Energía nuclear
Llamemos a los pequeños reactores nucleares por lo que son (I)

La fiebre canadiense por los pequeños reactores nucleares ha conducido a verdaderas profesiones de fe en la clase política, dispuesta a calificar como éxitos a proyectos que solo existen sobre el papel. A sus tremendos inconvenientes, que incluyen costes y riesgos, se añade la propia experiencia del país con los pequeños reactores nucleares, un fracaso sin paliativos. No se disminuye el peligro, ni el coste.

Pequeño reactor nuclear Edwards Slider. Fuente: Beyond Nuclear International
Pequeño reactor nuclear Edwards Slider. Fuente: Beyond Nuclear International Michel Duguay Gordon Edwards Pierre Jasmin
Movimiento de Quebec por la Paz. Coalición Canadiense por la Responsabilidad Nuclear. Universidad Laval
3 ene 2022 02:49

El viernes 13 de septiembre de 2019, la portada del St John Telegraph recogía lo que para los lectores más ilusos se trataba de una nueva noticia para Nuevo Brunswick, en Canadá: la promesa de que la provincia se convertiría en un próspero centro de producción de energía nuclear.

Tras muchos meses de reuniones entre bastidores en Nuevo Brunswick con ejecutivos, políticos, representantes del Gobierno federal, alcaldes, representantes nativos, dos empresas nucleares presentaron una oferta impresionante, con miles, incluso decenas de miles de trabajos creados en la zona. Todo gracias a la producción y venta de componentes para unos modelos de reactores aún no sometidos a prueba. Se trata de los pequeños reactores nucleares (SMNR por sus siglas en inglés), de los que se espera poder instalar por todo el globo centenares o incluso miles.

El 1 de diciembre, los líderes de los gobiernos provinciales de Saskatchewan y Ontario se acoplaron a esta fantasía nuclear con una rueda de prensa de domingo en Ottawa. Allí anunciaron su deseo de promover y desarrollar sus propios modelos de pequeños reactores nucleares por su deseo (sic) de afrontar la crisis climática. Y para ello exigían al Gobierno federal que financiara la necesaria investigación para conseguirlo. Hay bastante aquí para sospechar que se aprovechan de la cuestión climática para vender esta idea sin pretender hacer nada para cambiarla: durante años se opusieron a gravar con impuestos las emisiones de CO2.

También existen otros motivos. El uranio de Saskatchewan necesita encontrar nuevos mercados ya que se encuentra en una severa crisis. Más de mil trabajadores han sido despedidos ante el declive global de la nuclear. Al mismo tiempo, Ontario ha cancelado toda financiación de más de 800 proyectos de energías renovables, a costa de sanciones económicas de 200 millones de dólares, mientras se destinan decenas de miles de millones para sus geriátricos reactores. Cuando podrían perfectamente comprar energía hidroeléctrica de Quebec a mitad de precio.

En una entrevista del 2 de diciembre para la emisora QUB, Gilles Provost, portavoz del Movimiento contra la radiación de Quebec (Ralliement contre la pollution radioactive) y experiodista de medioambiente para Le Devoir, criticó estas declaraciones por prematuras e irreflexivas. Después de todo, ninguno de estos prototipos conjeturales existe siquiera. Mientras tanto, estos políticos siguen insistiendo que ayudarían a combatir la emergencia climática sin reconocer que llevaría una década, o más, para empezar a ver resultados. Además, existe el precedente de otros tres pequeños reactores fallidos en Canadá.

Ontario ha cancelado toda financiación de más de 800 proyectos de energías renovables, a costa de sanciones económicas de 200 millones de dólares, mientras se destinan decenas de miles de millones para sus geriátricos reactores. Cuando podrían perfectamente comprar energía hidroeléctrica de Quebec a mitad de precio.

Estos nuevos reactores son, hasta la fecha, seguros, ya que solo existen sobre el papel y los refrigera la tinta. Pero declararlos un éxito antes de construirlos es toda una profesión de fe, dados los tres previos fracasos con los pequeños reactores que han tenido. Se construyeron dos reactores MAPLE de 10 megavatios junto al río Chalk pero nunca operaron dados los problemas de seguridad, y el reactor “Mega-Slowpoke” ni siquiera consiguió la licencia para operar, precisamente por esta misma causa. Se intentó rescatar este modelo ofreciéndoselo gratis a dos universidades, Sherbrooke y Saskatchewan, y a varias comunidades. Ninguna lo quiso. Mejor, pues el único reactor Mega-Slowpoke que se construyó, el de Pinawa, en Manitoba, está siendo desmantelado sin haber producido un solo megavatio.

Todo este revuelo mediático alrededor de los reactores pequeños recuerda a las grandiosas expectativas por el 2000 por un Renacer Nuclear que predecía miles de reactores descomunales por todo el planeta. Esta iniciativa fue un singular fracaso. Solo salieron adelante unos pocos reactores, caracterizados por retrasos de hasta un lusto, o incluso más, y por salirse de presupuesto en la práctica totalidad de los casos. En consecuencia, varias de las principales compañías nucleares declararon la bancarrota o estuvieron bien cerca de ello, como Areva y Westinghouse, o incluso abandonaron toda relación con el sector nuclear, como Siemens.

