Palestina
El feminismo palestino como una lucha anticolonial

Las mujeres palestinas sostienen dos luchas esenciales para su pueblo: reivindican igualdad en sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales y, además, defienden sus libertades fundamentales en un contexto colonial de apartheid.

Mercado en la ciudad vieja de Jerusalén
Mercado en la ciudad vieja de Jerusalén
Plataforma BDS Granada
10 mar 2020 16:34

Las mujeres palestinas son fundamentales en la historia de la lucha del pueblo palestino por su liberación frente a una larga y prolongada ocupación militar por parte del Estado de Israel, que roba impunemente sus tierras, sus aguas, sus alimentos, sus formas de vida y sus culturas, instaurando un contexto colonial de apartheid criminal y genocida. Ellas son invisibles a pesar de ser las que sostienen dos luchas esenciales, igualdad en sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales y, además, sus derechos de autodeterminación y libertades fundamentales en el contexto colonial de apartheid. Es por ello que la relación entre la liberación nacional y la liberación de las mujeres es impulsada por el Movimiento de Mujeres Palestinas actualmente, no sin arduas y pacíficas protestas, utilizando una variedad de métodos para denunciar las violaciones de los derechos humanos, exigiendo responsabilidades mediante protestas pacíficas semanales, investigando y denunciando, además de ser fortalecedoras comunitarias y claves en la pervivencia de la memoria viva que sostiene al pueblo palestino.

Al igual que los hombres, ellas son sometidas a detenciones, torturas, encarcelamientos sin juicios ni cargos y son asesinadas en flagrante violación al derecho internacional por el sólo hecho de ser palestinas, crímenes que Israel busca ocultar muchas veces bajo campañas como el pinkwashing, o la imagen de que es una democracia que también da espacio para que las mujeres disfruten de las mismas libertades que los hombres.

Los sistemas de opresión que sufren las mujeres palestinas están entrelazados con la violencia que ejerce el Estado de Israel y sus consecuencias en el patriarcado palestino. Son conscientes de que no podrán conseguir igualdad de derechos sociales y políticos respecto de los hombres si no se liberan además de la opresión que ejerce el Estado de Israel contra toda la población palestina. El proyecto sionista que se originó en el siglo 19, primero con los misioneros cristianos y luego con la ideología de la supremacía judía desarrollada por Herzl, se basa en la misma narrativa de superioridad racial que se utilizó por las potencias europeas para justificar la colonización en todo el mundo. Bajo el sistema de colonización y de apartheid israelí, los territorios palestinos están completamente separados unos de otros, segregando las comunidades y en muchos casos también separando familias, lo que produce una sociedad fragmentada en distintos territorios y diferentes estratos sociales. Esta parcelación tiene un efecto específico sobre la vida de las mujeres porque al estar igualmente vulneradas con la violencia militar y segregación racial de Israel, se refuerzan los comportamientos patriarcales de su sociedad, reflejados en el control que ejercen los hombres sobre la vida de las mujeres, muchas veces explicado como forma de protección.

El Estado de Israel, a su vez, explota este modelo patriarcal a su favor, ya sea en interrogaciones con amenazas y torturas para obtener información de los detenidos, o bien ejerciendo una violencia contra las mujeres específicamente en base a su género. Según la organización para los prisioneros políticos palestinos, Addameer, en los últimos 50 años se han arrestado o detenido alrededor de 10.000 mujeres. Al igual que sus compañeros, las mujeres son encarceladas prohibiéndoles recibir visitas de sus familias, en violación a la Cuarta Convención de Ginebra, y la mayoría son sometidas a agresiones específicas en base a la violencia de género, como torturas, golpes, insultos, amenazas, registros corporales vejatorios y acoso sexual. Y al igual que sus compañeros, en su mayoría son detenidas bajo lo que Israel denomina “detención administrativa”, es decir, un sistema de encarcelamiento donde no se imputan cargos ni se llevan a cabo juicios, y por períodos de seis meses que pueden renovarse por un tiempo indeterminado de veces.  

Al igual que los hombres, las mujeres palestinas son perseguidas por Israel por el simple hecho de expresar sus opiniones en las redes sociales, como el caso famoso de Dareen Tatour. Esta poeta palestina fue sentenciada a casi tres años de arresto domiciliario y luego 5 meses en la cárcel por escribir un poema llamando a su pueblo a resistirse al régimen de Israel. En este caso, Tatour utilizó las palabras como parte de un movimiento nacional de resistencia no-violenta que desafía las injusticias que se niegan a aceptar. Ejemplos de mujeres como ella hay muchísimos, como las mujeres de la familia Tamimi en Nabi Saleh, que salen a las afueras de la aldea a manifestarse de manera no-violenta contra el robo de sus tierras para una colonia que le ha robado el manantial que les proveía de agua a la comunidad. Ahed Tamimi, con sólo 17 años, fue encarcelada por 8 meses bajo cargos falsos después de bofetear a un soldado en una de las manifestaciones, un soldado del ejército israelí que había asesinado a varios parientes de su familia y dejado a su primo con una deformación craneal severa. Otro caso de las mujeres en prisión es la legisladora Khaleda Jarrar, que ha sido encarcelada por largos períodos sin cargos ni juicios al menos tres veces desde el año 2015. La persecución sistemática de Israel es una táctica que busca aplastar toda forma de resistencia no-violenta de mujeres y hombres palestinos que se mantienen determinados a luchar hasta que se respeten sus derechos humanos básicos.

