Cine
Adiós a los Cinemes Méliès, un templo para el cine clásico escondido en Barcelona

Barcelona pierde una de sus salas más emblemáticas en plena crisis del coronavirus.

Cines Melies - 1
Carles Balagué, fundador de Cinemes Méliès, ha tenido que bajar la persiana de la sala. Victor Serri
16 nov 2020 07:00

Los cines Méliès se estrenaron hace más de veinte años con dos películas: El Gran Carnaval, dirigida por Billy Wilder, y Asunto interno, por Carles Balagué. Este último era también el impulsor de la nueva sala, creada con la “ilusión” de dedicarla al cine clásico. Truffaut, Godard, Hitchcock, Visconti y Pasolini son algunos de los directores que Balagué recuerda haber proyectado en los Méliès, siempre en versión original. Aunque de lo que más se enorgullece es de haber podido repasar casi todas las películas de Wilder, con tan solo “tres o cuatro” pendientes de visionarse en estos cines del barrio barcelonés del Eixample, que han echado el cierre este verano, tras el impacto de la crisis del coronavirus.

Inaugurados en diciembre de 1996, los Méliès habían conseguido sobrevivir a casi todo: un incendio en su cabina, que los hizo cerrar muchos meses y casi pensar que era el final; una inundación y la caída del techo de una de las salas

Inaugurados en diciembre de 1996, los Méliès habían conseguido sobrevivir a casi todo: un incendio en su cabina, que los hizo cerrar muchos meses y casi pensar que era el final; una inundación y la caída del techo de una de las salas... Hasta pagar 4.000 euros por una copia de Atrapa a un ladrón de Hitchcock. Y es que este era uno de los problemas con los que se encontraban los cines de Balagué: recuperar clásicos era caro y muchas veces el formato de las copias no se adaptaba a sus salas.

Pese a todas estas adversidades, los cines pudieron salir adelante, hasta que la pandemia los ha sentenciado. “Es como una plaga”, lamenta Balagué, que vio que no podía asumir los nuevos costes que tenía que afrontar para adaptarse a las nuevas medidas de distancia social. Tenía que contratar a más trabajadores y anular una sesión de su programación, además de toda la limpieza necesaria para garantizar la seguridad de los usuarios, lo que hacía “muy, muy difícil” poder continuar. Con las cuentas en la mano, el fundador de los Méliès vio que la columna de los gastos “se disparaba” y tomó la decisión de poner punto final a la historia de estas salas.

Cines Melies - 3
Adiós a los Cinemes Méliès en Barcelona. Victor Serri

Desde el anuncio del cierre, el interior de los Méliès se ha ido vaciando “poco a poco”. “Todo ha sido un poco complicado”, valora Balagué, pensando en toda la maquinaria y proyectores digitales y de 35mm que han tenido que mover. Balagué se ha guardado en un piso en el que vivió hace años su icónico logo, el que daba la bienvenida a los que se adentraban en sus salas.

LOS QUE LOS ECHARAN DE MENOS

David, ex vecino del cine, solía ir a menudo a los Méliès antes de mudarse fuera de España hace unos años. Arquitecto, la crisis de 2008 le afectó especialmente, por lo que acabó yéndose en 2013, continuando su carrera en África, principalmente en Marruecos y Costa de Marfil. Desde el extranjero, una de las cosas que más echó de menos fue la cultura de la que disfrutaba en Barcelona, pese a que en Casablanca tuvo la suerte de encontrar una sala un poco parecida a los Méliès.

“Para mí, significaban una mezcla entre el comercio de proximidad, por la cercanía y cariño de su oferta, y un templo por su devoción al cine en mayúsculas”, dice David, antiguo vecino de los Méliès

“Para mí, significaban una mezcla entre el comercio de proximidad, por la cercanía y cariño de su oferta, y un templo por su devoción al cine en mayúsculas”, expone David. A su vuelta a Barcelona, ha intentado volver a “esos lugares que le hicieron especial antes de marcharse” y se sorprende con la —cada vez más larga— lista de bajas. “El Méliès es uno más. Ley de vida, imagino”, lamenta.

Otra aficicionada a pasarse por los Méliès de vez en cuando, Txell, lo valora como “una pérdida para el barrio, la ciudad y las personas”. “Cada vez que cierra un cine es como si cerrasen una ventana”, defiende. “Fueron una larga historia de amor al cine, un espacio para difundir aquel cine tan especial, el clásico, el de autor, el alternativo… El que no entiende de masas, pero sí de historias por explicar. Seguro que los Méliès tienen muchas, como toda la gente que alguna vez ocupamos una butaca para ver las descabelladas escenas de películas de Lars Von Trier. Primeras citas, aficionados semanales, apasionados del cine clásico se quedan huérfanos con este cierre”, agrega.

Para vecinas del Eixample como Mercedes, los Méliès era “unos cines muy queridos”, porque, literalmente, estaban al girar la esquina. Ella, nacida en la calle Urgell con Consell de Cent y ahora viviendo en Avenida de Roma, apreciaba de esta sala que ofrecía películas en versión original y tenía una “muy buena y variada programación”. “Lo echo mucho de menos”, sostiene. Por suerte, se consuela un poco sabiendo que los Renoir, no muy lejos, en la calle Floridablanca, aún siguen.

Como decía Txell, cuando cierra un cine, lo sufre todo lo que hay a alrededor. La Crêperie Les 3 Pommes, a pocos metros de los Méliès, en la calle Aragón, lo ha acusado especialmente. Sus propietarios, Fred y Nelly, explican que muchos de los clientes que iban al Mèliés luego se pasaban por su restaurante para cenar. “Es una muy mala noticia”, subrayan, preocupados por que la “vida en el barrio” se vaya perdiendo lentamente, como ya ha pasado —un poco— con el cierre de los cines de Balagué.

