Colombia
El uribismo regresa al poder a pesar del histórico resultado de la izquierda

El triunfo de Iván Duque en las elecciones presidenciales colombianas con el 53,9% de los votos augura una derechización de la política exterior del país. 

petro
Seguidores del candidato de izquierda, Gustavo Petro, durante la noche electoral. Nelson Cárdenas
18 jun 2018 10:10

Histórico pero no suficiente. El candidato presidencial en Colombia de la izquierda, el ecologismo, las organizaciones étnicas y los defensores y defensoras de derechos Humanos, Gustavo Petro, logró un resultado histórico (8 millones de votos), pero no fue suficiente para evitar la victoria de Iván Duque, el hombre ungido por el ex presidente Álvaro Uribe y apoyado por toda la élite política y económica del país.

Este domingo, en las elecciones más tensas que se recuerden en el país de las alternancias entre gobernantes de las élites, se elegía entre el regreso del uribismo -y de todo lo que significa- y un proyecto que, denominado como Colombia Humana y sin maquinaria política tradicional detrás, logró hacer soñar a millones de colombianos con el triunfo. 

El resultado de Petro es histórico porque Juan Manuel Santos accedió a su segundo mandato con menos apoyo

Al final, con el 99,87% de los votos escrutados, apenas dos horas después del cierre de los centros de votación, Iván Duque, del partido Centro Democrático, lograba el 53,97% de los votos (10,3 millones de votos) frente al 41,81% (8 millones) logrado por Gustavo Petro, de Colombia Humana.

La primera reacción de uno de los políticos tradicionales que apoyaba a Duque al conocer el resultado, el ex alcalde de Bogotá, Jaime Castro, fue: "Este resultado demuestra que Colombia es tierra estéril para el comunismo". Lo dijo orgulloso y sus palabras resumen la campaña de miedo que impulsó el Centro Democrático y que se explica por el profundo sentimiento en contra de la izquierda instalado en Colombia, como en buena parte de América Latina, desde los años setenta. Y Petro, para la derecha colombiana, no es más que eso: un comunista.

De nada le sirvió al candidato alterno suavizar su discurso, ni aclarar mil veces que un gobierno presidido por él no expropiaría tierras ni copiaría fórmulas venezolanas. El miedo a lo que aquí se ha denominado como “castrochavismo” y la defensa de los privilegios de los sectores económicos tradicionales logró que en torno a Duque se unieran en la segunda vuelta de estas elecciones (la primer se celebró el 27 de mayo) los partidos que apoyaron al actual presidente Juan Manuel Santos, todos los gremios económicos, las iglesias cristianas (se calcula que sus dos partidos mueven cerca de 1,5 millones de votos) y una serie de personajes de dudoso pelaje, incluido el que fuera el jefe de los sicarios de Pablo Escobar, Jhon Jairo Velásquez Vásquez, alias ‘Popeye’.

Petro logró el apoyo de la mayoría de movimientos de base y de algunos políticos que juegan en los límites de lo establecido: Claudia López y el ex alcalde de Bogotá Antanas Mokus. Pero no consiguió que Sergio Fajardo, el autodenominado político de centro que fue alcalde de Medellín, o Humberto de La Calle, candidato liberal y jefe negociador por parte del Gobierno del acuerdo de paz con las FARC, se sumaran a Colombia Humana y el discurso de estos últimos promoviendo el voto en blanco le ha hecho mucho daño.

Petro a cambio logró el apoyo internacional de personajes como Chomsky, Piketti, Negri o Žižek. Anoche, el candidato de la izquierda aseguraba que todos esos apoyos llegaron porque “América Latina, el mundo, tenía esperanza en que el cambio, el milagro, se produjera en Colombia”.

El resultado de Petro es histórico porque Juan Manuel Santos accedió a su segundo mandato con menos apoyo (7,8 millones de votos) y porque los dos candidatos alternos que han retado a las élites tradicionales en Colombia se quedaron muy lejos de este resultado (el propio Mokus, en 2010, se quedó con 3,6 millones, y Carlos Gaviria, en 2006, sólo sumó 2,6 millones). Nunca la izquierda había llegado tan lejos en un país que tiene el récord de asesinato de sindicalistas, defensoras y defensores de derechos humanos, o líderes y lideresas ambientales.