Es necesario comprender que la brutal violencia del Estado de Israel tiene consecuencias nefastas al interior de la sociedad palestina. La necesidad imperante de trabajar en la resistencia, ha causado muchas veces que dentro de la sociedad palestina se ignoren los feminicidios de mujeres y niñas, considerándolos como casos independientes de violencia familiar y no como parte de un entramado social de estructura patriarcal. Esta complicidad es apoyada por instituciones corruptas o espacios políticos típicamente dominados por hombres que no consideran que la lucha de las mujeres sea tan importante como la liberación nacional frente a la colonización de Israel. Sin embargo, a pesar de que las mujeres han sido parte crucial de la lucha por la liberación de su pueblo desde comienzos de la colonización sionista, se les da poco o ningún reconocimiento a los esfuerzos que han hecho y cómo han adaptado su lucha durante distintos períodos, no sólo por su liberación a nivel nacional sino también en base a sus necesidades específicas como mujeres.

El feminismo que se va desarrollando en Palestina, tiene las características propias de una lucha anticolonial que busca poner fin a la discriminación y violencia contra las mujeres al mismo tiempo que acabar con la discriminación y violencia israelí ejercida contra mujeres y hombres palestinos por el solo hecho de ser palestinos. No se pueden seguir ignorando los casos de violencia y feminicidio en nombre de una liberación nacional. Las mujeres palestinas sometidas a la violencia doméstica por sus familiares sufren el mismo dolor que las mujeres palestinas torturadas por la policía militarizada de Israel. Los feminicidios como el caso de Israa Ghrayeb son tan repudiables como los asesinatos de mujeres como Razzan Annajjar, asesinada por el ejército israelí en la Gran Marcha del Retorno a Gaza mientras salvaba las vidas de los manifestantes.

Como ocurre bajo todo régimen colonial, la destrucción que provoca la violencia de Israel dentro de la comunidad palestina muchas veces es la causa de que se repliquen las mismas formas de violencia, en este caso de hombres hacia mujeres, y por esta razón es un deber de toda la sociedad palestina trabajar para terminar en su conjunto con su propio sistema patriarcal al mismo tiempo que exigir a Israel que respete sus derechos humanos. Como las activistas de Tali’at lo definen, la única forma de poner fin a la devastadora realidad sufrida por el pueblo palestino es trabajar desde un feminismo solidario para terminar con la fragmentación social y construir un movimiento de liberación igualitario.

Es por todo ello que desde el movimiento BDS de Granada seguiremos defendiendo el boicot al Estado sionista de Israel, y reivindicamos que respete el Derecho Internacional, respete el derecho de retorno de las y los refugiados palestinos, ponga fin a la colonización de tierras palestinas, desmantele el muro del Apartheid, y respete los derechos de las y los palestinos con igualdad a los israelíes. De esta forma, trabajando juntas para poner fin a esta injusticia racista e histórica contra todo el pueblo palestino, permitiremos que el trabajo de las mujeres palestinas por sus propios derechos dentro de su sociedad sea más viable.

 

Referentes:

Informe sobre mujeres palestinas defensoras de derechos humanos: https://www.vocesdefensoras.org/territorios/el-cuerpo-y-la-voz/

Ramzy Baroud, artículo sobre Israa Ghrayeb https://www.ramzybaroud.net/israa-ghrayebs-honor-killing-should-be-our-wake-up-call/

Addameer—mujeres prisioneras políticas: http://www.addameer.org/the_prisoners/women

Movimiento feminista Tali’at: https://madamasr.com/en/2019/10/26/opinion/politics/taliat-putting-feminism-at-the-center-of-palestinian-liberation/

Dareen Tatour: https://www.aljazeera.com/news/2018/07/dareen-tatour-sentenced-months-prison-poem-180731084215893.html

