Crisis climática
No rescatar el ayer, invertir en el mañana

El rescate tiene precio, y es climático.

Controladores áereos
En la Unión Europea, el queroseno para aviación está exento de impuestos.

coportavoz de EQUO y exeurodiputado de los Verdes/ALE

14 may 2020 05:39

¿Tenemos que rescatar a Iberia y Vueling? ¿Tenemos que rescatar a la industria automovilística con un nuevo Plan Renove? Si pensáramos como en el siglo XX, la respuesta sería sí, sin duda. Son decenas de miles de empleos y sectores estratégicos para un desarrollo basado en el coche individual y en el viajar cuanto más lejos y rápido, mejor.

Sin embargo, ya no estamos en el siglo XX, sino en el XXI. Además del empleo y de la industria, existe una nueva cuestión fundamental: la sostenibilidad de la vida. La emergencia sanitaria ya ha puesto en evidencia la fragilidad de nuestras sociedades y la centralidad de la salud como prioridad social y política. Sobre nosotros se cierne otra crisis entrelazada con la primera, y a estas alturas ya bien conocida y analizada, y de efectos sanitarios, sociales y económicos muchos más devastadores a medio y largo plazo: la emergencia climática.

Asimismo, es bien sabido que el transporte es unos de los sectores que más contamina nuestra salud y más contribuye al cambio climático. La quema de gasoil o diésel en los coches o de queroseno en los aviones deja decenas de miles de vidas humanas truncadas cada año y aún más en el futuro. Por tanto, volver a rescatar estos sectores para que todo siga igual, o simplemente con correctivos verdes al margen, como el anunciado por el Gobierno, sería cometer un error garrafal, que comprometería nuestra salud y supervivencia a medio y largo plazo.

En vez de un Plan Renove, necesitamos un Plan de choque por la movilidad sostenible, donde todos los esfuerzos económicos se destinen a apoyar la nueva movilidad limpia, innovadora y eléctrica de fuentes renovables

Al mismo tiempo, ante el shock económico que ha sufrido este sector, con la consecuente pérdida de numerosos empleos, es también evidente que los poderes públicos tienen que actuar. Ahora bien, lo pueden hacer de dos maneras. Pueden repetir los errores de la crisis de 2008, cuando se privatizaron los beneficios y socializaron las pérdidas sin ningún tipo de condicionalidad socioecológica, por ejemplo lanzando a lo bruto un Plan Renove que ancló para años la movilidad insostenible del siglo pasado. O con valentía ante la encrucijada histórica en la que nos encontramos, pueden aprovechar las enormes ayudas previstas al servicio de una gran transición ecológica y justa, que marcará los próximos decenios.

Así que primero se trata de poner condiciones ecológicas claras a los rescates y planes de recuperación, además de no operar en paraísos fiscales, no repartir dividendos y terminar con la brecha salarial de género. Solo habrá rescate si se cumple el Acuerdo climático de París. El rescate es a cambio de un esfuerzo y reestructuración sin precedentes del sector, para contribuir a la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero a un ritmo, según Naciones Unidas, de 7.6% al año. El rescate tiene precio, y es climático. 

En concreto, si hablamos del sector automovilístico, no puede haber ayudas para los coches del pasado, ya sean de gasoil o diésel. En vez de un Plan Renove, necesitamos un Plan de choque por la movilidad sostenible, donde todos los esfuerzos económicos se destinen a apoyar la nueva movilidad limpia, innovadora y eléctrica de fuentes renovables.

Hay que redimensionar el sobredesarrollado transporte aéreo para ajustarle al contexto de emergencia climática y de crisis económica post covid-19

Hablamos de una inversión masiva para fomentar el uso seguro de los medios limpios, como la bici, el transporte colectivo y público o el coche compartido. Inyectar dinero sí, pero para establecer un fondo estatal extraordinario para el transporte público, incluyendo infraestructuras y ayudas para la movilidad activa peatonal y ciclista, proponer tarifas atractivas frente al transporte privado, incentivar la compra, reparación y uso de las bicicletas no motorizadas y eléctricas, o aportar ayudas para la adquisición de coches eléctricos, empezando por los vehículos de servicios y distribución urbana de mercancías. O sea, inyectar dinero con sentido común climático y de salud pública.

