Frontera sur
Cada una de las veces cuenta

En las últimas semanas varias menores han sido entregadas a las autoridades marroquíes. La violación del Derecho en general, y de los derechos de las menores en particular, ha sido ominosa. Ni procedimiento, ni decisión expresa en la que se valoren las circunstancias personales y familiares de cada menor. Este Gobierno ha optado por una peligrosa vía de hecho, que erosiona uno de los fundamentos mismos del Estado de Derecho: el sometimiento de su actuación a las leyes. Y cada una de esas veces en que lo hace, cuenta
pancarta Ceuta
Pancarta ante la delegación del gobierno Kike Castro

Abogada. Observatorio del Racismo Institucional RAIN, Comisión Legal Sol.

Abogada de Red Jurídica
17 ago 2021 20:32

A veces parecería que, en las fronteras, las normas jurídicas no constituyen el marco de actuación de los poderes públicos. A veces, demasiadas veces, parecería que en realidad no son de obligado cumplimiento: que el Ministro-policía de turno puede emitir órdenes que claramente conculcan la legislación vigente.

Las directivas, leyes y reglamentos que regulan la entrada y la permanencia de las personas extranjeras en este país, como en el resto de la Unión Europea, tienen por finalidad esencial generar la ilegalidad de esas personas y mantenerla en el tiempo; impedir que ejerciten derechos inherentes a la ciudadanía y perpetuar su desigualdad. Y, aún así, a veces parecería que al poder le sobran, le molestan. Y opta por desobedecerlas.

Es lo que viene ocurriendo desde que en mayo de este año Marruecos hiciera la vista gorda para que pudieran entrar en Ceuta, a nado, entre seis y ocho mil personas marroquíes, de las cuales cerca de dos mil eran menores de edad. Desde entonces, vienen ejecutándose casi a diario devoluciones ilegales de adultas y de niños. Ilegales. Ciertamente, tan ilegales, por mor de esas leyes insolidarias y restrictivas, como las entradas que efectuaron esas personas en el territorio español. Pero con la gran diferencia de que en cada una de las deportaciones quien viola de forma flagrante el ordenamiento jurídico, y a sabiendas, es la autoridad: justo quien debería garantizar que se aplica.

Todas las niñas y los niños necesitan y merecen ser protegidas, especialmente cuando no están al cuidado de sus familias. Y a este respecto, la condición de menor debe prevalecer sobre la posible condición de extranjera/o. Por eso, las leyes españolas, cumpliendo con lo establecido en los convenios internacionales (Convención de Derechos del Niño, Carta Europea de Derechos del niño) obligan a que el Estado dispense idéntica protección a las niñas y niños extranjeros que a las y los nacionales. Para unas y otros, en toda decisión que se adopte, debe prevalecer el interés superior de la o del menor. Por encima de cualquier otro. Si un(a) menor se encuentra en situación de desamparo, el Estado debe asumir su tutela, y si es de nacionalidad extranjera no puede deportarla/o a su país de origen sin previamente haber adoptado una serie de garantías.

Para devolver a menores marroquíes a su país de origen, en particular, recuerda que es de “observancia estricta la legislación española, las normas y principios del derecho internacional y (...) lo establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño” el artículo 5 de un convenio específico que celebraron España y Marruecos en 2007 (vigente desde 2012) con el fin de evitar la entrada de menores marroquíes en España y facilitar su deportación: el Acuerdo sobre la cooperación en el ámbito de la prevención de la emigración ilegal de menores no acompañados, su protección y su retorno concertado. Esto significa que, taxativamente (sin excepciones, excusas ni mentiras), conforme a lo previsto en este Acuerdo, se debe tramitar un procedimiento administrativo para cada menor. En el marco de este procedimiento deben poder realizar alegaciones la o el menor, por supuesto con asistencia letrada y de intérprete, pero también el Ministerio Fiscal y la entidad que ostente la tutela legal, custodia, protección provisional o guarda del niño o la niña. Además, tienen que practicarse la pruebas que se propongan y dar traslado nuevamente al Ministerio Fiscal y al resto de las partes, antes de adoptar decisión alguna. Porque, obviamente, ha de emitirse una decisión expresa para cada menor. Todo lo anterior lo exige la ley española: esa que ha de ser “de observancia estricta”, según un Acuerdo que, insisto, tiene por objetivo favorecer el retorno de menores marroquíes. Pero también es obligado, conforme a las “normas y principios del derecho internacional” a que se refiere el Acuerdo, y en particular según la Observación General núm. 6 (2005), del Comité de los Derechos del Niño, sobre Trato a los menores no acompañados y separados de su familia fuera de su país de origen (CRC/CG/2005/6, 1 de septiembre de 2005), que se realice una evaluación pormenorizada del riesgo que comporta el retorno (de persecución, abusos, o explotación); que se examine la capacidad de la familia del o de la menor de dispensar los cuidados adecuados y que se tomen en consideración las opiniones de dicha familia acerca del retorno; que se realice un diagnóstico de las condiciones de acceso a la alimentación, la vivienda, los servicios sanitarios, la educación, la formación profesional y las oportunidades de empleo en el país de origen; y que, en definitiva, de adoptar una decisión a favor del retorno, es porque no quepa duda de que responde al interés superior del niño o la niña.

