Violencia machista
Eliminando violencias, creando comunidades

Se puede hablar de violencia contra la mujer cuando se produce una violencia física, psicológica, sexual, económica, simbólica, política, gineco-obstétrica, ejercida contra la mujer.
Economistas sin Fronteras
25 nov 2023 07:00

Cuando se habla de eliminar la violencia que sufren las mujeres, presentar estadísticas resulta algo frío. Ninguna estadística o dato puede transmitir el dolor y la angustia que la violencia, de cualquier tipo, origina en las víctimas. Sin embargo, permite cuantificar la realidad, ofrece elementos para su análisis y permite tomar decisiones. Desgraciadamente, todas conocemos casos individuales de violencia contra la mujer, porque la sufrimos en primera persona, porque la sufren nuestras compañeras o porque aparecen en los medios. Nos emocionan, nos causan dolor, tristeza y amargura. Sin embargo, para dar respuesta a los problemas hay que afrontarlos conociendo la realidad que muestran los números.

El entorno laboral, un entorno en el que el ejercicio del poder se exhibe sin ningún pudor, la violencia es un problema grave. Insultos, amenazas, menosprecio del desempeño laboral, insinuaciones sexuales, agresión física, violación, son violencias que se sufren en el entorno laboral. Estos ataques provienen en su mayoría de superiores jerárquicos pero también de compañeros de trabajo o clientes. Las mujeres son las víctimas más frecuentes de este tipo de violencias que se soportan, a menudo, debido al estigma y al miedo a represalias.

Según datos de la OIT a nivel mundial, más de una de cada cinco personas empleadas (743 millones, es decir, un 22,8%) “ha sufrido al menos una modalidad de violencia y acoso en el trabajo durante su vida laboral” (1). Se estima que del total de mujeres residentes en España que tienen entre 16 y 74 años y que ha trabajado alguna vez en su vida el 28,4% (4.489.219) ha sufrido acoso sexual en el trabajo en algún momento de su vida (2). Las mujeres con mayor formación y que residen en un área densamente poblada son las que más aparecen como víctimas de este acoso. Del total de mujeres víctimas de acoso sexual en el trabajo, en el 88,5% de los casos el agresor ha sido un hombre, siendo este porcentaje 8 veces superior al de agresoras mujeres, que representan el 10,8%.

Opinión
25N Acoso sexual en el trabajo: seguimos siendo suyas, solo cambia el escenario
Las empresas crean protocolos de prevención y de actuación, se forman comisiones investigadoras, se hacen públicos algunos casos, Pero la problemática es mucho más importante, habitual y grave de lo que pudiera parecer.

Otra de las violencias más evidentes contra las mujeres en el ámbito laboral y que reduce el desarrollo de las sociedades, es la que se lleva a la práctica a través de los salarios. La brecha salarial de género es una forma clara de violencia económica. En 2020, en el Estado español, el salario anual más frecuente en las mujeres (13.531,7.-€) representaba el 73,2% del salario más frecuente en los hombres (18.491,7.-€).  Es decir, las mujeres perciben un salario 26,8% menor del salario más frecuente en los hombres. Si consideramos el salario mediano en las mujeres, representa 81,5% del salario mediano de los hombres y si nos centramos en el salario medio bruto, el de la mujer representa el 81,3% respecto al del hombre (3).

Siguiendo con las estadísticas, la brecha de género en los salarios por hora aumenta según va aumentando la edad de la mujer, pasando de un valor de 1% en el tramo de los trabajadores de 25 a 34 años, hasta 15,7% en el tramo de 55 a 64 años. También se puede decir que los valores más altos en la brecha de género en los salarios por hora, según el sector de actividad económica, corresponden a las actividades sanitarias y de servicios sociales, sectores muy feminizados, con un 21,4% de brecha salarial. Por otra parte, según el empleador, se aprecia que los valores de la brecha son mayores en el sector privado, con un valor del 13,9% frente al público 8,2%.

Los valores más altos en la brecha de género en los salarios por hora, según el sector de actividad económica, corresponden a las actividades sanitarias y de servicios sociales.

Otras violencias económicas en el ámbito laboral son las dificultades en los ascensos, en un trato objetivo en comparación con los compañeros a la hora de la distribución de tareas en los distintos puestos de la empresa o en la baja representación en ciertos sectores y puestos de trabajo de alto nivel.

