Encuesta monarquía
La república probable y sus alternativas

La agonía del régimen de la Segunda Restauración hace no sólo posible sino probable, cada vez más probable, la solución republicana.

Raúl Sánchez Cedillo

Participa en la Fundación de los Comunes

12 oct 2020 08:00

Como un reloj averiado, sigo convencido de que la crisis de régimen en España, que se abre en 2011 con el 15M y que entra en fase de gangrena entre el octubre de 2017 y este 2020 que vivimos, es una crisis republicana, es decir, una crisis orgánica que solo tiene una solución relativamente estable en un marco republicano. Una solución que la prolongación de la agonía del régimen de la Segunda Restauración hace no sólo posible sino probable, cada vez más probable. 

La realidad y el deseo

Quiero pensar que entre la realidad y el deseo hay un centro de gravedad real, un proceso objetivo-subjetivo con una historia y una narración llenas de fechas y discontinuidades. Probemos si no a pensar contrafácticamente y supongamos que, durante un cierto periodo, podría haber habido una solución posible de la crisis constitucional mediante una reforma de la constitución monárquica. ¿Dónde situamos ese periodo? No desde luego en los inicios de la transición; ni tampoco tras el 23F y la victoria del PSOE de González, Boyer y Solchaga. Parece claro que la última posibilidad de reforma de la constitución monárquica coincide con los seis años comprendidos entre la victoria electoral de Zapatero en 2004 y la primavera de 2010, periodo este en el que tenemos la autoinmolación de Zapatero en el altar de la austeridad (12 de mayo) y la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut de Cataluña (28 de junio). Sí, cuesta imaginarlo: son precisamente los años en los que se gesta el bloque orgánico de las derechas que hoy hacen imposible toda salida constitucional estable. Cuesta imaginar que, todavía en pleno bipartidismo, una mayoría de dos tercios en ambas Cámaras y un referéndum pudieran haber estabilizado por un periodo largo la cuestión territorial mediante una monarquía parlamentaria confederal, que habría estado cimentada en los ejes de independencia fiscal madrileño, vasco y catalán. Cuesta, pero era posible y, como no se intentó en ningún momento, no tiene sentido pronunciarse sobre las probabilidades de éxito que hubiera tenido.

Si ahora mismo no se puede derogar ni siquiera una reforma laboral, ni una ley mordaza, ¿se va a poder implantar una república?

Cuando se escriban las crónicas serias sobre ese periodo, habrá que reseñar la irresponsabilidad y la ceguera de las elites políticas y mediáticas para atajar en sus albores algo que sólo podía acabar muy mal. 

De la crisis de régimen al fallo multiorgánico

Mi tesis es, pues, que hoy la república (luego entramos en los adjetivos) es más probable de cuanto lo haya sido desde el inicio de la Segunda Restauración. Pero me pregunto (junto a miles de personas): si ahora mismo no se puede derogar ni siquiera una reforma laboral, ni una ley mordaza, ¿se va a poder implantar una república? ¿Qué tiene que suceder en los elementos de la coyuntura y en su configuración para que esto sea concebible? Vamos por partes.

Para entendernos, vamos a considerar primero los factores favorables a la salida republicana, al menos los más determinantes. Insistiendo en que lo que cuenta es su conjunción, su acción concomitante, sus efectos de anulación de las probabilidades marginales de unos y otros. Si la sentencia del Estatut conduce al procés y la respuesta del Estado —porque no podemos olvidar el papel del PSOE en esta historia— conduce al octubre de 2017, la autoinmolación de Zapatero conduce al 15M y, por renglones muy torcidos, a Podemos y sus satélites. La crisis sistémica del capitalismo desde 2008 y el régimen de austeridad en la UE actúan como catalizadores e intensificadores de estos procesos. Pero estos procesos marcan umbrales de irreversibilidad: resquebrajamiento del consenso de las clases medias con el régimen de acumulación y distribución dominado por el IBEX35 y final del bipartidismo turnista. De estas secuencias nacen tres fuerzas que podemos llamar semisistémicas o bifrontes: la constelación de Podemos; la derecha fascista de Vox y sus grupos menores y el bloque independentista catalán. 

