Opinión
Ecuador, la estrategia de miedo y terror como artefacto de disuasión

Este sábado vimos cómo las únicas zonas que teóricamente se mantienen al margen de los horrores a los que abre el paso el Estado de Excepción se convertían en un infierno. Carta de la Colectiva Antipatriarcal por Acciones de Sororidad desde Quito tras varios días de represión del Gobierno de Lenín Moreno.

Ecuador CAPAS 1
Una mujer muestra una pancarta en una marcha en Quito en una imagen cedida por el colectivo CAPAS.
CAPAS (Colectiva Antipatriarcal por Acciones de Sororidad), Quito
13 oct 2019 10:30

El desasosiego y el pavor que se respira en las inmediaciones de la avenida 12 de Octubre y Patria arde y espanta más que los propios gases lacrimógenos que inundan el espacio que debió ser salvaguardado de la violencia y la oprobiosa represión orquestada por el gobierno de Lenín Moreno.

Tal y como se puede observar en las grandes pancartas que se distinguen en las fachadas de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador y la Universidad Politécnica Salesiana, nos encontramos en la zona que da cobijo a lxs compañerxs indígenas durante sus jornadas de resistencia en Quito, reconocida por el Ministerio de Gobierno, a petición de las universidades, como lugar de paz y de acogida humanitaria.

No obstante, algunas compañeras de la Colectiva Antipatriarcal CAPAS hemos sido testigas este fin de semana, una vez más, del cinismo inconmensurable de la ministra Romo y la banda de politiqueros inhumanos y cínicos que comandan la estrategia de represión con la que tratan de contener, franquear y borrar la voluntad del pueblo, en un desesperado intento de encasquetar a la ciudadanía precarizada el peso de las deudas que le fueron condonadas a la oligarquía bancaria y empresarial del país.

Nos encontramos ante un triste y obsceno escenario de violación de los principios humanitarios más básicos

Nos encontramos ante un triste y obsceno escenario de violación de los principios humanitarios más básicos que este 12 de octubre, Día de la Resistencia Indígena, nos recuerdan que debemos seguir moviéndonos, movilizándonos, para no dejar de sentir las cadenas que aún hoy siguen estrangulando nuestras posibilidades de buen vivir y dignidad, por muchos siglos que hayan transcurrido desde que iniciara el proyecto colonizador cuyas formas se transformaron y modernizaron, pero nunca su fondo: la naturalización e invisibilización de masacres y despojos de vidas y territorios devaluados continúa.

Las declaraciones de denuncia acerca de la grave violación de derechos humanos por parte del gobierno arrecian ya, más allá de organizaciones y colectivxs que resisten desde la primera fila en este agónico y desnivelado pulso, desde organismos poco sospechosos de pertenecer a las “turbas enardecidas”, “zánganos” y “saqueadores” que constituyen, en palabras literales de las autoridades políticas e individuos de la élite preocupados más bien por su trabajo, ganancias y la integridad de los adoquines, la muchedumbre salvaje, iletrada y violenta que consideran ha de quedarse en el páramo.

Ecuador CAPAS 2
Una mujer se dirige a sus compañeras en una concentración este sábado en Quito (imagen cedida por CAPAS).

Amnistía Internacional exigió a las autoridades ecuatorianas poner fin a la fuerte represión de las manifestaciones e investigar de forma rápida, independiente e imparcial todas las denuncias de detenciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza, torturas y malos tratos cometidos contra personas detenidas. Estas graves acusaciones no gozan de la discrecionalidad de las subjetividades y opiniones personales; lamentablemente, se sustentan sobre la cruda e irrebatible evidencia del derecho internacional: tal y como reconoce la Declaración de Turku, “el personal médico, religioso y demás personal humanitario será respetado y protegido y se le garantizará toda la ayuda disponible para el desempeño de sus funciones”; el documento A/HRC/25/38 del 24 de marzo de 2014 del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que también orienta a la promoción y protección de los derechos humanos en el contexto de las manifestaciones pacíficas, donde asegura que la libertad de expresión y reunión son derechos inalienables y el estado tiene el deber de proteger y no reprimir; y los valores consagrados en los Convenios de Ginebra y sus protocolos adicionales que protegen de la barbarie, durante el conflicto, a heridos, enfermos y personas que no participan en las hostilidades. Todos estos principios fueron desvirtuados, deshonrados, echados por tierra por Moreno, Romo y Jarrín de una sola vez, en un solo golpe, en una sola jornada.