LOS CIERRES, UN PROCESO DE REGENERACIÓN DEL SECTOR

Pese a que cada vez que se cierra una sala, el pesimismo se adueña de los amantes del cine —a los Méliès se han sumado recientemente los Texas, lo que ha despertado una ola de solidaridad entre los vecinos del barrio de Gràcia—, el presidente del Gremi de Cinemes de Catalunya, Camilo Tarazón, se niega a verlo todo negro. “Los cierres en Barcelona han coincidido con reaperturas”, remarca y lo enmarca en un proceso de regeneración del sector, como ocurre en tantos otros. “La gente vemos los cines como si fuesen algo especial y no dejan de ser negocios”, valora. Y añade: “En los últimos años la tendencia en la evolución de los espectadores ha sido positiva y, la idea general en los medios, de que la evolución del mercado doméstico hacia el streaming significa una competencia con el cine físico es absolutamente artificial”.

Tarazón no esconde la inquietud —o puede que desesperación— que ha despertado la crisis del coronavirus en el sector y cree que se tardará años a llegar a los niveles de consumo que se habían conseguido recientemente. Y muchas empresas no podrán continuar cuando todo se calme. En ese sentido, el profesor de la Universitat de Barcelona (UB) Juanjo Caballero señala que la crisis que está viviendo el sector actualmente supera y de largo la de 2008 —que llegó después de la crisis que había provocado el cambio hacia la digitalización y a la que siguió el ivazo de 2012—, cuando se registraron niveles de asistencia a los cines muy bajos. “Ha supuesto un colapso de la actividad del sector, a nivel de producción, distribución y exhibición”, explica e indica que “se batirá el récord” de caída de espectadores, teniendo en cuenta el impacto del confinamiento.

Sin embargo, el presidente del Gremi de Cinemes se muestra positivo: “Esto es como una película made in Hollywood y tendrá un final feliz. Cuando tú puedas ir a ver una película que te gusta esto será un final feliz”.

EL MODELO DE A CONTRACORRIENTE

Si eres una distribuidora y tus películas funcionan especialmente bien en determinados cines, como los Verdi —en Barcelona y Madrid—, ¿qué haces si están a punto de cerrar? En esa disyuntiva se encontró A Contracorriente hace un año, cuando su fundador se dirigió a ellos y les dijo “ahora o nunca”, según cuenta el máximo responsable de A Contracorriente y de los Verdi, Adolfo Blanco. “Para nosotros, que los Verdi subsistieran era algo que deseábamos como distribuidores”, sostiene. Para A Contracorriente, fue “una suerte estar ahí” para hacerlo posible, gracias a la ayuda del Institut Català de Finances (ICF) destinada a sanear sus cuentas. “A los Verdi los cogimos en la UCI, moribundos, en coma… Salieron del coma y ahora los tenemos en planta”, ilustra Blanco. Eso sí, a la espera de cómo acaba la pandemia.

Pese a todos los pesares, Blanco ve cómo el cine se ha convertido en un “bálsamo” en estos meses de coronavirus. “Tenemos señales que nos hacen esperar que va a recuperar la condición de entretenimiento preferido de los ciudadanos. Cuando ha habido películas como la de Santiago Segura la gente ha ido. O te quedas en casa o vas a renunciar a la vida. El cine es parte de la vida”, defiende. “Ahora todo es raro, todo es diferente. Ya veremos qué pasara cuando toda esta pesadilla haya pasado. No conozco a nadie que me diga que no quiere volver al cine, pero igual es porque me dedico al cine”, sostiene. Y, como dice Tarazón, el final feliz esta vez será sentarse de nuevo en una butaca.

Archivado en: Barcelona Cine
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cine
Cine y Economía Solidaria Cine y Economía Solidaria
El cine ha demostrado a lo largo de los años que es una potente herramienta para impulsar el cambio ¿Puede la Economía Social y Solidaria servir de
Transporte público
El 47 50 años después y el bus sigue sin llegar
La historia de Manolo Vital nos recuerda que cada viaje esconde historias de esfuerzo, y que a veces un autobús puede ser el único puente hacia la dignidad de un barrio olvidado.
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.
Turismo
Opinión Abolir el turismo
VV.AA.
Lleguemos a donde lleguemos, no puede ser que sea más fácil imaginar el fin del capitalismo que el fin del turismo.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el CAED de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el Estado español.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Más noticias
Comunidad de Madrid
Paro del profesorado Nueva jornada de huelga en la educación pública madrileña
Este jueves 21 de noviembre el profesorado se vuelve a levantar contra las políticas del gobierno de Díaz Ayuso, que mantiene paralizadas las negociaciones para mejorar sus condiciones laborales.
València
dana A las 20:11, era tarde
Todavía conservamos el horror de cientos de coches amontonados y arrastrados por la riada. Es por esos millones de turismos y sus emisiones ─aunque no solo─ que vivimos en un planeta que se está calentando demasiado rápido.

Recomendadas

Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
València
Dana y vivienda “La crisis de vivienda multiplicada por mil”: la dana evidencia el fracaso de las políticas del PP en València
La dana ha dejado a miles de familias sin hogar. Ante la inacción de las instituciones, han sido las redes familiares las que han asumido el peso de la ayuda. La Generalitat, tras décadas de mala gestión, solo ha podido ofrecer 314 pisos públicos.