Sólo estos factores son suficientes para diagnosticar una crisis orgánica de muy mal pronóstico. El régimen del 78 es un Estado de partidos dentro de un sistema político de pluralismo limitado (Juan José Linz dixit). Esto significa que los partidos se reparten el monopolio de todos los poderes del Estado, no sólo del legislativo o el ejecutivo. Junto a las oligarquías del capitalismo financiero, dominan el pluralismo limitado de los medios de comunicación (la sociedad civil realmente existente) y, last but not least, el poder judicial (como sabemos, el monopolio de las fuerzas del franquismo en la judicatura se adaptó al Estado de partidos con la Ley orgánica del Poder judicial de 1985). Conclusión: en el Estado de partidos español, la crisis orgánica del sistema de representación no puede dejar de producir sus efectos en el conjunto de los poderes del Estado, amplificando y cronificando esa crisis. 

La pandemia del siglo ha puesto de manifiesto el valor real de los derechos fundamentales inscritos en la constitución: bonos basura

¿Y la jefatura del Estado? Quizás sea este el factor más obvio del fallo multiorgánico de la Segunda Restauración. Si la autonomía relativa de la Casa Real se ha revelado, con las vicisitudes de Juan Carlos I, como la autonomía absoluta de las responsabilidades fiscales y penales del IBEX35, la autoridad y la legitimidad incipientes de su sucesor han quedado heridas de muerte con su intervención en el octubre catalán y con su respaldo apenas disimulado al procés de las derechas madrileñas. Pero no menos obvio es el caso de la judicatura, que desde la sentencia del Estatut ha consolidado en su interior la hegemonía de las derechas y ha asumido el programa involucionista de estas. El eventual procesamiento de Pablo Iglesias en el Supremo tendría el carácter, de producirse, de un paso del Rubicón en la voladura de puentes constitucionales. 

Así, pues, fallo multiorgánico, guerras intestinas en el Estado de la Segunda Restauración, ausencia completa de figuras institucionales de mediación. Y, por encima de todo, la pandemia del siglo que ha puesto de manifiesto, por si todavía fuera necesario, el valor real de los derechos fundamentales inscritos en la constitución: bonos basura. 

Objeciones y escepticismo

Pero, se dirá: “nadie puede negar la crisis terminal y la voladura de puentes y pilares del Estado de partidos; ahora bien, que ello vaya a conducir a la república es cualquier cosa menos probable. Es mucho más probable, se dirá, un proceso/golpe involutivo, ya sea mediante el lawfare, la sedición cívico-policial-militar o una combinación de ambas, sin olvidar la más que probable puñalada por la espalda del clan González y Cebrián o del mismo Pedro Sánchez”. No en vano, Isabel Ayuso acaba de decir (es un decir) que el Supremo, el bloque madrileño de las derechas y el monarca son las fuerzas dispuestas a dar un golpe de Estado. Siempre es difícil de valorar el grado de bocachanclismo de la presidenta madrileña, pero no es ni mucho menos la única en expresarse de este modo. 

Entonces, ¿golpe sui generis? No. No se puede descartar, pero es muy improbable. La principal razón: las derechas están desunidas, su conjunción es sólo aparente. Parece más bien que la descomposición de la derecha unida, de la criatura de Fraga y del primer Aznar, produce un agujero negro (fascista) que arrastra inevitablemente sus fragmentos, creando espirales de enorme violencia, pero de insuficiente arrastre gravitatorio para engullir a todo el sistema político y a todas las componentes del bloque orgánico de las derechas políticas y sociales. En pocas palabras: las derechas divididas no pueden ganar elecciones; su lucha es sobre todo fratricida y, por último, no cuentan con el respaldo de los poderes dominantes de la UE. Si el próximo 3 de noviembre Trump perdiera las elecciones estadounidenses, el bloque Ayuso-Abascal lo tendrá mucho más crudo, tengan o no sanción real. Cuanto más barrabasadas cometen, más acercan el momento de la crisis republicana.

En el PSOE puede pasar de todo, casi siempre malo, pero el peso del republicanismo no hará más que reforzarse

Última objeción: el PSOE jamás dará ese paso. Tal vez, pero tras el “primer aviso” de Vox, respaldando las pintadas fascistas en la estatua de Largo Caballero, en coincidencia con sus iniciativas de revisionismo histórico franquista junto a PP y Cs en el ayuntamiento de Madrid, cabe esperar efectos de profundidad en el PSOE en Madrid y en todo el Estado. La guerra de las derechas madrileñas contra el estado de alarma decretado por el gobierno de coalición hará otro tanto. En el PSOE puede pasar de todo, casi siempre malo, pero el peso del republicanismo no hará más que reforzarse, en correspondencia con el peso del republicanismo en la opinión pública, so pena de verse arrastrado al centro de la nada de un constitucionalismo del que han desertado los actores principales. 

