Coronavirus
Tengo 72 años y un mensaje

Tengo dos peticiones. Una: que cuando me toque me ayuden a morir en paz, porque lo terrible no es morir, es morirse. La otra: que mientras estamos encerrados dejen de aterrorizarnos.


2 abr 2020 04:44

Tengo 72 años y patologías previas. Es decir las posibilidades de salir vivo de esta son reducidas y cada día que me levanto sin tos y sin fiebre es un regalo. Nunca se me había acelerado el corazón esperando el resultado con el termómetro en el sobaco. Hasta ahora.

Ya me han explicado que, en la lógica económica, soy un estorbo, que lo mejor es que me muera. Hay que renovar el stock como quien cambia de temporada de moda o de modelo de móvil. Destrucción creativa que decía el Schumpeter, pero ahora el producto soy yo.

Ya sé que fui un ingenuo creyendo que mi trabajo servía para algo, que tenía la obligación de devolver la oportunidad recibida haciéndolo lo mejor posible a costa, incluso, de salud, familia y afectos. Creía que con mi esfuerzo construía algún futuro y que la verdadera vida está en el recuerdo que dejas en los otros. Pero es lo que aprendí de mi madrina que, muy enferma, rezaba cada noche plegarias interminables, no por ella, por nosotros.

Ya sé que he sido un imbécil por cotizar 43 años y pagar impuestos sin engañar ni un céntimo con aquella herencia, con aquel dinero extra. ¿Cómo no se me habría ocurrido?

Ya he asimilado en estos días, a marchas forzadas y de manera descarnada, que somos material de deshecho

Ya sé que no debería haber “invertido” mi tiempo en cuidar de los míos. Pero es que nos habían fabricado así. Si había huevos eran para “os fillos”. Ellos, los mayores, patatas viudas. Si había dinero extra era para comprarnos las botas Segarra, para ellos darle una vuelta más a los abrigos. Y todo esto hecho con naturalidad, nunca nos agobiaban con la falta de dinero: y la había. Así, que cuando llegó la crisis todo era poco para ayudar a los hijos. En silencio y sin condiciones, como me habían enseñado. Una estupidez para estos darwinistas de pega que reclaman ahora que deje sitio.

No puedo remediar el intuir suspiros de alivio cuando las estadísticas machacan una y otra vez que más del 80% de los muertos son los viejos y enfermos. ¿Es que se puede llegar a viejo perfectamente sano? ¿No se dan cuenta de que la vejez es un destino irremediable y que los que siguen a los que ahora suspiran tomaran nota?

Y sé que todo ha cambiado. En el mundo en el que nos criamos los mayores eran objeto de respeto, incluso alguno se echaba años para darse lustre. Hoy la edad te convierte en un viejuno.

Ya he asimilado en estos días, a marchas forzadas y de manera descarnada, que somos material de deshecho. El progreso, la economía, “necesita” que desparezcamos y no que llenemos de achaques los centros de salud ni nos empeñemos en apurar un poco más la copa de la vida en una cama de hospital.

¿Cuál es el objetivo de proyectar a todas horas imágenes terribles de gente hacinada en los hospitales? ¿A quién sirven?

No hay que ser un lince para vislumbrar que, si sobrevivimos, a los de las patologías previas nos quedan no quince días sino muchos meses de aislamiento y temor. Eso, contando con que decidan que somos elegibles para tratamientos o vacunas.

Así que tengo dos peticiones. Una es, que cuando me toque me ayuden a morir en paz porque lo terrible no es morir. Es morirse. Lo primero no tiene arreglo, en lo segundo cabe la compasión.

La otra es que, mientras estamos encerrados, dejen de aterrorizarnos.

¿Cuál es el objetivo de proyectar a todas horas imágenes terribles de gente hacinada en los hospitales? ¿A quién sirven? No, desde luego, a los que estamos en casa sanos pero encerrados. Tampoco a los que han perdido a un ser querido y están solos con su duelo y mucho menos a los que tienen síntomas a los que debe de recorrer un escalofrío de miedo al pensar en verse así.

