¿Qué le pasa a la izquierda extremeña?
Fernando Llorente: "El ecosistema de la izquierda extremeña está muy enrarecido y arrastra un déficit de cultura democrática"

Llegamos a la sexta entrega de nuestro ¿Qué le pasa a la izquierda extremeña?, la sección en la que sentamos en el diván a personas reconocidas de la izquierda política y social de nuestra tierra. 

Fernando Llorente, 52 años, los últimos 22 en la Vera, sociólogo nómada, campesino hasta donde dejan serlo, ecologista abajo a la izquierda.

¿Qué fue, en Extremadura, de la oportunidad de cambio que se vislumbró a partir de 2011? ¿Puede hablarse de una crisis orgánica del Régimen extremeño del 83, o solo de una reconfiguración del sistema regional de partidos?

Casi 8 años después del 15M, tanto a nivel estatal como al regional tenemos que reconocer que la oportunidad de un cambio sustancial del régimen político de la Transición parece haberse cancelado por el momento. Incluso hay signos de involución: el retroceso en derechos y libertades públicas, tentaciones recentralizadoras, desmantelamiento y deterioro del Estado de Bienestar y el ascenso de pulsiones autoritarias y neofascistas. De modo que nos movemos en un escenario o disyuntiva perversa: neoliberalismo o neofascismo.

En Extremadura, por su posición periférica, dependiente y cuasi colonial, la ola de movilizaciones del movimiento de las plazas llegó de forma atenuada pero llegó, aunque no ha logrado romper el dominio territorial, institucional y cultural del bipartidismo. La legislatura en que gobernó Monago con el apoyo de IU solo sirvió para destrozar aún más a IU y en 2015 volvió al gobierno el PSOE caciquil, clientelar y desarrollista de Vara con el apoyo en la investidura y en los presupuestos de Podemos. No parece apropiado hablar de crisis orgánica sino tan solo de recambio de élites, y esto solo en el flanco izquierdo (aunque ahora las derechas han iniciado su evolución polarizada… a peor). Así, mientras el sistema institucional y político ha demostrado estabilidad y sigue en su ensimismamiento, la crisis económica, ecológica y social sigue perjudicando la vida de la actual generación y destrozando el porvenir de las futuras, sin que ni siquiera las izquierdas sean del todo conscientes de la gravedad de la situación.

No parece apropiado hablar de crisis orgánica sino tan solo de recambio de élites

¿Qué balance haces de la acción de la izquierda social, política y cultural extremeña en esta legislatura 2015-2019 que ahora concluye?

Si recordamos el ambiente de optimismo, de deseos de cambio y de esperanza que hubo en 2015 con la eclosión de los círculos de Podemos en tantas localidades, con las candidaturas municipalistas, etc., y lo comparamos con la actualidad, tenemos que concluir que ha sido una legislatura decepcionante en la que la “nueva política” ha envejecido tan aceleradamente que no ha necesitado enemigos externos (que por supuesto también haylos) para autoderrotarse. Hoy los círculos han desaparecido tanto como la dichosa “ilusión” y prácticamente solo queda una estructura de cuadros, liberados y cargos, con el agravante de que muchos grupos de base y movimientos sociales se han descapitalizado en el proceso del “asalto a las instituciones”.

Incluso en lo estrictamente parlamentario ha sido una legislatura con muchos claroscuros. El peso limitado, pero decisivo, de los seis escaños de Podemos debería haber servido para más. Se debería haber arrancado un compromiso claro de Vara para cerrar Almaraz cuando en 2021-23 termina el período menos peligroso de explotación. O la pendiente demolición de la urbanización de lujo ilegal de Valdecañas. No se debería haber apoyado un Pacto por el Tren que a la postre solo ha servido para reforzar a Vara y acelerar las inversiones en el AVE. Las ambigüedades ideológicas o el oportunismo táctico en estos temas han sido un error lamentable. También se debería haber condicionado el apoyo a los presupuestos de la Junta a que cesase la oposición bastarda que el PSOE de Carcaboso le hace a Lorena y el fin de la persecución judicial a Alberto Cañedo. Y mejor no recordar las bochornosas declaraciones televisivas de Alvaro Jaén respecto a la cuestión catalana… Si a esto se le une la nula disposición para acometer una política de ilustración y pedagogía populares y la carencia de un discurso crítico sobre el extractivismo y el desarrollismo en clave decolonial, han provocado que Podemos Extremadura no sea mucho más que la franquicia del pablismo madrileño, sin vida ni discursos propios.

