Perú
Perú: el racismo mata

La comunidad internacional y los grandes medios de comunicación llevan más de dos meses mirando hacia otro lado ante la masacre producida tras la detención del presidente Castillo, evidenciando que el mismo racismo que mata en Perú llega a este lado del océano.

Mugarik Gabe

3 feb 2023 05:00

Alguien pudo pensar en algún momento que el racismo en América Latina había desaparecido. Muchos estudios hablaban del mestizaje; las grandes corrientes del pensamiento político y social hacían desaparecer a los pueblos indígenas y estos solo eran mostrados en afiches turísticos, como mano de obra barata o perdidos y exóticos en las selvas.

Sin embargo, las últimas décadas pusieron sobre la mesa no solo la no desaparición de estos pueblos sino su fuerza a la hora de plantear su existencia y sus derechos. Durante unos años, la política latinoamericana se verá atravesada por demandas continuas y por nuevos protagonismos que alcanzan un papel relevante en la discusión y aprobación de nuevas constituciones, en los procesos de construcción de estados plurinacionales o de nuevos modelos económicos. Los pueblos indígenas dejan de ser solo un motivo de estudio como antiguas grandes civilizaciones y ahora están presentes y reivindican su espacio en la vida política, social y económica de las diferentes repúblicas latinoamericanas.

Esto ha encendido las alarmas del neocolonialismo y del racismo incrustado, de manera especial, en las élites políticas y económicas. En aquellas pequeñas pero poderosas oligarquías que siempre ejercieron su poder como si el continente fuera su finca, ya fuera esta cafetalera o platanera. Lo hemos visto en el Brasil de Jair Bolsonaro, hoy demandado por genocidio contra el pueblo yanomami; lo vimos en el gobierno golpista de Jeanine Añez en Bolivia, cuando la represión causó decenas de muertes, principalmente entre quechuas y aymaras. Lo vemos desde hace décadas en Guatemala, donde los sucesivos gobiernos criollos arrinconan a la población maya y expolian sus territorios en el convencimiento de que son ignorantes y, por tanto, nunca podrán llevar las riendas del Estado.

Y en estas últimas semanas asistimos, en grado máximo, a nuevas muestras de racismo con el gobierno de Dina Boluarte en Perú. El país andino-amazónico voto mayoritariamente por un profesor, Pedro Castillo, que representaba ese Perú siempre apartado que ahora reaccionaba contra las élites limeñas. Habían sido 40 años de modelo neoliberal que no habían hecho sino empobrecer a esas grandes mayorías que conforman el país, permaneciendo estas en la eterna y colonial situación de mano de obra barata y anulada.

Desde las concepciones profundamente racistas es desde donde se explica la reacción de las élites tradicionales desde el minuto uno del gobierno de Castillo. Habían perdido el gobierno y se abría una oportunidad de cambio profundo

Por eso, desde las concepciones profundamente racistas es desde donde se explica la reacción de las élites tradicionales desde el minuto uno del gobierno de Castillo. Habían perdido el gobierno y se abría una oportunidad de cambio profundo en el país que alterara el statu quo reinante los últimos doscientos años. Y esto hizo aflorar un racismo que nunca había desaparecido pero que ahora se convertía en elemento determinante en la vida política del país. De ahí el desprecio de esta clase hacia el presidente elegido, de ahí el insulto continuo y de ahí el sabotaje persistente para acabar con un periodo que consideraban debía de ser un pequeño paréntesis en su historia de dominación. Gentes brutas, atrasadas, no podían definir el presente y el futuro inmediato, pensaban y expresaban.

Su asalto definitivo ha sido apartar al presidente constitucional, al profesor serrano, y volver a ocupar el gobierno. Imaginaron que sería fácil, que habría algunas protestas, pero que en unos días las mismas se agotarían por sí solas o por la represión. Sin embargo, volvieron a errar el cálculo político.

La protesta social surge desde los departamentos centrales y del sur, precisamente, aquellos en los que quechuas y aymaras son práctica mayoría y quienes más duramente han sufrido la invisibilización. Así, será en estos territorios donde estalla la rebelión social al sentir que, una vez más, las élites de Lima, con la complicidad de las internacionales, retomaban el país, reconquistaban la que consideraban como su finca. Una vez más, y van…, se volvía a imponer la voz del patrón y los pueblos andinos, ahora junto a los amazónicos y a las clases empobrecidas de las barriadas periféricas limeñas, volverían a desaparecer de la historia oficial de Perú. Pero esta vez el proceso ha cambiado y los protagonistas ya no son las clases pudientes, sino los silenciados, los invisibilizados, que desde el sur elevan la protesta, y la extienden hasta el centro neurálgico de la república, hasta la capital. Lima se suma por que el racismo y el empobrecimiento también se siente en los barrios periféricos, poblados en gran medida también por mujeres y hombres quechuas y aymaras migrantes.