¿Cuál es el propósito de esos análisis “sesudos” realizados por periodistas sin ninguna formación científica, para los que hasta ayer Logaritmo era un arcano matemático y que no están satisfechos hasta que con cualquier papel robado o filtrado anuncian un Armagedón? ¿No se dan cuenta que prisioneros en nuestra casa nos angustian no solo por nosotros sino pensando en qué será de los nuestros?

No hay que ser un lince para vislumbrar que, si sobrevivimos, a los de las patologías previas nos quedan no quince días sino muchos meses de aislamiento y temor

¿Para que sirven que nos remachen una y otra vez que hay muchos más muertos? ¿Qué podemos hacer aparte de asustarnos y perder la confianza en aquellos: los sanitarios, que pueden ayudarnos? ¿No son conscientes de la ansiedad que desatan?

Cualquier ingeniero de cualquier empresa le podría explicar a la jauría de juntaletras que, incluso en condiciones normales de presión y temperatura, recibir una partida defectuosa de un proveedor es un asunto absolutamente normal y que para eso existen los departamentos de calidad. Y aun con todo eso, grandes fabricantes han tenido que llamar, para revisar, centenares de miles de automóviles por defectos que ponían en riesgo la vida de los usuarios. Me refiero ahora a los dichosos test defectuosos. Solo a ignorantes o malvados se le ocurriría escribir lo que hemos tenido que leer estos días.

Y sí, es posible que alguien haya pecado de buena fe o incluso que con la urgencia el fabricante aun siendo de calidad haya cometido errores. Pero sufrir la suficiencia de quienes no han tenido nunca que decidir nada, es insoportable. Pero lo peor, es sembrar la desconfianza en profesionales con experiencia y currículum impecable que compran y verifican los productos. ¿A quién sirven quienes lo hacen? No, desde luego, a los que quizás tengamos que usarlos.

Y si la respuesta a estas preguntas es que sirven a la verdad, yo les digo que, aquí y ahora, se guarden su verdad y les pido una cosa a la que, al menos por los servicios prestados, tenemos derecho los viejunos. ¡Callaos de una puñetera vez!

Archivado en: Vejez Coronavirus
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Chernóbil
Cuba y Chernóbil Cuba, Chernóbil y COVID-19
Los médicos cubanos ya acudieron al rescate de los niños de Chernóbil.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un rayo de esperanza tras cinco años de los protocolos de la vergüenza
A punto de prescribir los posibles delitos, un avance judicial abre la puerta a conocer quién decidió no derivar a hospitales a ancianos en residencias en la Comunidad de Madrid.
#55197
4/4/2020 0:52

LO CREO QUE HAY QUE HACER, Y YO LO HAGO, ES NO VER TELEVISIÓN Y SELECCIONAR LA PRENSA ESCRITA O DIGITAL. LUEGO, NO CREERSE TODO "LO QUE DICE LA TELE O INTERNET ". PARA CONTRASTAR, IR SIEMPRE QUE SEA POSIBLE A LAS FUENTES.

0
0
#54902
2/4/2020 16:25

Ante todo ánimo y mucha fuerza, mensaje justo y conmovedor, usted ya dado más del que algunos llegarían a dar y no tengo su edad.Sus años y canas se las ha ganando, enhorabuena, porque muchos de nosotros con menos edad que usted no tenemos la certeza de llegar a donde ha llegado. Respecto al miedo, es lo que quieren, que tengamos miedo para que el sistema inmunológico sera más vulnerable, o sea el candidata perfecto para el coronavirus. Otra vez ánimo y ojalá podría leer algún que otromensaje suyo. Ninguno de nosotros sobra, cada uno tiene destinado su papel en esta vida, aunque no le conozco personalmente pero tengo interés en que viva mucho años más.

9
6
#54783
2/4/2020 11:45

Muchas personas que han escrito o siguen escribiendo gillipolleces estos días tendrían que callarse abochornadas tras leer esto.