Han provocado que Podemos Extremadura no sea mucho más que la franquicia del pablismo madrileño, sin vida ni discursos propios

Otros actores políticos de la región como Equo y, sobre todo, Extremeños parece que han evolucionado mejor en estos años, pero aún son más minoritarios que IU y Podemos. Una vez escarmentadas del espejismo del “asalto a las instituciones” como atajo al cambio social, el protagonismo político en clave emancipadora está volviendo a la sociedad, a lo horizontal, a lo popular. El ejemplo más conmovedor y creativo es el del movimiento feminista, que en estos años ha evolucionado y crecido cuantitativa y cualitativamente. El movimiento contra la mina de litio en Cáceres, o por la recuperación de la vía de tren convencional de La Plata (un modelo de tren popular, reequilibrador y no centralista), son también ejemplos del dinamismo social de estos años, como también lo es la economía social y cooperativa en expansión, las iniciativas agroecológicas y agroforestales y los cientos de luchas locales en defensa del territorio, de los recursos naturales y los valores comunitarios, las prácticas cotidianas de defensa y cuidado de la vida humana y no humana, etc. Es aquí donde debemos poner el foco de atención para recuperar discursos y prácticas constituyentes de nuevos sujetos políticos de cambio, de renovados deseos de emancipación que en el futuro puedan abrir un ciclo re-evolucionario.

¿Ves deseable y posible la unidad de la izquierda transformadora y los actores de cambio en Extremadura? ¿Qué desafíos les aguardan en el medio plazo del próximo cuatrienio, y qué estructuras y estrategias necesitaría desarrollar para enfrentarlos con éxito?

La enunciación Unidad de la Izquierda es un lugar común tan manido como engañoso. Es verdad que la injusticia de un sistema electoral poco proporcional compele a la “unidad” para no desperdiciar votos. Pero los votos también se desperdician cuando no se obedece el mandato de abajo, cuando no sirven para distribuir el poder sino para afianzar las dinámicas de representación y delegación. En cualquier caso, la unidad no es necesariamente buena si no atendemos al cómo y al para qué de la unidad.

El ecosistema de la izquierda extremeña está muy enrarecido y arrastra un déficit de cultura democrática. IU arrastra las cicatrices de la guerra interna de la legislatura de Monago y toda la historia de política conspirativa del PCE. Podemos arrastra el pecado original del golpe que dio Claro Que Podemos y en su corta vida ha reinstaurado todos los tics y vicios de la izquierda autoritaria en un curioso “estalinismo” organizativo sin marxismo y apenas sin socialismo en lo programático (todo lo más, socialdemocracia neokeynesiana).

Hay mucha, demasiada, gente dispersa, decepcionada, excluida o autoexcluida de los partidos, que sin ni siquiera redes de diálogo y encuentro tiene una incidencia política casi nula

En el flanco verde es llamativo el hecho de que en una región rural y de gran riqueza natural que ha levantado y ganado luchas importantísimas como Valdecaballeros en el pasado lejano y la Refinería en el cercano, la ecología política, EQUO, sea tan débil y minoritaria. Y también es paradójico que en una región periférica, dependiente y superexplotada como la nuestra, la “conciencia nacional” no logre avanzar más allá de un regionalismo ambiguo y minoritario que impide a Extremeños ser determinante en la confluencia de las izquierdas. Fuera de estos 4 partidos hay algunas iniciativas municipalistas que tratan de articularse poco a poco y que aunque son pocas sí dan un buen ejemplo de unidad por abajo. También hay mucha, demasiada, gente dispersa, decepcionada, excluida o autoexcluida de los partidos, que sin ni siquiera redes de diálogo y encuentro tiene una incidencia política casi nula.

Así que la Unidad con mayúscula se hará, si se hace, a nivel de las camarillas dirigentes de los partidos, y eso será bueno de cara a contener la previsible caída del voto a la izquierda del PSOE en 2019, tanto en la Junta como en los ayuntamientos. Pero lo que verdaderamente necesitamos para avanzar algo en las tareas del cambio social es que abajo, en la base, en los movimientos empecemos a construir COOPERACIÓN. Eso requiere mayor atención y cuidado a las actitudes y más cultura democrática, necesitamos diálogo y escucha entre las diversas identidades y sensibilidades de las izquierdas y eso pasa por tejer redes y crear una esfera pública de debate y reflexión compartida y colaborativa.