Pero esa reacción de las élites no se entiende solo por una cuestión racista ligada exclusivamente a una consideración de inferioridad del otro, del diferente. Como la historia de la humanidad muestra, el racismo tiene también un claro componente económico y clasista. Así, en el caso de Perú hay mucho en juego y, también como tantas otras veces, para las élites no se trataba de tener un gobierno legítimo, de la democracia o del Estado de derecho; se trataba de la libertad, pero de la de esa oligarquía y la de las empresas transnacionales. Perú es un país con grandes recursos naturales, sobre todo mineros y de los más cotizados como es el litio y el uranio, además de petróleo, oro o cobre, entre otros. Desde la era de Alberto Fujimori, década de los 90 del siglo pasado, los contratos de concesión de explotación se firman por 30 o 40 años y son intocables e inalterables durante ese tiempo, y un número muy importante de ellos (alrededor de 900 según algunas fuentes) caducan en este año 2023 y en el próximo. Por eso la renovación de estos contratos es esencial para las élites políticas y económicas peruanas e internacionales. Está en juego una infinidad de recursos naturales que se deben de traducir en ingentes negocios y beneficios.

El conflicto en Perú evidencia que el racismo en América Latina sigue no solo presente sino que resurge en los últimos años de la mano de unas élites acostumbradas a entender el continente como suyo

Por último, esta situación permite también entender mejor el desprecio de la llamada “comunidad internacional”, es decir, las empresas transnacionales y los gobiernos europeos y estadounidenses que las protegen. El silencio ha sido atronador ante el gobierno de Dina Boluarte y, sobre todo, ante su brutal represión que ya alcanza varias decenas de personas asesinadas y centenares de heridas y detenidas; la mayoría quechuas y aymaras. Y esto es racismo también, en este caso por parte de esa comunidad internacional a la que las vidas indígenas, las vidas empobrecidas, no importan.

En suma, el conflicto en Perú evidencia que el racismo en América Latina sigue no solo presente sino que resurge en los últimos años de la mano de unas élites acostumbradas a entender el continente como suyo y que no soportan la posibilidad de que otra América Latina, más justa y verdaderamente democrática, al servicio de las grandes mayorías, se abra paso. Pero esto último es lo que está ya ocurriendo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Literatura
Gabriela Wiener “Me pregunto si es posible hacer libros que cambien el discurrir del mundo”
La escritora peruana afincada en Madrid ha publicado recientemente ‘Atusparia’, una novela que recorre el pasado, el presente y un posible futuro de su país, un territorio de represión pero también de luchas por el territorio y por el porvenir.
Perú
Perú El Caso Perseo pone a prueba los últimos rescoldos de la democracia en Perú
El 14 de octubre quedará visto para sentencia un expediente que juzga al Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales, al que Fiscalía acusa de “terrorismo” en una práctica, la del llamado “terruqueo”, que criminaliza a los movimientos.
Asanuma
7/2/2023 6:43

https://www.amnesty.org/es/latest/news/2021/06/peru-esterilizaciones-forzadas-crimenes-lesa-humanidad/

0
0
Asanuma
7/2/2023 6:41

No hay que olvidar las esterilizacions forzosas a más de 300.000 indígenas de Perú bajo el gobierno de Fujimori, apoyadas por los grupos evangélicos y católicos que luego son feroces antiabortistas.

0
0
Hodei Alcantara
Hodei Alcantara
3/2/2023 7:26

El racismo no es más que una herramienta usada por las elites económicas para mantener su poder y dividir al pueblo. Durante la historia, ha pasado en infinidad de ocasiones. En el caso peruano, el incivilizado y barbarizar a los pueblos indigenas sirve para deslegitimar sus peticiones politico-sociales.
Cómo siempre nos encontramos ante un país secuestrado por sus elites locales e internacionales capitalistas.
Al pueblo peruano no le queda mad remedio que hacer uso de la legítima protesta y soberanía popular!

1
0
Sirianta
Sirianta
3/2/2023 17:43

Como suele ser habitual en usted, un comentario acertadísimo.