República por defecto o virtù constituyente. La caja negra de la experiencia pandémica

Entonces, ¿esto es pan comido? No, en absoluto. Esa es la paradoja: como en el caso de las dos repúblicas anteriores, en la génesis probable de una nueva república pesan más los factores de corrupción (en el sentido global con el que Machiavelli usaba la expresión) que la presencia activa de la virtù constituyente. Pesan más las rigideces y la descomposición de los equilibrios de la constitución material española que la irrupción de un sujeto plural constituyente. Están presentes los elementos invariantes de la historia republicana española: la gran depresión de 1873 y la nueva gran depresión de 1929; está presente y lo está cada vez más, el desorden en el sistema mundo y en el subsistema europeo; está presente el problema de la colonia y de la guerra colonial, como lo estuvo en ambas repúblicas (y sus rotundos fracasos al respecto), y como ahora lo está como problema colonial europeo. 

Termino con una caja negra: la de las transformaciones subjetivas (afectivas, éticas, psíquicas) que la experiencia de la pandemia está produciendo y no puede dejar de producir. Las negativas ya las estamos viendo: a las narraciones fascistas históricas se suma el polo paranoico de las conspiraciones sobre el Covid19 y sobre las medidas de control epidemiológico, mientras que lo que podemos llamar el agambenismo difuso en la izquierda intelectual propaga la gran impotencia ante lo que sería el golpe final del biopoder occidental sobre la vida desnuda, hecho de mentiras sobre el virus y medidas totalitarias de control de las poblaciones. 

Mi apuesta es que de la caja negra saldrá una nueva virtù republicana, hecha de luchas y contrapoderes múltiples y autónomos

Sin embargo, creo que finalmente la virtù prevalecerá, porque, en física como en política, hay lo que se llaman las trayectorias dependientes (path dependence) y los puntos de inflexión (tipping points). El sentido de los valores fundamentales de la sociedad política, el sentido de la vida, de la cooperación, del trabajo y de su reconocimiento y de la justicia distributiva y reparadora, está en juego ahora mismo en los cerebros conectados de la multitud, para lo bueno y para lo malo. Pero la dependencia de la trayectoria me lleva a pensar que, en esta historia que empieza el 15M, en el proceso de nuestros cerebros se impondrá el sentido emancipador, el que ve en la situación pandémica y su gestión capitalista un punto de inflexión, tras el cual este régimen neoliberal de parásitos rentistas y fascistas se hace intolerable por más tiempo, se vuelve contrario a toda expectativa de una vida digna o de la mínima seguridad de la vida. Mi apuesta es que de la caja negra saldrá una nueva virtù republicana, hecha de luchas y contrapoderes múltiples y autónomos, de reapropiación de la cooperación social, de exigencia agresiva de educación, sanidad, trabajo y/o renta universal comunes y universales, de combate de las causas del calentamiento global y del envenenamiento atmosférico, de expropiación de los expropiadores. De constitución de lo común de los seres humanos como institución republicana. Tendremos así no una república débil, por defecto, sino una(s) república(s) biopolítica(s). 

En la partida que se juega en Europa, esta república sólo podrá triunfar si, en vez de cerrarse en el agujero negro del problema español, vuelca su virtù sobre sus hermanos europeos, para poner fin al poder despótico de un capitalismo colonial, cada vez más fascista y ecocida, que piensa que no sólo puede subsistir reduciendo al máximo el valor del trabajo socialmente necesario, sino que apuesta por reducir al mínimo el valor de las vidas de la multitud para asegurar su supervivencia como un zombi planetario. No podemos dejar pasar este kairós republicano, nos va literalmente la vida en ello. 

Acceda a la encuesta
La Encuesta sobre la Monarquía es una iniciativa impulsada por la Plataforma de Medios Independientes (PMI), que agrupa a 16 cabeceras, entre las que se encuentra El Salto. Para poder realizar la mayor encuesta hecha nunca en España sobre la monarquía, la PMI organizó una recaudación de fondos que logró completar en un solo día. La encuesta financiada por 1.965 donantes se encargó a 40dB., el instituto de opinión dirigido por Belén Barreiro, expresidenta del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas). El proyecto surgió tras la solicitud de estos medios al CIS de una encuesta sobre la monarquía, un asunto sobre el que el organismo lleva más de cinco años sin preguntar.

