Antimilitarismo
El anecdotario de los señores armados que vemos por la mañana

La retahíla de anécdotas a que nos someten unos señores, todos señores (hasta que el virus equilibró la situación), cada mañana, entre doce y una del mediodía, cuando el Comité de Gestión Técnica del Coronavirus comparece ante… ante nadie, para que luego respondan a unas preguntas periodísticas previamente filtradas, atraganta el almuerzo.

Rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Gestión Técnica del Coronavirus
Rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Gestión Técnica del Coronavirus. Foto: Moncloa/Borja Puig de la Casa
Asamblea Antimilitarista de Madrid
15 abr 2020 08:00

El pacifismo se nos ha quedado antiguo.

Ahora somos antimilitaristas.

Gloria Fuertes (“Glorierías”)


Cuando un país está en guerra, por ejemplo, nunca hemos escuchado a una médica salir a la palestra para anunciar a cuántas personas se ha “abatido” el día previo. Pero sí nos quieren acostumbrar a que en tiempos de paz profesionales de la violencia (quienes tienen su monopolio “legítimo” y reciben un sueldo por ello, quiero decir) nos informen de los avances a la hora de salvarnos de un virus que no se elimina con armamento de última generación, ni de primera, ni con obediencia ciega, ni con I+D+i militarista, ni con desfiles ni banderas.

“Hemos ayudado a una señora mayor…”, “un joven pretendió burlar el confinamiento en no sé dónde mediante un truco…”, “hemos desinfectado no sé cuántas residencias…”, “en tal pueblo, disfrazado de…”, y así durante más de media hora. Diariamente.

El país, mientras, está aguantando como puede la embestida del virus COVID-19, sostenido por los debilitados servicios públicos que cuidan la vida y se encargan de los sectores esenciales que facilitan la misma. Desconocemos con ese nivel de precisión lo que le ha pasado, también diariamente, a una cajera con aquella persona que al ir a pagar le ocurrió algo; aquello, hasta gracioso, que a una repartidora le sucedió cuando llegó justo a tiempo para entregar algo importante; o eso otro que un limpiador observó, con estupor, cuando cumplía su obligación; ah, y lo del celador que... Y así, camioneros, carteras, farmacéuticas, riders, panaderos… No digamos nada médicas, médicos, enfermeras… ¿De verdad no hay anécdotas cotidianas que les suceden cada uno de estos días? ¿Por qué los señores armados han de mostrar presencia, horas de pantalla, con esa retahíla de las cosas que hacen, y no los demás?

Share y valor social

Da la sensación de que el valor social que se otorga a los profesionales que en estos días tienen mayor protagonismo que en tiempo ordinario se mide por la cuota de share que se administra a través de estas apariciones en la televisión. Sorprende mucho, por ejemplo, que el Ejército, del que habitualmente no se ha hablado nunca en este país y del que ha habido un consenso tácito entre los partidos en los tiempos de la alternancia democrática para no hablar ni discutir sobre él, comparezca cada día a contarnos detalles absolutamente prescindibles por boca de un señor lleno de condecoraciones. Si no fuera por la preocupante situación que vivimos, parecería un chiste. Si no fuera por razones ocultas, desde luego ni ese señor ni ningún otro de su rango se prestarían a semejante teatrillo. Ahora, sí. Les conviene.

Sorprende mucho que el Ejército comparezca cada día a contarnos detalles absolutamente prescindibles por boca de un señor lleno de condecoraciones.

Por otro lado, cuando en un discurso alguien se detiene en detalles muy precisos su interlocutor suele perder el hilo a la hora de captar lo esencial entre tanta hojarasca. Esto lo sabe cualquier persona dedicada a la comunicación o a la literatura. Por tanto, no es algo casual lo que está ocurriendo.

Con semejantes interlocutores desde el comienzo de las comparecencias no extraña la interesada puesta en escena de las metáforas bélicas, tan caras a Pedro Sánchez. Obviamente, es el universo semántico de aquellos a quienes tanto tiempo se les deja hablar. Ahí sí se encuentran en su salsa, y no cogiendo el mocho. Y de la guerra, saben, porque se dedican a prepararla, a ello han empleado esfuerzo, biografía y méritos, y así lo denuncian unas chapitas de colores en su pechera que no han conseguido precisamente limpiando, desinfectando ni mal leyendo gracietas. Con estas tristes metáforas bélicas, manoseadas hasta el hartazgo por militares, fuerzas policiales y obediente personal civil (ministerial, político, periodístico), con esta manera de entender las cosas, decimos, la lucha por salvar vidas se troca en referencias a soldados, estado de guerra, enemigo, más guerra, vencer, moral de victoria, guerra-guerra-guerra, ejército, economía bélica etc.