Duque es un furibundo enemigo del gobierno de Venezuela, de Unasur y de todo lo que queda del ciclo de gobiernos progresistas de América Latina

Los 12 puntos de diferencia (2,3 millones de votos) entre Duque y Petro tienen muchas explicaciones, pero también una territorial. Colombia es un país donde, desde su independencia, hace 208 años, los poderes locales instalados desde la Colonia española han marcado, dinamitado o determinado el rumbo del país. Esta vez no ha sido diferente. Petro ganó en Bogotá, pero la capital no manda. El poder del uribismo en la rica Antioquía y en el Eje Cafetero, zona de colonización antioqueña, ha sido determinante. Allí las diferencias en la votación han sido de 50 puntos. Mientras, regiones con alto porcentaje de población afro o indígena y empobrecidas se han decantado por Petro. El candidato de la izquierda también ha ganado en el Valle del Cauca y en dos departamentos caribeños.

¿Y ahora?

El triunfo de Duque puede tener consecuencias drásticas en los destinos del país. No tanto en el modelo económico, tan neoliberal y extractivista como el del saliente Juan Manuel Santos, sino en el clima político, los procesos de paz y las relaciones internacionales.

Duque es un furibundo enemigo del gobierno de Venezuela, de Unasur y de todo lo que queda del ciclo de gobiernos progresistas de América Latina. Santos, también; pero la política del actual Gobierno ha rehuido las confrontaciones. Si Duque cumple sus amenazas y retoma la agresividad de su padrino político, Álvaro Uribe Vélez, la tensión geopolítica en la región aumentará.

Y este hecho tiene mucho que ver, además, con los procesos de construcción de paz que se intentan impulsar en el país. El partido de Duque, con Uribe como líder indiscutible, ha sido la principal piedra en el zapato del acuerdo que el Gobierno firmó con la guerrilla de las FARC en noviembre de 2016 y en campaña ya ha avisado que hay mucho que revisar. Es decir: que los ya “peluqueados” acuerdos sufrirán una revisión a la baja que consolide la sensación de victoria de las Fuerzas Militares de Colombia. Tampoco se ve claro el futuro para las nuevas instituciones nacidas del acuerdo con las FARC: la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas.

En esa misma línea, Duque ha anunciado que no tienen intención de seguir con la Mesa de Diálogos entre el Gobierno y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que en este momento opera en La Habana. El ya presidente repitió hasta el último día de campaña que lo único que ofrece al ELN es desarme, desmovilización y algunas ayudas para la reinserción.

El regreso del uribismo trae en la mochila cuentas pendientes, al haberse sentido traicionado por Juan Manuel Santos (que ya fue el elegido de Uribe en 2010), y necesidades urgentes, como blindarse ante los numerosos procesos judiciales abiertos por corrupción o por graves violaciones de derechos humanos a muchos de sus principales representantes

De momento, el 20 de julio, día en que se instala el nuevo Congreso de la República, se despejará la duda de si Álvaro Uribe será su nuevo presidente, y de aquí al 7 de agosto, cuando tome posesión el Gobierno de Duque, se tendrán muchos más elementos para anticipar sus derroteros.

En las filas de Colombia Humana este domingo por la noche la palabra que más se repetía era: “Resistencia”. Gustavo Petro, dirigiéndose a sus seguidores en un tono de vencedor, anunció que va a ser oposición y que “los 8 millones de colombianas y colombianos que han apoyado a Colombia Humana no van a permitir que nos devuelvan a la guerra”. Lamentó Petro que “haya pobres que sigan prefiriendo recibir dinero el día de las elecciones a cambiar las injusticias del país”. Gustavo Petro terminó asegurando que “la clase política tradicional de Colombia ha muerto esta noche”. El inmenso capital político acumulado en estas elecciones va a ser aprovechado. El siguiente escenario es el de las elecciones regionales y locales de 2019.

Archivado en: Colombia
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Colombia
Colombia Sostener la vida en un ETCR
En la vereda colombiana La Plancha, la convivencia entre excombatientes y población civil es una realidad marcada por necesidades comunes.
Análisis
Análisis Racionar el agua, cortar derechos; historias desde Bogotá
Ante la sequía, la alcaldía de la capital colombiana arrancó con una política de racionamiento de agua. La medida ha puesto sobre la mesa las dinámicas estructurales que acompañan a la crisis climática.
#18946
18/6/2018 17:54