Informe monarquía PMI 2020 by El Salto periódico on Scribd

Archivado en: Encuesta monarquía
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Editorial
Editorial Apatía o República
Análisis editorial de los resultados de la II encuesta sobre la monarquía publicada por la Plataforma de Medios Independientes.
Encuesta monarquía
Juan Carlos I La inoportuna vuelta a casa del miembro de la familia real peor valorado por los españoles
Por segundo año consecutivo, el rey Juan Carlos I aparece como el miembro peor valorado de la Casa Real. Su posible regreso a España, tras el anuncio de archivo de las investigaciones por parte del Supremo, añade un factor de inestabilidad al reinado de Felipe VI.
#74874
22/11/2020 12:37

Los Voxenetas quieren que España sea una republica pero una republica bananera como Honduras,Guatemala y Paraguay donde mandan partidos como Vox y cuyos presidentes son narcotraficantes ,humoristas cutres é hijos de secretarios de dictadores como Jimmy Morales,Horacio Cartés , Marito Abdo Benitez y Juan Orlando Hernandez.

1
0
#74871
22/11/2020 12:27

¿Como seria una tercera republica en España ? ¿ como las de Europa ? ¿ o como las de America Latina ?.

1
0
#74869
22/11/2020 12:19

Si España tuviese una 3ª republica ,esta 3ª republica acabaria siendo como las republicas de Latinoamerica y no como las de Francia y Alemania ,aunque esto que pienso en este pais la gente no se lo cree .

1
0
#74886
22/11/2020 17:07

Yo quiero una republica pero no como las de Latinomerica donde la izquierda es perseguida y los ejercitos no son profesionales.

1
0
#71882
13/10/2020 17:19

Ojalá. Tengo menos fé que el articulista en que exista límite al maniqueísmo del PSOE. No creo que las pintadas de la estatua de Largo Caballero les preocupen a quienes llevan cuarenta años manchando su nombre y el de su partido, y veo tan improbable que el PSOE se vuelva republicano como que sus votantes (republicanos, si, pero antes que republicanos, del PSOE) se vuelvan podemitas, y por desgracia una es condición de la otra.

5
3
#74870
22/11/2020 12:25

Cuando España tenga una nueva republica esta nueva republica será como las de Centroamerica osea republicas bananeras aunque eso los progres adolescentes no lo saben.............

1
0
#71881
13/10/2020 17:10

Es tiempo de República. La Monarquía ha quedado atrapada en la red ideológica de las derechas. Ya ni siquiera los votantes socialistas coinciden con la dirección del PXXE, que necesitará su travesía del desierto. La población joven es manifiestamente republicana. El desprestigio de la Monarquía es evidente. Todo apunta a que España mañana será republicana. Sólo que el “mañana”, por los 2/3 que exige la reforma constitucional, puede ser un poco largo. Mientras tanto, a construir republicanismo y a confiar en las generaciones jóvenes que vendrán con su voto y pensamiento republicanos.

6
2
#71913
13/10/2020 21:34

Si nos tenemos que esperar a los dos tercios vamos de culo... antes de que suene la flauta, nos dan un golpe de estado los de siempre, que para eso no necesitan dos tercios, y tenemos al Generalísimo Abascal para los próximos cuarenta años.

2
0
#74876
22/11/2020 12:39

Santiago Abascal parece un presidente de republica bananera centroamericana como el narcotraficante que es presidente de Honduras o el caricato que era presidente de Guatemala .

1
0
#71867
13/10/2020 15:49

Un ensayo interesante con argumentos de fondo bien entrelazados... y otros para cojer con pinzas (por ej.: El 'asunto' de EE.UU no tiene solución solo con la salida de Trump y ni mucho menos únicamente con la llegada de Biden/Harris)
Me quedo con una joyita del texto:[...] Conclusión: en el Estado de partidos español, la crisis orgánica del sistema de representación no puede dejar de producir sus efectos en el conjunto de los poderes del Estado, amplificando y cronificando esa crisis. [...]
Nota: Efectivamente hay dos claves importantes, 1) el coronavirus es un agente anticapitalista; 2) la resolución del dilema P$0€ que únicamente corresponde al P$0€