Estas violencias en el ámbito del trabajo hacen que las trayectorias laborales de las mujeres sean claramente desiguales. La mayor parte de la investigación existente coincide en señalar que, mientras la trayectoria laboral de los varones es lineal y ascendente, en el caso de las mujeres se caracteriza por una serie de hitos que marcan sus carreras y que van a darlas forma, bien de U o bien de cordillera (4). Este tipo de trayectorias desiguales, lleva a una menor tasa de participación en el mercado laboral y a unas carreras laborales discontinuas, puesto que las trabajadoras se ven obligadas a reducir su actividad con contratos a tiempo parcial. En 2022 el porcentaje en los contratos a tiempo parcial respecto al empleo total, varía de un 3,5% para hombres frente a un 10% para mujeres (5). Esta disparidad en la trayectoria laboral también trae consigo en más ocasiones de las deseadas, la interrupción del trabajo, con la consiguiente dificultad de volver al mercado laboral pasado un tiempo o dejar definitivamente el empleo.

Dado el espacio de este artículo sólo apuntar algunas consecuencias de esta menor remuneración y vidas laborales irregulares. Por una parte, su derivada en las pensiones, que serán menores. Por otra parte, su derivada en la pobreza, que afecta más a las mujeres. Por último, señalar otro gran efecto que proviene de estas situaciones de violencia de las que venimos hablando: la limitación en la participación de la mujer en la vida política. Esta limitación no es baladí, sin su participación en el ámbito de decisión, este queda cojo sin las aportaciones que las mujeres pueden hacer para solucionar los problemas de toda la comunidad.

Una característica de las estadísticas es que son muy tozudas, y nos dan año tras año una visión muy negativa de la realidad que vivimos las mujeres y que nos puede llevar a la parálisis. Sin embargo, debemos reclamar soluciones. Hay que exigir con fuerza políticas para prevenir, atender y sancionar este tipo de violencias en el entorno laboral. Es cierto que las empresas son cada vez más conscientes de la importancia de tener entornos laborales seguros para todos sus empleados, incluidas las mujeres, para mejorar sus resultados económicos, pero esto no es óbice para reivindicar que las normas en los centros de trabajo garanticen la dignidad y un entorno seguro para todos los trabajadores. Hay que exigir la adopción de medidas disciplinarias para los agresores. Hay que solicitar a nuestros representantes políticos y sindicales una y otra vez la igualdad en salarios, mejorar las pensiones no contributivas, reclamar más derechos para las ocupaciones más desprotegidas, adecuar el diseño de las políticas a las diversas trayectorias de vida femeninas, una conciliación efectiva y una reducción en la jornada laboral.

Feminismos
Contra las violencias machistas Contra las violencias machistas en el entorno laboral
Analizamos a la luz del caso Rubiales la estructura de las organizaciones de la Economía Solidaria y las medidas para la prevención de abusos en el entorno laboral.

Ahora bien, más allá de todas las acciones reactivas que se puedan implementar  ante estas violencias, no habrá un cambio significativo si no se cambia la estructura sobre la que construimos nuestras vidas. Ver más allá de nuestra situación concreta y crear entre todas, una disposición social en la que lo productivo y lo reproductivo esté igualmente representado. Profundizar en un feminismo más progresista e independiente que ponga en el centro a todas las personas, hombres y mujeres y que se aleje de ese feminismo liberal en el que predomina el sálvese quien pueda, la meritocracia y los mercados. Una vida distinta es posible porque una economía distinta es posible. Una economía justa desarrollará la sociedad sin el dolor de las mujeres.

Economistas sin Fronteras no se identifica necesariamente con la opinión de la autora y ésta no compromete a ninguna de las organizaciones con las que colabora.

(1) Experiencias de violencia y acoso en el trabajo: Primera encuesta mundial. Resumen de los resultados: https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/---dgreports/---dcomm/documents/publication/wcms_863167.pdf

(2Encuesta europea de violencia de género 2022: https://violenciagenero.igualdad.gob.es/violenciaEnCifras/Encuesta_Europea/docs/EEVG.pdf

(3Según datos del INE: https://www.ine.es/ss/Satellite?L=es_ES&c=INESeccion_C&cid=1259925408327&p=1254735110672&pagename=ProductosYServicios%2FPYSLayout&param3=1259926137287

(4Frutos y Titos, 2001; Bodoque, 2008; Hewlett, 2002, por ejemplo citados en Trayectorias laborales de las mujeres que ocupan puestos de alta cualificación: https://www.igualdadenlaempresa.es/DIE/jornadas/monograficos/docs/Trayectorias_laborales_mujeres_ocupan_puestos_alta_cualificacion.pdf