Visto lo visto, desde aquí abajo deberíamos exigir a la “Unidad de la Izquierda” que al menos no sean un obstáculo añadido a la más humilde “cooperación de las gentes diversas de las izquierdas”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

¿Qué le pasa a la izquierda extremeña?
¿Hacia una Extremadura sin izquierda?

Nuestra matria extremeña y las gentes que la habitan merecen un destino mejor que esta suerte de distopía periférica de emergencia sanitaria y social, apologías del genocidio, bulos racistas, termómetros al rojo y parajes calcinados a la que este verano ha venido a servir de episodio piloto. 

Obituario
Julio, una senda hacia Utopía

En Extremadura, en esta tierra que tantas veces visitó, tanto en público como en privado, Julio deja a muchos huérfanos. Julio no puede morir mientras siga existiendo en el mundo una persona que se levante para decir ¡hasta aquí!

Elecciones del 26 de mayo
Apuntes apresurados de sociología electoral extremeña

Fernández Vara no es Pedro Sánchez, y entregarse al abrazo del oso del PSOE más corrupto y caciquil, más desarrollista y antiecologista, más casposo y antiilustrado, puede ser un suicidio a medio plazo.

#27936
15/12/2018 18:52

Quiero destacar el oportunismo de Podemos por querer ocupar el espacio de I.U. con un discurso sucio, y ahora que sus marcas blancas de muchos Ayuntamientos han destapado alguna que otra vezguenza, ya no los reconocen como suyos.

0
2
#27984
16/12/2018 13:24

este será alguno de Vox intentando dividir a la izquierda

0
0
#27764
13/12/2018 18:28

Estoy de acuerdo con parte de las críticas que se vierten en este artículo como en otros anteriores de esta sección. Pero echo de menos las propuestas, muchas veces los errores los conocemos todos, pero como se hacen las políticas en la práctica de otra manera diferente? hubiera sido distinto o hubiera ido peor con otros "dirigentes"? Y por último, creo que tenemos los representantes que nos merecemos, es decir, que sin eximir el grado de responsabilidad de los que tienen cargos institucionales, que hacemos los de abajo paro cambiar la situación? Espero que sea algo más que están cómodamente en el sillón filosofando

10
2
Videovigilancia
Derechos y libertades Videovigilancia algorítmica en nombre de la seguridad de los Juegos Olímpicos de París
Aunque las autoridades francesas aseguran que no se utilizará el reconocimiento facial durante los Juegos Olímpicos de París, existe el temor de que el uso de la videovigilancia algorítmica se convierta en permanente.
Industria armamentística
Industria armamentística La Junta de Andalucía reúne en Sevilla a 250 empresas armamentísticas cómplices con el genocidio en Palestina
La Junta de Andalucía organiza la Aerospace and Defense Meetings ADM 2024 en Sevilla que congregará a cientos de empresas armamentísticas en pleno genocidio de Israel contra el pueblo palestino y en un contexto de rearme en la UE
Análisis
Análisis Israel nunca tuvo derecho a existir
Sobre Israel hay quienes se sobresaltan al escuchar que no tiene derecho a existir. Inmediatamente le atenazan décadas de falsos axiomas y propaganda de occidente para sostener su colonia en Palestina.
Agroecología
Día de la Persona Agricultora Milikua: “Las tareas del campo cobran valor cuando las hacen los hombres"
La autora del libro 'Sobre la tierra, bajo la sombra' (Consonni, 2023) reflexiona en el Día de la Persona Agricultora sobre el papel que ha tenido y tiene la mujer en el campo, su representación en los espacios de poder o sobre el Estatuto Vasco de las Mujeres Agricultoras
Sanidad pública
Sanidad a la madrileña Vecinas de Madrid escenifican la tragedia de la sanidad pública en una acción sorpresa en el Metro
El próximo domingo 19 de mayo a las 12:00 horas cuatro columnas desde Nuevos Ministerio, Plaza España, Hospital de La Princesa y Atocha partirán hacia Cibeles en la que se espera otra masiva marcha en defensa de la sanidad pública.
Policía
Espionaje político Juancar, otro policía infiltrado en los movimientos sociales de Madrid
El Salto desvela la identidad del agente policial Carlos P.M., que pasó dos años infiltrado en movimientos sociales de Madrid bajo la falsa identidad de un joven estudiante.
Opinión
Opinión Infiltrados en la democracia
Un nuevo caso de infiltración policial subraya la permanencia de una serie de prácticas que amenazan derechos fundamentales y tienen potencial delictivo.
Sanidad
Sanidad Universal El Gobierno aprueba un proyecto de ley para volver a la sanidad universal
La norma, que deberá atravesar el trámite parlamentario para su aprobación, pretende retornar a la situación anterior a 2012, cuando Rajoy eliminó la universalidad en la atención sanitaria.