12
5
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición Sánchez piensa en un paréntesis legislativo para evitar roces con los socios tras una semana explosiva
El choque bronco por el caso de las compras de balas israelíes a cargo de Grande Marlaska puso sobre la mesa como nunca la ruptura de la coalición, aunque nunca fue una opción.
LGTBIAQ+
Juicio el 9 de mayo Lidia Falcón pide cinco años de cárcel a una mujer trans por un tuit de 2021 que no la menciona
La activista antiderechos Lidia Falcón denunció a Diana Juan Cano en 2021 por un tuit que apenas tuvo repercusión. La acusación pide una pena de cinco años de prisión y 50.000 euros de indemnización.
Comunidad de Madrid
LGTBifobia Femen protesta contra las terapias de conversión en un acto de la familia de psiquiatras Rojas Estapé
El movimiento Femen ha querido denunciar públicamente la relación de esta familia con sectores ultraconservadores de la Iglesia y su postura abiertamente contraria a los derechos del colectivo LGTBIQ+
Galicia
Galicia Cuidar sin derechos: la lucha de las trabajadoras en las residencias privadas de Galicia salta a la huelga
Sin tiempo ni medios para ofrecer unos cuidados adecuados, alertan de una situación insostenible en los centros y denuncian la privatización de un servicio a costa del bienestar de las personas mayores y dependientes.
València
València Convocan una huelga general contra Mazón el próximo 29 de mayo
CGT, CNT, COS e Intersindical llaman a la movilización por la gestión de la Dana, los recortes y la situación de acceso a la vivienda.
Guinea-Bissau
Internacional Guinea-Bissau arranca una ola de represión tras el sabotaje popular de una mina de arena en un parque natural
Una acción liderada por las mujeres del pueblo de Varela provocó un incendio en la bomba de extracción de la mina de arena pesada. El Gobierno ha llevado a cabo la detención de 16 personas, entre las que se encuentran líderes locales.
Opinión
Opinión “Tener correa” y la ridiculización del afecto
Existe una presión muy fuerte sobre los propios hombres para que no amen demasiado, no cuiden demasiado. El ideal de “libertad masculina” tradicionalmente se entiende como independencia, desapego, y muchas veces, desinterés.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Opinión
Opinión Las sáficas también somos trans, deseamos trans y amamos trans
Resulta irónico que a quienes tanto nos han cuestionado la identidad de “mujeres de verdad” en función de nuestra expresión de género o la vida que decidimos emprender no levantemos antorchas al ver el mismo odio operando con estrategias similares.
Francia
Francia Militantes e intelectuales exigen la absolución de Anasse Kazib, perseguido por su apoyo a Palestina
El Estado francés utiliza el tipo penal de “apología del terrorismo” para perseguir a personalidades y colectivos que han mostrado su apoyo a Palestina y su repulsa al genocidio cometido por Israel.
Más noticias
Gasto militar
Gasto militar ¿De dónde sacará Sánchez el dinero para financiar el incremento del gasto en defensa?
La promesa de aumentar las partidas presupuestarias militares necesita redirigir 10.471 millones de euros para alcanzar el 2% del PIB. Cumplirlo este año abre a su vez un grave problema para hacerlo en 2026.
Opinión
Opinión Las sáficas también somos trans, deseamos trans y amamos trans
Resulta irónico que a quienes tanto nos han cuestionado la identidad de “mujeres de verdad” en función de nuestra expresión de género o la vida que decidimos emprender no levantemos antorchas al ver el mismo odio operando con estrategias similares.
Opinión
Opinión IA: un proyecto tecnosupremacista
La pregunta que me hice hace algunos años fue: ¿Por qué existe un evidente interés en “crear la cuestión de la IA”, cuando las tecnologías y las lógicas que la componen están ya operativas desde hace años?

Recomendadas

Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.
Turquía
Pinar Selek “Turquía sigue gobernada en base al miedo”
La profesora y socióloga turca, quien ha sufrido además de cárcel, un acoso judicial por 27 años, habla de la falta de independencia del poder judicial, del adoctrinamiento social y de la formación de la sociedad turca.