Para las compañías aéreas, la lógica es la misma. Rescate sí, pero con condicionalidad socioecológica. El dinero público se tendría que utilizar para poner en pie un plan de viabilidad que se base en una proyección realista: hay que redimensionar el sobredesarrollado transporte aéreo para ajustarle al contexto de emergencia climática y de crisis económica post covid-19. En concreto, es preciso poner coto al insostenible modelo low cost, reducir los vuelos de corta distancia, empezando por los que tienen alternativa de tren y, conjuntamente con la UE, impulsar y recuperar los trenes nocturnos de larga distancia, así como racionalizar el número y tamaño de los aeropuertos. Para que coja vuelo la transición ecológica, el sector aeronáutico tiene que aterrizar en la pista climática.

En paralelo y de forma prioritaria, es necesario rescatar a las personas trabajadoras de estos sectores. Primero a corto plazo, es precisa una red para que nadie se quede atrás, a través de una renta básica de emergencia y luego permanente. Y se trata de poner en marcha, desde ya, planes de transición hacia una industria de movilidad con cero emisiones e intensivos en empleos de calidad y sostenibles, para satisfacer la creciente demanda de alternativas a los motores de combustión y la infraestructura de carga, tanto para automóviles, como para furgonetas o autobuses. Esto iría acompañado de programas de formación continua, que brindarían nuevas oportunidades profesionales a las personas trabajadoras del sector del transporte fósil hacia la movilidad sostenible y limpia, y otros sectores verdes. La transición será justa o no será.

Para que coja vuelo la transición ecológica, el sector aeronáutico tiene que aterrizar en la pista climática

Y para generar margen presupuestario, es el momento de realizar una moratoria en la ejecución de las partidas de gasto en las grandes infraestructuras. Hasta no realizar una evaluación de su viabilidad económico-financiera futura, a la luz del panorama postcrisis y de los cumplimientos del Acuerdo climático de París, nada justifica seguir con el Tren de Alta Velocidad o la ampliación de aeropuertos como el Prat. Junto con una tasa sobre el queroseno hoy inexistente, ¡cuánto dinero podríamos redireccionar de estas partidas presupuestarias hacia las políticas de movilidad e infraestructuras sostenibles!

La crisis de la covid-19 es un punto de inflexión. Aprendamos de ella para cambiar de rumbo hacia la justicia social y ecológica. Y para ello, tengámoslo claro: no rescatemos el mundo de ayer, invirtamos en el mundo de mañana.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Crisis climática
Crisis climática La UE se entrega al ardor guerrero mientras descuida la crisis social y la emergencia climática
Varios países de la UE ya están recortando drásticamente en servicios públicos y estado del bienestar para poder costear el aumento del presupuesto militar.
Crisis climática
Balance climático El Mediterráneo se consolida como zona especialmente vulnerable al cambio climático
Las víctimas de la dana suponen dos tercios de las muertes por fenómenos extremos en Europa en 2024, según un informe conjunto de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial que hace un balance climático del continente el pasado año.
Pensamiento
Fabian Scheidler “El progreso tecnológico se utiliza para aumentar la riqueza de unos pocos. No sirve a nadie más”
El autor de ‘El fin de la megamáquina. Historia de una civilización en vías de colapso’ ha desarrollado la metáfora del capitalismo como una máquina destructora y reivindica que hay oportunidades para el cambio.
#60569
14/5/2020 15:33

Estoy 100% de acuerdo, pero de verdad... No tengo esperanza, me duele pero no nos creo capaces como conjunto de cambiarlo todo tanto. Supongo que al menos, podríamos tomarlo como un punto de inflexión a nivel personal: Cambiemos nuestra vida después de este paréntesis, ya basta de excusas, empezar de lo pequeño a lo grande... ¿Pero a nivel global? ¿Lo veis posible? Acepto sugerencias y recomendaciones, saludos

2
1
#60536
14/5/2020 11:17

Errata a corregir: "vehículos de gasoil o diesel" son la misma cosa. Supongo que querría decir Gasolina o Diesel.