Últimas

Catalunya
Catalunya El Senado veta la Amnistía y la Audiencia Nacional intenta que los imputados de Tsunami abandonen el exilio
El juez de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, les ha llamado a declarar desde Barcelona el 22 de mayo, antes de que se apruebe la ley. Les imputa terrorismo, un delito por el que no podrían ser amnistiados.
Genocidio
Human Rights Watch Israel ha lanzado al menos ocho ataques sin aviso previo contra organizaciones humanitarias
La organización no gubernamental Human Rights Watch acusa a Israel de atacar centros y convoys de ayuda humanitaria y advierte a los países que suministran armas a las FDI que eso contraviene el derecho internacional.
Palestina
Movimiento BDS Archivada la denuncia por una acción de boicot a McDonald's
Un juzgado de Madrid considera que en el despliegue de la pancarta “Ahora sí, boicot McDonald's. Llámame McGenocidio” no existió delito.
Sidecar
Sidecar Un régimen de guerra global
Los conflictos armados están atrayendo a algunos de los actores más poderosos de la escena internacional, lo cual invoca el espectro de la escalada nuclear.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda El Gobierno amplía la moratoria hipotecaria unas horas antes de su vencimiento
Cuando faltaban unas horas para el fin de la moratoria hipotecaria que beneficia a 30.000 familias, el Consejo de Ministros aprueba su prórroga hasta 2028. La PAH anuncia que seguirá luchando por una “solución definitiva”.
Más noticias
Sidecar
Sidecar Problema Trump
Los críticos siempre han tratado a Trump como un desgracia que hay que deplorar, más que como un problema que hay que resolver.
Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Crisis climática
Industria y crisis climática La transición de la industria del acero choca con los límites del hidrógeno verde
La industria siderúrgica debe reducir en un 93% sus emisiones para que el aumento de la temperatura global se mantenga un 1,5º C por debajo de los niveles preindustriales. Y el hidrógeno verde no es suficiente para transformar la industria del acero.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Un vídeo muestra las técnicas violentas de las agencias de desocupación
Una grabación realizada con móvil muestra la utilización de técnicas de violencia física por parte de trabajadores de una empresa de desocupación, un sector que ha escapado hasta ahora de la regulación y cuenta con la complicidad de la Policía.

Recomendadas

Genocidio
Movilizaciones Estudiantes por Palestina, el “no en nuestro nombre” global
Las acampadas se extienden por todo el mundo. La represión de algunas de ellas no consiguen limitar el alcance de una forma de protesta que desafía a los Estados y que Israel considera una amenaza que pone en riesgo su impunidad.
Ocupación israelí
Guerra contra Gaza Crece el debate en EE UU por su responsabilidad en la masacre de Gaza
Un informe del Departamento de Estado admite por primera vez que las bombas de 900 kg suministradas por EE UU se han podido utilizar de forma indiscriminada contra civiles.
Salud
Salud perinatal Susana Carmona: “No encuentro nada más feminista que estudiar lo que pasa en nuestros cuerpos”
La psicóloga clínica Susana Carmona recoge en ‘Neuromaternal’ casi todo lo que la neurociencia puede enseñar sobre las madres. Por ejemplo que la maternidad, como la adolescencia, es una época de neuroplasticidad y de adaptación.
Palestina
Noura Erakat “Nuestra lucha por salvarnos como palestinos es también una lucha para salvar el mundo”
La organizadora y abogada defensora de la Campaña en Estados Unidos por el fin de la ocupación israelí Noura Erakat respondió a las preguntas de Olga Rodríguez para la entrevista de la revista trimestral de primavera de El Salto.