Feminismos
La odiosa equidistancia

Esa misma equidistancia del “ni machismo, ni feminismo, igualdad” nos hace plegarnos a los intereses inmobiliarios “por no perjudicar a terceros”, nos hace ser tibios al cambiar los nombres franquistas de nuestras calles “para no romper el consenso con nuestros socios de gobierno” o nos hace recibir con honores a dirigentes de la derecha más dura y asistir a procesiones religiosas o actos indefendibles ideológicamente porque “representamos a la Institución” o “gobernamos para todos”.

Retrato de niña
Foto de Aamiraimer Colectivo Burbuja
11 nov 2017 07:29

Todas estamos acostumbradas a lidiar en las redes sociales con elementos del género masculino que saben mejor que nosotras qué es el feminismo, que intentan llevarnos “por el camino correcto”, porque no quieren que seamos feminazis. De hecho, creo que las feministas ocupamos uno de los primeros puestos del ranking de seres más denostados en las RRSS, sólo superadas por los separatistas catalanes y los venezolanos partidarios de Maduro, si bien estos últimos han caído en el olvido en las últimas semanas debido al fervor anticatalanista alimentado por el sistema desde mediados de septiembre.

Estamos acostumbradas a los haters de Twitter y siempre hay alguna compañera con ganas de darles un revolcón dialéctico. Es bueno hacer pedagogía en cualquier sitio. En grandes grupos, como es el caso del que tiene Colectivo Burbuja en FB, el hecho de ser abiertas a todo tipo de participantes nos causa muchos problemas de moderación, pues se nos cuelan provocadores y agitadores de todo tipo, también machistas. Tras años de aplicar el buenismo y los argumentos pedagógicos, hemos llegado a la conclusión de que esas personas son irrecuperables y que no podemos malgastar energía en combatirlas, ya que sirven a unos intereses muy concretos y muy poderosos. Es preferible que nos tilden de intolerantes que hacer el juego a quienes queremos combatir. Por tanto, la expulsión de uno o varios de esos trolls es la medida inevitable.

Lo asombroso y triste es que nos encontremos con esos elementos machistas en espacios en los que se supone que el debate sobre el feminismo está superado

Pintadas políticas
Pintadas en la Facultad de Sociología de la Universidad Complutense. David F. Sabadell

Lo asombroso y triste es que nos encontremos con esos elementos machistas en espacios en los que se supone que el debate sobre el feminismo está superado. Pondré como ejemplo lo sucedido en un chat de activistas del municipalismo en Madrid, con casi quinientas participantes a las que se presupone conciencia feminista. Pues bien, en estos días hemos tenido que leer perlas como estas: “yo no soy machista ni feminista, yo defiendo la igualdad”, “hablar de feminismo es tener una postura fundamentalista”, “somos muy sensibles y salen sarpullidos al hablar de feminismo”, “me gustaría diferenciar entre feminismo y equidad de género” o “yo defiendo vuestros derechos pero el término feminismo no me parece adecuado”, incluso la estupefaciente “defender el feminismo es tener a veces posiciones de superioridad”.

Aunque se trata de un personaje aislado, han surgido algunos espontáneos en su defensa, lo cual dice mucho de la deriva ideológica en la que estamos. Que se dé esta controversia en la vida real es lo esperable, ya que estamos en una sociedad patriarcal y las personas son educadas con los valores del patriarcado. Solo en algunas familias se inculcan los valores del feminismo, que son los de la igualdad y el respeto. En los espacios políticos progresistas se supone que ya hemos superado el debate sobre el patriarcado, pero parece que siempre hay quien tiene esa asignatura pendiente, como ilustra mi ejemplo.

Resulta doloroso comprobar que la equidistancia se extiende como un virus. Equidistancia cuando se trata de temas espinosos. Hay quien no quiere ser etiquetado junto a “los radicales”, “no quiere ofender”, quiere “llegar a la mayoría social”, no quiere “reabrir viejas heridas”. Y asistimos perplejas a la adopción de los viejos mantras equidistantes del “centro sociológico” por parte de gentes que se decían de izquierdas. Gentes que abrazan esa equidistancia para atraer a “los que faltan”, para lograr la mayoría electoral. Es una versión actualizada del ya viejo “el que se mueva no sale en la foto”, una especie de PSOE 2.0, de tal modo que observamos la equidistancia no solo en temas de género, sino también en temas de Memoria Histórica, conflictos territoriales o de clase e incluso hallamos equidistancia en temas tan delicados como refugiadas o derechos sociales básicos.

Esa equidistancia que lleva a decir “ni machismo, ni feminismo, igualdad” nos trae indefinición en la defensa del patrimonio público enajenado por gobiernos municipales anteriores, nos impele a plegarnos a los intereses inmobiliarios “por no perjudicar a terceros”, nos hace ser tibios al cambiar los nombres franquistas de nuestras calles “para no romper el consenso con nuestros socios de gobierno” o nos hace recibir con honores a dirigentes de la derecha más dura o asistir a procesiones religiosas o actos indefendibles ideológicamente porque “representamos a la Institución” o “gobernamos para todos”. Esa equidistancia no la mantiene la derecha cuando gobierna, por lo que nuestra postura tan “ética” es, al final, “fuego amigo” y por parecerles bien a la mayoría, a ver si al final acabamos por no parecerles bien ni a las nuestras.