3
2
Genocidio
Genocidio La ONU advierte de que un ataque sobre Rafah colapsaría la distribución de ayuda en Gaza
Turquía suspende todo el comercio con Israel. El fiscal del Tribunal Penal Internacional advierte de que no admitirá “amenazas” después de que trascendiera que imputará a Netanyahu y los suyos.
Fútbol
Fútbol Vicente del Bosque como respuesta a las presiones de FIFA y UEFA
El nombramiento del exseleccionador como presidente de la Comisión de Normalización, Representación y Supervisión busca alejar los fantasmas de una intervención política de la RFEF.
Palestina
Palestina Bicicletada contra el genocidio palestino en Alicante
El núcleo local del BDS País Valencià ha realizado un recorrido reivindicativo para exigir el fin del genocidio contra Palestina por las principales calles de las tres capitales valencianas.
Colombia
Colombia Sostener la vida en un ETCR
En la vereda colombiana La Plancha, la convivencia entre excombatientes y población civil es una realidad marcada por necesidades comunes.
Cine
Cine 'Civil War', estética geopolítica en tierra de nadie
La sensación es que Civil War se queda en algunas ocasiones en una peligrosa tierra de nadie, tanto en sus cambios de estilo como en su contenido.

Últimas

Memoria histórica
Memoria histórica Relatores de la ONU piden a España que actúe contra las leyes antimemoria de tres autonomías
Los relatores internacionales denuncian las posibles vulneraciones de derechos de dos normas en proceso y una aprobada por los Gobiernos de coalición de Partido Popular y Vox en tres comunidades autónomas.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Educación pública
Educación a la madrileña Huelga de profesorado en Madrid o cómo organizar la protesta desde abajo
El profesorado madrileño convoca los próximos 8 y 21 de mayo dos jornadas de huelga para que se reviertan los recortes de la época Aguirre en una protesta que tuvo su génesis al margen de la mesa sectorial.
Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: Una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Más noticias
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Análisis
Análisis No dejemos de hablar de Siria
La situación humanitaria en Siria se endurece en un contexto de inestabilidad regional, mientras que la ayuda internacional que el país recibe es muy inferior a la necesaria.
Periodismo
Periodismo Desinforma, que algo queda
En la fecha que se conmemora el Día de la Libertad de Prensa, hay que analizar sus dimensiones, la opacidad en el reparto de la publicidad institucional, la necesidad de la alfabetización mediática y qué medidas concretas pueden llevarse a cabo.
Comunidad El Salto
Palestina La campaña de apoyo a Gaza de El Salto recauda más de diez mil euros para la UNRWA
El pasado 26 de febrero, tras más de cuatro meses de ofensiva militar de castigo por parte Israel sobre la Franja de Gaza, desde El Salto decidimos ir más allá del periodismo ante la gravedad de los hechos.
El Salto Twitch
Antirracismo Frente a su racismo, respuesta comunitaria antirracista
El tema de “Entre el nopal y el olivo” de hoy nace desde la reflexión (no nuestra y no nueva) de cómo responder desde la colectividad a la violencia racista. Cómo imaginamos un horizonte antirracista. Cómo pensar estrategias juntas.

Recomendadas

Rap
Rap Viaje a los orígenes del hip hop en España: “Nadie esperaba ganar dinero con el rap”
El historiador Nicolás Buckley y el periodista Jaime Valero, exredactor jefe de HipHop Life, publican Maestro de ceremonias, un libro sobre la historia de la cultura hip hop en España.
Sidecar
Sidecar Las reglas del juego
Aunque es poco probable que el reciente intercambio de fuego entre Israel e Irán desemboque en una guerra total, este ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de Israel en un momento político decisivo.
Arte contemporáneo
Artivismo Lara Ge: “A través de la práctica creativa nutrimos el espacio comunitario”
Ideadestronyingmuros desarrolla temas sobre feminismo, alternativas de vida al capitalismo y también sobre movimientos migratorios, con una fuerte posición transfronteriza.
En el margen
Francisco Godoy Vega “El ojo del blanco es como el ojo de Dios: es abstracto, es superior y puede verlo todo”
Doctor en Historia del Arte, Francisco Godoy Vega forma parte del colectivo de arte colaborativo Ayllu. Este activista antirracista aborda las consecuencias del supremacismo blanco. En 2023 publicó el libro ‘Usos y costumbres de los blancos’.