Especulación
Moratoria de los pisos turísticos en Madrid: ¿avance o medida cosmética?

El Gobierno de Manuela Carmena prevé congelar la creación de nuevos pisos turísticos en el Distrito Centro hasta tener lista una ley que ponga límites y ordene la turistificación de la capital. 
Turistas plaza Santa Ana
Turistas en la Plaza de Santa Ana, en el centro de Madrid. David F. Sabadell
24 ene 2018 12:13

El Ayuntamiento de Madrid seguirá los pasos de Barcelona para intentar hacer frente a las peores consecuencias de la turistificación. Según ha adelantado la Cadena Ser, el Gobierno municipal de Manuela Carmena aplicará una moratoria de un año, prorrogable a uno más, a nuevas licencias de pisos turísticos en el Distrito Centro. De esta forma, el Ayuntamiento gana tiempo mientras elabora y tramita el Plan Especial de Alojamientos Turísticos de la ciudad. Fue la estrategia del equipo de Ada Colau en Barcelona: congelar la creación de nuevos establecimientos mientras el Ayuntamiento desarrolla un plan que consiga ordenar los intereses hoteleros y la transformación de viviendas en pisos turísticos en sus diferentes formatos. 

La moratoria afectará, según esta emisora, a todas las modalidades de hospedaje “que se implantan como usos compatibles en edificios existentes de uso residencial”. De fondo, la intención de que los pisos turísticos sean regulados como un negocio más, salvando el vacío legal existente.

La escalada de precios se ha dejado sentir en todo Madrid, con un crecimiento medio del 36% de los precios de alquiler entre 2014 y 2017, según el portal idealista.es. El aumento de alquileres ha sido especialmente grave en el Distrito Centro, con un incremento del 39,1%, y en Puente de Vallecas, donde alquilar hoy una vivienda es un 39,9% más caro que hace tres años.

En Madrid, según los datos del Ayuntamiento, hay actualmente 42.462 viviendas turísticas. De ellas, unas 23.400 están en el Distrito Centro.

El precedente de Barcelona

El caso de Barcelona sirve de faro. Sin ir más lejos, este 24 de enero ha sido incluida por la CNN en el top ten de lugares del mundo que convendría evitar, junto con Venecia, las Islas Galápagos o Machu Picchu, por el impacto de los visitantes en sus entornos. En el caso del ecosistema urbano de Barcelona, la CNN destaca que “el aumento de visitantes a la capital catalana en un 25% respecto al 2012 ha generado descontento entre los habitantes locales”. Y también un incremento medio de 100 euros en los alquileres.

El consistorio de Ada Colau consiguió sacar adelante el 27 de enero de 2017 uno de sus principales proyectos, el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos, un marco normativo que regula los criterios urbanísticos y de gestión de los alojamientos turísticos de la ciudad de Barcelona. La norma, que incluye a hoteles, viviendas de uso turístico, apartamentos turísticos, albergues o residencias universitarias, debía aprobarse antes de que venciera la suspensión de licencias en Gràcia para evitar que se dispara una vez más el registro de nuevos pisos turísticas. El plan de Colau prevé zonas en las que se prohíbe nuevos establecimientos y otras de crecimiento limitado.

¿Una medida “cosmética”?

Para Carlos de la Calle, del colectivo Lavapiés ¿Dónde Vas? se trata de un “anuncio insólito” y que presenta contradicciones y múltiples interrogantes que no podrán resolverse hasta conocer el texto completo de la moratoria, una medida que este colectivo junto con otras organizaciones sociales y vecinales llevaban tiempo reclamando. “Anuncian una moratoria en la concesión de unas licencias que hasta ahora no existían y que las viviendas de uso turístico no han necesitado para funcionar. ¿Qué pasa con todas las que funcionan ahora, la inmensa mayoría sin licencia de ningún tipo? ¿Los van a cerrar? ¿Van a hacer las inspecciones que hasta ahora no han hecho?”, se pregunta. 

Para este activista, el principal problema se deriva del desconocimiento del contexto: “La turistización es un fenómeno que va mucho mas allá y hay miles de plazas hoteleras ahora mismo en construcción. La moratoria tiene que ser para todo, parar viviendas de uso turístico y hoteles”.  

Desde Lavapiés ¿Dónde Vas? identifican una voluntad de “no hacer nada diciendo que hace algo: no va a cerrar viviendas de uso turístico y poner a los pies de los caballos al resto de barrios”

De fondo, identifica una voluntad del Ayuntamiento de “no hacer nada diciendo que hace algo: no va a cerrar viviendas de uso turístico en el Centro y lo que va a hacer es cronificar el problema aquí y poner a los pies de los caballos al resto de barrios. Si la moratoria no se amplia mucho, a las zonas amenazadas, vamos a llegar tarde otra vez”. 

La nueva normativa, critican desde Lavapiés ¿Dónde Vas?, “es para viviendas de uso turístico profesionales, y ahí no hay normativa que valga, lo que hay que hacer es prohibirlas, como ya se han dado cuenta en muchas ciudades”.

Para De la Calle, el problema de la turistificación no está vinculado “solo ni especialmente” con el alquiler temporal de viviendas habituales que se destinan a usos turísticos. Es mucho mayor, señala, el porcentaje de viviendas y edificios completos o casi completos que se destinan profesionalmente a la actividad turística, bien como viviendas de uso turístico “camufladas como P2P o economía colaborativa”, bien como apartamentos turísticos, bien como hostels, albergues u hoteles. “Y eso ya está regulado por el Plan General de Ordenación Urbana. Es decir, esa actividad ya precisaba de licencias y se está desarrollando sin ellas”, añade.