0
0
Estados Unidos
Estados Unidos Trump inaugura una utopía de los multimillonarios con su segundo mandato
En su primer mandato, los más ricos mostraron cierta distancia con el presidente Donald Trump. Ahora, la oligarquía estadounidense ha abrazado su pensamiento ‘antiwoke’ y aguarda los beneficios fiscales prometidos para seguir ampliando la desigualdad
Estados Unidos
El regreso de Trump Lo que Trump promete hacer el primer día de su vuelta al poder
El reelegido presidente de Estados Unidos plantea aprobar una batería de entre 50 y 100 decretos en las primeras horas en la Casa Blanca: deportaciones masivas, recorte en derechos civiles, ambientales y en los servicios públicos.
Desigualdad
Desigualdad La riqueza de los milmillonarios crece en 2024 tres veces más rápido
La desigualdad sigue trepando posiciones con una concentración de riqueza sin precedentes en la historia humana, según el reciente informe de Oxfam ‘El saqueo continúa’.
Ocupación israelí
Primera fase de la tregua Varios incidentes ponen a prueba el alto el fuego en Gaza
Cuando no se han cumplido 48 horas de tregua, la agencia Wafa denuncia dos ataques israelíes en Rafah, mientras un soldado habría muerto en Nablús. Al menos 830 camiones han entrado en la Franja con ayuda humanitaria.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Alto el fuego en Gaza: buscando en la paz lo que no lograron en la guerra
Israel tiene una capacidad especial para ganar en los acuerdos, y sobre todo en el modo de aplicarlos, lo que no ha obtenido en sus campañas militares.

Últimas

Granada
Granada AMA Desokupa intenta desalojar un nuevo centro social en Granada sin orden judicial
Los activistas denuncian que la guardia de seguridad privada les está impidiendo el acceso de comida al edificio, durante el intento de desalojo varias personas han sido identificadas sin justificación por la policía.
Sevilla
Educación Pública La Junta de Andalucía cierra 163 aulas en los colegios públicos de Sevilla
En la comunidad autónoma se cerraron en 2024 un total de 706 aulas, según USTEA. Colectivos en defensa de la educación pública además denuncian la baja calidad de los comedores y la falta de inversión en educación especial.
València
València Refugios de la Guerra Civil afloran en Paiporta tras la dana
Las inundaciones revelan refugios antiaéreos para protegerse de los bombardeos fascistas. Fueron construidos por los propios habitantes bajo sus propias casas hace 90 años.
Más noticias
Redes sociales
Redes Sociales 20 de enero de 2025: el día en el que miles de tuiteros quieren dejar colgado a Elon Musk
Organizaciones ecologistas y universitarias, ayuntamientos como el de París y miles de usuarios de la red social que un día fue Twitter están convocados a dejar X coincidiendo con el día de investidura de Donald Trump.
Sumar
Sumar Yolanda Díaz, entre el ‘pacta sunt servanda’ y el juego de Junts
Sumar ha tenido su premio tras pasar del tono bajo al ‘ruido’ que antes rechazaba y consigue torcer el brazo del PSOE en la tramitación de la reducción de la jornada.
Opinión
Infancia Infancia vulnerada por la violencia institucional
La imposición de custodias compartidas sin un análisis exhaustivo y específico de cada caso puede dejar a los menores desprotegidos bajo el pretexto de priorizar los derechos de los progenitores.

Recomendadas

Música
Música y política Apoyar a Palestina “es complicado” en la música antifascista de Alemania
La cancelación de conciertos en la escena antifascista de grupos que han mostrado su rechazo al genocidio evidencia la división del país respecto a Palestina.
Argentina
Argentina Golpe a la memoria en Argentina: los retrocesos en políticas de derechos humanos en la era Milei
La política de derechos humanos en Argentina enfrenta retrocesos alarmantes bajo la gestión de Javier Milei. Despidos masivos, cierre de espacios de memoria y desfinanciamiento amenazan el legado de memoria, verdad y justicia.
Túnez
Túnez Gabes, 50 años de muerte lenta
Entre vertidos químicos, suelos estériles y redes vacías, las comunidades locales del sureste de Túnez resisten y lideran una lucha ambiental y social que atraviesa fronteras.
Rap
Poetas Puestos “Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz”
Charly Efe y Teko, acompañados de una banda, publican el disco ‘Tontos felices’ donde mezlcan su carrera en el rap con ritmos rock para crear lo que han bautizado como rap‘n’roll.