Tras las disculpas por las granadas de gas lacrimógeno que la Policía hizo caer mientras declaraba su voluntad de diálogo, escribimos estas líneas mientras continúa el horror

Este sábado, día de luto por el asesinato de lxs 5 compañerxs de lucha que cayeron en las garras del régimen de Lenín Moreno, vimos cómo las únicas zonas que teóricamente se mantienen al margen de los horrores a los que abre el paso el Estado de Excepción (considerado constitucional por una Corte Constitucional Inconstitucional) se convertían en el infierno más temible de toda la ciudad de Quito.

Moreno, su ministra de interior, María Paula Romo, y su ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, procuradorxs de los intereses de la inhumana élite burguesa ecuatoriana, junto con la de sus indisociables socios dueños del capital transnacional, herederos todos ellos de una condición de privilegio vitalicio que, en el transcurso de una historia disparatada, se mantuvieron en la cumbre de una hegemonía económica y sociopolítica mezquina, racista y patriarcal a expensas del hambre, la miseria y exterminio de los cuerpos disidentes de América Latina, Nuestra América, mostraron hoy su cinismo y carencia de sentido ético y humano ante la ciudadanía mundial: tras las disculpas por las granadas de gas lacrimógeno que la Policía hizo caer en las universidades y contra el Ágora de la Casa de la Cultura, mientras reiteraban en sus declaraciones su voluntad de diálogo y la búsqueda de una solución a la crisis que mientras escribimos estas líneas continúa enredándose al son de las bombas del abuso y del horror del crimen de lesa humanidad, daban órdenes a sus fuerzas de represión para tomarse todas las atribuciones a la hora de atacar y reprimir al pueblo indígena en resistencia. La zona de tregua, el lugar donde miles de voluntarixs aliadxs procuran, a duras penas, brindar cuidados y condiciones para la recomposición a lxs compañerxs indígenas, es, en realidad, el blanco de la estrategia de desgaste del gobierno de lxs privilegiadxs que prefieren ver morir a lxs conciudadanxs racializadxs, exotizadxs y empobrecidxs, antes que ver peligrar su posición dominante en un país cuya riqueza natural y multicultural aborrecen.

Archivado en: Ecuador Opinión
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Amazonía
Pablo Fajardo “Sacrificaron la Amazonía y la vida de la gente por racismo y por la ganancia económica”
El activista y abogado Pablo Fajardo fue elegido hace casi 20 años por la Unión de Afectados por Texaco para el juicio más importante contra la petrolera Chevron. Dos décadas después sigue luchando por la justicia ambiental y social en Ecuador.
Extractivismo
Extractivismo As mulleres paran o espolio e defenden os territorios
Crónica dun encontro entre activistas medioambientais de Ecuador e Galiza onde reflexionaron sobre as prácticas das empresas extractivistas nos seus territorios coa complicidade dos gobernos de cada país.
Drogas
Geopolítica de las drogas Fentanilo: la droga que destruye Estados Unidos y golpea las puertas de América Latina
Más de 100.000 personas murieron en EE UU por sobredosis de fentanilo en 2023. Esta droga sintética amenaza con revolucionar el mercado mundial de los estupefacientes y provocar una “epidemia” en toda América Latina.
Estados Unidos
Estados Unidos Trump inaugura una utopía de los multimillonarios con su segundo mandato
En su primer mandato, los más ricos mostraron cierta distancia con el presidente Donald Trump. Ahora, la oligarquía estadounidense ha abrazado su pensamiento ‘antiwoke’ y aguarda los beneficios fiscales prometidos para seguir ampliando la desigualdad
Estados Unidos
El regreso de Trump Lo que Trump promete hacer el primer día de su vuelta al poder
El reelegido presidente de Estados Unidos plantea aprobar una batería de entre 50 y 100 decretos en las primeras horas en la Casa Blanca: deportaciones masivas, recorte en derechos civiles, ambientales y en los servicios públicos.
Desigualdad
Desigualdad La riqueza de los milmillonarios crece en 2024 tres veces más rápido
La desigualdad sigue trepando posiciones con una concentración de riqueza sin precedentes en la historia humana, según el reciente informe de Oxfam ‘El saqueo continúa’.
Ocupación israelí
Primera fase de la tregua Varios incidentes ponen a prueba el alto el fuego en Gaza
Cuando no se han cumplido 48 horas de tregua, la agencia Wafa denuncia dos ataques israelíes en Rafah, mientras un soldado habría muerto en Nablús. Al menos 830 camiones han entrado en la Franja con ayuda humanitaria.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Alto el fuego en Gaza: buscando en la paz lo que no lograron en la guerra
Israel tiene una capacidad especial para ganar en los acuerdos, y sobre todo en el modo de aplicarlos, lo que no ha obtenido en sus campañas militares.

