Jesús Sabariego

Motivado por la reciente reseña de McEnzie Wark sobre The Matrix Resurrections, fui al cine a verla con mi señora. Dejo algunas impresiones que me suscitaron sus más de dos horas de metraje, en una sala prácticamente vacía. No teman, no hay espóiler. Quizá un poquito.

Capitaloceno, infraestructura social o diplomacia de datos. Siguen algunas reflexiones sobre conceptos “tecnopolíticos” que merecen atención y plantean cuestiones de calado para el próximo año

Durmiendo no somos productivos para el sistema. Nuestros sueños reescriben el mundo, señalando las opresiones y traumas que no nos atrevemos a nombrar durante el día

La primavera de los movimientos ha cumplido diez años

La convulsa década que dista del 15M, quizá nos permita hacer análisis menos apologéticos de este evento, aún a riesgo de caer en una nostalgia efectista

Ante el espectáculo cotidiano deshumanizado que ofrece la red, quizá la mayor rebelión sea desaparecer

La tecnología se ha apropiado de nuestra potencia para construir otros mundos.

El tiempo es oro, reza el refrán popular.

La tecnología ha codificado el deseo en el capitalismo cognitivo digital como su fuerza motriz.

El estreno en Netflix de “El dilema de las redes sociales” pone de manifiesto el despiadado negocio del capitalismo digital en el que se basa la economía de la atención

El reestreno en algunos cines de cintas clásicas de ciencia ficción ambientadas en el pasado, generan una inquietante reflexión sobre las interacciones entre humanos y máquinas en los procesos de aprendizaje.

La inexistencia de una política pública de datos acorde a los desafíos actuales, implica que las administraciones, incapaces de administrar ese oro del siglo XXI, acaben privatizando su gestión

Al apropiarse de nuestra comunicación, los algoritmos nos deshumanizan, transformándonos en tendencias extrapolables a campañas que se dirigen directamente a lo más instintivo y primario, los miedos

La extensión de la actividad docente on line al próximo curso ha generado un debate, que puede servir de coartada para ocultar los acuciantes problemas a los que debemos hacer frente

Para quienes trabajamos desde los márgenes, cepillando a contrapelo la Historia en la metáfora de Walter Benjamin, las epistemes siempre han sido una trampa.

¿Para qué sirve la máquina, una vez desvelado que su funcionalidad comunicativa es apenas la excusa, el elemento superficial?

Sobre el virus, la hostilidad, la necesidad de los cuidados y el deber de inmunizarnos ante el odio y la intolerancia

Recuperar la política pasa hoy por robársela a una tecnología que, lejos de la promesa emancipadora, nos estandariza como parte de su plan de negocio.