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Minería
Movilización ciudadana contra la mina de litio de Cañaveral (Cáceres)
Tras la creación de una plataforma ciudadana para organizar la oposición a la mina a cielo abierto proyectada en el paraje de Las Navas, después de un extenso proceso de información a los vecinos y vecinas de la comarca y habiendo logrado recoger más de 22.000 firmas en contra del macroproyecto extractivista, llega el momento de las movilizaciones. Así, este sábado 3 de julio, la Plataforma No a la Mina de Cañaveral ha convocado una marcha que, partiendo a las 20 horas desde Grimaldo, tiene previsto alcanzar Cañaveral a las 22:30.
Entre las poblaciones de Grimaldo y Holguera, en concreto, parece dirimirse albergar la escombrera de la mina de litio, en tanto que sería Cañaveral el término municipal donde ubicar la explotación minera, confirmando que el nivel de afección medioambiental alcanza niveles comarcales (incluyendo también a los términos municipales de Pedroso de Acím, Holguera o Torrejoncillo).
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Minería a cielo abierto en Extremadura Poderosos intereses tras el litio de Cañaveral, en Cáceres
Mientras la ciudadanía parece tomar conciencia de las consecuencias que un proyecto extractivista de las características del planificado por Lithium Iberia comporta, la alcaldía cañaveraliega persiste en su respaldo al mismo, las instituciones autonómicas sostienen un apoyo más allá de tácito a la explotación y la campaña mediática de difusión de los hipotéticos beneficios de la mina sigue su curso.
En concreto, desde la máxima institución extremeña, su presidente Guillermo Fernández Vara, se afirma mantener incluso un “contacto permanente” con los promotores de la prevista explotación en Las Navas. De hecho, no deja de establecerse, en ese sentido, una constante vinculación del litio que se extraería en Cañaveral con la tantas veces publicitada fábrica de baterías, cuyo destino parece ser que sería Badajoz pero de la que nada concreto se puede concluir todavía; ni parcelas precisas de ubicación, ni plazos de ejecución, ni licencias, ni nada remarcable más allá de lo publicitario y declarativo.
No hay que ignorar, tampoco, que este tipo de proyectos tienen un fundamental componente de negocio especulativo en el mercado de valores, al que no hay que dejar de prestar atención y que está sujeto a movimientos imprevisibles cuyo origen y desarrollo se explican desde fuera de las instituciones representativas, ubicándose en la lógica de los mercados y en operaciones bursátiles, terreno donde la generación de marcos positivos de opinión ciudadana e institucional se traducen en subidas y bajadas del precio de las acciones y, por tanto, en beneficios inmediatos.
En este orden de cosas, como ya se señaló en su día y conviene recordar, Íñigo Resusta Covarrubias, actual presidente de Lithium Iberia es, a la vez, cofundador y presidente de Auriga Global Investors, una sociedad de gestión de valores que mueve carteras de inversión intermediando en la compraventa de acciones.
“La generación de empleo apenas compensaría el perdido por el impacto de las obras y por la misma explotación. A largo plazo (...) tras la finalización del plazo de vida de la misma, no existe ninguna experiencia contrastada de regeneración eficaz del territorio ni de recuperación del tejido productivo previo a la mina”
Sobre las expectativas de creación de puestos de trabajo, la experiencia arroja datos con demasiados claroscuros. Mientras que la empresa habla de 400 empleos, diversos especialistas dan por hecho, a la luz de los resultados de otras explotaciones similares, que la generación de empleo apenas compensaría el perdido por el impacto de las obras y por la misma explotación. A largo plazo, señalan las mismas fuentes, y tras la finalización del plazo de vida de la misma, no se conoce ninguna experiencia contrastada de regeneración eficaz del territorio ni de recuperación del tejido productivo previo a la mina.
En el capítulo de las certezas, en cambio, todo parece mucho más claro: el impacto medioambiental está asegurado y puede resultar definitivo para el desarrollo comarcal en el corto plazo. Turismo, agricultura, ganadería, valores paisajísticos, calidad de vida y ecosistemas se verían seriamente dañados.
SEO/BirdLife ya presentó en su momento una batería de alegaciones al documento inicial del proyecto de mina de litio en Cañaveral, sometido a consultas de los interesados en julio del año pasado, pero, señalan, “sin que hasta el momento se haya informado de posibles modificaciones o soluciones a los graves problemas ambientales que implica. En realidad, solo se conocen las periódicas noticias que promueve la empresa promotora en la prensa extremeña, donde afirman falsamente que su proyecto es ambientalmente viable, lo que está generando una grave preocupación en ciudadanos y asociaciones de protección de la naturaleza que sí conocen los detalles del proyecto”. Marcelino Cardalliaguet, delegado de SEO/BirdLife en Extremadura declaró también que “SEO/BirdLife defiende firmemente esas políticas de lucha contra el cambio climático, pero pide evitar que sirvan de cheque en blanco para que intereses externos pretendan saquear la región en busca del máximo beneficio. Si se quiere sacar el litio para luchar contra el cambio climático, se debe pagar la factura del trabajo digno, la salud y la naturaleza de los extremeños”.
Nueve colectivos y asociaciones ecologistas de Extremadura mostraron también su preocupación por el impacto ambiental de la mina de litio de Las Navas: Adenex, Amus, Anser, Dema, Ecologistas en Acción en Extremadura, Ecologistas Extremadura, El Sabio Mudo, Grus y la Sociedad Extremeña de Zoología.
Los colectivos afirmaron de la Junta de Extremadura que «parece estar poniendo todas las facilidades a la empresa promotora Lithium Iberia para dar viabilidad a un proyecto con impactos ambientales severos», añadiendo que «el anuncio de que la explotación de la mina se realizaría en parte a cielo abierto durante 6 años implica unos efectos aún más perjudiciales sobre el medio ambiente, generando una gran cicatriz en el paisaje de la comarca».
De acuerdo con las declaraciones de Guillermo Fernández Vara, el proyecto de mina de litio en Cañaveral tendría el permiso de investigación «muy avanzado», pudiendo transformarse en solicitud de permiso de explotación «antes de que acabe el año»
La zona de ubicación del proyecto resulta ser un área de alta sensibilidad ambiental, situada entre la Reserva de la Biosfera de Monfragüe, el Parque Nacional de Monfragüe y los espacios de la Red Natura 2000 ubicados en sus aledaños, todos ellos de relevancia continental por la presencia de numerosas especies y hábitats protegidos.
En el comunicado suscrito en su momento por los colectivos ambientalistas de la región se afirmó, concretamente, que «la mina generaría graves impactos sobre la vegetación, arrasando un gran número de encinas y otras especies; sobre el suelo y la atmósfera por el uso de tóxicos para el tratamiento del mineral; impactos directos sobre especies en peligro de extinción debido a la apertura de accesos, molestias y destrucción de hábitats que provocarían una degradación irreversible de todo el entorno natural».
En este momento, y de acuerdo con las declaraciones de Guillermo Fernández Vara, el proyecto de mina de litio en Cañaveral tendría el permiso de investigación «muy avanzado», pudiendo transformarse en solicitud de permiso de explotación «antes de que acabe el año».