Filosofía
Notas para un año electoral: sobre la posibilidad del común

El partido, la organización y el futuro son instrumentos muy útiles para llevar a cabo una política de los fines. ¿Lo son igual para una política del común? Tratamos de pensar otras prácticas y afectos para dar lugar a esta política.

8M Bilbao ayuntamiento
Vista de la plaza del ayuntamiento de Bilbao durante la huelga feminista de 2019 Christian García
26 mar 2019 10:00

Félix Guattari dramatiza en La revolución molecular (Errata Naturae, 2017) una discusión entre el maoísta Benny Lévy y Michel Foucault. Cuando el primero le pregunta a Foucault «¿Cómo normalizarías tú la justicia?», este responde: «Eso está todavía por inventar!». No se pueden programar las instituciones revolucionarias en nombre de ninguna ley histórica ni moral, sino que habrá que acudir a «instancias de elucidación política» que, señala Guattari, «serían instancias de análisis e intervención micropolítica que permanecerían en el plano molecular de las energías deseantes».

La definición es cierto que no ayuda demasiado a comprender qué son estas instancias de elucidación política de las que hablaría Foucault, pero lo que se juega en esta suerte de trabalenguas son las instancias de intervención política de la multitud, que no tienen nada que ver con los partidos ni con las jerarquías. Una instancia de elucidación política no trata de producir sistemas informacionales con la intención de transmitir consignas y por tanto homogeneizar el mensaje para la totalidad de los componentes que incluye, como tampoco sistemas de representación, sino que aspira a configurar un común en el que los individuos están colectivamente atravesados por múltiples compromisos. Lo que no hay aquí es una ley a priori sobre cómo este común se puede trazar, ni sobre cómo pueden intervenir políticamente estas instancias.

Por un lado el común no está dado a priori. Se constituye mientras se montan las mismas instancias de elucidación política, que no requieren de organización centralizada. Estas son una especie de derrame de la máquina de guerra, un instante de terapia institucional y transversalidad en el que se trata de construir otras maneras de vivir, en el que se trata de escapar de la lógica tiránica de la justicia burguesa. Siguiendo el pensamiento de Artaud, uno de los más sagaces críticos de la subjetividad moderna, estas instancias de elucidación política, más que normalizar y castigar a lo extraño, tratan de producir nuevos espacios, vacíos o desiertos, que habitar, para disolverse en esa extrañeza: «He sentido que hacías el vacío para permitirme avanzar, para hacer el lugar de un espacio imposible a lo que en mí se encontraba todavía sólo en potencia, a toda una virtual fecundación y que debía nacer atraída por el lugar que se le ofrecía» (Artaud, El pesa-nervios).

Estas son una especie de derrame de la máquina de guerra, un instante de terapia institucional y transversalidad, en el que se trata de construir otras maneras de vivir.

Por otro lado la finalidad de las instancias de elucidación política tampoco es hacer la revolución. Si se entiende de esta manera no hay entonces la posibilidad de hacer la revolución. Estas instancias, que sin embargo sí tienen como finalidad la intervención sobre la organización material-semiótica que gobierna el mundo y su transformación, no siguen un programa. Uno de los principales problemas al que se ha enfrentado la filosofía política ha sido el de encontrar el camino hacia el mundo que estaba por venir, para la transformación de la realidad, y en ese sentido no nos debería extrañar que al final no fuese posible encontrarlo, porque quizás nunca hubo nada más que dominación y violencia. Es aquí donde estas instancias de las que venimos hablando tienen un papel fundamental.

Las instancias de elucidación política serían líneas de fuga sin fin —sin telos— ya que ellas mismas desconocen si hay camino. El fracaso es, entonces, coextensivo a su existencia: la línea de fuga acaba con la institucionalización o con el agotamiento; la reterritorialización reaccionaria o la abolición, quizás ambas a la vez. Por eso las mismas instancias de elucidación política no tienen como fin la revolución. Son ellas mismas micro-revoluciones encarnadas que en su huida consiguen la consistencia suficiente para resistir. La potencia de una línea de fuga la muestra su movimiento y su resonancia con otras líneas de fuga, y no sus puntos en el recorrido (la representación histórica de la política). Y como son en sí mismas multiplicidades no pueden ser organismos centralizados, pues su regla es la diversidad: el deseo prolifera por multiplicación.