Nada de esto se ha hecho, nada, cada una de las veces que se ha entregado, en las últimas semanas, a un(a) menor (o a un grupo de menores) a las autoridades marroquíes. La violación del Derecho en general y de los derechos de las y los menores en particular ha sido ominosa. Ni procedimiento, ni decisión expresa en la que se valoren las circunstancias personales y familiares de cada menor. Este Gobierno ha optado por una peligrosa vía de hecho, que horada uno de los fundamentos mismos del Estado de Derecho: el sometimiento de su actuación a las leyes. Y cada una de esas veces, cuenta. Cuenta, negativamente, claro, en el saldo del devaluado balance democrático.

Por esta razón, también cuenta cada victoria. Y conseguir que se paralicen estas deportaciones, siquiera temporalmente, es una victoria importante. Ayer, las abogadas de Coordinadora de Barrios y Fundación Raíces, Patuca Fernández y Paloma García de Viedma, lograron que un juzgado de Ceuta recordara al Ministerio del interior que la legislación está para cumplirse, que hay que respetar las reglas del juego.

Muchas desearíamos unas reglas bien distintas, sabedoras de que las cartas, en el actual tablero, están claramente marcadas. Lo están, a favor del mantenimiento del bienestar de las sociedades europeas: un bienestar fundado en la explotación y la injusticia que, por otra parte, si hoy peligra, no es por que se diluyan las desigualdades con otras sociedades, sino porque se agudizan en su propio interior. Y es que cuando se vulneran impunemente los derechos de otras personas, que son los derechos que les hemos reconocido, se crea el caldo de cultivo para la violación de los derechos de cualquier otra. Los derechos laborales, el derecho a la vivienda, el derecho a la salud. Nuestros derechos, que son o tienen que ser los de todas. Y es que los derechos humanos son eso: humanos. Si se le niegan a una persona, se nos niegan a todas.

Puede escocer, desde este punto de vista, que obligar al Gobierno a que acate normas tan terribles como lo son las de Extranjería (no olvidemos que lo que hacen, en definitiva, es protocolizar deportaciones forzosas, incluso de niñas y niños) sea motivo de alegría. Pero sí. Hoy creo que tenemos que alegrarnos de que no se haya deportado a nueve niños marroquíes, porque gracias al esfuerzo y la obstinación de colectivos de defensa de derechos humanos, y gracias a que siguen creyendo en la dignidad de todas las personas, hemos ganado todas.

