Coronavirus
¡Abrid los parques!

Mientras A Coruña, Barcelona, Bilbao o Zaragoza han abierto sus parques y zonas verdes, otras grandes ciudades como Madrid o Móstoles los mantienen clausurados en una decisión de las corporaciones municipales cuanto menos cuestionable.

Salida 2 de mayo 8
Runners y paseantes en el parque de la Dehesa de la Villa. David F. Sabadell

Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @pablorcebo.bsky.social, pablo.rivas@elsaltodiario.com

4 may 2020 12:31

Una gran parte de la población española está sufriendo en silencio este lunes una circunstancia que rara vez se había dado de forma tan multitudinaria y al mismo tiempo: tenemos agujetas. Algo más que normal tras el comienzo de la desescalada y el permiso gubernamental de salir a hacer deporte de forma individual tras cuarentaitantos días metidos en casa. No mover en mes y medio los músculos necesarios para accionar el mecanismo que nos permite correr es lo que tiene.

Hasta ahí bien. Pero las sensaciones que muchos sentimos al salir este sábado por fin a echarse la tan esperada carrerita son encontradas. La felicidad de poder, por fin, trotar cual gacela por la ciudad se mezcló con el estupor de estar haciéndolo entre masas. Incluso hubo miedo. Los contagios por el bicho que podía transportar el aliento de lo que ahora llaman runners, noveles o habituales, podrían contarse en unos días —discúlpenme si me paso de listo, ojalá me equivoque— por millares.

Las autoridades sanitarias señalan que, al correr en línea, la distancia de seguridad de 1,5 metros debe ampliarse considerablemente. Un estudio de la Universidad Ku Leuven (Bélgica) y la Universidad Técnica de Eindhoven (Países Bajos) cifra en cinco los metros mínimos que deben guardarse al desplazarse en línea. Eso si se va despacio, a unos 4 km/h, los metros mínimos aumentan según la velocidad, pasando a 6 si el desplazamiento es de 6 km/h. Apunten ciclistas, a 14 km/h ya necesitaríamos 10 metros de separación. Suma y sigue.

No hay que ser un lince para saber que el personal, tras mes y medio de clausura, iba a tomar las calles cual manifestación. Qué menos

Ahora el caso práctico en una de las ciudades que ha decidido no abrir sus espacios verdes: Madrid. Sábado 2 de mayo —aunque es válido para el domingo y el lunes—, 8 de la mañana. Calzarse las zapatillas, los pantalones cortos y rumbo a lo que más se parezca o acerque a una zona verde. Está en el ADN, correr por donde haya menos asfalto y menos tubos de escape. Mala idea, obviamente se le ha ocurrido lo mismo a medio barrio. Si en las aceras de zonas sin apenas arbolitos ya es complicado separarse no ya cinco, sino los dos metros de rigor, al llegar al lateral de Madrid Río aquello parece la San Silvestre concentrada en las aceras. 

Tras unos segundos no lo ves nada claro. Decides saltarte la norma y sumarte a quienes están invadiendo parte del carril bici. Al minuto, un ciclista, con razón y malos modos, te pega un grito en la oreja cuando pasa a tu lado. A un costado, cuatro carriles de asfalto vacíos con algún coche esporádico y, al otro, un inmenso parque sin un alma y con muchos policías municipales en sus entradas controlando que nadie pase.

Es un hecho que miles de personas se apiñaron —y apiñarán— literalmente para hacer deporte en todas las ciudades del Estado, y no solo en los laterales de las zonas verdes. También lo es que en ciudades como Barcelona, donde las zonas verdes se han abierto y se han cerrado 44 calles para uso deportivo y peatonal, se produjeron hechos similares. Las imágenes del paseo marítimo abarrotado abriendo telediarios lo constatan.

En la mayor megaurbe del Estado español, 2.500 hectáreas de zonas verdes, ideales para que esos corredores se dispersen, siguen clausuradas

Sin embargo, ante lo que se veía venir, aquí hay algo que ha generado críticas y revuelo: por qué en muchas ciudades —entre ellas la más grande, pero también en otras grandes aglomeraciones como Móstoles o Leganés, al contrario que han hecho la mayoría de grandes ciudades— no se ha extendido el espacio público abriendo parques y jardines para peatones y ciclistas y reestructurando temporalmente vías destinadas al coche. No hay que ser un lince para saber que el personal, tras mes y medio de clausura, iba a tomar las calles cual manifestación. Qué menos tras lo que le ha tocado pasar.

En la mayor megaurbe del Estado español, 2.500 hectáreas de zonas verdes ideales para que esos corredores se dispersen, siguen clausuradas. Las razones esgrimidas por el equipo municipal son relativas al control ciudadano. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, justificaba la medida debido a razones de control ciudadano y señalaba que así se evitan aglomeraciones como forma de evitar que se produzca un rebrote. El problema es si el rebrote lo facilita justo lo contrario: la masificación en vías de una ciudad con demasiada gente y sus zonas verdes vacías.