Que un partido pueda servir en un instante concreto y determinado como herramienta de la multitud, que pueda ser útil a la máquina de guerra, no significa que la máquina de guerra se pueda pensar bajo el modelo del partido. Si el partido puede servir a la máquina de guerra no es nunca subsumiéndola ni capturándola, sino en la medida que la máquina de guerra hace multiplicar sus extensiones hasta las instituciones, sin que ella pase a orbitar alrededor de estas. El partido que no tenga detrás una máquina de guerra no puede servir como herramienta emancipadora para el común, sino que sólo puede servir para someterlo a una concepción de la justicia que se considera a si misma más justa que la anterior.

El pueblo por-venir, el pueblo virtual —que está aunque no llega— no es el pueblo ideal, sino que es un pueblo animal, erótico, afectivo.

A diferencia de los partidos, estos no-partidos, no reproducen en su estructura interior una miniatura de aquello contra lo que combaten, ni tampoco apelan a mitos del Hombre Natural en el que representaciones ficticias del poder asientan el estado de derecho sobre un fondo ahistórico. Está claro que no hay ninguna garantía de que estas instancias nos puedan aportar ninguna solución inmediata, y ni siquiera somos tan optimistas para pensar de entrada que existe tal cosa como una solución, pero en cualquier caso es una tentativa más simpática y alentadora —incluso más realista— que dejar nuestras vidas en manos de funcionarios de la Revolución.

Quien diga que la Revolución se llevará a término de una vez por todas deberá demostrarlo por su necesidad o por su materialización. Hasta entonces nada nos motiva a pensar que el tiempo de lo político va a terminar, sino que será necesaria la proliferación constante de estas máquinas de guerra para evitar la esclerotización de la vida: ya no se trata de construir un Estado que capture el afuera, sino un estado sacado siempre de su en-si, que hace tiempo que habría dejado de ser un Estado.

Sería necesario, entonces, no exigirle en exceso a estas instancias de elucidación política. El pueblo por-venir, el pueblo virtual —que está aunque no llega— no es el pueblo ideal, sino que es un pueblo animal, erótico, afectivo. No parece una postura materialista aceptar la tesis de la Victoria final, que daría lugar al Hombre nuevo. Quizás lo que hay que hacer con el Hombre es traer al mundo su muerte de una vez por todas.

Por otro lado todo «atreverse a pensar» necesita de un «atreverse a poder» —como dice Foucault en su texto “¿Qué es la Ilustración?”—. Hay que emprender fugas y desterritorializaciones, hacer agencia con el deseo y poner el cuerpo en riesgo; rebasar el límite de lo posible. Capturar el cuerpo para sí, no ponerlo en juego con el común, es ya una forma de fascismo en la medida que se niega parte de la potencia del cuerpo de la sociedad, se la aísla de la multitud —capturada por el dispositivo—. Resistir es comprometer el cuerpo en la fuga, que es donde la multitud se encuentra, ya lejos de su yo y lejos de su identidad, sin patria y sin nombre, sin su Unidad y sin su cuota de autónomo: un devenir-cualquiera que es un devenir-todo-el-mundo en tanto que ya no está ensimismado y es extranjero a si mismo, pues es su cuerpo el que pertenece al común.

Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Partidos políticos
Congreso de los Diputados PSOE y PP arrancan la larga campaña para las generales con la crisis del ómnibus
La debacle del miércoles que afecta a millones de personas es el match de inauguración de un año en el que muchos creen que podría tumbarse al Gobierno. Sánchez y Feijóo juegan con fuego y los aliados miran atónitos.
Análisis
Análisis El PSOE intenta pescar en el río revuelto de la izquierda para acercarse al PP
Entre los votantes del PP solo hay dos cosas que produzcan ilusión: el rechazo a Sánchez y su Gobierno e Isabel Díaz Ayuso. Feijóo no es una de ellas.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición El CIS vuelve a situar la vivienda como el principal problema de la población
Uno de cada dos votantes de las izquierdas sitúan la vivienda entre los tres grandes problemas que afronta el país. La encuesta del CIS muestra a los partidos de la izquierda en la misma situación de desinfle que el mes pasado.
#32344
29/3/2019 2:51

Vaya coñazo postmoderno. Con sus máquinas de guerra imaginarias, sus riesgos nunca experimentados en la vida real y sus cuerpos vacíos de espíritu, amasijo de carne huesos y excremento. Vaya mierda de pensadores postmodernos y la plaga cancérigena universitaria que han colaborado en crear y que tanto nos está alejando de lo erótico, de lo afectivo y de nuestros deseos a medida que la esquizofenia reina indiscutible en ese espectáculo lamentable que todavía se hace llamr sociedad.

1
4
#32235
26/3/2019 13:33

¡Fantástico! Hay que introducir a Deleuze-Guatteri en la política...