Toda esta verborrea superflua pretende normalizar lo más grave: ante un estado de alarma motivado por una cuestión puramente sanitaria, la única persona de este ramo que comparece se dedica a dar unos datos y hacer de maestro (o maestra) de ceremonias para dar paso a los uniformados para la turra diaria. Cuando enfermamos, queremos a una médica a nuestro lado, a un enfermero. No a un señor armado.

Toda esta verborrea superflua pretende normalizar que, ante un estado de alarma motivado por una cuestión puramente sanitaria, la única persona de este ramo que comparece se dedica a hacer de maestro (o maestra) de ceremonias.

Ante la gravedad de la situación que estamos viviendo que este señor, de oficio militar, coja una escoba y se dedique a barrer cuando se le está pagando un sueldo público tendría que ser noticia solo para anunciar un mundo nuevo en que, pasada la crisis, se reconvirtieran tales profesiones a estas otras, si es que hay vocación de servicio. Porque limpiando o desinfectando se cuida la vida, y aprendiendo a manejar un fusil, un cazabombardero o una fragata como las de Navantia se destruyen. Se aniquilan vidas aun incluso cuando no se entre nunca “en acción”. Cada euro, cada persona dedicada a esos menesteres pagada con fondos públicos es un euro y una persona detraída de donde más hace falta porque está en donde no hace falta ninguna. En el mejor de los casos.

Cada euro, cada persona dedicada al militarismo pagada con fondos públicos es un euro y una persona detraída de donde más hace falta porque está en donde no hace falta ninguna.

Un acrónimo, una propuesta: IFEMA

En Madrid, el recinto del IFEMA se ha convertido en algo parecido a un hospital porque hay camas, hay personas enfermas, medicamentos y principalmente por el generoso y responsable empeño del personal sanitario. Mucho de él voluntariamente ha decidido exponerse allí, ha trabajado en condiciones espantosas (mucho menos protegido que los militares que por allí pululan) y ha conseguido organizarse, a pesar muchas veces de sus jefes.

Por estas fechas, el año pasado y hace tres, y así sucesivamente, bienios hacia atrás, este mismo recinto ha acogido a una de las mayores ferias internacionales de armamento y tecnología para la muerte, actualmente llamada FEINDEF.

La plataforma Desarma Madrid lleva realizando acciones directas noviolentas de denuncia estos años el día de su inauguración. No es casual que algunas de las personas que están hoy en IFEMA atendiendo detrás de los EPIs, soportando la desorganización, arriesgando su cuerpo, apretando los dientes y aguantando el tirón, sean las mismas que ante las obscenas convocatorias de la exposición y compraventa de ingenios para matar estuvieran también protestando y denunciándolas, nuevamente exponiendo sus cuerpos. Militares y policía, entonces, cumplieron su función, que no fue estar del lado de la ciudadanía que se opone a la barbarie y a la muerte, sino proteger los intereses de una de las principales industrias del mundo en términos de rentabilidad.

Activistas contra HOMSEC - 11

Es paradójico que en el recinto de IFEMA, donde ahora se está cuidando y sosteniendo la vida, hace tan poco tiempo se estuviese mercadeando con armamento para destruirlas, fruto de los negocios realizados, en las guerras activas hoy mismo en el mundo. Y debía hacernos reaccionar ante la próxima edición con la que amenazan para el año 2021.

Es paradójico que en el recinto de IFEMA, donde ahora se está cuidando y sosteniendo la vida, hace tan poco tiempo se estuviese mercadeando con armamento para destruirlas.

Otro acrónimo, otra propuesta: IRPF

El Estado, ahora, en la crisis económica y social que nos ha venido encima debe asistir a millones de personas que lo va a necesitar. Para ello pagamos impuestos, se supone. De ahí debe salir.

Estamos en temporada de IRPF. Estamos, por tanto, en temporada de Objeción Fiscal a los Gastos Militares, campaña a la que en breve dedicaremos un capítulo específico. Animamos a que cada cual manifieste en su declaración, siquiera con un solo euro (Ni un hombre, ni una mujer, ni un euro para la guerra) ese rechazo a financiar el militarismo.


Objecion fiscal

Quienes no queremos “ser soldados”, como nos quieren los comparecientes mañaneros, tampoco queremos financiarlos, ni a ellos ni a sus generales ni a su gigantesco negocio de extracción de recursos públicos. No queremos contribuir con nuestro dinero a la preparación de la próxima guerra. Sí queremos sostener con nuestros impuestos una renta básica universal y esos servicios públicos esenciales que bien se está demostrando cuáles son, en proporción directa a la destrucción que han sufrido en los últimos años por las políticas neoliberales de PP y PSOE más los respectivos partidos nacionalistas de derechas.