Últimas

Granada
Granada AMA Desokupa intenta desalojar un nuevo centro social en Granada sin orden judicial
Los activistas denuncian que la guardia de seguridad privada les está impidiendo el acceso de comida al edificio, durante el intento de desalojo varias personas han sido identificadas sin justificación por la policía.
Sevilla
Educación Pública La Junta de Andalucía cierra 163 aulas en los colegios públicos de Sevilla
En la comunidad autónoma se cerraron en 2024 un total de 706 aulas, según USTEA. Colectivos en defensa de la educación pública además denuncian la baja calidad de los comedores y la falta de inversión en educación especial.
València
València Refugios de la Guerra Civil afloran en Paiporta tras la dana
Las inundaciones revelan refugios antiaéreos para protegerse de los bombardeos fascistas. Fueron construidos por los propios habitantes bajo sus propias casas hace 90 años.
Más noticias
Redes sociales
Redes Sociales 20 de enero de 2025: el día en el que miles de tuiteros quieren dejar colgado a Elon Musk
Organizaciones ecologistas y universitarias, ayuntamientos como el de París y miles de usuarios de la red social que un día fue Twitter están convocados a dejar X coincidiendo con el día de investidura de Donald Trump.
Sumar
Sumar Yolanda Díaz, entre el ‘pacta sunt servanda’ y el juego de Junts
Sumar ha tenido su premio tras pasar del tono bajo al ‘ruido’ que antes rechazaba y consigue torcer el brazo del PSOE en la tramitación de la reducción de la jornada.
Opinión
Infancia Infancia vulnerada por la violencia institucional
La imposición de custodias compartidas sin un análisis exhaustivo y específico de cada caso puede dejar a los menores desprotegidos bajo el pretexto de priorizar los derechos de los progenitores.

Recomendadas

Música
Música y política Apoyar a Palestina “es complicado” en la música antifascista de Alemania
La cancelación de conciertos en la escena antifascista de grupos que han mostrado su rechazo al genocidio evidencia la división del país respecto a Palestina.
Argentina
Argentina Golpe a la memoria en Argentina: los retrocesos en políticas de derechos humanos en la era Milei
La política de derechos humanos en Argentina enfrenta retrocesos alarmantes bajo la gestión de Javier Milei. Despidos masivos, cierre de espacios de memoria y desfinanciamiento amenazan el legado de memoria, verdad y justicia.
Túnez
Túnez Gabes, 50 años de muerte lenta
Entre vertidos químicos, suelos estériles y redes vacías, las comunidades locales del sureste de Túnez resisten y lideran una lucha ambiental y social que atraviesa fronteras.
Rap
Poetas Puestos “Tanto los medios como la política quieren que seas un tonto feliz”
Charly Efe y Teko, acompañados de una banda, publican el disco ‘Tontos felices’ donde mezlcan su carrera en el rap con ritmos rock para crear lo que han bautizado como rap‘n’roll.