Archivado en: Desigualdad Feminismos
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Derechos reproductivos
Derechos reproductivos Feministas de ocho países piden que la UE garantice el derecho al aborto a todas las europeas
El movimiento Mi voz, mi decisión comienza la recogida de firmas que forma parte de su campaña para pedir que la Unión Europea cree un mecanismo para financiar abortos en otras países a aquellas mujeres que no tienen acceso garantizado en el suyo.
Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Gabriel
13/11/2017 13:21

Totalmente de acuerdo. Lo de "PSOE 2.0" se lo voy a decir a más de uno ;-)

2
0
Lawfare
Justicia a la derecha Pedro Sánchez no está solo: estos son los precedentes a su caso de ‘lawfare’
El presidente del Gobierno aseguraba en su carta que el suyo era un caso de lawfare “sin precedentes”. Lo cierto es que esta estrategia de judicializar la vida política se ha enraizado durante los últimos años.
Lawfare
Guerra judicial Las izquierdas brindan el apoyo unánime a Sánchez que él les negó durante la era del ‘lawfare’
Todos los partidos con representación en el Parlamento y ubicados a la izquierda del PSOE, también los soberanismos, han mostrado sus posiciones públicas en solidaridad con el acoso mediático y judicial contra el presidente del Gobierno.
Política
Lawfare ¿Qué decisiones puede tomar Pedro Sánchez tras amagar con dimitir?
Tras el anuncio del presidente, se abren varias posibilidades que no se resolverán hasta el lunes: ¿Una moción de confianza? ¿La convocatoria de elecciones? ¿Un cambio de marco? ¿Dimitir y dar el salto a la presidencia del Consejo Europeo?
Opinión
Opinión Cuando la mierda nos come
El panorama mediático se ha convertido en una amalgama de espacios a cada cual más insano. Basura fabricada por gabinetes ultras, aceptada por jueces afines y amplificada por pseudomedios de propaganda regados con dinero público. Hay que pararlo.
Medios de comunicación
Opinión ¿Y qué esperabas, Pedro?
Los gobiernos de derechas llevan años alimentando con dinero público a sus medios afines que esparcen bulos y manipulan sin que el Gobierno haya hecho nada para evitarlo.
Palestina
Genocidio en Gaza La Flotilla de la Libertad acusa a Israel de parar su salida con una nueva maniobra de presión
Los esfuerzos de Israel para impedir la partida del barco Adkeniz con destino a Gaza ponen otra traba que puede ser definitiva para el destino de una misión que pretende romper el bloqueo marítimo sobre Gaza.

Últimas

Sanidad pública
Ribera Salud Hospital del Vinalopó: el último rehén de la privatización del PP valenciano
La vuelta del PP al gobierno valenciano ha supuesto un balón de oxígeno para la principal beneficiaria de la privatización sanitaria, que mantendrá la concesión de Elx-Crevillent a pesar del malestar social.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Más noticias
Palestina
Genocidio en Gaza La Flotilla de la Libertad acusa a Israel de parar su salida con una nueva maniobra de presión
Los esfuerzos de Israel para impedir la partida del barco Adkeniz con destino a Gaza ponen otra traba que puede ser definitiva para el destino de una misión que pretende romper el bloqueo marítimo sobre Gaza.
Antifascismo
Antifascismo en Roma 25 de Abril, día de ‘La Liberazione’
El movimiento antifascista celebra el fin de la ocupación nazi con una demostración de poder en las calles de Roma.
Portugal
Portugal Cuando los campesinos portugueses tomaron la tierra… y la contrarrevolución se la despojó a tiros
Tras el 25 de abril de 1974 una ola de ocupaciones agrícolas impulsó en Portugal una profunda reforma agraria que los gobiernos socialistas y conservadores tardarían más de una década en desmontar.
El Salto Twitch
El Salto Twitch La Catana 2x06, comunicación política y campaña
Nos preguntamos cómo la carta de Pedro Sánchez atraviesa un momento político y electoral que se estira desde las generales, pasando por elecciones gallegas y vascas, para cristalizar en unas catalanas y europeas que van a marcar nuestro imaginario.
Derechos Humanos
Libertades y derechos Amnistía Internacional acusa al Estado de no investigar casos graves de violación de los derechos humanos
El informe anual de esta organización de derechos humanos denuncia “la persistente falta de rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos cometidas por el Estado español”.

Recomendadas

Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Pensamiento
Kristen Ghodsee “Necesitamos soluciones que podamos llevar a cabo sin la ayuda del Estado”
Esta escritora y etnógrafa estadounidense explora experiencias utópicas del pasado y del presente en su último libro ‘Utopías cotidianas’ (Capitán Swing, 2024).