Huelga feminista
Alemania se suma a la huelga de mujeres del 8 de marzo

Aunque mucha gente ni se ha enterado, las convocantes tienen razones de peso para llamar la atención de sus conciudadanas. La huelga está dando que hablar en ciertos ámbitos, sobre todo por otra cuestión poco o nada relacionada con el feminismo: el derecho a la huelga general.

8M Alemania
Manifestantes en Berlín con una pancarta de Marianne Weber. Foto de Mike Herbst
BERLÍN
24 feb 2019 06:00

A la señora Seidel la idea le parece divertida: “Yo ya hago huelga todos los días”, dice con una sonrisa. Con la espalda encorvada hacia la izquierda, lleva tiempo sin trabajar y ella es quien recibe los cuidados de otras personas. Por eso la idea de una huelga de trabajo, cuidados y consumo que lleven a cabo las mujeres, para ella suena algo ajena. Sin embargo, en el ascensor, junto a ella, la otra vecina, la señora Lange, ya jubilada, se ríe también, pero no pierde la oportunidad de contar lo duro que fue para ella trabajar y tener que ocuparse al mismo tiempo de los hijos y de la casa: “Mi marido secaba los platos y pasaba la aspiradora. Y punto”, suspira mirando directamente a los ojos.

Después de una pausa dramática asegura, acercándose confidente: “No hacía absolutamente nada más, por eso empecé a trabajar a media jornada, porque alguien tenía que recoger a los chicos de la escuela”. A ella le parece bien que las mujeres alemanas hayan convocado una huelga similar a la que en 2018 se celebró en numerosos países, pero hasta ahora no había oído ni una palabra sobre dicha protesta. “Eso son cosas de jóvenes 5asegura, “me parece bien, pero soy un poco escéptica de que pueda servir para algo”.

La huelga de mujeres en Alemania tiene el potencial de provocar debates paralelos de calado, como en el caso del derecho a la huelga general, que en teoría está prohibida

Las tres panaderas de la filial del único despacho en la plaza de Roeder son jóvenes, pero tampoco tenían ni idea de que se fuese a celebrar una huelga de mujeres: “¿Y para qué?”, se ríe la primera. “¿Y quién cuida de mi hija?”, pregunta otra de ellas. Ninguna se plantearía ir a una huelga de mujeres ni creen que tenga sentido. Y es que fuera del ámbito político, feminista, activista o jurídico pocos hablan de una huelga de mujeres que, en especial en Alemania, tiene el potencial de provocar debates paralelos de calado, como en el caso del derecho a la huelga general, que en teoría está prohibida.

La estudiante de ciencias políticas Susanne Hentschel tampoco se hace demasiadas ilusiones para esta ocasión: “Es poco realista pensar que la huelga será un movimiento masivo este año, pero estamos convencidas de que éste es el comienzo de un nuevo movimiento feminista”. Susanne forma parte de un grupo feminista y es una de las organizadoras en Berlín. Asegura que es positivo “que los sindicatos se hayan solidarizado con la huelga”, sin embargo su deseo es “que éstos llamen a secundarla también”. Nada fácil, teniendo en cuenta la ambigua legislación alemana al respecto, que supone una prohibición de facto de las huelgas generales y de carácter político que no estén ligadas a la negociación de convenios.

En la constitución esta forma de protesta no está prohibida, explicaba el profesor de ciencias políticas Jörg Nowak en la revista de la Central pública alemana para la educación política (Bundeszentrale für Politische Bildung). “La huelga política y la huelga general están en Alemania aún bajo la sospecha de la revolución y los golpes de estado”, por lo que “hasta hoy, con las prohibiciones de huelga sigue institucionalizado el miedo a la actividad política autónoma de los trabajadores”. Este profesor, sin embargo, asegura que en momentos puntuales de la historia sí que se han utilizado las huelgas masivas con fines políticos y que no fueron ilegalizadas, a pesar de la lectura que suelen hacer a menudo los propios sindicatos de la legislación.

Friederike Benda, que forma parte de la directiva del partido Die Linke y participa en la organización de la huelga, asegura al teléfono en ese sentido que el movimiento feminista quiere contribuir a que acabe “el monopolio de la huelga por parte de los sindicatos” y se lleve a cabo “una discusión en torno al significado del concepto de huelga”. En cuanto a la participación es optimista y cree que la propuesta “ha sido una bomba” porque a los primeros encuentros ya asistieron muchas mujeres y organizaciones. “Hemos visto cómo la propuesta de una huelga de mujeres tocaba un nervio existente en nuestra sociedad”, asegura, al tiempo que destaca cómo las huelgas que se llevaron a cabo en otros países les han impresionado y motivado. La diputada de su partido en el Bundestag y portavoz de mujer Conny Möhring declaraba en un comunicado que, “cuando las mujeres anuncian de forma masiva [que van a la huelga], en el mejor de los casos se sacaría del ámbito privado al público la cuestión de la organización del trabajo y las preguntas al respecto se volverían visibles”. El
partido ha aprobado una resolución en apoyo de la huelga de mujeres.