https://www.lahaine.org/mundo.php/lento-parto-en-colombia

http://www.revistalacomuna.com/opinion/fajardo-tibio/

0
1
Ocupación israelí
Ocupación israelí Israel ataca Rafah y se hace con el paso fronterizo con Egipto
Tel Aviv da la espalda a las negociaciones internacionales que piden un alto el fuego e invade Rafah, el último refugio de los palestinos de la Franja expulsados por la ofensiva israelí.
Palestina
Opinión Israel deja a la humanidad sin refugio
Otra vez Israel nos demuestra que puede hacer lo que quiera. Sus tentáculos de intereses económicos y sus sofisticadas bombas son capaces de asesinar a la justicia misma.
Universidad pública
Protestas contra el genocidio El consejero de Educación de Madrid pide sacar “la política” de la facultad de Políticas
La Comunidad de Madrid reacciona contra una declaración universitaria que exige al Santander, con quien la UCM mantiene un convenio, que deje de financiar proyectos contaminantes y a la industria armamentística corresponsable del genocidio en Gaza.
Sanidad pública
Sanidad Pública Aumenta el gasto en conciertos sanitarios mientras el Ministerio crea un observatorio de la corrupción
Organizaciones como Mareas Blancas piden la derogación de la ley 15/97, al tiempo que esperan el borrador de una nueva ley de gestión pública que el Ministerio de Sanidad estaría ultimando con los diferentes grupos parlamentarios.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Podemos amenaza con romper con el Gobierno si no aprueba una nueva moratoria hipotecaria
La medida vence el próximo 15 de mayo y protege al menos a 30.000 hogares. La PAH defiende que la ley no solo tiene que ser prorrogada sino mejorada para que llegue a las familias que la necesitan.
Contaminación
Contaminación Los entornos escolares suspenden en calidad del aire
Un informe analiza 114 entornos escolares de cinco provincias y los resultados son alarmantes: ninguno cumple las recomendaciones de la OMS. Solo una quincena de municipios de los 149 obligados a ello ha implantado su zona de bajas emisiones.
Análisis
Análisis Financiarización, extracción de rentas y acuerdos público-privados: tiempos de maleza
Estos elementos interconectados refuerzan las estructuras de poder que limitan la verdadera democracia y centralizan el control económico.

Últimas

Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Análisis
Análisis Mercados de carbono sesgados, distorsionados y debilitados
Un reciente documento del Fondo Monetario Internacional reconocía que «las diferencias existentes entre los precios eficientes y los precios al por menor de los combustibles son enormes y generalizadas».
Gasto militar
Gasto militar El Gobierno reconoce 22.000 millones de nuevos programas de armas, el doble del presupuesto de Defensa
La cifra admitida por el Gobierno se queda corta, según denuncia el Grupo Tortuga, ya que esconde sobrecostes, créditos a coste cero y otros gastos asociados a esta nueva escalada armamentística.
Sidecar
Sidecar El núcleo de Europa
En los años de auge de las décadas de 2000 y 2010, Alemania consolidó su posición como plataforma de producción globalizada, pero los triunfos de ayer ensombrecen hoy su renqueante economía orientada a la exportación.
Más noticias
Literatura
Azahara Palomeque “Yo quería hacer una novela que fuera un torrente de voz”
Azahara Palomeque realiza en su última obra, ‘Huracán de negras palomas’, un ácido repaso de la desigualdad, la racialización y la soledad, en el marco de unos Estados Unidos de difícil redención ética.
Desempleo
Paro El paro cae en abril y se superan los 21 millones de afiliados
La cifra de desempleo disminuye en 60.503 personas y se sitúa en 2.666.500, la cifra más baja registrada desde septiembre de 2008.
Baleares
Plurilingüismo Mallorquines y mallorquinas salen a la calle y gritan un rotundo “Sí a la llengua”
La Plaça Major de Palma se quedó pequeña para albergar a las miles de personas que acudieron al acto organizado por la OCB en defensa del catalán.
Literatura
Literatura La Feria del Libro de Buenos Aires, sin plata
La 48º edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires no es una más, se volvió un síntoma de la situación del libro y su industria en la Argentina gobernada por la extrema derecha.

Recomendadas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Lawfare
CLOACAS DEL ESTADO Manos Limpias: génesis de la querella como arma política de la ultraderecha
Ruiz-Mateos fue pionero en presentar demandas y personarse como acusación particular en causas judiciales sobre la corrupción del PSOE. Miguel Ángel Rodríguez y Manos Limpias sofisticaron este ‘modus operandi’ con bulos desde “pseudomedios”.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.