Las especulaciones alrededor del prometido renacer también condujeron a una importante, y nada realista, subida del precio del uranio, estimulando una fiebre del uranio sin precedentes. Y, cuando estalló la burbuja, supuso un colapso catastrófico de los precios. Cameco tuvo que cerrar varias minas que siguen cerradas. Y el precio del uranio no se ha recuperado todavía.

Los reactores nucleares grandes se han relegado a un rol residual en el mundo energético por sus elevados precios. Solo Rusia, China e India han esquivado las tendencias del mercado dados los monopolios de sus empresas públicas. No por ello la contribución nuclear a la producción eléctrica mundial ha dejado de bajar del 17% de 1997 al 10% de 2018. En Norteamérica y la Europa occidental no se espera ningún gran proyecto novedoso y muchos de las viejas centrales están cerrando sin sucesión.

Continúa en la segunda parte.

beyond nuclear international
Artículo publicado originalmente en Beyond Nuclear International. Traducción de Raúl Sánchez Saura.
 
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Energía nuclear
Debate nuclear Se necesita energía para el debate nuclear
Las disputas europeas sobre la energía nuclear como fuente de energía «sostenible» reflejan presiones militares, un aspecto que se discute poco.
Cine
Kamal Aljafari “Palestina está en la raíz de la situación actual del mundo”
Kamal Aljafari lleva toda su carrera trabajando con materiales de archivo, indagando en las imágenes e interviniendo en ellas para preservar memorias en desaparición y para oponerse al proyecto colonial sionista y su falseamiento del pasado.
Paterna
Paterna Vandalizan el muro de Paterna donde el franquismo fusiló a 2.238 personas
El paredón amaneció este viernes con grandes letras pintadas con spray negro donde se podía leer “Sagredo eres maricón y tarado”, en referencia al alcalde del municipio.
Opinión
Derecho a la vivienda Flex Living: el caballo de Troya de la precarización del alquiler
No es una respuesta moderna a las nuevas formas de habitar la ciudad. El ‘flex living’ no es más que la última jugada del sector inmobiliario y los grandes fondos de inversión para maximizar beneficios a costa del derecho a la vivienda.
Opinión
Opinión ¡Que vivan los aranceles!
Que Trump propugne aranceles no debe hacernos caer en la trampa de defender los intereses de los grandes oligopolios.

Últimas

Madrid
La burbuja del alquiler Sumar, Podemos y sindicatos de inquilinos presionan para convertir en indefinidos los contratos de alquiler
Sumar lanza una propuesta legislativa para transformar en indefinidos los contratos de alquiler, una de las principales demandas de la manifestación por la vivienda del 5 de abril. Una moción de Podemos, rechazada en el Congreso, pedía lo mismo.
Comunidad de Madrid
Movilización por la educación 23F: el día que una veintena de colectivos llenarán de verde Madrid para defender la educación pública
La comunidad educativa de todos los niveles en la enseñanza se prepara para una movilización que arrancará a las 12:00 horas desde Atocha hasta Sol, en la región que menos invierte en educación por estudiante.
Política
El Salto Radio Podcast | ¿Cancelar la cancelación?
Hablamos con Antonio Gómez Villar, a partir de su libro “Cancelar no es transformar” sobre malos entendidos y límites de esta acción política
Opinión
Opinión ¡Que vivan los aranceles!
Que Trump propugne aranceles no debe hacernos caer en la trampa de defender los intereses de los grandes oligopolios.
Galicia
Memoria histórica Cultura, exilio y lucha de las bibliotecarias gallegas durante la Segunda República
Durante los primeros años treinta, las bibliotecas se convirtieron en espacios de trabajo ideales para un modelo de mujer que aspiraba ser independiente y que había manifestado un claro compromiso político. La Guerra acabó con todas sus aspiraciones.
Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Sindicatos piden el cese de la dirección del Hospital 12 de Octubre tras las obras de remodelación
Los problemas con las nuevas instalaciones han cristalizado en una unión sindical que ha reclamado formalmente el fin de la cúpula de dirección tras ser “ignorados” de manera “sistemática”.
Opinión
Opinión La unidad del anarcosindicalismo es la acción conjunta
Al hilo de supuestos movimientos desde la CGT hacia la unificación con CNT es necesario diferenciar entre lo que es una relación en clara mejora y lo que sería un proyecto real en marcha.

Recomendadas

Líbano
Ocupación israelí Israel incumple el acuerdo de paz y mantiene tropas en el sur de Líbano para “vigilar” a Hezbollah
El Ejército sostiene la ocupación de cinco colinas a lo largo de la frontera tras evacuar sus soldados de decenas de municipios. Miles de civiles regresan a sus casas para descubrir que lo han perdido todo.
Feminismos
Ana Bueriberi “El activismo tiene que ser colectivo: para contribuir al cambio es imprescindible despersonalizar la causa”
La periodista madrileña Ana Bueriberi reconoce que no sintió la discriminación hasta que llegó a la Universidad. Hoy, desde el proyecto Afrocolectiva reivindica una comunicación antirracista, afrofeminista y panafricanista.
Inteligencia artificial
Militarismo La máquina de los asesinatos en masa: Silicon Valley abraza la guerra
Las fantasías distópicas sobre los futuros usos de las máquinas en la guerra están más extendidas que el relato de lo que ya está pasando en los campos de batalla.