Archivado en: Feminismos Palestina
Sobre este blog
Voces desde Palestina para analizar la situación de ocupación, colonialismo y apartheid israelí bajo el que viven. Las voces de las personas siempre silenciadas, con rigor y desde la experiencia, reflejando la diversidad del activismo palestino. Existir es resistir.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.
Sobre este blog
Voces desde Palestina para analizar la situación de ocupación, colonialismo y apartheid israelí bajo el que viven. Las voces de las personas siempre silenciadas, con rigor y desde la experiencia, reflejando la diversidad del activismo palestino. Existir es resistir.
Ver todas las entradas
Galicia
Galicia La Xunta entorpece el acceso a más de 8.500 contratos que suman 57 millones de gasto
La Axencia de Doazón de Órganos e Sangue indexa miles de pagos sin concepto e imposibilita su fiscalización. La Xunta de Alfonso Rueda aduce que la opacidad es causada por “un fallo de codificación”. Sin embargo, esa práctica se repite desde 2018.
Islamofobia
Religión El aumento de vetos al hiyab en escuelas reaviva el debate sobre la islamofobia en España
Cada vez son más los centros educativos que están vetando estas prendas propias de la cultura musulmana a través de disposiciones en sus protocolos internos.
Opinión
Opinión Vox y la paradoja del soberanismo subordinado
Mientras denuncian el 'globalismo' abrazan sin fisuras el patrocinio del mayor supermillonario planetario, que no parece tener más patria que el aumento de los dividendos de sus empresas
Grecia
Grecia La tragedia griega de Tempi: dos años de dolor y lucha por la rendición de cuentas
El 28 de febrero de 2023, un tren de pasajeros colisionó frontalmente con un convoy de mercancías cerca de Tempi. El impacto dejó 57 muertos, en su mayoría jóvenes estudiantes que regresaban del carnaval.
Fronteras
Fronteras Sombras en el acuerdo de cesión de competencias pactado por el PSOE y Junts
El acuerdo sobre transferencia de las competencias en materia de migración entre PSOE y Junts encuentra el 'no' de Podemos y de organizaciones de migrantes y el 'sí' con matices de la izquierda independentista y de Sumar.
Análisis
Análisis De geografías viables o de cómo habitar el territorio
La destrucción que trajo la barrancada es directamente proporcional a la ocupación del territorio y a los metros cuadrados de asfalto que nos dejaron los sucesivos booms inmobiliarios.
Caribe
Opinión Granada: ecos de una revolución abortada
Granada fue durante algunos años símbolo de una América alternativa. Esta isla caribeña sirve de recuerdo fehaciente de las lecciones de Fanon, Malcom X y todos aquellos que se han atrevido y se atreven a cuestionar la estructura imperial

Últimas

Comunidad de Madrid
Sanidad privada Denuncian ante Inspección a un hospital de Quirón por poner en riesgo a una trabajadora embarazada
El sindicato CCOO ha denunciado al Hospital La Luz por forzar a enfermeras embarazadas a trabajar sin una adaptación a sus puestos, realizando tareas asociadas a riesgos como la exposición a químicos o radiaciones.
Análisis
Análisis ReArm Europe, el triunfo del capitalismo verde militar
El plan que acaba de presentar la presidenta de la Comisión Europea vuelve a utilizar la mágica cifra de los 800.000 millones, ahora con el objetivo declarado de transformar el modelo de defensa europeo.
La vida y ya
La vida y ya Reparadoras de grietas
Piensa, sobre todo, en quién se fijará en los vínculos que rompieron las bombas. Quién se dará cuenta de todo lo que se quebró.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid La Guardia Civil desaloja a los bomberos forestales encerrados en Las Rozas en protesta por un nuevo convenio
La plantilla de prevención y extinción de incendios reclama un convenio actualizado, recuperar el poder adquisitivo perdido en una década y contratos estables en un contexto de catástrofes climáticas de cada vez mayor impacto y frecuencia.
Más noticias
Argentina
La calle contra Milei Pensionistas argentinos salen a las calles para hacer frente al ajuste y la represión de Milei
Cada miércoles, jubilados y jubiladas se movilizan alrededor del Congreso en Buenos Aires exigiendo el aumento de sus haberes, la continuidad de la moratoria jubilatoria y el acceso a medicamentos esenciales.
Reducción de jornada
Seguidismo de la patronal Junts traslada a Yolanda Díaz su “no” a la reducción de jornada y peligra su posible aprobación
La negativa de Junts a apoyar la reducción de jornada (al menos por el momento), junto con el no del PP, suman suficientes votos en contra como para tumbar la ley de bajada de horas una vez llegue al Congreso.

Recomendadas

República del Sudán
Belkis Wille “En Sudán hay milicias practicando violaciones a gran escala contra mujeres y niñas”
Belkis Wille, investigadora de Human Rights Watch, denuncia los abusos de grupos armados como las Fuerzas de Apoyo Rápido en el conflicto sudanés, donde se registran crímenes tanto de esclavitud sexual como de sometimiento mediante violaciones.
Sevilla
Komando G “Sin las mujeres, el barrio se pararía”
El Komando G es una red feminista ubicada en el Polígono Sur de Sevilla en la que participan vecinas y mujeres representantes de entidades sociales que busca ser un espacio de cuidados y reivindicación para todas las mujeres del barrio.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Trump y Netanyahu imponen a Hamás un rediseño de la tregua en Gaza
La vigencia del alto el fuego iniciado en enero pende de un hilo mientras Tel Aviv mantiene el bloqueo de ayuda humanitaria a las puertas del enclave palestino y la Casa Blanca negocia directamente con Hamás.