justa (ni rearme que lo aguante)
¿Es el rearme la solución definitiva a las tensiones y conflictos bélicos actuales? ¿Desde un sentido crítico, debemos aceptar que incrementar el gasto en defensa va a hacer más seguro el mundo?
#90716
21/5/2021 21:17

Una de las grandes entre las/os grandes: doña Emilia.
Y, además, esto.
Muchas gracias.

0
0
#90646
21/5/2021 12:18

Muchas gracias por el artículo. Sinceramente no conocía esta faceta de Emilia Pardo Bazán.

23
0
Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.
Turquía
Pinar Selek “Turquía sigue gobernada en base al miedo”
La profesora y socióloga turca, quien ha sufrido además de cárcel, un acoso judicial por 27 años, habla de la falta de independencia del poder judicial, del adoctrinamiento social y de la formación de la sociedad turca.
Gasto militar
Gasto militar ¿De dónde sacará Sánchez el dinero para financiar el incremento del gasto en defensa?
La promesa de aumentar las partidas presupuestarias militares necesita redirigir 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% del PIB. Cumplirlo este año abre a su vez un grave problema para hacerlo en 2026.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.

Últimas

Salud
El precio justo La nueva ley del medicamento o estrategias para bajar el precio de los genéricos (que son caros)
En España pagamos de media un 10% más por los medicamentos genéricos que consumimos que en el resto de la UE. Al mismo tiempo, nuestro gasto farmacéutico ha aumentado un 33% en la última década.
Galicia
Galicia Más de 200 colectivos exigen transparencia sobre la mina Doade y piden la intervención del Parlamento Europeo
Organizaciones de toda Europa, lideradas por SOS Suído-Seixo, exigen a Bruselas acceso a la documentación sobre la explotación prevista, denunciando opacidad, privilegios empresariales y riesgo ambiental en zonas protegidas de Galicia.
Laboral
Laboral Tres nuevos días de huelga para parar el ERE en Bridgestone
Los sindicatos de forma unánime convocan paros los días 24, 25 y 26 de abril y no descartan ampliar las acciones de lucha para evitar el despido de 546 trabajadores.
There Is Alternative
There Is Alternative De redes, software, cacharritos y todo lo que no sea Elon Musk | TINA #1
Primer programa del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de la tecnología y sus alternativas éticas y responsables.
El Salto Radio
El Salto Radio A dos velas
El documental “A dos velas”, de Agustín Toranzo indaga en las causas de los cortes de suministro eléctrico sistemáticos e indiscriminados que varios barrios obreros de Sevilla vienen denunciando desde hace años.
Más noticias
Opinión
Opinión Priorizar bombas sobre camas de hospital
El presupuesto público parece tener siempre un límite cuando se trata de contratar personal o mejorar infraestructuras en Sanidad. Pero no lo tiene cuando se trata de gasto militar.
Opinión
Guggenheim Urdaibai Respuesta al Agirre Center: no participaremos en este juego con cartas marcadas
VV.AA.
El “proceso de escucha” se invalida a sí mismo al existir un plan ya elaborado y no publicado “de expansión discontinua del Guggenheim de Bilbao en Urdaibai”.
Comunidad de Madrid
Huelga de universidades públicas Con un gigantesco mural profesorado y alumnado exigen más inversión en las universidades públicas de Madrid
Después del encierro del pasado 7 de abril, una espectacular acción de la comunidad universitaria ha llamado la atención sobre el recorte de recursos que prevé el gobierno de Díaz Ayuso en su nueva ley de universidades.

Recomendadas

El Salvador
El Salvador El caso Ábrego García destapa el turbio pacto de Trump con Bukele
El joven salvadoreño no ha sido condenado ni en Estados Unidos ni en su país de origen, pero es uno de los cientos de personas con la vida pendiente de un hilo por las políticas de Trump y Bukele.
Siria
Siria Fragmentos de un retorno
Regresar no siempre es fácil. En estas misivas, los sirios Naoura A., residente en Francia, y Basem Al Bacha, residente en Alemania intercambian opiniones con motivo de la vuelta de Naoura a la ciudad donde se conocieron: Damasco.
Historia
Historia Miguel Martínez: “En Villalar, la izquierda arrancó los comuneros al franquismo”
Miguel Martínez, profesor de historia y literatura españolas en la Universidad de Chicago, analiza desde una óptica progresista la Edad Moderna, el momento histórico fetiche de las derechas españolistas.