Bilbao
Abre La Sinsorga, el centro cultural feminista impulsado por Andrea Momoitio e Irantzu Varela

El pasado viernes se inauguró La Sinsorga, un edificio con cuatro espacios diferenciados (garito, tienda, sala cultural, sala socias) abierto a todas las personas, “excepto tránsfobas y fascistas”.
Sinsorga presentación - 1
Paula Iglesias, Irantzu Varela y Antrea Momoitio brindando por la apertura de La Sinsorga en el desayuno con la prensa.

Dieciocho meses se han alargado las obras de unas de las inauguraciones más esperadas en Bilbao: La Sinsorga, el centro cultural feminista impulsado por Andrea Momoitio e Irantzu Varela. Desde el pasado viernes, se puede desayunar, comer, cenar, tomar una cerveza, un café y picar algo. El sábado celebraron su primera actividad cultural, de la mano del ciclo de cine Zinegoak. 

Cuando Momoitio y Varela anunciaron a todas sus conocidas que habían alquilado un edificio entero, que antes era una tienda de vestidos de novia, la noticia corrió rápidamente por la ciudad. Buscaban socias que les anticiparan el dinero para pagar el alquiler del edificio mientras obraban. Consiguieron casi 300. Gracias a su confianza, han podido llevar a cabo una reforma realizada casi por entero por mujeres. Jamás pensaron que cumplir esta premisa iba a ser tan complicado. 

No fue fácil encontrar a Nuria, Paz, Raquel, Julia y Bea, las electricistas, fontaneras, carpinteras y obreras que se han ocupado del grueso de las tareas. Para faenas concretas, como la instalación del sistema antiincendios, las empresas encargadas de estos certificados no enviaron a mujeres, sino a hombres, al carecer de técnicas en plantilla. 

Momoitio y Varela han contratado únicamente a electricistas, fontaneras, carpinteras y obreras, lo que ha alargado la reforma hasta los 18 meses

Mientras Momoitio y Varela observaban hasta qué punto está masculinizado el sector de la construcción, las cineastas Paula Iglesias y Marta Gómez, de la productora Al borde films, grababan el proceso para presentar un documental que editarán el próximo año y estrenará en, al menos, seis salas de cine. “Hemos hablado con mujeres que no soportaron el machismo en el sector de la construcción y acabaron dejándolo, algo que hemos entendido perfectamente viendo cuando, los pocos hombres que han trabajado aquí, han cuestionado incluso a la arquitecta”, explica Varela, quien añade que las cinco encargadas de la obra destacan son “mujeres apañadas, con muchas habilidades artísticas que se dedican a la construcción”. Y poco destructoras: “Lo primero que proponía un hombre al entrar en La Sinsorga era romper algo”.  

Sinsorga presentación - 2

Salvado el tema de las obras e inaugurado el local, ahora es tiempo de resignificar el amor romántico: abrir al público las puertas de la antigua tienda de novias, de la que quedan cinco vestidos intervenidos y donde ya se ha asomado alguna vecina —divorciada— que compró su vestido de novia en la tienda. Les ha sorprendido que en estos primeros días en funcionamiento han ido a tomar algo más “matrimonios heterosexuales mayorcitos” de los que tenían previstos, junto con un público “muy diverso”. En resumen, los primeros días han ido “muy muy bien” y la comida “ha gustado mucho”, señala Momoitio.

En la planta baja está situado lo que llaman “el garito”, con una barra mostrador para preparar cafés, bebidas y servir la comida del catering Sustraia, una cooperativa de mujeres que elabora comida vegana y vegetariana. En la primera planta se ubica la tienda —camisetas, vino, dildos, etc.—.  Más arriba está la Planta de las Flores, donde se celebran las actividades culturales. La ganbara —el desván— será el espacio privado para las socias. 

“Andrea y yo hemos creado el espacio al que nos gustaría ir, un refugio para las que son como nosotras, bolleras y feministas”, Irantzu Varela

Tienen previsto abrir todos los días a partir de las 8h, y cerrarán a las 23h, 0h y 1h en función de si es noche laborable, viernes o sábado. Tras la tensión de las obras, ahora viven la “tensión de no defraudar y que las socias sientan el espacio como propio”, indica Momoitio, tras crear entre ambas socias “el espacio al que nos gustaría ir, un refugio para las que son como nosotras, bolleras y feministas”, añade Varela. 

Aseguran que el espacio está abierto a todas las personas, a excepción de tránsfobas y fascistas, “aunque no creemos que el brilli-brilli les tire mucho”, añadieron en el desayuno con la prensa celebrado el pasado jueves. Con el sentido del humor y la ternura que les caracteriza, Varela y Momoitio explicaron que llevaban un par de días apareciendo en La Sinsorga con la misma ropa, que lavaban y secaban la noche anterior. “Es por el documental, no queríamos que pareciera llevamos tres días de inauguración”: las socias, la prensa, al público, etc. Cada día menos agotadas, recordaron que son dos personas “muy complementarias: mientras a una le daba ataques de pánico, a la otra le daban ataques de ilusión”, sostiene Varela. “Ver todo el proceso desde fuera ha sido precioso”, asegura la documentalista Paula Iglesias.