Este año la estimación del Gasto Militar si contamos, además de las partidas destinadas al Ministerio de la Guerra (hoy, de Defensa), el Gasto Militar real encubierto en el resto de los ministerios, asciende a unos treinta mil millones de euros, según el cálculo del Grup Antimilitarista Tortuga. De esta cantidad, “solo” un tercio va al ministerio que preside la señora Margarita Robles.

Este año, el Gasto Militar ascenderá a 30.000 mil millones de euros. ¿Por qué no nos explican cada mañana los de las anécdotas sin gracia cuánto se podría haber invertido en Sanidad Pública con esa cantidad?

Treinta mil millones de euros. ¿Por qué no nos explican cada mañana los de las anécdotas sin gracia cuánto se podría haber invertido en, por ejemplo, Sanidad Pública, de haber contado cada año con una cantidad similar para utilizarla en lo que realmente construye sociedad?

Nos contaban estos días de atrás que Bruselas estaba buscando en los mercados internacionales 100.000 millones de euros que ayudasen a paliar el impacto económico de la pandemia en países como Italia y España. Quizá no hubiera que buscar tanto. Aquí derrochamos treinta mil todos los años.

A pesar del blanqueo que supone la ayuda humanitaria, la UME, y otros intentos de hacernos comulgar con ruedas de molino, es cierto que ahora todas las manos son bienvenidas para atajar las consecuencias de este virus. El sanitario… y el militarista.


Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Presentan la primera demanda por mayores muertos en domicilios sin traslado hospitalario durante el covid
Los padres de Francisco murieron sin recibir traslado hospitalario ni asistencia médica a tiempo cuando enfermaron por covid-19 en su domicilio de Madrid, entre mediados de marzo y principios de abril de 2020.
Sanidad
Investigación La exclusión hospitalaria de mayores durante el covid en Madrid precedió a la existencia de protocolos
El primer protocolo de la Consejería de Sanidad sobre derivación a hospitales de pacientes de covid residentes en centros de mayores es del 18 de marzo, pero la disminución de residentes derivados empezó el 7 de marzo, según una investigación.
Justicia
Transparencia Un fallo judicial aporta más intriga a la reelección de Von der Leyen como presidenta de la Comisión Europea
El TJUE determina que la alta instancia comunitaria no veló por los derechos ciudadanos a la transparencia al ocultar demasiada información sobre los contratos con las farmacéuticas para obtener vacunas contra el covid-19.
#57338
17/4/2020 13:01

No te contagies del virus del militarismo #NoEsUnaGuerra: https://enpiedepaz.org/objecion-fiscal/

0
0
#57314
17/4/2020 9:14

http://2020.nonaogastomilitar.org/

0
0
#57233
16/4/2020 19:41

Ya está activa la web de Objeción Fiscal: https://objecionfiscal.info/

1
0
#57388
17/4/2020 18:45

Sigue siendo erróneo el gasto militar que difunde en esta .info ya que contempla el gasto militar presupuestado para el 2019, no para 2020 que es el consolidado del año anterior, prorrogado. Ver aquí el análisis que calcula el correcto: https://enpiedepaz.org/programas-de-salud-publica-2-000-millones-aumento-gasto-militar/

0
0
Rafalé
15/4/2020 12:23

Un artículo muy interesante. Aplaudo la bienvenida de la ayuda al final del artículo. A los que nos hemos calificado siempre como antimilitaristas esta situación nos supone cierta contradicción. Nos incomodan las insignias y el lenguaje de un sector que merecía una discusión y revitalización previa que jamás se abordó. Sin embargo su papel me parece más fundamental del que se destaca en el artículo. Me pregunto cómo sería el confinamiento sin la presencia de militares y policías. Desde mis días de encierro en otro país con menos presencia, tengo que decir que soy escéptico y que sería prudente en ser binario para defender algunas tesis.

1
6
#57172
16/4/2020 11:48

El confinamiento sin militares ni policías sería menos histérico y más llevadero.

4
1
#61253
21/5/2020 13:24

Si claro, no sería confinamiento.

0
0
#57043
15/4/2020 12:13

Enhorabuena por el artículo, aunque nos permitimos hacer una consideración sobre el cálculo del gasto militar, que no se dá actualizado. Las cifras ajustadas al gasto consolidado de 2019 que se ha usado en lo presupuestado para 2020 se pueden encontrar en https://enpiedepaz.org/programas-de-salud-publica-2-000-millones-aumento-gasto-militar/.

Por otro lado, aunque realicemos igualmente cálculo y denuncia del gasto de control social añadido es importante, aunque el objetivo de ese gasto sea igualmente militarizador de la sociedad, no obviar mencionar, precisamente, los dos conceptos cuando se habla de gasto militar, porque no aclararlo cuando queremos abreviar, puede restar, lamentablemente, credibilidad ante la opinión pública.