(5Según datos del INE: https://www.ine.es/jaxiT3/Tabla.htm?t=10896&L=0

Sobre este blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Violencia machista
Machismo ¿Somos los hombres potenciales violadores?
¿De verdad no compartimos nada con ese bombero, ese informático, ese concejal, ese periodista que participaron en el horror de Dominque Pélicot?
Juegos olímpicos
Juegos Olímpicos 2024 La intersexfobia y el racismo de la policía de los cuerpos en el deporte
¿A cuántas más deportistas “sospechosas” hay que señalar y forzar en algunos casos a finalizar su vida profesional para cuestionar esos estándares? ¿Cuándo se va a revisar el eurocentrismo sobre los cuerpos de las deportistas racializadas?
Promociones
Promociones Aprovecha tu descuento de socia para formarte en violencias machistas
Repetimos alianza con la Asociación Otro Tiempo para ofrecer un 10% de descuento para socias de El Salto en la 4ª edición de su curso “Especialista en Violencias Machistas”.
Sobre este blog
Economistas sin Fronteras Somos una Organización no Gubernamental de Desarrollo (ONGD), fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza. Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Ver todas las entradas
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.
Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Comunidad de Madrid
Memoria histórica Contra la basura y el olvido: tras la pista de los cuerpos y de la memoria de los brigadistas internacionales
El Salto acompaña a un contingente internacional de políticos, políticas y activistas en una ruta en memoria de los brigadistas internacionales que acudieron a luchar a España contra el fascismo, en un ejercicio inspirador para el presente.
Opinión
Opinión La coherencia de las políticas de Trump
No se pueden entender los aranceles de Trump sin su lucha por el control de los recursos minerales, sin Groenlandia, Ucrania o la República Democrática de Congo.
El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.
Crisis climática
Balance climático El Mediterráneo se consolida como zona especialmente vulnerable al cambio climático
Las víctimas de la dana suponen dos tercios de las muertes por fenómenos extremos en Europa en 2024, según un informe conjunto de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial que hace un balance climático del continente el pasado año.

Últimas

Eventos
Taller de podcast El Salto invita a estudiantes a explorar las posibilidades del formato audiovisual
Proponemos un taller de guion y producción de programas para estudiantes de comunicación y periodismo los días 24 de abril y 8 de mayo.
València
València CGT denuncia graves incumplimientos del plan de inundaciones en la dana de València
Un informe incorporado a la causa judicial señala la falta de seguimiento de los propios protocolos autonómicos en el día de la tragedia y la víspera.
Más noticias
Comunidad de Madrid
Educación El Gobierno de Ayuso deberá pagar 1.000 euros a una profesora por el exceso de horas lectivas
Según CCOO, hasta 6.500 profesoras y profesoras se podrán acoger a esta sentencia que supone una penalización a la Comunidad de Madrid por el exceso de horas extras que realiza el profesorado.
Laboral
Laboral El sindicato ELA alerta sobre la salud mental de las trabajadoras en intervención social
“Somos un instrumento de contención porque tratamos con población muy dañada, estamos en mitad del sándwich”, explica la educadora social Vanesa Núñez Moran.
Ayuntamiento de Madrid
Huelga de basuras Huelga indefinida de basuras en Madrid desde el 21 de abril tras romperse las negociaciones
Los representantes sindicales fuerzan el paro para obligar a las empresas subcontratadas por el Ayuntamiento a escuchar sus propuestas. El Ayuntamiento fija servicios mínimos del 50 %.

Recomendadas

Poesía
Culturas Joan Brossa, el mago que jugó con la poesía para reinventar el poder de la palabra
Casi inabarcable, la producción creativa de Joan Brossa se expandió a lo largo —durante medio siglo XX— y a lo ancho —de sonetos a piezas teatrales, pasando por carteles o poemas objeto— para tender puentes entre el arte, la política y el humor.
República del Sudán
Sudán Cara a. Un Sudán en guerra
Se cumplen dos años de una guerra que ya deja más de 13 millones de personas desplazadas y más de ocho millones de sudaneses al borde de la inanición.
Andalucía
Memoria histórica La inanición de la memoria andaluza
Las políticas públicas de memoria en Andalucía se encuentran en un estado de paralización que pone en duda la voluntad de la Junta por la reparación efectiva.