Fronteras
Libia, esclavitud africana, normalidad europea

Como en tiempos de Gadafi, el beneficiario último del “mercado de humanos” libio es la UE, que no distingue bien entre dictaduras, democracias y caos mientras garanticen por igual sus intereses; es decir, mientras sirvan para impedir que migrantes y refugiados lleguen a sus costas.

Esclavos en Libia
Imagen del vídeo de CNN sobre la venta de esclavos en Libia.
@SantiagoAlbaR
5 dic 2017 09:11

En el año 2010, durante una cena organizada por su amigo y aliado Berlusconi, el dictador Gadafi declaraba ante 800 invitados: “Europa se volverá negra sin mi ayuda”. A cambio de 5.000 millones de euros al año se comprometió a construir nuevos campos de internamiento y torres de vigilancia en las playas, prolongando así el acuerdo firmado en 2009 que estipulaba el patrullaje conjunto y las devoluciones en caliente de cualquier migrante, con independencia de su nacionalidad, a la policía libia.

De todos los crímenes de Gadafi, quizás el más grave y el menos conocido fue su complicidad en la política migratoria de la UE, particularmente la italiana, como verdugo de migrantes africanos. Quien quiera una amplia información sobre el tema puede leer Il Mare di mezzo (2010), del valiente periodista Gabriele del Grande, o acudir a su página web, Fortresseurope, donde se recogen algunos documentos espeluznantes. Ya en 2006, Human Rights Watch y Afvic denunciaban los arrestos arbitrarios y torturas en centros de detención libios financiados por Italia.

El acuerdo Berlusconi-Gadafi de 2003 inauguró una década de colaboración criminal –con el establecimiento de una red de lager en el desierto– cuyas consecuencias se resumen sucinta y dolorosamente en el grito de Farah Anam, fugitiva somalí de los campos de la muerte libios: “Prefiero morir en el mar que regresar a Libia”.

Seis años después del linchamiento del dictador y de los bombardeos de la OTAN, muy poco ha cambiado en este aspecto. Las recientes imágenes de la CNN han señalado a quien quiera mirar hacia este lado la situación de entre 400.000 y 700.000 migrantes y refugiados extranjeros atrapados en Libia: trabajos forzados, secuestros, abusos sexuales, violencias arbitrarias que a menudo conducen a la muerte. Poco importa si las imágenes del escándalo revelan un caso de esclavitud en sentido estricto; todo hace pensar, más bien, en una “reventa” entre traficantes.

Lo cierto es que en Libia, como en otros muchos lugares de África y de Asia, hay un “mercado” de humanos en el que la desgracia y la fragilidad, disueltas a menudo en sangre, dejan también un reguero de beneficios sin fronteras. En Libia ese “mercado” involucra a passeurs transnacionales –negros y árabes–, a milicias locales y grupos armados, así como a los tres gobiernos que se disputan desde hace tres años la hegemonía, incapaces de controlar las cárceles secretas y campos de internamiento que, de Sabha a Trípoli, jalonan el territorio.

Gadafi, por así decirlo, retenía el monopolio del terror en un país redundante de funcionarios racistas; hoy el caos libio reparte franquicias privadas entre exfuncionarios armados que no reciben su sueldo. Antes y ahora, sus víctimas son miles de africanos que prefieren morir en el mar que trabajar en Libia.

El beneficio de este "mercado" de la explotación y la muerte es en Europa invisible e intangible: son los hombres y mujeres que no vemos y no tocamos

Ahora bien, como en tiempos de Gadafi, el beneficiario último de este “mercado” es la UE, que no distingue bien –conjuntivitis humanitaria– entre dictaduras, democracias y caos mientras garanticen por igual sus intereses; es decir, mientras sirvan para impedir que migrantes y refugiados lleguen a sus costas. El beneficio de este “mercado” de la explotación y la muerte es en Europa invisible e intangible: son los hombres y mujeres que no vemos y no tocamos porque nuestros cancerberos del norte de África, pagados o tolerados, los detienen –y a veces los torturan y matan– en el camino.