4
0
#57039
15/4/2020 11:56

Un artículo con argumentos importantes y bien estructurado. Pero, como el enlace sobre de Objeción Fiscal al Gasto Militar está actualmente en obras, es más recomendable hacer una búsqueda en internet sobre el término exacto de "objeción fiscal al gasto militar" y entrar en el primer resultado que aparece destacado.

4
1
Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Genocidio
Genocidio El TPI emite la orden de detención contra Netanyahu y Gallant por crímenes de guerra
La Sala de Cuestiones Preliminares del TPI rechaza las impugnaciones de competencia formuladas por el Estado de Israel y emite órdenes de arresto contra Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant.
COP29
Cumbre del clima La COP29 encara su última jornada con un final agónico sin acuerdo en los temas clave
Los borradores de los textos de negociación sobre la mesa quedan muy lejos de un acuerdo sobre financiación climática en línea con las necesidades para que el planeta no rebase los 1,5ºC de calentamiento medio.
Crisis climática
Informe de Unicef El cambio climático multiplicará por tres la exposición de los niños y niñas a las inundaciones para 2050
Es la proyección que hace Unicef en su informe 'El Estado Mundial de la Infancia 2024'. La exposición a olas de calor extremas será ocho veces mayor para 2050 respecto a la década del 2000. “El futuro de todos los niños y las niñas está en peligro”, advierte la agencia de la ONU.
Barcelona
Derecho a la vivienda El hartazgo por la vivienda impagable se da cita este 23 de noviembre en Barcelona
El amplio movimiento por la vivienda catalán, sindicatos y organizaciones vecinales, sociales y soberanistas demandan soluciones urgentes ante una crisis de vivienda sin solución a la vista
Tribuna
Tribuna Vivienda: es hora de organizarnos
La situación de crisis inmobiliaria nos exige leer el momento para acertar en las batallas que debemos dar ahora, reflexionar sobre los modos de acción colectiva y lograr articular una respuesta política amplia.
Turismo
Opinión Abolir el turismo
VV.AA.
Lleguemos a donde lleguemos, no puede ser que sea más fácil imaginar el fin del capitalismo que el fin del turismo.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Los sindicatos denuncian a la Comunidad de Madrid por exponer a sus sanitarios a “gravísimos” riesgos
Solicitan la mayor indemnización económica pedida contra una administración por no contar con un verdadero plan de prevención de riesgos laborales para atención primaria.
Racismo
Racismo institucional Diallo Sissoko, una víctima más del sistema de acogida a migrantes
La muerte de este ciudadano maliense durante su encierro en el CAED de Alcalá de Henares ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias del sistema de acogida a migrantes en el Estado español.

Últimas

Palabras contra el Abismo
Palabras contra el Abismo Lee un capítulo de ‘Café Abismo’, la primera novela de Sarah Babiker
El barrio es el espacio físico y social en los que transcurre ‘Café Abismo’, la primera novela de la responsable de Migraciones y Antirracismo de El Salto, Sarah Babiker.
Violencia machista
25 de noviembre Con el lema “Juntas, el miedo cambia de bando”, el movimiento feminista llama a organizarse este 25N
En un año en el que ha vuelto al primer plano el debate público sobre la violencia patriarcal sistémica que siguen padeciendo las mujeres, la marcha del 25 de noviembre vuelve a las calles el próximo lunes.
Más noticias
Comunidad de Madrid
Paro del profesorado Nueva jornada de huelga en la educación pública madrileña
Este jueves 21 de noviembre el profesorado se vuelve a levantar contra las políticas del gobierno de Díaz Ayuso, que mantiene paralizadas las negociaciones para mejorar sus condiciones laborales.
València
dana A las 20:11, era tarde
Todavía conservamos el horror de cientos de coches amontonados y arrastrados por la riada. Es por esos millones de turismos y sus emisiones ─aunque no solo─ que vivimos en un planeta que se está calentando demasiado rápido.

Recomendadas

Memoria histórica
Memoria histórica Museo del franquismo, ¿eso dónde está?
España sigue ajena a la proliferación mundial de espacios museísticos dedicados a dictaduras y resistencias democráticas.
València
Dana y vivienda “La crisis de vivienda multiplicada por mil”: la dana evidencia el fracaso de las políticas del PP en València
La dana ha dejado a miles de familias sin hogar. Ante la inacción de las instituciones, han sido las redes familiares las que han asumido el peso de la ayuda. La Generalitat, tras décadas de mala gestión, solo ha podido ofrecer 314 pisos públicos.