Este colectivo, opuesto a la gentrificación y la turistificación del centro de Madrid, pide que el Ayuntamiento no se limite a regular los nuevos usos, sino que “aplique la disciplina urbanística a los usos ilegítimos”. 

Porque la regulación de nuevos usos, denuncian, “no puede servir para generalizar los usos ilegítimos”. Para De la Calle, “el primer paso es la moratoria, pero será una medida cosmética si no va acompañada de la elaboración participativa y democrática de planes concretos para cada barrio y para la ciudad en su conjunto, para contener el posible desplazamiento de los núcleos afectados y el contagio a los precios del alquiler en el conjunto de la ciudad”.

La turistificación, concluye De la Calle, “es un problema general, porque afecta al modelo de ciudad que quiere ser Madrid. Si el Ayuntamiento apuesta por que Madrid sea una ciudad subalterna y dependiente de la economía global de servicios de bajo rendimiento, estaremos en un problema de sostenibilidad a medio y largo plazo”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Sevilla
Derecho a la vivienda El precio de las viviendas de protección oficial en Sevilla se dispara hasta los 350.000 euros
En 2022 las viviendas protegidas con las mismas características costaban 188.000 euros, Andalucía lidera la subida de precios en la vivienda según el último Índice de Precios de Vivienda.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Sánchez omite las principales demandas de las movilizaciones de vivienda en sus anuncios estrella
Las 12 medidas para atajar la crisis de vivienda anunciadas por el presidente Pedro Sánchez no convencen a las organizaciones sociales: más allá de las palabras y anuncios “grandilocuentes” no hay ninguna propuesta que vaya a bajar los precios.
Medio ambiente
TURISMO Así son los operativos del Gobierno Vasco para acelerar la implantación del Guggenheim Urdaibai
Han sido externalizados el Plan Estratégico Comarcal de Busturialdea, el informe de valoración de los terrenos e instalaciones de Astilleros de Murueta para la expansión del museo y las campañas de comunicación para controlar el relato.
#7300
24/1/2018 17:16

Fácil. En Madrid gobierna el partido del valle del silicio, Ahora Madrid. Air b y b es una empresa dedicada a expulsar a las clases mas bajas de los centros de las ciudades. Y traer a un montón de guiris para que puedan disfrutar de los nuevos carriles bici y de scooters eléctricas. ?Sueña Ahora Madrid con Florentinos eléctricos?

10
0
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.
Turquía
Pinar Selek “Turquía sigue gobernada en base al miedo”
La profesora y socióloga turca, quien ha sufrido además de cárcel, un acoso judicial por 27 años, habla de la falta de independencia del poder judicial, del adoctrinamiento social y de la formación de la sociedad turca.
Gasto militar
Gasto militar ¿De dónde sacará Sánchez el dinero para financiar el incremento del gasto en defensa?
La promesa de aumentar las partidas presupuestarias militares necesita redirigir 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% del PIB. Cumplirlo este año abre a su vez un grave problema para hacerlo en 2026.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.

Últimas

Salud
El precio justo La nueva ley del medicamento o estrategias para bajar el precio de los genéricos (que son caros)
En España pagamos de media un 10% más por los medicamentos genéricos que consumimos que en el resto de la UE. Al mismo tiempo, nuestro gasto farmacéutico ha aumentado un 33% en la última década.
Laboral
Laboral Tres nuevos días de huelga para parar el ERE en Bridgestone
Los sindicatos de forma unánime convocan paros los días 24, 25 y 26 de abril y no descartan ampliar las acciones de lucha para evitar el despido de 546 trabajadores.
There Is Alternative
There Is Alternative De redes, software, cacharritos y todo lo que no sea Elon Musk | TINA #1
Primer programa del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de la tecnología y sus alternativas éticas y responsables.
El Salto Radio
El Salto Radio A dos velas
El documental “A dos velas”, de Agustín Toranzo indaga en las causas de los cortes de suministro eléctrico sistemáticos e indiscriminados que varios barrios obreros de Sevilla vienen denunciando desde hace años.
Opinión
Opinión Priorizar bombas sobre camas de hospital
El presupuesto público parece tener siempre un límite cuando se trata de contratar personal o mejorar infraestructuras en Sanidad. Pero no lo tiene cuando se trata de gasto militar.
Más noticias
Opinión
Guggenheim Urdaibai Respuesta al Agirre Center: no participaremos en este juego con cartas marcadas
VV.AA.
El “proceso de escucha” se invalida a sí mismo al existir un plan ya elaborado y no publicado “de expansión discontinua del Guggenheim de Bilbao en Urdaibai”.
Comunidad de Madrid
Huelga de universidades públicas Con un gigantesco mural profesorado y alumnado exigen más inversión en las universidades públicas de Madrid
Después del encierro del pasado 7 de abril, una espectacular acción de la comunidad universitaria ha llamado la atención sobre el recorte de recursos que prevé el gobierno de Díaz Ayuso en su nueva ley de universidades.

Recomendadas

El Salvador
El Salvador El caso Ábrego García destapa el turbio pacto de Trump con Bukele
El joven salvadoreño no ha sido condenado ni en Estados Unidos ni en su país de origen, pero es uno de los cientos de personas con la vida pendiente de un hilo por las políticas de Trump y Bukele.
Siria
Siria Fragmentos de un retorno
Regresar no siempre es fácil. En estas misivas, los sirios Naoura A., residente en Francia, y Basem Al Bacha, residente en Alemania intercambian opiniones con motivo de la vuelta de Naoura a la ciudad donde se conocieron: Damasco.
Historia
Historia Miguel Martínez: “En Villalar, la izquierda arrancó los comuneros al franquismo”
Miguel Martínez, profesor de historia y literatura españolas en la Universidad de Chicago, analiza desde una óptica progresista la Edad Moderna, el momento histórico fetiche de las derechas españolistas.