We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Unión Europea
Golpe de palacio en la Comisión Europea: Juncker entrega todo el poder a su “Rasputín”
Martin Selmayr es el nuevo secretario general de la Comisión Europea, un puesto desde el que se controla a las más de 33.000 personas que trabajan para la institución. La decisión, tomada al margen del escrutinio público, ha sido duramente criticada por los propios socios del Partido Popular Europeo.
La promoción exprés de Martin Selmayr a la secretaría general de la Comisión Europea, auspiciada por el presidente de la Comisión Jean Claude Juncker, ha puesto de relieve la magnitud de la “burbuja” que es Bruselas, además de consolidar la “germanización” de la Unión Europea. El llamado #SelmayrGate ha dividido la gran coalición formada por el PPE (Partido Popular Europeo, que ha promovido el ascenso de Selmayr) los socialdemócratas europeos (PSE) y los liberales de Alde.
Martin Selmayr procede de la CDU, el partido de Angela Merkel y es el nuevo responsable “civil” de la Comisión, que controla una plantilla de 33.000 funcionarios y funcionarias, lo que le otorga un poder casi absoluto para marcar las líneas de trabajo de la UE, en un momento complejo, tras la constatación del desgaste del proyecto europeo en las elecciones italianas y alemanas de los últimos meses.
El fondo político del caso está en segundo plano por la forma en la que Juncker ha maniobrado para situar a su mano derecha en cabeza de la Comisión Europea. El periodista de Liberàtion, Jean Quatremer, ha denunciado las irregularidades del caso: el posible trato de favor y que no se han respetado los procedimientos de concurrencia y transparencia para que otros funcionarios pudieran optar al puesto.
En el artículo "Un golpe típico de la UE: el asombroso acaparamiento de poder de Martin Selmayr", Quatremer explica que Juncker llevó a cabo su movimiento con una convocatoria extraordinaria a la prensa el 21 de febrero, que no tenía ninguna noticia de que hubiese una vacante a la secretaría general de la Comisión, hasta entonces dirigida por el neerlandés Alexander Italianer. El periodista francés avanza que Juncker está “cansado” y que Selmayr está ejerciendo de facto como presidente de la Comisión Europea, usando a Juncker como “una marioneta”.
Además, el periodista francés ha explicado el silencio de los comisarios salientes: Selmayr les ha anunciado que subirá de dos a tres e incluso cinco años el mantenimiento de los salarios tras su paso por la Comisión, además de otros beneficios.
Las críticas al nombramiento de Selmayr se han extendido también al PPE, que en declaraciones a la web de información europea Politico ha lamentado, por boca del eurodiputado Françoise Grossetête, que se está dando “munición” a los partidos euroescépticos. Otro miembro del PPE compara el movimiento del dúo Juncker-Selmayr con la “burocracia secreta del siglo XIX”.
Selmayr, que ha sido calificado como el Rasputín de Juncker, ha dicho que su modelo político es Pascal Lamy, jefe de gabinete del presidente Jacques Delors (1985-1994), que se ganó el apodo de "la Bestia del Berlaymont". Como Lamy, que desarrolló su carrera en el comercio internacional, los acuerdos comerciales son el principal eje de desarrollo de la política comunitaria para Selmayr.
El nuevo jefe de la Comisión Europea procede del conglomerado mediático Bertelsmann, presente en España en el grupo Atresmedia. En su currículum también cuenta con la denuncia de manipulación de estadísticas sobre asentamiento de refugiados para defender el acuerdo con Turquía, del que se cumplen este mes dos años de vigencia.
Enchufismo: el Parlamento Europeo cuestiona el ascenso de la 'mano derecha' de Juncker (@MartinSelmayr) como Secretario General de la Comisión Europeo, un puesto con mucho poder en el engranaje comunitario. Explicamos el #SelmayrGate en este hilo ⤵️ pic.twitter.com/cqjoN10kf6
— Tom Kucharz (@tomkucharz) 14 de marzo de 2018