Archivado en: Feminismos Bilbao
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Feminismos
Economía Feminista Frente a la crisis capitalista Economía Feminista
Coincidiendo con el comienzo del encuentro de Economia Feminista Abya Yala que está teniendo lugar estos días en Argentina, reflexionamos sobre el papel de las Economías feministas en las crisis derivadas del capitaloceno.
Feminismos
Irene García Galán “La memoria feminista hay que construirla desde abajo, desde nuestras casas”
‘Hilaria’ (Errata Naturae, 2025) es un libro dedicado a la tatarabuela de Irene García Galán, pero también un ensayo político que navega a través de la memoria feminista, el antipunitivismo y el anarquismo.
Córdoba
Red transfeminista La RATA cordobesa se consolida con un evento en forma de “perolada”
La Red de Autodefensa Transfeminista (RATA) ha organizado el pasado 15 de marzo una jornada de actividades como espacio alternativo ocio, existencia y resistencia en el centro social autogestionado Rey Heredia de Córdoba.
Infancia
Infancia Reforma de la ley de infancia: cinco claves para proteger a las madres protectoras
El Ministerio de Infancia y Juventud ha iniciado un proceso para ampliar esta norma aprobada en 2021. Varias organizaciones dan las claves para evitar el castigo a las madres protectoras.
Israel
Israel Israel lleva de nuevo a Gaza al borde de la hambruna con su bloqueo de suministros más prolongado
“Hay días que no puedo permitirme comer”, comenta Muhammad, residente en la ciudad de Gaza, donde regresó con su mujer y su hijo después de la tregua del 19 de enero, tras más de un año desplazados.
Granada
Urbanismo 146.574 m² de solares vacíos en Granada por disfrutar
“¿Y si estos espacios no estuvieran esperando al próximo gran inversor? ¿Y si ya fueran nuestros?”. Esta y otras reflexiones sobre la especulación inmobiliaria, en un proyecto artístico exhibido en el Centro José Guerrero.
Música
Kiliki Frexko “No me interesa el arte político que te dice qué pensar o cómo deben ser las cosas”
Tras años de trabajo colectivo, Kiliki Frexko presenta su primer proyecto en solitario. ‘Iltze 1’ es un paso adelante en su trayectoria, donde mezcla referencias, explora nuevos sonidos y habla desde un lugar más personal, sin perder el filo.

Últimas

Salario mínimo
Salario mínimo PSOE y Sumar intentan llegar a un acuerdo para no perjudicar con el IRPF a los trabajadores con el SMI
La ministra de Hacienda ha confirmado que sería “algún tipo de medida que permita compensar a aquellos pocos trabajadores” en la situación de tener que tributar con el salario mínimo.
Opinión
Opinión Es el militarismo, amigo, el militarismo
¿Puede que si el militarismo es la solución para todo, realmente no solucione nada, sino que realmente sea el problema?
Guerra en Ucrania
Conflicto bélico Rusia y Ucrania acuerdan un principio de alto el fuego marítimo a instancias de Estados Unidos
La Casa Blanca emite dos comunicados que coinciden en señalar una tregua en el Mar Negro y en prometer trabajo para el final de los ataques energéticos por ambas partes.
Israel
Genocidio Mercadona vende tampones y patatas procedentes de Israel
En 2024 se produjo una reducción de las importaciones de tampones y patatas israelíes. Mercadona es una de las plataformas que trabajan con estos productos.
LGTBIfobia
Manifestación Plataforma Trans planta cara a la transfobia con una manifestación contra el odio
La convocatoria el 29 de marzo denuncia un contexto internacional antiderechos. La organización pide a partidos y sindicatos que se sumen a la marcha porque la transfobia es un problema social, y por lo tanto también político, explican.
Madrid
Madrid La Sareb amenaza con el desahucio a dos jóvenes activistas en Carabanchel
Cadete 7, el bloque en lucha del que el ‘banco malo’ prevé desalojarles de forma inminente este jueves 27, fue el primero recuperado por el movimiento de vivienda de Madrid en 2013 tras haber permanecido deshabitado desde 2008.
Más noticias
Opinión
Opinión Bretón no es un monstruo, ni Martín el nuevo Capote
Frente a la libertad sin peros que defienden unos, la responsabilidad de muchos: la de ciudadanos y librerías que se niegan a comprar o vender, respectivamente, el libro que Anagrama ha tenido a bien materializar.

Recomendadas

Galicia
Galicia Un municipio gallego demanda a la Xunta por la contaminación del embalse de As Conchas
Los vecinos de la comarca de A Limia llevan a la Xunta ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia por la contaminación provocada debido a la cría intensiva de ganado porcino y avícola en esta zona de Ourense.
Residencias de mayores
Residencias Fondos de inversión y residencias: la mano invisible que retuerce los cuidados
Mientras DomusVi, en manos del fondo de inversión ICG, ya es la empresa con más residencias privadas del Estado, residentes, familiares y trabajadoras explican lo que supone que las prácticas especulativas acunen la vejez de las personas.
Feminismos
Irene García Galán “La memoria feminista hay que construirla desde abajo, desde nuestras casas”
‘Hilaria’ (Errata Naturae, 2025) es un libro dedicado a la tatarabuela de Irene García Galán, pero también un ensayo político que navega a través de la memoria feminista, el antipunitivismo y el anarquismo.