Como en tiempos de Berlusconi, Italia, pionera, ha sido acusada de haber alcanzado acuerdos con redes de traficantes –ahora que no hay un dictador al que dirigirse– a fin de bloquear las salidas desde Libia. Por otro lado, la financiación europea de los guardacostas libios dependientes del GNA (el irrelevante Gobierno de Unidad Nacional con sede en Trípoli) se ha traducido ya en naufragios inducidos y asaltos a naves de organizaciones como Médicos sin Fronteras o Sea Watch, un grupo de admirables activistas dedicados a la localización y rescate de pateras a la deriva.

“La UE –ha declarado Mehdi Ben Youssef, de Amnistía Internacional– debe dejar de privilegiar las soluciones que pasan por detener a los migrantes en Libia”. Pero eso es tanto como pedir a un león que deje de privilegiar las soluciones digestivas que pasan por devorar gacelas o –para no parecer demagógico– como pedir a una multinacional en quiebra que deje de privilegiar las soluciones económicas que pasan por despedir empleados y bajar salarios. Si algo une todavía a los países que forman la UE es esta gran vocación leonina (o empresarial).

No nos escandalicemos de la “esclavitud” en Libia. Escandalicémonos más bien de la complicidad de nuestros gobiernos. Cruzar fronteras no es delito; defender los derechos de los que las cruzan tampoco. Mientras escribo estas líneas Helena Maleno, valiente periodista y activista que se juega la vida por salvar las de otros, estará respondiendo por ello ante un tribunal marroquí. Tan inquietante como por desgracia elocuente es el hecho de que el juez –del reino amigo y vecino– ha llamado a declarar a Maleno como resultado de investigaciones emprendidas hace cinco años por la policía... española.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Grecia
Grecia Frontex pone de nuevo la mirada en Grecia
En enero de 2025 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acusó a las autoridades griegas de llevar a cabo devoluciones forzadas de manera sistemática.
Fronteras
Fronteras El Gobierno de Mauritania alerta de que ya son más de cien cadáveres hallados en sus costas en 2025
Desde 2023 Mauritania es el principal punto de salida de embarcaciones hacia las Islas Canarias. El Gobierno reconoce el hallazgo de cuerpos. Mali reclama un trato humanitario a las personas que permanecen varadas en el país vecino.
Fronteras
Fronteras 24 horas en un albergue de Tijuana: “Que no se olviden de nosotros”
Unos 80 migrantes siguen con preocupación la política de cerrojazo y militarización de la frontera de Donald Trump desde sus casas de nylon.
#7086
20/1/2018 4:03

La bruja averia de soros ataca de nuevo. Este medio es otro entuerto de soros.

0
0
#4219
6/12/2017 20:19

Carmen Chacon que estas en los infiernos.

11
0
La Invi Málaga
6/12/2017 9:15

No sabía la historia criminal de Gadafi por años llevaba buscando indagar. Las acusaciones aquí reveladas no me cuadran con testimonios de cómo se decretaba el respeto a la igualdad del negro africano. Y la veneración que se le da en movimientos de liberación nacional por toda África. Sigo indagando.

18
1
Verdeynegro
6/12/2017 5:59

Repugnante artículo, plagado de medias verdades y mentiras enteras, que encima termina sugiriéndonos con que debemos " escandalizarnos" .... Pocas ganas de colaborar cn un medio que acoge esta basura en su interior

18
5
#4172
5/12/2017 23:57

Si despues van alli los EEUU a eliminarlos de la faz de la Tierra a esos esclavistas (que es lo que merecen) eres el primero que les llamas Criminales de Guerra...da tu la solución lumbreras

0
16
#4140
5/12/2017 12:18

No ha cambiado nada con la caída de Gadafi, no. Del país con mayor calidad de vida de la historia de Africa, al desastre y el genocidio. De 2 millones de trabajadores extranjeros en Libia, una proporción exagerada, a los mercados de esclavos. Pero son "igualmente racistas". Y controlar la inmigración masiva a Europa también era malo, sí. Este señor no es que esté a sueldo de Soros y demás mega-oligarcas sionistas, es que deberían echarlo por incompetente. Se le nota demasiado.

23
4
#4126
5/12/2017 10:36

La hipocresía del autor no tiene limites. Apoyo la destrucción de Libia construyendo falsedades. Después lo mismo con Siria. A sueldo de la Open Society.

