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Biodiversidad
El abrazo al Mar Menor se contagia por ecosistemas de toda la península en plena sequía
Coordinador de Clima y Medio Ambiente en El Salto. @PabloRCebo pablo.rivas@elsaltodiario.com
Con una sequía galopante, los embalses al 40%, saliendo de una ola de calor en la Península —con récord de temperatura en València, 45,6ºC registró el Aeropuerto de Manises— y entrando en otra en Canarias, las masas de agua situadas en la Península Ibérica están sufriendo lo indecible. Y es que al embate que los ecosistemas ibéricos sufren habitualmente —un cóctel de sobreexplotación y contaminación en el que entran multitud de agresiones— se suma la meteorología que acentúa la crisis climática.
Para defender estos espacios, una iniciativa que triunfó en 2021 y 2022 en la mayor laguna salada de Europa, el Mar Menor, ha saltado a todo el Estado. Cerca de un centenar de organizaciones y colectivos han convocado cadenas humanas en torno a 80 lagunas, masas de agua, ríos, acuíferos y todo tipo de ecosistemas acuáticos para exigir su protección.
Bajo el lema “Todas las aguas, la misma agua, todos los mares, el mismo mar”, la acción simultánea se produce “debido a la situación límite a la que se está llevando a numerosos ecosistemas acuáticos emblemáticos de España”, denuncian los convocantes
La campaña, de nombre Abrazo al agua, nace del exitoso Abrazo al Mar Menor, que consiguió en 2021 que más de 70.000 personas cubriesen mediante una cadena humana gran parte de los 73 kilómetros de perímetro de la amenazada albufera situada en la Región de Murcia. La iniciativa, una más de las que se han producido en los últimos años para defender este espacio, se enmarca en dentro de la explosión social acaecida en el Campo de Cartagena y en todo el Estado para defender un Mar Menor que ha colapsado en varias ocasiones, con repetidas crisis medioambientales y episodios de hipoxia —falta de oxígeno en el agua que produce la mortalidad de fauna y flora marina— debido principalmente al cóctel de nitratos y agroquímicos utilizados en la agricultura intensiva en la zona, que acaba en la laguna provocando el afloramiento masivo de fitoplancton.
Si bien la campaña se repitió en 2022, este año las organizaciones convocantes han saltado el perímetro de la amenazada albufera para ampliar la acción reivindicativa a ecosistemas acuáticos de la toda la península para denunciar su situación, para lo cual han contado con decenas de organizaciones sociales y ecologistas locales, regionales y estatales.
Todas, la misma
Bajo el lema “Todas las aguas, la misma agua, todos los mares, el mismo mar”, la acción simultánea, que en la mayoría de espacios comenzará a las 12 horas de esse sábado 12 de agosto, se produce “debido a la situación límite a la que se está llevando a numerosos ecosistemas acuáticos emblemáticos de España como Doñana, el Mar Menor o las Tablas de Daimiel”, denuncian las organizaciones convocantes en un comunicado, pues, como continúan, “las masas de agua y sus seres vivos están en grave peligro por la contaminación de origen humano: minas, agroindustrias, ganadería intensiva, plásticos, polución…”.
Este año la situación es especialmente crítica en varios ecosistemas acuáticos, principalmente por la sobreexplotación de los acuíferos que les dan vida para el uso de su agua para la agricultura y ganadería. Este mismo jueves se daba a conocer que la laguna principal del Parque Nacional de Doñana, la de Santa Olalla, se ha desecado completamente por segundo año consecutivo, algo que desde la Estación Biológica de Doñana constatan que no había ocurrido antes. Es un fenómeno que “atestigua la grave situación en la que se encuentra el sistema lagunar de Doñana y, con ello, toda la biodiversidad que depende de él”, denuncian desde el organismo.
Los ecologistas remarcan que la solución a estos problemas es simple: “Una gestión responsable de este bien común, solución que está en manos de los políticos”, y el cumplimiento de la Directiva Marco del Agua
Si, como señalan los datos de la Estación Biológica, el ciclo hidrológico 2021-22 fue el año con los niveles de precipitación más bajos de los últimos diez años, con 283mm, “en el presente las precipitaciones caídas han sido similares (337mm hasta agosto)”. A eso se suma que “en ambos años se están registrando temperaturas máximas muy elevadas y la mayor temperatura media anual registradas”, con 18,53ºC.
La situación meteorológica no ayuda así a lo que esta acrecentado la mano del ser humano, que sobreexplota el acuífero que nutre Doñana. “El 80% de estas lagunas se secaron antes de lo que se esperaría con los niveles de temperatura y precipitación registrados y el 84% se inundaron menos de lo previsto, lo cual evidencia que la actividad humana está alterando el equilibrio natural de las lagunas y está agravando el problema”, denuncian desde la Etsación Biológica, un organismo que se ha opuesto frontalmente a las políticas de la Junta que buscan amnistiar los pozos ilegales que secan ese acuífero.
Los estertores de Daimiel
Crítica es también la situación en otro parque nacional, esta vez en La Mancha: las Tablas de Daimiel. Si en julio las hectáreas inundadas eran un centenar, según publicó este diario, en agosto el emblemático espacio está prácticamente seco. A principios de este mes el director general de Medio Natural y Biodiversidad de la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, Félix Romero, señalaba a EFE que el espacio contaba ya solo con 50 hectáreas inundadas.
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Las cifras, que probablemente mejorarán algo debido al aporte de agua artificial previsto para mediados de mes, suponen ya una noticia habitual en los últimos años en un lugar que hoy yace muerto cuando debería tener hasta 1.800 hectáreas encharcadas.
Pero el Abrazo al Agua no llega solo a grandes parques nacionales emblemáticos amenazados. Desde las organizaciones convocantes señalan que quieren aprovechar la ocasión “para visibilizar los problemas con el agua de otros lugares menos conocidos pero igual de valiosos ambientalmente, entre los que se encuentran ríos, lagunas o humedales”.
En Castilla-La Mancha, además de las Tablas de Daimiel, otros 13 espacios acogerán cadenas humanas. Se trata de una región especialmente afectada, pues es la que registra mayor superficie de zonas vulnerables por nitratos de toda España, tanto en hectáreas (3,7 millones de hectáreas), como en porcentaje sobre la superficie (el 46,4% de C-LM), según un informe del Ministerio de Transición Ecológica en diciembre 2020. Las organizaciones convocantes denuncian además que se están extrayendo del acuífero de la Mancha Oriental más de 30 hm3 por encima de sus capacidad de recarga.
Para Paciencia Talaya, portavoz en Castilla-La Mancha de Stop Ganadería Industrial, “el mundo científico está de acuerdo en que actualmente las masas de agua están en grave peligro por la contaminación de origen humano: agricultura intensiva, ganadería industrial, plásticos… debido a intereses económicos cortoplacistas, intereses que están privatizando y esquilmando un recurso cada vez más escaso por el cambio climático”.
Los grupos ecologistas, sin embargo, remarcan que la solución a estos problemas es simple: “Una gestión responsable de este bien común, solución que está en manos de los políticos”, y el cumplimiento de la Directiva Marco del Agua. Con el Abrazo al agua las organizaciones convocantes pretenden así “remover las conciencias de una parte de la población que ignora el peligro que para las futuras y presentes generaciones supone esta deriva”.