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Justicia
“Mami, tengo miedo”, Gabriel revela una llamada desesperada a su madre, Juana Rivas
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No es la primera vez que Gabriel comunica su testimonio a los medios de comunicación. Gabriel Arcuri Rivas, que ya tiene 18 años, hizo público a principios de diciembre de 2024, un vídeo en el que pedía ayuda en su nombre y su hermano, “a aquellas personas que sí pueden hacer algo por nosotros y hasta día de hoy no han hecho”, donde narraba “el infierno” que durante muchos años no había podido expresar. Gabriel, hace dos años, pudo expresar ante la justicia su deseo de volver con su madre y desde los 16 años vive con ella.
Hoy lunes, 24 de febrero, Gabriel ha vuelto a enviar su testimonio, esta vez en un audio que envió a su madre pidiendo ayuda cuando tenía 13 años desde Italia. El equipo jurídico de Juana Rivas ha señalado en una nota de prensa que Gabriel “ha autorizado la difusión pública de esta llamada de auxilio, porque tiene miedo de que su hermano Daniel, de tan solo 11 años de edad, pueda volver a Italia con su padre, procesado en ese país por maltratar y condenado en España por violencia de género”.
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En el audio, Gabriel dice, “Mami, por favor, tengo miedo, no quiero volver con papi. Me ha pegao y me ha cogío a Dani y le ha pegado en la cabeza muy fuerte, y le ha dicho: “Figlio di puttana, stronzo figlio di puttana; Sei come tua madre, piccolo nano di merda” (traducción: “Hijo de puta, gilipollas hijo de puta; eres como tu madre, pequeño enano de mierda”), … y yo he dicho por favor que quería por favor hablar con la mami, quería saludarla y que Dani se consolara, porque lloraba, porque quería hablar contigo, pero papi no quería, y papi le decía: “No, che non c'è la mamma, che non c'è la mamma” (traducción: “No, que no está tu mamá, que no está tu mamá).… le he preguntao por favor si podías … eh … podía hablar contigo, podía llamarte, y me dijo: “Figlio di putana schifoso, no probare a fare una cosa del genere, vergognati”. (Traducción: ”Asqueroso hijo de puta, no intentes hacer algo así, avergüénzate"). Me cogió del brazo y me tiró contra la pared, a Dani le hizo lo mismo, lo levantó de la camiseta y lo tiró en la escalera y se hizo daño en la espalda, y se quedó llorando … en el suelo.
Los letrados apuntan que esta grabación, otros audios y mensajes de texto similares emitidos por Daniel y Gabriel, partes médicos, fotografías de lesiones, y declaraciones de testigos, entre otras pruebas, han sido presentadas a la Justicia italiana y a la Justicia española y han resaltado el testimonio prestado por Daniel el pasado día 7 de enero ante la Jueza de Guardia de Granada, “quien le escuchó por primera y única vez en España, y decidió dar plena credibilidad al menor y protegerle, ante los gravísimos actos de maltrato que describe”.
“Juana ha recibido durante todos estos años desesperadas solicitudes de auxilio de sus hijos”, Carlos Aránguez, abogado de Juana Rivas.
Carlos Aránguez ha reiterado que aunque Francesco Arcuri, el padre de los niños, afirmaba en una reciente entrevista “que Juana no tenía interés en llamar o ver a sus hijos”. El letrado sostiene que a realidad es que Arcuri ejercía violencia física y psíquica sobre los niños para impedir cualquier comunicación con su madre que escapara a su estricto control, que siempre intentaba estar presente cuando los niños llamaban a Juana, y consultaba compulsivamente el listado de llamadas y los niños tenían que llamar a su madre siempre a escondidas. Carlos hace público que Juana ha recibido durante todos estos años desesperadas solicitudes de auxilio de sus hijos, que un perito judicial italiano ha examinado los terminales, y ha acreditado que las llamadas y mensajes entre los niños y su madre no han sido manipulados.
El recorrido judicial del caso de Juana Rivas y sus hijos
La Corte de Apelación de Cagliari en Italia otorgó el pasado 18 de febrero la custodia de Daniel Arcuri Rivas en exclusiva al padre, Francesco Arcuri. El proceso civil para dirimir la custodia del hijo menor tuvo que cambiar de tribunal cuando la Corte Suprema de Italia revocó una primera decisión, que también daba la custodia exclusiva a Arcuri, apelando al interés superior del menor, a la conveniencia de no separar a los hermanos y al cumplimiento de la normativa europea sobre violencia de género y doméstica ya que en la actualidad, Francesco Arcuri está siendo procesado en Italia por supuestos maltratos físicos y psicológicos a sus hijos. El nuevo tribunal asignado en Cagliari para retomar el caso de la custodia por no disponer de otra sala de derecho civil fue la sala de lo mercantil, sin especialización en la materia. La decisión ha sido recurrida por el equipo jurídico de Juana Rivas que recordaron que “la anterior sentencia civil, con argumentos similares y los mismos peritos, fue anulada por la Corte de Casación Italiana”.
Daniel, el hijo menor de Juana y Francesco, no ha salido de nuestro país porque todavía le protege la medida cautelar ordenada por el juzgado de Instrucción nº 4 de Granada.Daniel, el hijo menor de Juana y Francesco, no ha salido de nuestro país porque todavía le protege la medida cautelar ordenada por el juzgado de Instrucción nº 4 de Granada de no reintegración del menor a su padre después de escuchar a Daniel el martes 7 de enero en una exploración tras la cual dictaminó que el relato del menor era lo suficientemente “serio y convincente en la expresión de la situación de temor por su seguridad y peligro extremo para su integridad física que siente padecer en caso de retorno con su padre a Italia”. El menor vive actualmente con su madre y su hermano en Granada y está escolarizado en el municipio donde habitan.
Granada
Juana Rivas El juzgado de violencia contra la mujer archiva la denuncia de violencia vicaria de Rivas contra Arcuri
Juana Rivas y Gabriel, su hijo mayor, han interpuesto denuncias por acoso telefónico y violencia vicaria contra Francesco Arcuri desde diciembre, ambas han sido archivadas por la justicia de Granada que también se ha inhibido de abordar el caso en un largo ir y venir de un juzgado a otro, hasta llegar a la Audiencia Provincial. Ésta resolvió que la única causa que permanece abierta, la de supuestos malos tratos contra Arcuri, tenía que asumirla el Juzgado de Instrucción número 9 de Granada, que acordó remitirla a la Justicia italiana al considerar “que los hechos objeto de investigación tuvieron lugar presuntamente en el domicilio familiar en Cagliari, donde el menor reside con su progenitor al tener éste atribuida la guarda y custodia por resolución judicial”, según informaba Europa Press.
El equipo jurídico de Juana Rivas ha recurrido la decisión de que el caso se envíe a la Corte de Apelación de Cagliari en Italia sin que en España se aplique el delito de violencia vicaria con la convicción de que “Daniel y Gabriel son ciudadanos españoles y están en territorio nacional de nuestro país”.