28
5
#4179
6/12/2017 1:21

Que critica mas dura amiga, porque no construye y nos educa en vez de criticar

3
16
Energía
Límites planetarios Reducir el consumo energético, el debate olvidado (e incómodo) del gran apagón
España proyecta un 43% de aumento de consumo eléctrico en los próximos cinco años. Especialistas opinan que la electrificación de la demanda, clave para abandonar los combustibles fósiles, tiene que ir acompañada de la suficiencia energética.
Laboral
Laboral Los trabajadores de Bridgestone tendrán que decidir sobre la última oferta de la empresa
Reducen en 103 despidos el ERE de la multinacional, fomentan las prejubilaciones y se comprometen a asegurar la producción en las dos plantas afectadas en Cantabria y Bizkaia.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Vecinas de Madrid convocan otra gran manifestación por la sanidad pública
El próximo 25 de mayo la plataforma Vecinas y Vecinos de Barrios y Pueblos de Madrid organiza otra gran marcha contra la política sanitaria del Gobierno de Ayuso.
Pensamiento
Michael Hardt “La respuesta a Trump no debe ser volver a la normalidad”
Pensador estadounidense y colaborador de Antonio Negri en algunas de sus mejores páginas, el filósofo Michael Hardt ha seguido dedicando su trabajo a la idea y a las prácticas del común.
Palestina
Palestina Imputan a dos capitanes de buque implicados en el comercio de armas con Israel
El Juzgado de Instrucción nº 6 de Barcelona investiga la implicación de la naviera Maersk en el suministro de armas al ejército israelí y le requiere que identifique a dos capitanes.
València
Lawfare La Audiencia de València dicta que la causa contra Mónica Oltra llegue a juicio
Aunque la Fiscalía y el juez instructor descartaron que existiera indicios de delito contra la ex consellera y el resto de acusados, la Audiencia ratifica la celebración del juicio.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Justicia
Justicia Cómo retorcer el derecho antidiscriminatorio: apuntes del juicio por delito de odio a una activista trans
La presidenta del Partido Feminista pide cinco años de prisión y 50.000 euros en daños a una mujer trans por considerar que un tuit que no la mencionaba constituye una amenaza y una incitación al odio. Pero, ¿qué son los delitos de odio?
Sanidad pública
Sanidad Pública España necesita 100.000 enfermeras para alcanzar la media europea
Casi un 40% de enfermeras manifiesta que dejará la profesión en los próximos 10 años. Son datos del Ministerio de Sanidad y las profesionales exponen las razones: falta de conciliación y contratos precarios.
Educación
Eduación La educación vasca no irá a la huelga tras llegar a un acuerdo tildado de “histórico”
Los sindicatos desconvocan los paros para esta semana al haber alcanzado mejoras en las condiciones laborales del profesorado y una mejor financiación para los centros públicos.
Estados Unidos
Guerra comercial Estados Unidos y China acuerdan una rebaja en los aranceles durante 90 días
Tras una reunión en Suiza, los dos países anuncian que reducirán los impuestos a las importaciones a partir del 14 de mayo.

Recomendadas

Estados Unidos
Roberto Montoya “Nos dicen que hay que armarse contra Putin cuando el mayor peligro para el mundo es Trump”
Más Donald Trump que nunca, el multimillonario ha regresado para terminar lo que no pudo hacer en su primer mandato. El periodista Roberto Montoya bucea en el personaje y su contexto en el libro ‘Trump 2.0’ (Akal, 2025).
Cine
Cine Colectivo y sin autor: breve historia de otro cine
La película ‘Una isla y una noche’, autoproducida y autodistribuida por el colectivo francés Piratas de Lentillères, es la puerta de entrada para recordar otros modos de hacer cine, alejados de la firma de autor y los grandes estrenos.
Historia
Historia El largo viaje de Pepe Díaz
Se cumplen 130 años del nacimiento en Sevilla de una figura carismática y trágica del movimiento obrero español.
México
Recursos naturales Los “millonarios del agua” aumentan el estrés hídrico de México
Bancos españoles y grandes corporaciones obtienen beneficios del agua ante un Estado que incumple su obligación de garantizarla. Más de un millón de viviendas en México se abastecen de forma recurrente por servicios de entrega privada de agua.