Que la policía tendría que controlar que grupos de chavales no tan concienciados se junten cobijados por setos es un hecho, pero con la cantidad de efectivos que tienen las urbes españolas, generalmente superiores a otras localidades de nuestro entorno, no parece una tarea tan ardua. El Retiro se peinaba cada noche en la vieja normalidad, y si la cantidad de agentes dedicados a intentar que el vulgo no pase a las zonas verdes estos días se pusiese a ello gran parte de la tarea estaría hecha. Incluso en ayuntamientos nada sospechosos de saltarse la tradición local de tener a un regidor popular desde los tiempos de la dictadura, como Pozuelo de Alarcón, han dado vía libre en sus zonas verdes. 

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, que ha dicho que la decisión se tomó “por prudencia”, abrió este domingo la puerta a que las zonas verdes dejasen de estar clausuradas. Literalmente ha dicho que le están “dando una vuelta”. No tarden demasiado. No sería descabellado sacar la conclusión de que, con algo tan simple, y por la simple reducción numérica de contagios, no solo la ciudadanía llevaría algo mejor este desconfinamiento, incluso se salvarían vidas.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Comunidad de Madrid
Pandemia La Fiscalía abre diligencias por primera vez por muertes sin asistencia en domicilio durante la pandemia
Los padres de Francisco Rodríguez fallecieron en su domicilio de Madrid tras contagiarse de covid-19 y después de llamar de manera recurrente para conseguir asistencia médica que no consiguieron a tiempo.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Presentan la primera demanda por mayores muertos en domicilios sin traslado hospitalario durante el covid
Los padres de Francisco murieron sin recibir traslado hospitalario ni asistencia médica a tiempo cuando enfermaron por covid-19 en su domicilio de Madrid, entre mediados de marzo y principios de abril de 2020.
Sanidad
Investigación La exclusión hospitalaria de mayores durante el covid en Madrid precedió a la existencia de protocolos
El primer protocolo de la Consejería de Sanidad sobre derivación a hospitales de pacientes de covid residentes en centros de mayores es del 18 de marzo, pero la disminución de residentes derivados empezó el 7 de marzo, según una investigación.
#59422
5/5/2020 11:26

A esos ayuntamientos lo que les gusta es que la gente se apelotone en el transporte público para ir a currar.

0
0
juanTFK
juanTFK
4/5/2020 18:03

Parece una obsesión insana por el control de la ciudadanía, con cierto aroma a paternalismo rancio.
Son decisiones muy difíciles de explicar, más aún de comprender.
Dentro de poco tiempo se verán las consecuencias de esta insensatez. Veremos también si quienes han tomado estas decisiones asumen su responsabilidad o, como me temo, harán esperpénticas maniobras para echar la culpa al primer despistado que pase por ahí.

2
1
#59368
4/5/2020 16:37

Abrir parques en una ciudad de millones de personas implica que la mayoría(yo incluido) iríamos seguro. Eso es una locura. Se podría abrir la casa de campo por su tamaño y poco más.

0
3
#59355
4/5/2020 13:24

Deberían de diferenciar espacios para correr o hacer deporte de espacios para pasear, también se puede hacer que las franjas horarias sean diferentes para hacer las dos cosas. Ahora es un poco caótico estar paseando y otras personas haciendo deporte o corriendo encima de ti.

0
0
#59395
4/5/2020 22:44

Ya hay franjas horarias!!!

2
0
Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Galicia
Galicia La Xunta de Feijóo, condenada por negar visitas a una mujer que murió de cáncer por tener covid-19
La jueza dice que la situación exigía “flexibilizar” las medidas de prevención. Falleció a inicios de 2022 en el Hospital Álvaro Cunqueiro durante los últimos meses de la administración del jefe del PP con Julio García Comesaña de conselleiro.
Egipto
Egipto Ashraf Omar continúa en prisión provisional por dibujar
Ashraf Omar, caricaturista político del medio digital AlManassa, sigue en prisión preventiva indefinida tras ser arrestado violentamente en su domicilio el 22 de julio de 2024.

Últimas

Justicia
Justicia Rubiales, condenado por agresión sexual y absuelto del delito de coacciones
18 meses de multa con cuota de 20 euros al día por un delito de agresión sexual. Es la condena al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por los hechos ocurrido en la ceremonia de entrega e medallas del pasado mundial celebrado en agosto en Sidney.
Tribuna
Tribuna Verde de ecosocial, verde de educación pública
En nuestras aulas se ha colado una prisa ansiosa, que juzga al alumnado como un gasto, que lo dirige, poco a poco, a un mundo laboral tecnoptimista y completamente atomizador.
Más noticias
El Salto Radio
El Salto Radio Humedales necesarios
Damos un paseo radiofónico por algunos de los humedales de Andalucía, espacios fronterizos entre el mar y la tierra, tan necesarios para nuestra supervivencia. Lo hacemos con Juan Martín Bermúdez, de SALARTE y algunos oyentes.
Fascismo
Memoria antifascista Allí donde hay humo, hay fuego
A unos días de las elecciones alemanas, donde la ultraderecha acude fortalecida, un repaso sobre el proceso de desnazificación posterior a la Segunda Guerra Mundial y sus medias verdades.

Recomendadas

Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.
América Latina
Extrema derecha Los soldados de Donald Trump en América Latina
Mientras algunos presidentes latinoamericanos, con mayor o menor ímpetu, intentan ponerle freno, otros tantos se arrodillan y le rinden pleitesía sin recibir nada a cambio. ¿Quiénes son los súbditos latinoamericanos de Trump?