We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Opinión socias
Vencerán pero no convencerán

Vencerán pero no convencerán, parafraseo a Unamuno insuflándome el convencimiento de pertenecer a la parte buena de la sociedad mientras contemplo, atónito, como el mundo observa a unos Estados Unidos cuya única superioridad es la fuerza del fachomacho que ha reunido sus armas fálicas con la supuesta inteligencia artificial y la tontuna natural para construir un feudalismo nuevo y mejorado. Y yo pensaba que la inteligencia era el estado evolucionado del conocimiento que te debe llevar a la paz y a la felicidad.
Con ese batiburrillo de película con guiones sin sentido de serie B, su arsenal de aparatos de muerte y una pandilla de seres despreciables y ricos se ha puesto ha recorrer el mundo del que conoce poco para reunirse con más de su calaña, como el presidente ruso, el presidente israelí, y se han dicho a si mismos cogiéndose el paquete: “Si nosotros la tenemos más grande por qué debemos conformarnos con tan poco, nos merecemos el mundo, nos merecemos que nos teman, que huyan, que nos hagan caso o ya verán”.
Esa es su forma de hacer política y, desgraciadamente, le funciona para sus intereses, al menos a corto plazo. Luego están los patéticos de vox, y demás rufianes. Partidos fascistas europeos lameculos que son muy necesarios para que el matón se sienta feliz con sus sucursales de lacayos de chichinabo. Son gánsters que enarbolan cada uno la bandera del ultranacionalismo y se juntan artificiosamente para meneársela y eyacularse los unos a los otros con caras del placer sin culpabilidad, sé que también hay mujeres en esos grupos, pocas, reproducen los modos masculinos ancestrales para encajar en ese sistema perverso. Todos y todas sabemos, ellos también, que en algún momento se tirarán de los pelos, y si no se remedia nos pillará en medio. Yihadistas, sionistas, trumpistas, fascistas, ultracatólicos… son los mismos, se retroalimentan, su razón común es destituir cualquier derecho humano, la pluralidad, la felicidad… y todo lo que sus ideologías coloquen como problema u obstáculo para la implantación de su forma simplista y abominable de ver el mundo. Necesitan tener gran cantidad de enemigos para medrar y engañar a las masas crédulas y miedosas.
El camino para un mundo nuevo debería asfaltarse hacia otros objetivos, no repetir los ya trillados de este heteropatriarcado opresor
¿Y que hace Europa? Titubear, sentir que aquello que la hace fuerte es una debilidad y por eso a menudo se diluye por falta el brillo, y esto la apoca, ataca su autoestima. Se equivoca, la debilidad es su fortaleza, el no tener las cosas claras es su virtud, el intentar despedirse de los dogmas y las soluciones fáciles debería ser una razón para sentir orgullo. El camino para un mundo nuevo debería asfaltarse hacia otros objetivos, no repetir los ya trillados de este heteropatriarcado opresor y pensar en la población en su totalidad, no solo la encerrada cada una en sus fronteras pintadas en el mapa. No debería medirse de tú a tú con el casposo naranja, con el casposo ruso, con el casposo israelí… hay tantos también dentro intentando implosionar las sendas hacia la equidad. La vieja Europa sabe que los momentos más florecientes de su historia fueron los de más diversidad y amplitud de miras. Cuando se encerró en nacionalismos y religiones los monstruos le dieron un zarpazo.
La apuesta, salirse de los bloques, fijar objetivos y aliarse por materias y sensibilidades con cualquiera que las comparta, y luchar por ellas, así habría esperanza y un futuro para la humanidad. Pensar en las personas y no en las creencias ciegas, aquí comenzó la separación iglesia estado no del todo resuelta, aquí se instaló el estado social luego desembocado en el estado del bienestar, la asistencia sanitaria universal, la educación pública, las pensiones… grandes avances humanos en los que hay que ahondar por mucho que las grandes corporaciones con su oligarcas y esos políticos despreciables quieran ponerlas en entredicho.
Aunque este ataque ultraliberal garrapiñado de fascismo sea fuerte y poderoso económicamente, quizá no tenga unos cimientos tan profundos como creemos
No dejar que el cara naranja, o cualquier otro, con su estrategia de susto o muerte nos apabulle. Está consiguiendo sus objetivos aparentemente y eso no es bueno, aunque espero que esto se vuelva en contra de sus satélites europeos, en parte está sucediendo o será una inflamación de optimismo que paradójicamente me ataca ahora. Es el turno de la izquierda si sabe jugar y explicar sus cartas, si piensa en soluciones y explica mejor los logros incontestables que se han producido en Europa y en el mundo gracias a ella. Aunque este ataque ultraliberal garrapiñado de fascismo sea fuerte y poderoso económicamente, quizá no tenga unos cimientos tan profundos como creemos, están muy fragmentados aunque quieran aparentar los contrario. Es muy importante que no toquen el poder. Fundamentalmente son malas personas que han buscado la ideología, la agrupación, la religión, que se ajuste a su falta de sensibilidad, por tanto el tiempo juega a nuestro favor.
Las mujeres del todo el mundo, la cuarta ola del feminismo son una gran empuje ahora mismo, la izquierda está en auge, por mucho que nos parezca lo contrario debido a lo que se publicita, pues se le quita importancia al dato del auge de la izquierda entre las mujeres, los analistas son hombres patriarcales y para ellos lo importante es la derechización de los hombres, se ningunea el papel de la mujer una vez más. Aprovechemos que la izquierda crece en general, sin miedos ni complejos de inferioridad busquemos soluciones. No dejemos que la realidad nos oculte lo que ocurre de verdad.