0
0
Economía social y solidaria
Tecnología Inteligencia Artificial y economía solidaria: ¿posibles aliadas?
¿Cómo debe relacionarse la economía solidaria con una tecnología que vulnera derechos humanos y ambientales constantemente? Cooperativas e investigadoras tecnológicas animan al movimiento a perderle el miedo y a utilizarla de manera crítica.
Multinacionales
Multinacionales Maersk y las rutas de complicidad con el genocidio israelí en Gaza
Crece la presión internacional contra la naviera danesa que está aprovisionando a Israel de armas para cometer el genocidio de Gaza en contra de las medidas cautelares tomadas por la Corte Internacional de Justicia.
Historia
Historia Cuando la solidaridad antifascista reunió a musulmanes, judíos y cristianos en la España republicana
Marc Almodóvar y Andre Rosés rescatan a los combatientes árabes de la Brigadas Internacionales en el libro ‘Moros contra Franco. El antifascismo y la Guerra Civil española en el mundo árabe’.
Crisis climática
Crisis climática La UE se entrega al ardor guerrero mientras descuida la crisis social y la emergencia climática
Varios países de la UE ya están recortando drásticamente en servicios públicos y estado del bienestar para poder costear el aumento del presupuesto militar.
El Salto n.78
El Salto 78 Nueva revista, viejas injusticias: hablemos de Violencia Institucional
En el último número de la revista de El Salto dedicamos la portada y nuestro “Panorama” a una de las violencias que sufren las mujeres solo por el hecho de serlo, la que aún a día de hoy emana de un sistema irracional y patriarcal.

Últimas

Eventos
Taller de podcast El Salto invita a estudiantes a explorar las posibilidades del formato audiovisual
Proponemos un taller de guion y producción de programas para estudiantes de comunicación y periodismo los días 24 de abril y 8 de mayo.
Opinión
Space X Los viajes al espacio y el efecto Katy Perry
El 2024 fue el año más caliente desde que hay registros, mientras que Katy Perry y un puñado de millonarias nos deleitaron con su viaje espacial cortesía de Jeff Bezos.
Series
Series Masculinidad hegemónica o plomo: la sátira contra los hombres en ‘The White Lotus’
La serie culmina de forma trágica, llevando al extremo la lógica neoliberal, y se cuestiona si es posible una transformación que no termine cooptada por el propio patriarcado.
Más noticias
Palestina
Genocidio Israel sigue atacando hospitales, la ONU habla del peor momento en los 18 meses de asedio
No hay tregua en Gaza, donde Israel ha recrudecido las matanzas y sigue sin permitir el acceso de alimentos y productos de primera necesidad. La ONU denuncia asimismo el asesinato de más de 70 civiles en Líbano.
Opinión
Opinión La coherencia de las políticas de Trump
No se pueden entender los aranceles de Trump sin su lucha por el control de los recursos minerales, sin Groenlandia, Ucrania o la República Democrática de Congo.

Recomendadas

Valencià
València Duelo colectivo y brecha de género, las consecuencias de la dana en la salud mental
Más allá de lo material, el sufrimiento mental continúa golpeando las vidas de l´Horta Sud. Mujeres cuidadoras y colectivos vulnerables encabezan un luto que todavía no ha encontrado descanso.
Galicia
Galicia La UE cava hondo: litio gallego para el nuevo militarismo europeo
En pleno rearme ordenado desde Bruselas, Galicia entra en el tablero geopolítico como potencial proveedor de litio para la industria de defensa. Un enclave de alto valor ecológico en Doade (Ourense) se convertirá en cantera para baterías militares.