3
1
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Hidrógeno
Descarbonización Los planes de expansión del hidrógeno en Europa chocan con la falta de energía verde para producirlo
La escasez de hidrógeno producido con renovables y el exiguo desarrollo del aluvión de proyectos anunciados ponen en entredicho la estrategia de descarbonización en Europa, según un informe de Global Energy Monitor.
Crisis climática
Parlamento Ciudadano Climático Un jurado popular ciudadano para combatir la crisis climática y el retroceso democrático
En un momento crítico para la democracia y la acción climática, cinco organizaciones medioambientales reunieron en el Congreso de los Diputados a científicos, actores sociales y asambleístas para impulsar un Parlamento Ciudadano Climático Permanente.
Pensiones
Revalorización de las pensiones Los pensionistas no se fían y salen a la calle tras el rechazo al decreto ómnibus
La Unidad de Acción de Madrid convoca a manifestarse este viernes 31 frente a la sede del PP tras la “posición negativa de la derecha ultranacionalista, sea española o catalana”.
Ayuntamiento de Madrid
Convenio colectivo Las cuidadoras ganan a Almeida: Madrid anuncia nuevos pliegos con la subida salarial pactada
Las trabajadoras de cuidados seguirán en huelga dado que “no hay nada tangible”. El anuncio afectaría a 12.000 personas empleadas por el Ayuntamiento, pero no a las 2.000 trabajadoras más convocadas a la huelga que trabajan para la Comunidad.

Últimas

Cine
El Salto recomienda Diez películas y series en Filmin para acercarse a la diversidad de Andalucía
Una selección realizada por la periodista de El Salto Aurora Báez Boza sobre las mejores películas y series para descubrir las diversidades que habitan dentro de Andalucía
Salario mínimo
Pacto bipartito Trabajo y sindicatos acuerdan la subida del salario mínimo en 50 euros sin el apoyo de la patronal
Díaz anuncia un acuerdo con los sindicatos que llevará al Congreso de Ministros de forma “inminente” la propuesta del Ministerio de Trabajo. Los sindicatos proponían una subida de 66 euros y la patronal, de 34 euros.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Sin materiales, sin protección adecuada y sin financiación: los bomberos de Madrid denuncian “abandono”
La contaminación de los equipos de protección de cinco bomberos en un incendio en una nave de reciclaje hace levantar de nuevo la voz de los sindicatos, que ya tienen denunciada ante el TSJ de Madrid, la falta de financiación.
Opinión
Opinión No es Poder Popular todo lo que reluce
VV.AA.
No hay alternativa capaz de cambiar este sistema que no hable claramente de socialismo y de clase trabajadora
Lavapiés
Madrid Lavapiés gana un asalto a la organización fascista Hacer Nación
La empresa en la que se iban a organizar unas jornadas con figuras de la extrema derecha europea ha confirmado que comunicó a Hacer Nación que no le cedía su espacio.
Más noticias
Madrid
Justicia El fiscal general del Estado, en el alambre, declara como investigado ante el Supremo
Álvaro García Ortiz acude al alto tribunal a explicar su versión de las filtraciones denunciadas por el entorno de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Es la primera vez que un fiscal de su categoría declara como investigado.
El Salto Radio
EL SALTO RADIO Cultura y resistencia desde América del sur
Cuatro historias sonoras de experiencias creativas y comunitarias en algunas ciudades de Perú, Argentina y Paraguay

Recomendadas

Dana
Tres meses de la dana “Aquí no llovió casi nada”
VV.AA.
Un vecino de Benetússer explica cómo la riada arrasó y cambió para siempre las vidas de miles de personas.
Crímenes del franquismo
Isabel Alonso Dávila “El franquismo fue una máquina de fabricar miedo y dolor hasta el final”
Detenida en Granada en 1974 y 1975 por su vinculación con el movimiento estudiantil antifascista de la época ha presentado la primera querella en Andalucía por Crímenes contra la Humanidad en la dictadura franquista
Jaén
Andalucía Lopera no quiere que Greenalia especule con sus olivos
Decenas de pequeños olivareros de la Campiña Norte de Jaén podrían perder sus terrenos en beneficio de una empresa que quiere talar los árboles para instalar siete parques fotovoltaicos.
Redes sociales
Nuevas normas Meta abraza el discurso de odio y desafía la normativa anti discriminación
La plataforma de Mark Zuckerberg anunció cambios en sus normas: cuando empiecen a aplicarse, los comentarios misóginos y LGTBIAQ+fobos no violarán su política, pero existen herramientas para denunciar el discurso de odio.