La huelga reclama prohibir la posibilidad de condenar a a ginecólogos a pagar multas tan solo por poner en su página web información sobre los abortos

Sobre las reclamaciones concretas de la huelga destacan por su particularidad en Alemania la prohibición de la publicidad de los abortos a través de la que se ha condenado a ginecólogos a pagar multas tan solo por poner en su página web información sobre los abortos. También los colectivos de personas con sexualidad diversificada están organizando la protesta y están llamados a acudir a la cita en un país conservador en el que no se legalizó el matrimonio homosexual hasta 2017, pero en el que siguen existiendo trabas como las relativas a la adopción.

En Berlín tuvo lugar un encuentro la semana pasada al que acudieron unas 300 personas según la organización en el cual participaron como ponentes mujeres de Irán y Kurdistán, entre otras nacionalidades. En dicha cita se concretaron una serie de reclamaciones concretas que se unen a las circunstancias de desigualdad estructural derivadas del patriarcado en el país. Entre ellas destacan el aumento de las pensiones hasta los 1400 euros netos, el fin de la criminalización y la estigmatización de las trabajadoras del sexo, una subida del salario mínimo a 13 euros la hora. Asimismo piden cuestiones más generales como la paralización de privatizaciones, la creación de vivienda asequible, la expropiación de empresas inmobiliarias y el acabar con la precariedad laboral de los contratos definidos y mediante empresas subcontratadas.

En el ámbito de género las reclamaciones van desde abortos gratuitos y despenalizados, la abolición de los informes médicos para ser reconocido como trans o intersexual, o lavabos mixtos en todos los edificios públicos. Los asesinatos por violencia de género deberían ser reconocidos como un problema estructural en Alemania, sigue el documento. También se muestran solidarios con los refugiados, en tanto en cuanto hay mujeres con esta condición legal que participan en la protesta y piden que se tenga en cuenta las situaciones familiares a la hora de decidir el estatus legal y que se paralicen todas las deportaciones. También que se reconozca el derecho al voto a los inmigrantes que residan en el país independientemente de la situación administrativa
en que se encuentren.

El movimiento, fuertemente descentralizado, tiene asimismo una organización desigual dependiendo de las ciudades. El pasado viernes, se mostró un documental en Berlín sobre la huelga feminista en España. Entre las acciones que se han planteado para el día de la huelga destacan una sentada a las doce de la mañana “en cualquier lugar” donde se quiera protestar, así como gritar durante un minuto a las cinco de la tarde o hacer de la pausa matutina una asamblea en los trabajos en la que discutir sobre feminismo. El 8 de marzo hay planeada una manifestación en Berlín a la que se espera que acudan numerosas personas, en especial porque el día ha sido declarado festivo en la ciudad. Motivos no faltan.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Unión Europea
Unión Europea ReArm Europe tropieza en los parlamentos de Países Bajos y Alemania
La CDU de Merz ha maniobrado para aprobar el plan ReArm Europe antes de la constitución de las nuevas cortes, a sabiendas de que la negativa de La Izquierda y de AFD supondría un varapalo importante para el proyecto de la Comisión Europea.
Opinión
Opinión El evitable ascenso de Alternativa por Alemania
El mejor cordón sanitario a la extrema derecha es combatir las causas que han generado su ascensión, que sus ideas y propuestas no se apliquen de forma interpuesta por los partidos de la gran coalición que presumiblemente gobernara Alemania.
Análisis
Análisis Alemania: victoria sin entusiasmo de la CDU y retorno de La Izquierda
Los conservadores optan a gobernar con el SPD en coalición. AfD obtiene un resultado histórico que le convierte en amenaza para el futuro de Alemania. La Izquierda se desempeña bien en las elecciones tras una campaña tácticamente inteligente.
#30952
25/2/2019 1:57

las feministas españoals deberían pedir la abstención para las genrales del 28a, a no ser que los partidos políticos españoles cambien su forma de hacer política

1
2
#30988
26/2/2019 7:41

No me parece buena idea la abstención, porque la intencionalidad política se puede confundir con apatía, desinterés o resignación. En tal caso, defendería votar nulo, para dejar patente que sí se desea influir en la política, pero que el feminismo no tiene representación. Además, muchas veces se ignoran a pequeños partidos que no tienen representación parlamentaria pero sí buenas propuestas y a los que hay que apoyar para que algún día sí pasen a tenerla.