Sobre este blog
Este es un blog coordinado por la cooperativa jurídica madrileña Red Jurídica, con colaboraciones ocasionales de profesionales del mundo jurídico de distintas partes del Estado, en el que intentamos explicar, desde una perspectiva crítica, la actualidad jurídica
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Derechos Humanos
Libertades y derechos Amnistía Internacional acusa al Estado de no investigar casos graves de violación de los derechos humanos
El informe anual de esta organización de derechos humanos denuncia “la persistente falta de rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos cometidas por el Estado español”.
Frontex
Frontex Sin límites para Frontex
La experta en militarización de fronteras cuestiona el papel real de Frontex, una agencia internacional creada para apuntalar la Europa-fortaleza que da la espalda a los derechos humanos
Migración
Fronteras La Europa fortaleza destroza vidas: un informe de MSF muestra el coste humano de las fronteras
Médicos Sin Fronteras recoge los impactos de las políticas migratorias en la salud y el bienestar de las personas en movilidad, y denuncia la apuesta de la Unión Europea de normalizar a través de su pacto migratorio la violencia en la frontera.
Sobre este blog
Este es un blog coordinado por la cooperativa jurídica madrileña Red Jurídica, con colaboraciones ocasionales de profesionales del mundo jurídico de distintas partes del Estado, en el que intentamos explicar, desde una perspectiva crítica, la actualidad jurídica
Ver todas las entradas
Catalunya
Catalunya Pere Aragonès, de presidente a segundo plato de Illa o Puigdemont
Las encuestas y el tirón de Pedro Sánchez acompañan a Salvador Illa, quien probablemente volverá a ganar las elecciones catalanas, como ya ocurrió en 2021. Esta vez, tiene más probabilidades de gobernar.
Pueblo gitano
Pueblo gitano Silvia Agüero y Nicolás Jiménez: “Hay que gitanizar a los anarquistas que se han burocratizado”
Son pareja en la vida, en la divulgación y en la tarea de gitanizar el mundo. Silvia Agüero y Nicolás Jiménez acaban de publicar '¿Anarquismo gitano?' para romper estereotipos y profundizar en la realidad de su pueblo.
Migración
Migración Maternidades migrantes: criar entre la precariedad laboral y la ley de extranjería
Sin redes familiares en las que sostenerse y en un contexto laboral enfrentado con la conciliación, las madres migrantes se ven especialmente expuestas a la precariedad.
Memoria histórica
Memoria Olvidadas por la historia: las mujeres del Patronato
Durante más de cuarenta años, la libertad de miles de mujeres fue arrebatada por el Patronato de Protección a la Mujer. Siguen invisibilizadas por una Ley de Memoria Democrática
República Democrática del Congo
República Democrática del Congo Chikuru quiere para la República Democrática del Congo esa paz que nunca ha conocido
La vida de Chikuru ha transcurrido en una República Democrática del Congo siempre en guerra, desde su organización FoBeWorld, aspira a ayudar a la infancia y juventud a construir un futuro mejor, frente al expolio que devora su presente.
Literatura
Literatura Mallorca, el refugi de Vicent Andrés Estellés
El poeta trobà a l’illa la serenitat necessària per enfrontar-se a l’entorn sempre tens de València, a la vegada que publicà diversos volums i travà sòlides amistats.
La vida y ya
La vida y ya Futuros laborales
Lo que está claro es que para mí pensar en mi futuro laboral tiene que ir acompañado de pensar qué puedo hacer para que el mundo sea un poco diferente.

Últimas

Genocidio
Genocidio La ONU advierte de que un ataque sobre Rafah colapsaría la distribución de ayuda en Gaza
Turquía suspende todo el comercio con Israel. El fiscal del Tribunal Penal Internacional advierte de que no admitirá “amenazas” después de que trascendiera que imputará a Netanyahu y los suyos.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Religión
Opinión Semana Santa y Ramadán
En el Sindicato de Vivienda de la Red de Apoyo Mutuo se celebró un desayuno con motivo del Ramadán, lo cual generó un debate interno interesante por ser una organización laica
Palestina
Palestina Bicicletada contra el genocidio palestino en Alicante
El núcleo local del BDS País Valencià ha realizado un recorrido reivindicativo para exigir el fin del genocidio contra Palestina por las principales calles de las tres capitales valencianas.
Que no te lo cuenten
Que no te lo cuenten De estrategias y misiones incumplidas
VV.AA.
La no dimisión de Pedro Sánchez y la imposibilidad de la Flotilla de la Libertad de llevar ayuda a Gaza marcan unas semanas intensas.
Más noticias
Fútbol
Fútbol Vicente del Bosque como respuesta a las presiones de FIFA y UEFA
El nombramiento del exseleccionador como presidente de la Comisión de Normalización, Representación y Supervisión busca alejar los fantasmas de una intervención política de la RFEF.
Cine
Cine 'Civil War', estética geopolítica en tierra de nadie
La sensación es que Civil War se queda en algunas ocasiones en una peligrosa tierra de nadie, tanto en sus cambios de estilo como en su contenido.
Formación El Salto
Formación El Salto Fotoperiodismo y movimientos sociales: Una mirada a las luchas desde abajo a través de un objetivo
La Escuela de Periodismo Crítico de El Salto ofrece su primer curso presencial, en el que abordaremos, de la mano de nuestros fotógrafos, cómo plasmar a través de la imagen movilizaciones y resistencias.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Comunidad El Salto
Palestina La campaña de apoyo a Gaza de El Salto recauda más de diez mil euros para la UNRWA
El pasado 26 de febrero, tras más de cuatro meses de ofensiva militar de castigo por parte Israel sobre la Franja de Gaza, desde El Salto decidimos ir más allá del periodismo ante la gravedad de los hechos.

Recomendadas

Colombia
Colombia Sostener la vida en un ETCR
En la vereda colombiana La Plancha, la convivencia entre excombatientes y población civil es una realidad marcada por necesidades comunes.
Rap
Rap Viaje a los orígenes del hip hop en España: “Nadie esperaba ganar dinero con el rap”
El historiador Nicolás Buckley y el periodista Jaime Valero, exredactor jefe de HipHop Life, publican Maestro de ceremonias, un libro sobre la historia de la cultura hip hop en España.