0
0
Genocidio
Genocidio Activistas crean la embajada de Palestina en Bruselas mientras Israel prosigue con su asedio en Gaza
Mientras los ataques de Israel sobre la Franja de Gaza ya han dejado más de 51.490 muertos, activistas han rociado de sangre un edificio que simula ser la embajada de Palestina, dejando un rastro de pintura roja hasta la embajada del Estado sionista.
Senegal
Migraciones El mito de la migración ordenada: la denegación de visados por el Consulado de España en Dakar
Maltrato institucional. Estas dos palabras son las más escuchadas cuando se pregunta a personas descontentas con el Consulado de España en Dakar. Cada vez más personas denuncian denegación de visados que no consideran justificados.
Análisis
Análisis La izquierda donde rompe la ola
El crecimiento electoral de un amplio abanico de fuerzas de extrema derecha desde hace unos años complica la consecución de decisiones a nivel de la UE.
Comunidad de Madrid
LGTBifobia Femen protesta contra las terapias de conversión en un acto de la familia de psiquiatras Rojas Estapé
El movimiento Femen ha querido denunciar públicamente la relación de esta familia con sectores ultraconservadores de la Iglesia y su postura abiertamente contraria a los derechos del colectivo LGTBIQ+
La vida y ya
La vida y ya Espacios de encuentro
Me contaba que, al final del día, le dolían mucho las manos y que había dejado de escribir. Que ya no llevaba el cuaderno pequeño que tenía para anotar ideas que luego se transformarían en artículos o poemas.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición Sánchez piensa en un paréntesis legislativo para evitar roces con los socios tras una semana explosiva
El choque bronco por el caso de las compras de balas israelíes a cargo de Grande Marlaska puso sobre la mesa como nunca la ruptura de la coalición, aunque nunca fue una opción.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
LGTBIAQ+
Juicio el 9 de mayo Lidia Falcón pide cinco años de cárcel a una mujer trans por un tuit de 2021 que no la menciona
La activista antiderechos Lidia Falcón denunció a Diana Juan Cano en 2021 por un tuit que apenas tuvo repercusión. La acusación pide una pena de cinco años de prisión y 50.000 euros de indemnización.
Galicia
Galicia Cuidar sin derechos: la lucha de las trabajadoras en las residencias privadas de Galicia salta a la huelga
Sin tiempo ni medios para ofrecer unos cuidados adecuados, alertan de una situación insostenible en los centros y denuncian la privatización de un servicio a costa del bienestar de las personas mayores y dependientes.
València
València Convocan una huelga general contra Mazón el próximo 29 de mayo
CGT, CNT, COS e Intersindical llaman a la movilización por la gestión de la Dana, los recortes y la situación de acceso a la vivienda.
Opinión
Opinión “Tener correa” y la ridiculización del afecto
Existe una presión muy fuerte sobre los propios hombres para que no amen demasiado, no cuiden demasiado. El ideal de “libertad masculina” tradicionalmente se entiende como independencia, desapego, y muchas veces, desinterés.
Que no te lo cuenten
Que No Te Lo Cuenten De armas y crisis climática
VV.AA.
Repasamos la actualidad política internacional y miramos los visibles efectos de la crisis climática en la costa mediterránea
Más noticias
Opinión
Opinión Las sáficas también somos trans, deseamos trans y amamos trans
Resulta irónico que a quienes tanto nos han cuestionado la identidad de “mujeres de verdad” en función de nuestra expresión de género o la vida que decidimos emprender no levantemos antorchas al ver el mismo odio operando con estrategias similares.
Francia
Francia Militantes e intelectuales exigen la absolución de Anasse Kazib, perseguido por su apoyo a Palestina
El Estado francés utiliza el tipo penal de “apología del terrorismo” para perseguir a personalidades y colectivos que han mostrado su apoyo a Palestina y su repulsa al genocidio cometido por Israel.

Recomendadas

Guinea-Bissau
Internacional Guinea-Bissau arranca una ola de represión tras el sabotaje popular de una mina de arena en un parque natural
Una acción liderada por las mujeres del pueblo de Varela provocó un incendio en la bomba de extracción de la mina de arena pesada. El Gobierno ha llevado a cabo la detención de 16 personas, entre las que se encuentran líderes locales.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.
Turquía
Pinar Selek “Turquía sigue gobernada en base al miedo”
La profesora y socióloga turca, quien ha sufrido además de cárcel, un acoso judicial por 27 años, habla de la falta de independencia del poder judicial, del adoctrinamiento social y de la formación de la sociedad turca.